Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Aún Espero Por Tí por Miya_0322

[Reviews - 48]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola a todos!! Bueno, mi segundo fic de Death Note, y esta vez se trata de un universo alterno.

La verdad, es que estaba tratando de conseguir un fanart en particular, y encontré uno muy gracioso de Matt vestido de novia, con Mello a su lado y Near de sacerdote. Esto me dio una idea, así que decidí comenzar a escribir.

Si bien no soy demasiado fanática de los AU, o de ver a mis personajes vestidos de mujer, prometo que sólo es una parte del primer capítulo, y luego verán a los dos bien hombres, como tanto me gusta escribir.

Algo más: muchas gracias a todos los que leyeron mi fic "Premonición de Muerte", el cual me divertí mucho mientras lo escribía.

Disclaimer: lo mismo de siempre, los personajes no me pertenecen, ni Death Note, etc... porque si fuera mía, Mello seguiría vivo.

En fin...

Notas del capitulo:

¡Gente! Este capitulo me quedó más largo de lo que suelo escribir, pero creo que quedó como lo imagine. Nunca escribí un AU, así que les pido paciencia si no queda tan bien. Si me dicen que les gustaron mis POV en segunda persona, seguro que escribo algo así en este fic también, ya que amo jugar con los narradores.

 Bueno, todavía no hay mucho drama en el fic, pero pronto comenzarán las tragedias, muahaha...

En fin, sólo les pido un review, y prometo contestarlos a todos, porque eso es lo que me impulsa a seguir escribiendo, y lo que me hace conocer sus opiniones.

Gracias por leerme, y al fic! 

            El sonido de la música hacía estremecer el lugar, dándole un pequeño malestar en el estómago al sentir los bajos muy fuertes, provocándole una sensación extraña. Levantó su mano con cansancio, y comenzó a erizarse un rulo de su cabello, mientras su hermano suspiraba cansino y volteaba a verlo.

            - Aún no comprendo, Near, porqué has querido venir a esta fiesta de disfraces…

            El hermano mayor de Near era un morocho bastante peculiar, un tanto más alto que él, y que siempre tenía unas pronunciadas ojeras bajo sus ojos por estar tanto tiempo estudiando para la universidad. Con la postura un poco encorvada, estaba vestido completamente de negro y tenía una especie de capa, que se anidaba con unos finos hilos blancos por delante.

            - Porque tengo planeado algo para Mello, hermano L…

            El morocho se llevó su dedo pulgar a la boca, mientras suspiraba. Sabía y era totalmente consciente de así como él apreciaba mucho al rubio hasta el punto de considerarlo casi como otro hermano, harta conocida era la rivalidad de éste con su hermano menor. Giró el rostro y miró a Near, mientras le señalaba su disfraz con desgano.

            - ¿Y este disfraz? –inquirió.

            - Parte del plan…

            Near continuaba erizándose el bucle, mientras su hermano observaba cómo esta vestido. Ataviado también completamente de negro al igual que Elle, se diferenciaba porque la pequeña capa que tenía encima era la de una especie de sotana negra, y sostenía en su mano un libro negro en su mano izquierda, haciendo que todo ese color oscuro, contrastara con el blanco de su cabello.

            - Pero…

            - Ahí llegaron…

            Elle se volteó para ver llegar a dos de sus amigos, uno de cabellos castaño disfrazado de pirata, y el otro morocho, de monje budista. Sin dudarlo demasiado, era factible concluir que su hermano Near había tramado algo en contra de Mello, y que estos dos recién llegados habían decidido ayudarle en el plan.

            - ¡Near! ¡Ryuuzaki! –saludó el castaño- Miren para allá…

            Los aludidos alzaron la vista, sólo para ver a una hermosa chica disfrazada con un vestido de novia, que atraía las miradas sensuales de todos los hombres presentes, algunos de los cuales se le acercaban, y ella los rechazaba cordialmente, mientras movía el rostro tratando de encontrar a alguien.

            - Puedo asegurar con un nivel del 90% de certeza, que esa chica vestida de novia está aquí por culpa de tu plan, Near… -aseguró Elle.

            - Exactamente… -afirmó el menor- Por cierto, será mejor que nos corramos de este lugar, si no queremos que “la novia” nos vea…

 

            Y ahí estaba. Maldiciendo internamente al momento en que lo habían convencido de ir a aquella ridícula fiesta de disfraces, al tiempo que intentaba deshacerse de todos esos pervertidos que intentaban sacarlo a bailar, y seguramente propasarse por demás. Dioses, realmente necesitaba un cigarrillo.

            La mano de uno de un muchacho le tocó el cuello, y sin dudar un segundo, la quitó de un cachetazo, para luego salir casi corriendo hacia el patio de la fiesta, mientras ocasionalmente tropezaba con tanta tela del vestido, al cual no le quedó más remedio que alzar levemente con sus manos, como si se tratara de una verdadera doncella.

