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Deseos de cosas imposibles por Orquidea

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Notas del capitulo: Por que has iluminado mis dias con tu increible imaginacion y no reparas al momento de compartir tu magia con todos.

Me gustaba imaginar que tenia tantas alucinaciones, sueños despiertos, añoranza y deseos de cosas imposibles por leer tanto ye s que si lo pienso bien no pasa el di en el que no lea su trabajo, maravillosos escritos de múltiples hojas o a veces no tantas, cargadas siempre de un tinte especial, logrando desarmar mis sentidos y hacerme creer que un ser de otra dimensión me espera en mi cama, que vagare por canchas buscando personas hechas de lluvia... que uno de estos días llegara un hermano perdido que sea totalmente hermoso y que me robara el aliento, un compañero de clase provocándome hasta que caiga, o que me perderé en el espejo y no encontrare mi reflejo  y podría seguir así, imaginando con esos personajes apasionados y sus vidas con tórridos romances que solo dejan suspiros y mentes pervertidas jajajajaja es solo que ando pensativo, bastante, jugando con mi mente que en el momento menos esperado llegara lo que le de sentido a mi vida, me gustaría que tuviera los ojos grises, siempre me han encantado, será por que los míos son cafés...

 

 

 

 

 

-         Uriel!!!!!!!!!!!!!!!

 

-         Ahh?? Javier??

 

 

-         Donde te has metido toda la mañana Uriel, se supone que presentamos proyecto de ciencias en 20 minutos y tu has estado perdido por horas!-    Enfadado Javier se dirige hasta Uriel para si poder zarandearlo.

 

-         Hey hey relájate hombre y no me toques, no pensaba faltar a la presentación después de todo fue MI idea lo de el proyecto.

 

 

 

 

Ambos compañeros se dirigieron al salón de clases a esperar su tueno de exponer, las horas pasaron rápidas y por fin su turno, si mas rodeos explicaron el proyecto y cuando menos lo esperaron las clases habían concluido.

 

 

 

-         Gracias Uriel, obtuvimos una A!!!

 

-         No es nada, solo deja de ponerte tan roñoso o acabaras por ponerte verde.

 

 

-         Uriel!!!!!!!

 

-         Jajajajaja nos vemos el Lunes!!.

 

 

-         Adiós!!

 

 

 

Bien, solo de nuevo, en donde me quede?? Ah sisisisi que entrare a un ciber y el dueño se enamorara perdidamente de mi, no no que un ojigris mirara mis comunes y corrientes ojos cafés tras el vidrio de una cafetería y quedara enamorado de mi!!! Jajajajajaja soy todo un caso, solo tres cuadras mas y llegaría a casa... llegaría...

 

 

 

 

 

-         Cuidado!!!!

 

 

 

 

 

Un auto a toda velocidad se impacto contra Uriel, lo demás ocurrió muy rápido, sangre por todos lados, los gritos desesperados de su hermana, paramédicos, gente curiosa, dolor, mucho dolor, todo oscuro y por fin la tranquilidad...

 

***

 

 

 

 

 

-         Familiares del Joven Uriel Del Castillo??

 

-         Doctor!! Soy Mariana Del Castillo, hermana y tutor de Uriel, dígame como esta mi hermano??

 

 

-         Señorita lamento decirle que su hermano presenta un estado muy complicado, se rompió tres costillas, fractura del brazo izquierdo, tuvo un pequeño derrame interno y lamentablemente se encuentra en estado de coma, esperamos que en un par de horas o días en su defecto despierte, ha sido un joven muy fuerte, pero esta delicado, lo lamento señorita.

 

-         Doctor, gracias por hacer lo que este en sus manos, cuando puedo verlo??

 

 

-         Me temo que por el momento no es posible, lo mejor es que repose, le aconsejo que vaya a casa y regrese por la mañana, cualquier anomalía o mejoría le será comunicada.

 

-         Gracias Doctor Mendoza- 

 

 

 

La chica comprendió y se dio vuelta, perdida en sus pensamientos e inevitablemente sintiendo culpa, -Debí recogerte hoy después de clases, era tu cumpleaños, tenia una sorpresa en casa, pero el trabajo y yo, yo me olvide del tiempo y... mamá, papá... como los necesito-.

