Ya había empacando algunas de sus cosas para quedarse en el departamento de Reita, ahora lo que más necesitaba Hiroto era su compañía sobretodo ahora que Shou y Tora estaban juntos.
Salió de su casa y tomó el primer taxi que vio para dirigirse a su destino, estaba emocionado de estar con el rubio otra vez, le gustaba y mucho, aunque aun no estaba seguro de amarlo todavía.
-“Pero estoy seguro que lo haré”- sonrió, recordando todos los bellos momentos que había pasado con su Reita, sino no estuviera él a su lado, estaba seguro que ya estaría saltando de un puente por la relación de Shou.
-Shou-kun
Le dolía, el solo recordar su nombre hacia que su corazón se hiciera pedazos; trataba de pensar solo en el bajista, de verdad trataba…pero Shou nuevamente aparecía como un fantasma en sus pensamientos ocupándolos todos nuevamente.
-Disculpe…déjeme aquí por favor- le pidió al taxista, que luego de pagarle se bajó del vehículo, se sentía un imbécil… ¿Qué diablos hacia parado justo frente al edificio donde vivía el vocal?- De verdad soy un estúpido.
Pero necesitaba aclarar algunas cosas antes de ir con el de Gazette, no le tomaría mucho tiempo ¿no?
-Gomen Reita- se disculpó antes, ingresando al edificio y enfrentarse al vocalista, para poder sacárselo de una vez por todas de su cabeza.
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Había seguido a Kai desde que salió de la compañía hasta que entró a un bar, aun no quería dar a conocer que estaba ahí, tenía una gran curiosidad por ver quién era la persona con que se iba a juntar el baterista, pero la verdad no creía que era solo curiosidad, ya que en estos momentos se estaba muriendo de los nervios y del enojo al saber que Kai se estuviera viendo con alguien, al solo un día de que se le halla declarado…¿tan rápido lo olvidó?
A pesar de todo, habían pasado mas o menos dos horas, desde que había llegado y el baterista seguía en el mismo lugar bebiendo tranquilamente una cerveza, a pesar de que se le habían acercado personas a hablar con él, después se iban, así que supuso que ninguno de ellos era el cretino que se juntaría con él.
-Oye ¿estás solo?
Ya era el cuarto chico que se le acercaba con las mismas intenciones: conversar, luego emborracharlo y llevarlo a la cama, aunque eso no estaría nada de mal, es mas, por esa razón había llegado ahí.
Estaba molesto, solo quería sacarse al pelinegro de su cabeza y lo mas fácil era encamándose con un tipo, pero…eso no iba con el.
¿Cobarde tal vez? Tal vez si lo era, al no tener el valor de acostarse con un desconocido e inventarle esa historia a todos de que se iba a juntar con alguien.
Que patético se sentía en estos momentos.
-ehh...no espero a alguien gracias- le sonrió viendo ahora como el guapo chico (para su gusto) se alejaba, ya estaba cansado, al diablo con todo- Es inútil, me voy de aquí
¿Para que engañarse a si mismo? ¿Para que perder el tiempo en ese lugar? La respuesta era obvia: aun no podía olvidar Aoi, a pesar de odiarlo, seguía igual de colgadito por él y no tenía el coraje suficiente para emborracharse e irse con un tipo.
-Aquí tiene- pagó la cerveza y salió del bar caminado hacia una plaza cercana, donde era seguido por Aoi.
El guitarrista estaba confundido…¿acaso dejaron plantado a Kai? No podía negarlo pero por alguna extraña razón se sentía enormemente feliz, tal vez era egoísta al pensar así, pero no le importaba, iba aclarar las cosas ahora, lo quisiera o no el menor.
-¡Kai!- le gritó haciendo voltear al baterista y quedó sorprendido al verlo allí, ¿acaso había visto su patético intento de tratar de ligarse a alguien?
-…-
-Pensé que…que te juntarías con alguien
-…- que patético se sentía, realmente era un idiota, sólo le daba esas mentiras para no sentirse rechazado totalmente por él, lo único que deseaba era que le quedara un poco de dignidad.
-¿No llegó cierto?- le preguntó algo triste al ver la cara angustiada del otro.