            - ¡Qué asco! –masculló al alejarse un poco- ¡Ese era el quinto!

            Observó el lugar, y se dio cuenta que el patio del establecimiento era bastante amplio, por no decir que se trataba casi de un parque: el césped estaba cortado muy prolijamente, y había algunos árboles en el lugar. Sabía que habían rentado una casa de campo para hacer la fiesta, pero nunca esperó tremendo parque detrás.

            Lo único bueno, era que iba a poder fumar a sus anchas, así que apoyándose contra un árbol, y corriendo metros de tela, logró alcanzar la pequeña cajetilla que había escondido entre la ropa, sólo para darse cuenta que le quedaba un cigarrillo, bastante aplastado. Muy frustrado, trató de estirarlo, pero luego recordó que no le habían dado tiempo de esconderse un encendedor en la ropa, así que un cigarro no encendido no le servía de mucho.

            De pronto, algo iluminó su rostro, y alzó la vista para toparse con el joven más hermoso que había visto. Era casi una aparición divina: estaba parado de perfil, vestido con un esmoquin blanco que resaltaba su piel, el cabello rubio que le llegaba hasta el hombro, y los ojos celestes más fríos y ensordecedoramente bellos que jamás había visto. Con la mano izquierda en el bolsillo del pantalón, le tendía la derecha con un encendedor, cuya llama iluminaba sus ojos.

            Agachó el rostro sin perder de vista al rubio, y colocándose el cigarrillo en la boca, se acercó hasta que al fin lo pudo encender, para luego soltar una bocanada de humo. Sin embargo, no sentía como si se calmara… al contrario de lo que esperaba, ver a ese rubio delante de sí, lo estaba poniendo más nervioso.

            Mas el rubio no había perdido la oportunidad de  de observar a la hermosa joven vestida de novia. El traje en sí no le importaba demasiado, más allá de que era blanco y arriba estaba cortado recto, dejando al descubierto los hombros de la chica, y el largo y níveo cuello que lo estaba volviendo loco. Alzó la vista mientras guardaba el encendedor en uno de sus bolsillos, y vio que tenía el cabello corto y rojo, y sus ojos refulgían verdes. Nunca antes deseó que hubiera más luz para poder ver al completo las facciones de ella, pero eso tampoco le importó demasiado.

            Al menos había encontrado algo decente en esa horrible fiesta a la que L le había rogado que fuera, seguro por alguna cuestión de Near, a quien había visto disfrazado de sacerdote, cerca de la pista de baile.

            Mientras tanto, con cada seca que le daba a su cigarrillo, la novia trataba de evitar ver al rubio a quien tenía enfrente. Sin embargo, vio que este volteaba, quedando ambos de frente, y dejándole ver una gran cicatriz que tenía en el rostro en el lado izquierdo, que parecía una gran quemadura, la cual se extendía por su cuello, y seguramente por parte de su brazo izquierdo.

            El rubio observó la mirada esmeraldina sorprendida, y llevándose la mano a la mejilla izquierda, sonrió quedamente.

            - ¿Te asusta? –preguntó con su voz grave y áspera, mientras la chica negaba con la cabeza- Mejor… -acabó por susurrar.

            Antes de que la pelirroja pudiera darse cuenta, ella quedó acorralada contra el árbol, con las manos del rubio a un lado de su rostro, y sus cuerpos a escasos centímetros de distancias. Con tranquilidad, el joven la miro casi devorándola con sus ojos azules, para luego quitarle el cigarrillo de la boca, y acariciarle el cuello lentamente.

            No pasó demasiado hasta que rápidamente él se apoderó de su boca lentamente al principio, y entreteniéndose en morder el labio inferior de ella después. Pero pronto, el rubio sintió que el beso era correspondido, y comenzó a apurarlo, mientras aprovechaba para atraer por el talle a la chica, quien ahora le colocaba las manos en el cuello.

            Pero justo en el instante en que sus cuerpos rozaron, el de ojos celestes se percató de algo que no se había dado cuenta hasta ese momento, y cortó el beso bruscamente, separándose del otro.

            - Eres… ¡Un hombre! –gritó.

            El pelirrojo se quedó helado. ¿Qué demonios había hecho? Se había dejado llevar por el momento, y terminó besándose con otro hombre –algo que nunca hubiera pensado que terminaría haciendo-, que seguramente ahora pensaba lo peor de él. Cerró los ojos con fuerza esperando que lo golpearan, pero cuando los abrió, vio que el rubio caminaba rápidamente hacia el local donde estaba la pista de baile.

            - ¡Lo que faltaba! –se quejó, mientras rumbeaba hacia su coche rojo- Y lo peor es que me gustó…

            Mientras tanto, el rubio se dirigía hacia la pista de baile, con unos grandes deseos de acabar con Near. Estaba seguro que el peliblanco había tenido algo que ver, pero lo que más le molestaba era que el beso con ese pelirrojo disfrazado de novia, le había gustado mucho más que cualquier otro beso en toda su vida.