Camino hasta el estacionamiento subiendo a un bonito convertible tojo, alejándose del camino, esperando que el estado de Uriel mejorara pronto.

 

 

 

 

 

 

 

Despertó

 

 

 

 

 

-         Dios me duele todo, tranquilo, respira, revisa que estés completo, brazo izquierdo enyesado, costillas rotas, vendoletes en la cabeza, dos brazos, dos manos, dos piernas, bien, estoy completo, ahora solo tengo que abrir los ojos y saber que no estoy ciego-

 

 

 

Con pesadez los grandes ojos cafés se abrieron, cerrándose un poco ante tanta luz y blancura del lugar. Se sentía un poco mareado, con suero por todos lados y maquinitas haciendo bip constantemente, confuso recordó que el no vio ningún auto venir, fue tan solo que sintió el impacto y después todo desvaneció...

 

 

 

-         Bueno, ciego no estoy tampoco...

 

 

 

 

La puerta se abrió y un apuesto joven con bata blanca entro.

 

 

 

-         Buenas noches Uriel, soy el doctor en turno Miguel Nava, no intentes moverte mucho por favor que estas muy débil..

 

 

 

Asombro, increíble, hermoso, y grises, eran grises sus ojos, un gris hermoso, con luz propia, Uriel enmudeció, su doctor en turno era la cosa mas bella que había visto en muchos muchos años, creyó seguir dormido a lo cual intento levantarse de la cama y cerciorarse por su cuenta que el era real.

 

 

 

-         No no!! Uriel!! Que haces??-  El chico perdió fuerzas en cuanto toco el suelo, de no ser por los esbeltos y fuertes brazos enfundados en bata blanca hubiera caído estrepitosamente al suelo.

 

-         Tengo que  saber que es real-  Apenado bajo la cabeza y comenzó a juguetear con su mano libre y los cabellos.

 

-         Que es real que?

 

-         Usted doctor, por su puesto, quien mas??

 

 

 

Rosado, eso vio de cerca Uriel, rosado en las mejillas del doctor, pero la emoción no duro mucho, con sumo cuidado fue depositado de nuevo en la cama, entonces con la sonrisa más encantadora que hubiera visto, Miguel comenzó:

 

 

 

-         Por su puesto que soy real- Entre pequeñas risitas continuo. -Es solo que estas muy aturdido por el accidente, creeme que es una experiencia increíble esto de los accidentes... tu hermana vendrá a verte mañana a primera hora y estoy seguro que nada le encantaría mas que verte bien, así que deberías reposar esta noche y no intentar levantarte; vendré a verte cada dos horas para revisarte el suero y si se te ofrece algo-.

 

-         Simplemente no podría quedarse conmigo doctor??- Palideció, acababa de decirle de forma no muy sutil a su nuevo doctor en turno que no quería que se fuera, grandioso, ahora pensaría que es un demente.

 

 

Observándolo bien, se veía tierno en aquella cama, con el brazo inmóvil, el torso vendado, esos raspones en la cabeza no le quitaban lo hermoso a su cabello, dorado, largo hasta la espalda, sintió emoción y curiosidad a la petición.

 

 

 

-         Unas horas más en este hospital no me vendrían mal, necesito compañía y me siento solo en CU (cuidados intensivos) pero mañana a primera hora debo irme, me esperan mis primos.

 

-         Gracias!!! - Sonrió Uriel arrinconándose un poco al lado de la cama con el corazón palpitando a mil. - Sus ojos doctor, son los mas hermosos que he visto en mi vida, dígame, cuantos años tiene??

 

-         Ah.... Gracias- De nuevo rosa, mas rosado en sus mejillas, comenzaba a imaginar que el Rosa y el gris se llevaban de maravilla, Miguel se sentó en el sofá pequeño al lado de la cama de Uriel.

 

-         Pues veras tengo 26 años-

 

-         Que doctor tan joven!!!

