En un parque, en la ciudad de Inglaterra, dos niños de tan solo diez y nueve años de edad. Estaban posados debajo de un árbol. Observando el cielo, que en este momento estaba oscuro.
Uno de ellos era de pelo negro y largo, atado a una coleta. Sus ojos eran de color negro. Su piel era algo pálida pero hermosa, sin mancha alguna el niño más guapo sin duda alguna, su cara no expresaba ningún sentimiento pero su corazón decía a gritos lo que sentía. Era el mayor.
El otro tenía la apariencia de ser una niña. Tenia pelo rubio y largo, solo que el la llevaba atada a una media coleta, y dejaba caer un rebelde flequillo. Sus ojos eran de color zafiro, su piel blanca y hermosa, parecía tallada por unos dioses. Era el menor de los dos.
Ambos eran mejores de amigos desde el Kinder, ya estaban a un paso de cursar la adolescencia y ambos tenían curiosidades que todo niño tendría.
El sexo era una de ellas.
-¿Itachi que es hacer el amor?-Pregunto el rubio.
-Creo que es cuando un hombre y una mujer se quieren mucho, mucho, mucho y se lo demuestran-Respondió, esperando haberle dado una buena respuesta.
-Haa… ¿y como se lo demuestran?-Pregunto nuevamente.
-Creo que es cuando se besan, se abrazan se dicen palabras bonitas o nos hacen un hermanito-Respondió nuevamente, serio como siempre.
-¿Y solo un hombre y una mujer pueden casarse? ¿O también pueden mujeres con mujeres y hombres con hombres?-Pregunto queriendo saber más. Obviamente la inocencia de un niño no tiene límite.
-Pues una vez yo vi a dos hombres besándose, papa dijo que era malo y que no se podía que entre ellos no había amor, solo…mmm-Se empezó a rascar la cabeza tratando de memorizar algo-Creo que era pujuria o lojoria. No me acuerdo.
-Sabes…yo te quiero…y no te miento y si siento amor por ti-Dijo tranquilamente acercándose a el y poniendo su cara en su pecho, sin si quiera notar el sonrojo en Itachi.
-Yo también te quiero Deidara. Eres mi mejor amigo en todo el mundo.-Le respondió. Hubo un momento de silencio por un buen rato, algo que Itachi aprovecho y trato de descansar, pero Deidara lo arruino con su vocezota.
-¿Itachi… has besado a alguien?-Pregunto inocentemente.
-Noup… no lo he hecho…-Respondió cerrando los ojos, pero algo le entre en duda-¿Y tu?-Abrió los ojos un poco curioseado por la respuesta que diría Deidara.
-Noup…-Deidara se quedo callado, por un momento y recordó una platica que tuvieron sus padres hacia apenas dos noches…
Flash Back
El pequeño Deidara se había levanto de su cama para ir a tomar un vaso de agua. Pero su cometido no se logro al oír a sus padres hablar en la habitación.
-Kushina… ¿te acuerdas como te conocí?-Pregunto Minato. Llamando la atención de Deidara y de su esposa.
-Cállate si no quieres morir…-Respondió secamente Kushina.
-Me acuerdo de ese día….-Puso una cara pensativa y luego con voz chillona dijo-“Disculpe señorita…me podría enseñar a besar, es que creo que no podré”-Dijo estirando los labios hacia su esposa, quién al oír eso, le propino un golpe.
Mientras sus padres discutían, sobre “la primera vez que se conocieron” Deidara había visto y observado todo, y por supuesto como su inocencia era demasiada, el pensaba que alguien debía enseñarle a besar.
Fin del Flash Back
-Itachi…-Hablo Deidara después de unos minutos-Enséñame a besar-Dijo imitando a su padre estirando sus labios, mientras Itachi se había levantado de golpe, golpeándose casi con el tronco del árbol y observando los labios de Deidara.
-Deidara…es que…yo no se besar…-Dijo avergonzando bajando la cabeza. Deidara un poco desilusionado, dejo de estirarle los labios para pensar en algo.
Mientras Itachi le veía, se había preguntado de donde sacaría semejante estupidez. Pero una estupidez que si había querido hacer.
-¡Ya se!-Hablo Deidara-Como los dos no sabemos besar, aprenderemos entre nosotros…ahora bésame-Volvió a estirar sus labios esperando que esta vez Itachi si le besara.
Mientras Itachi se debatía mentalmente en si hacerlo o no, no se daba cuenta que su cabeza se estaba moviendo en dirección a los labios de Deidara.
La distancia se fue acortando, ambos tenían cerrados los ojos con fuerza, sus labios estaban estirados. Ninguno de los dos sabía lo que hacían. Tan solo eran niños. No sabían si había algo de malo besarse entre hombres, y como no sabían poco les importaba.