            Entró en el salón donde las luces multicolores y la música estrepitosa cubrían a los cientos de disfraces que danzaban por la pista, y se quedó observando con la ira reflejada en sus ojos, hasta que finalmente encontró a un peliblanco disfrazado de sacerdote, junto a su hermano disfrazado de vampiro. Impulsivamente, comenzó a caminar rápidamente con las intenciones de matar al albino.

            - ¡Neeeeaaaar! –llamó, arrastrando las vocales del nombre.

            - Mello… -murmuró el aludido- Con su permiso, me retiro…

            Sin cambiar su neutral e inexpresivo tono de voz, comenzó a escabullirse con exactitud y facilidad entre la multitud, mientras el rubio trataba de seguirlo lo más cerca posible, para buscar obtener una respuesta. Tan ensimismado pasó al lado de L, que ni siquiera se percató de sus intenciones de hablarle, y siguió tras el albino.

            - Oye, Mello… iba a decirte que…

            - Ni modo, Ryuuzaki… -dijo el castaño, que permanecía a su lado disfrazado de pirata- Mello ya se fue…

            - Supongo entonces que tú, Raito-kun me explicarás lo que ha sucedido…

            - Si no queda otro remedio…

           

***

 

            Y ahí estaba de nuevo. Último semestre de clases en la preparatoria, sentado en uno de los últimos asientos, con el brazo izquierdo apoyado en su pupitre, y el rostro recargado en su mano. Su cabello rubio se mecía lentamente con el viento que entraba por las ventanas, y si bien con su mano libre tomaba los apuntes de la clase, no podía dejar de pensar en la fiesta a la que había asistido el sábado anterior.

            Lo que aún no comprendía, era cómo ese pelirrojo había terminado disfrazado de novia, y por qué había terminado L diciéndole que era un plan de Near. Trató de profundizar un poco más en el asunto, pero de esa forma no sacaría nada en concreto, lo único que tenía que hacer, era preguntarle al morocho, qué era lo que sabía del plan de su hermano.

            El timbre de fin de clases sonó al fin, y Mello se levantó rápidamente, tomando sus cosas, y encaminándose a la salida, mientras ignoraba por completo a un Near que sentado en su pupitre, comenzaba a erizarse un bucle mientras lo seguía con la mirada. El rubio salió rápidamente de la escuela, y colgándose su mochila de uno sólo de los breteles, comenzó a caminar hacia su departamento.

            Estaba vestido con el uniforme del colegio: traje de pantalón y saco color gris oscuro con finas líneas verticales en un tono gris claro, del mismo color que la camisa, y una corbata negra que llevaba floja y mal puesta. Sin embargo, esas formas sólo resaltaban aún más el porte de su postura. Caminaba con un paso seguro y rápido, cuando su celular comenzó a sonar.

            - Hable… -ordenó- ¿Por el departamento? Sí, es para compartir conmigo… -le respondió a la voz del otro lado, que parecía ser de un joven, seguramente de su misma edad- Si quieres verlo puedes ir en una hora… Está bien…

            Al menos algo bueno pasaría, y al fin podría compartir ese departamento, disminuyendo así los gastos que tenía. Apuró el paso, y en menos de quince minutos llegó a su casa, para luego cambiarse y comenzar a estudiar y comer chocolate hasta que esa persona llegase.

            Mientras tanto, un joven de cabellos rojos, vestido con un pantalón de jean y botas negras altas, y con una remera a rayas que tenía un cuello abierto y que casi dejaba al descubierto sus hombros, se bajó de su reluciente coche rojo, para ir a ver el departamento que podría llegar a alquilar.

            Después de lo que Light le había hecho pasar al llevarlo a esa fiesta horrible, lo menos que el castaño había podido hacer, era recomendarle ese número de teléfono y ese departamento, ya que él necesitaba mudarse. Se adentró en un edificio bastante lujoso pero no en exceso, y por el ascensor subió hasta el piso seis, donde había solo dos apartamentos. Ubicó el que correspondía, y tras tocar el timbre esperó que le abrieran.

            Mas cuando la puerta se abrió, sólo atinó a quedarse helado y dejar caer su cigarrillo de su boca, mientras sus ojos verdes se perdían en un hermoso rubio de ojos azules y cabello al hombro, que no era otro que el dueño de ese apartamento… y el hermoso chico de traje blanco que se había encontrado en la fiesta.

Notas finales:

¡Esto es todo! Neuvo fanfic, al día de haber terminado el otro... Don't Worry, prometo terminarlo tan pronto como el anterior.

Gracias por leerme, me encantaría ver sus reviews, y hasta el siguiente cap. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).