 

-         Jajajaja si, eso me dicen todo el tiempo, me apresure bastante en la escuela y aquí estoy, atendiendo bellos pacientes como tu en el turno de la noche- Sonrió, esa sonrisa de nuevo, tan tranquila, tan etérea. - y tu Uriel?? Que edad tienes??

 

-         Ahhhh pues hasta hace unas horas tenia 17-

 

-         Hasta hace unas horas?? Eso quiere decir que hoy es tu cumpleaños!!!

 

 

 

Cabizbajo Uriel respondió con un Si, pensando que solo le traía problemas a su hermana, desde que sus padres murieron, inevitablemente cambio en exceso, siendo mas callado, reservado, pero sobre todo ensimismado con deseos de cosas imposibles y confusas ideas.

 

 

 

-         Vamos vamos, no es para ese semblante el que hoy cumplas años y estés en un hospital, anda, sonríe que debes verte mucho mas lindo así-

 

-         He!??? Pero que has dicho??

 

 

 

 

Miguel se levanto del sofá dirigiéndose a la puerta, argumento que en un par de minutos volvería.

 

 

Pero en que estoy pensando??? Reteniendo al doctor de guardia en la noche?? Pero dios.... Tiene esos ojos tan irresistibles y hermosos que no me es posible despacharlo, quiero seguir viéndolos aunque sea un poco mas...

 

 

 

-         Uriel??- Grito el doctor desde el otro lado de la puerta.

 

-         Si??

 

 

-         Cierra los ojos por mi- Obedeciendo Uriel los cerro esperando la siguiente señal.

 

-         Ábrelos!!!!!

 

 

 

El asombro se asomo por sus orbes cafés, al menos una docena o mas de globos de todos los colores hicieron acto de presencia en la habitación, una pequeña cajita de chocolates y un pastelito con una vela.

 

 

 

-         Feliz cumpleaños Uriel!!!!!

 

-         Yo..... Ahhhh, inevitable, comenzó a llorar con tan solo pensar que sus ojos grises (sus ojos??) tenían aquel gesto para con el.

 

 

-         Es que no te gustan los globos Uriel??- Preocupado se acerco al pequeño, acariciando s cabeza tiernamente.

 

-         Abrázame Miguel... por favor..

 

-         Mmhhhm?

 

 

 

 

Calido, así se sentía en los brazos de Miguel... poco a poco se separaron y Miguel vio de cerca esos ojos cafés que podrían pasar por cualquiera pero de pronto miles de pequeños destellos irradiaban, haciendo juego con el dorado de sus cabellos.

 

-         Sabes?? Tienes unos ojos muy especiales Uriel.

 

-         No, pero si se que los tuyos son simplemente hermosos, muchas gracias me has alegrado la noche ( o mi vida??) pero...- Las mejillas le ardían de pronto y una gota de sudor perlo su frente.

 

-         Tienes fiebre?? Déjame revisarte- Poso su mano en la frente de Uriel, quedando cerca, muy cerca.

 

-         Ahh Ettoo, tengo derecho a un deseo??

 

-         Pos su puesto!! Es tu cumpleaños

 

-         Quiero... entonces quiero, que me beses!

 

-         Que!??????- El ojigris abrió los ojos en señal de enorme sorpresa y a los ojos de Uriel el que tenia fiebre parecía ser otro.  - Uriel yo.... Mañana... entonces tu..

 

-         Disculpa-  Apenado intento darse vuelta sin éxito debido al dolor que le demandaba el cuerpo. - No debí-

 

-         Vamos no te muevas a si de brusco- Ayudándolo a acomodarse Miguel cerro distancias. - Ere muy hermoso Uriel.

 

 

 

Suaves, carnosos, con sabor a cerezas eran lo labios de ojigris, Miguel comenzó a atraerlo mas y mas cerca de el, se torno por momentos apasionado el beso, inevitable respirar, rompiendo el encanto.

 

Y así abrazados, se sonrieron el uno al otro, entregándose a un segundo beso aun mas apasionado que el primero, era extraño, Uriel se sentía flotar, en exceso feliz... al fin el tenia su propia historia que contar, lagrimas de felicidad surcaron sus ojos y Miguel lo noto.