-Eso no te importa Aoi, eres solo mi compañero ¿recuerdas?- le contesto frío lo que hizo entristecer al mayor- Déjame tranquilo
-Gomen Kai, yo solo quería..ayudarte
-No, lo que tu querías era ver con quien me juntaba esta noche- respondió dolido- ¿Y por qué lo hiciste? Te lo responderé yo mismo, por una maldita simple curiosidad que tuviste, además de un enojo al saber que te quitaban a la única persona que se preocupaba verdaderamente de ti…muy egoísta de tu parte ¿no lo crees?
-…-todo era verdad, se sentía la mierda misma, lo único que le importaba era saber eso, el solo hecho de que alguien le arrebatara a Kai, le asustaba, le aterraba, no podría soportarlo…era egoísta, tenia todo la razón…Kai le pertenecía, no querría verlo con nadie mas…con nadie.
-Si eso es todo, me voy
-¡Espera! Kai yo creo que debemos aclarar las cosas…yo todo este tiempo te he extrañado mucho
-“¿Me extraño?”- esas palabras fueron música para sus oídos, se sentía tan feliz al escuchar eso, aunque muy adentro sabia que al pelinegro lo único que le importaba ahora, era tener de vuelta el idiota que le trataba de solucionar todos sus problemas, animándolo y estando a su lado- “ Esta vez no seré yo”
-Kai, vamos a mi departamento y arreglemos las cosas, yo quiero que todo sea como antes
-Me cansé- susurró
-¿ah?
-¡Entiende que ya nada puede ser como antes Aoi! ¡No quiero ser tu amigo, no quiero tenerte cerca de mí! En estos momentos ¡¡ te odio!!
-Kai…- esas palabras lo hicieron trizas, jamás se imaginó que por la boca de su mejor amigo salieran esas palabras llenas de rencor dirigidas a el
-Te odio- decía mientras lágrimas surcaban sus mejillas y trataba de reprimir sus sollozos que se le hacían incontenibles, se sentía tan estúpido- te odio… te odio
-…-se acercó al menor y lo abrazó, le dolía verlo así en ese estado por su culpa, era un imbécil por hacer sufrir a Kai una y otra vez.
Por su parte Kai se trataba de separar, pero el otro lo tenía bien sujeto abrazando con fuerza, transmitiéndole un sentimiento de calidez que Kai tanto había deseado sentir de él.
Finalmente dejó de oponer resistencia y se dejó abrazar, tratando de tranquilizarse mientras sentía que el mayor le acariciaba los cabellos y en un gesto de ternura le besaba el cuello.
-Tranquilo…no sigas llorando por favor- lo calmaba, mientras seguía dándole esas tiernas caricias que poco a poco comenzaban a tranquilizar al baterista, hasta que por fin detuvo sus sollozos, separándose de Aoi quien este, le limpió tiernamente las ultimas lagrimas que surcaban sus mejillas.- ¿Ves? Así te ves mas lindo- le sonrió mientras el otro se sonrojaba por todo el show que había dado al frente del pelinegro.
-…- otra vez lo sentimientos de amor hacia el resurgían y cada vez con mas fuerza, eso lo fastidiaba un poco, se había prometido así mismo olvidarse de Aoi, pero le era imposible odiarlo y guardarle rencor por todo lo que le hizo.
-¿Estás mejor ahora?
-…-asintió, separándose aun mas del pelinegro y dirigió su mirada al piso- Yo...tengo que irme
-Pensé que…íbamos a hablar
-No puedo ahora
-Pero...será mejor que te quedes conmigo Kai, no puedo dejarte solo en el estado en que estas
-¡¿Desde cuando te preocupa lo que pase conmigo?!- le dijo molesto mientras vio que Aoi ponía una cara de tristeza al escuchar eso- Gomen…es solo que…no quiero estar contigo ahora
-Pero Kai
-Haber Aoi- dijo tratando de calmarse aunque ya todo este asunto le estaba colmando la paciencia- Recuerda que hace poco tiempo me rechazaste, así que no te hagas que nada ha pasado además necesito tiempo para sacarte de mi cabeza ¿entiendes? No puedo estar contigo ahora
-…- lo sabia, había tomado esa decisión, aun amaba a Ruki, pero por alguna razón, al encontrarse con Kai, estaba empezando a dudar sobre sus sentimientos…es decir, no cualquiera sigue como desesperado a su mejor amigo, por solo juntarse con alguien. Tal vez…algo mas que amistad estaba empezando a sentir por él.- Kai yo…
-Ya Aoi déjame en paz- dijo enojado, alejándose del pelinegro que se sentía un idiota por haber quedado con la palabra en la boca, pero con una remota esperanza de aclarar sus sentimientos que sentía hacia el menor. Sin embargo primero tenia que ver a Ruki, a pesar de que Uruha le había dicho que estaba bien, lo que mas deseaba era poder disculparse con el.