Y así…Ambos juntaron sus labios, sintiendo una nueva caricia. El beso no duro demasiado, tan solo fue un beso rápido para experimentar, pero lo que muchos dirían, “Fue piquito” para ellos fue un beso de amor, o más. Su beso de amor eterno. En el que demostrarían su amor.
Por que nadie besaba así por que así…
Y menos un Uchiha.
Ambos ahora se veían sonrojados. Itachi tenía miedo de hablar, estaba rojo al igual que Deidara.
-“Debo decirle o preguntarle si le gusto como beso”-Pensó Deidara.
Y justó cuando iba a hablarle, Itachi se va dejando a Deidara con la palabra en la boca.
-¡Gomene Dei-chan debo ir a casa o mis padres me regañaran!-Grito perdiendo entre la oscuridad, yendo hasta su casa.
Mientras Deidara se quedaba ahí pensando.
“Yo si siento amor Itachi-kun…y no es pojoria ni lojoria…es lujuria…baboso-Pensó sonrojado yéndose también a su casa.
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A la mañana siguiente, Deidara iba en su bicicleta hasta la casa de Itachi su gran amigo, y ahora gran amor secreto.
Al divisar la casa Uchiha. Vio salir halos padres de Itachi y su pequeño hermano, salir, los tres vestidos de negro, hacia su auto. Curioso de no ver a Itachi con ellos hablo.
-Buenos días señor y señora Uchiha… ¿Dónde esta Itachi?-Pregunto aun montado en su bicicleta y con su carita infantil. Aun no sabiendo nada.
Pudo divisar la cara de dolor que tenia Mikoto, la madre de Itachi, y las pocas lagrimas que dejaba salir el papa de Itachi, y su hermanito entre susurros decía “Itachi…Nee-san…”Mientras lloraba.
Aun sin contestarle, Mikoto entre lágrimas se subió a su camioneta, junto con su hijo, quedando solo Fugaku.
-Hijo…-Fugaku se agacho hasta el suelo y le revolvió el pelo a Deidara, pero aun seguía llorando-Ayer…-Trataba de decirle-Ayer Itachi murió…-Termino de decir, notando la cara de dolor de Deidara-Ayer…cuando iba camino a casa…un carro le atropelló...y murió…-Termino de decir dejando un poco desconcentrado a Deidara. Quien a un no asimilaba las cosas.
-“Itachi murió”-(Deidara es inocente, pero no tanto como para no saber la palabra muerte)
Su rostro se lleno de lagrimas, empezó a patalear, y como reflejo cayo de la bicicleta siendo ayudado por Fugaku y otras dos personas que venían atrás.
Cuando Deidara diviso quienes eran. Observo que eran sus padres. También vestidos de negro.
-Mama, papa… Itachi murió…-Como acto abrazo a su mama esperando consuelo. Mientras Minato le daba un abrazo a su gran amigo y trataba de darle consuelo.
Kushina cargo a su pequeño (y no tanto) hasta el carro donde le subió y le puso el cinturón.
Después de un rato llego Minato.
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Todos estaban presentes en el funeral de gran querido Itachi, muchos lloraban, pero Mikoto y Deidara no podían dejar de llorar, una por la muerte de su hijo y el otro por su gran amor.
Llego el padre y empezó a dar la misa, Deidara no escuchaba solo miraba la caja dónde se encontraba Itachi.
“Y pensar que no pude confesarle mi amor”-Pensó llorando mas. Se separó de la mano de sus padres, yendo hasta el altar, donde estaba la caja posada, y adentro su gran amor.
Cuando hubo llegado todos le miraron. Nadie decía nada, era comprensible.
-Itachi…-Acariciando su mejilla pálida y con algunos moretones-Te quiero mucho…-Después se acerco a sus labios besándolos con dulzura esperando que este hecho despertara a su amado (como la película de La bella durmiente)
Todos lo vieron y estaban sorprendidos, Deidara los volteo a ver y dijo “El príncipe despertó a la princesa…yo quiero despertar a Itachi”
Mikoto estallo en lagrimas, Minato fue por su hijo agarrándolo fuertemente, ya que empezó a llorar y a patalear.
-¡El es mi gran amor!-Grito.
Todos le miraron sorprendidos. Mientras Minato se llevaba a su hijo.
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Los años habían pasado, Deidara ya tenia diecisiete años. Y ahora ya tenia más conciencia de las cosas sobre lo que años atrás paso. A Itachi jamás le olvido, el había despertado sus indicios de homosexualidad, pero ese no era punto. El le había dado su primer beso. Algo que jamás olvidaría. Y aunque ahora ya tenía novios, a quienes besaba, acariciaba y con quien tenia relaciones. Sabía que con Itachi seria diferente. Pero el ya no estaba. Pero siempre le recordaría. Como el muchacho a quien amo con locura y quien le dio su primer beso.