 

 

-         Todo en orden?

 

-         Si, es solo que he esperado algo así por mucho tiempo y yo...

 

 

-         Calla -  Sonriéndole se separo para dar paso a la cajita de bombones.  - Anda, comete uno, se que no deberías, pero te estoy supervisando muy de cerca y tu doctor te da permiso-  y de nuevo, sonrió encantadoramente.

 

 

 

Por horas reímos y comimos bombones, el pastel estaba delicioso, platicamos intereses en común y con un beso de vez en cuando me sentí mas vivo y feliz que nunca en toda mi vida, Miguel termino en mi cama del hospital, tan cerca de mi, tan delicioso que pronto me quede dormido.

 

 

 

-         Uriel, Uriel!!, despierta y escúchame, tengo que irme, fue un enorme enorme placer y deleite pasar mi ultima noche aquí, contigo, sus ojos grises denotaban tristeza y Uriel lo advirtió pronto.

 

-         Que pasa??

 

-         Uri, yo tengo que irme, te lo dije ayer, te quiero y espero perdones mi atrevimiento hacia ti, pero en cuanto llegaste a este Hospital y te vi entrar, me fue imposible no acercarme, entiende hermoso... te quiero tanto...

 

 

 

Oscuridad, silencio y tranquilidad...

 

 

 

Cuando volví a despertar lo primero que divise fue la cabeza dorada de Mariana, entre sus delgados brazos esperando respuesta mía.

 

 

-         Uriel!!!!!!!!- corrió la chica a abrazar a su hermano- o hermanito cuanto te amo!!

 

-         Vamos Mariana, no ha sido para tanto, aquí estoy y bien, lamento darte problemas-  Platicaron por unos minutos hasta que Uriel pregunto:

 

-         Y el doctor Miguel Nava hermana?? Donde esta? Le toca guardia esta noche también??

 

-         Miguel Nava?? Esta noche también?? Querido tu doctor se llama Lucas Mendoza y ayer curiosamente le toco también hacer guardia, me dijo que tenias un exceso de fiebre y que..

 

-         Nooooooooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!- Grito furioso y desesperado. - No puede ser eso verdad, mira mis globos de colores y mi caja de bombones!!!!

 

-         Cariño esta mañana te traje todo esto por tu cumpleaños, pensé que te animaría un poco.

 

-         No!! No no no!!! Miguel!!!! Quiero ver al doctor Miguel!!!!

 

El doctor Mendoza al escuchar semejante escándalo se dirigió a la habitación de Uriel, entro presuroso acercándose a Uriel, revisándolo, pero el no dejaba de preguntar por Miguel en un estado desconsolado.

 

 

-         Doctor dígame usted debe saber donde esta Miguel, Miguel Nava, anoche se encargo de cuidarme, le tocaba la guardia..- Lagrimas, desesperación, sus ojos, su beso!! Fue real, fue real!!

 

-         Como dice?? Conoce al Doctor Nava? Y lo vio ayer?? Eso es imposible jovencito, el doctor Nava, nuestro nuevo interno ingreso al hospital en la tarde de ayer, antes que usted, tuvo un terrible accidente junto con sus primos, ellos fallecieron al instante y el doctor Nava sigue muy débil en Cu... me temo que no es posible que

 

-         Quiero verlo!!!!! Quiero verlo por favor!!-  Olvidando su dolor físico se levanto tan rápido de la cama que no dio tiempo a ser detenido, corrió por pasillos hasta llegar a CU, donde cauteloso, busco a Miguel, en una habitación de cristal con muchos aparatos se encontraba... hermoso, etéreo... ya sin vida.

 

 

Se acerco lentamente a la camilla, lo tomo de la mano, se acerco a su oído y susurro - Debiste decírmelo Miguel, y si, te comprendo ángel mío...-  Con los ojos acuosos y una sonrisa débil, regreso a su cuarto, sabiendo que ahora, en definitiva, podía contar su historia.

 

 

 

 

"Mienteme una vez más, dibujas mi mejor sueño..."

Notas finales: Espero les guste, y bueno opinen que tal, es pequieñito, pero es para ti Yami :)

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