-Mañana lo iré a ver a su casa luego del ensayo y… hablaré con Kai
-Moshi, Moshi?
-Nee Reita ¿puedo ir a tu casa?- preguntó el baterista tratando de sonar igual que siempre aunque la conversación con Aoi lo había dejado horrible, si bien, no quería preocupar a Reita con sus problemas, al menos deseaba la compañía de alguien
-Etto…vendrá Hiroto-kun después, demo…puedes ayudarme a cocinar mientras ¿no?
-No seas aprovechado- lo regañó
-Vamos no seas malo Kai, ¡necesito ayuda!
-“Yo era el que necesitaba ayuda”- pensó- Está bien, no hagas nada estúpido, hasta que yo llegue Akira y aléjate de la cocina ¿me oyes?
-No me des órdenes- colgó enojado el bajista mientras el otro suspiraba, definitivamente tendría que llegar rápido sino Reita era capaz de estallar su propia residencia.
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No habían estimado quedarse dormidos tan temprano, pero el ensayo había sido tan agotador, además de que al llegar al departamento habían tenido un gran sexo, todo esto los dejó exhaustos para poder despertar hasta el otro día.
Tora se despertó con el sonido insistente del timbre, no era muy tarde, así que pensó que podría ser alguien de la banda, lo mas probable Nao que como era de distraído se había olvidado de decirles algo importante.
Se levantó de la cama tratando de no hacer mucho ruido para no despertar al vocal que dormía plácidamente a su lado, buscó y se puso unos pantalones para abrir la puerta y encontrarse con Hiroto.
-Hiro…- de todas las personas tenia que ser el guitarrista y se sentía la mierda misma al ver la cara de sorpresa que tenia el otro, después de todo la ardilla era su amiga y no le gustaba verlo sufrir por su relación- Pon…- lo llamó viendo que el pequeño aun no salía de shock momentáneo.
-Yo..yo…Shou ¿esta aquí?- que idiota!, era obvio que estaba allí, era su departamento, el que no tendría que estar aquí seria Tora.
-Ehh..si- respondió algo nervioso por el tenso ambiente y la mirada de furia que le dedicaba Hiroto ahora, al ver que solo estaba con un pantalón y recién se daba cuenta de las marcas que le había dejado el vocal.
-Te divertiste con él ¿no?
-Hiroto…
-¡No entiendo como puedes ser tan descarado de meterte con Shou, después de todo lo que le hiciste!
-Ese tema ya lo habíamos hablado Pon- trató de responder calmado-Tú sabes que lo amo y que en ningún momento lo haré sufrir como lo hice antes
-…-
-Además…pensé que estabas con Reita-san
-Eso no te incumbe- masculló desviando su mirada- Necesito hablar con Shou ahora
-¿Para qué Hiroto? Solo te estas haciendo daño haciendo esto ¿sabes?- dijo triste- Olvídate de Shou, Pon
-…-
-No quiero verte sufrir ni a ti ni a Reita-san…porque has pensado en sus sentimientos ¿no?
-…-claro que los pensaba, los tenia bien en cuenta pero…Shou, a Shou lo había amado desde años y estaba seguro de que si se le hubiera declarado, el que estaría en el lugar de Tora sería él.
-Hiroto, no sigas con esto onegai, Reita-san es una buena persona, puedes lograr algo muy lindo con él y Shou también lo cree.
-No te creo nada- respondió frío- Déjame hablar con Shou ¡quiero hablar con él!
-Cálmate Hiroto
-¡¡¿Que no entiendes?!! ¡¡Quiero decirle todo lo que he sentido por el por años!! ¡¡Quiero sacarme todo esto de encima!!…quiero..yo solo quiero- innumerables lagrimas comenzaban a aparecer en el rostro del pequeño, quebrándose- Yo quiero…yo solo..quiero..que me ame…yo solo quería que me correspondiera
-Pon…-le dolía verlo de esa manera, pero de verdad que el rubio estaba actuando de una manera muy egoísta e infantil, es decir, ¿para qué estaba con Reita si seguían amando a Shou?- Hiroto ya no eres un niño, debes afrontar las cosas como son, Shou no te corresponde y tienes que seguir adelante con tu vida, no debes seguir aferrándote por alguien que te quiere como un hermano.
-…- que se callara de una puta vez, no lo soportaba, quería matarlo ahí mismo ¿Qué se creía el maldito al darle ese tipo de discursos?- Sabes Tora, lo que haga con mi vida- dijo ya calmándose y secándose sus lágrimas- A ti no te importa pero déjame decirte que lo tuyo con Shou no va a durar
-¡Deja de actuar como un crío!- le gritó molesto a lo que el guitarrista lo miraba con recelo- ¡Si decidiste jugártela por Shou, al menos deja la farsa de tu noviazgo!
-Tu no me vengas a exigir nada Tora, lo que haga yo con Reita no te incumbe
-No puedes jugar de esa manera con los sentimientos de una persona Pon…el de verdad esta enamorado de ti.
-Lo se, pero en estos momentos quiero aclarar las cosas con Shou y lo que es mas importante, quiero que se aleje de ti- habló amenazante- Me da lo mismo si después no quiere nada conmigo, no permitiré que esté contigo y créeme que no descansaré hasta que su farsa de relación acabe- dijo saliendo rápidamente del edificio, mientras el otro lo miraba sorprendido, aun no podía creer cuanto rencor le guardaba el guitarrista y que no le preocupara los sentimientos del bajista de Gazette, aunque entendía que no era fácil, ya que Hiroto jamás había tenido una relación en donde sus parejas quisieran mas allá de tener su cuerpo por unas cuantas noches, probablemente le costaba creer que Reita estuviera verdaderamente enamorado de él.
Bajaba las escaleras con rapidez, estaba furioso, tenía unas enormes ganas de matar al más alto para acabar con todo esto, pero su celular lo hizo sacar de sus pensamientos
-¿Que quieres?- contestó molesto
-ehh..¿Hiroto-kun? Quería preguntarte a que hora apareces por acá- habló algo confundido por el tonito con que le hablaba su novio
-No lo sé Reita…en un rato más supongo- dijo frío, la verdad no tenia ganas de hablar con nadie.
-Bueno, es que estoy preparando algo para cuando llegues y quería saber si te apetece cenar pastas
-Supongo
-¿Te pasa algo?- preguntó notando que no se oía como su Hiroto de siempre
- No me pasa nada que te importe ¡No seas metiche Akira!
-Hiroto…- se quedó en shock de la manera que le hablaba su pequeña ardilla, pero decidió ignorarlo, su preocupación por él era mas grande- Algo paso ¿no? ¿Que te hicieron?
-¡Deja de entrometerte en mi vida! ¡Ya me tienes cansado!
-Pon...que
-Mierda Suzuki…¡quiero estar solo ahora! ¡Entiéndeme de una puta vez! No me preguntes tonterías
-….-
-…- recién se pudo dar cuenta de las cosas horribles que había dicho al bajista, se sentía un idiota, lo único que hacia el de Gazette era animarlo y el le respondía como perro rabioso- Rei
-Vete a la mierda- masculló colgándole de inmediato al guitarrista y dejándolo con la palabra en la boca, definitivamente la había cagado en grande.
-Y Reita ¿a qué hora viene? – le dijo desde el comedor Kai que ya había terminado de poner la mesa y la cena ya la había dejado lista.
-el…
-¿el?- se acercó al bajista que aun mantenía su mirada en el piso, algo raro le pasaba- Rei-chan ¿qué sucede?
-Nada Kai- le sonrió como pudo ocultando todo su dolor y tristeza en esos momentos- Ya viene llegando así que será mejor que te vallas sino quieres arruinar mi cena romántica
-¡jajaja! Esta bien, pero después me cuentas todo con lujo de detalles ¿bien?- se despidió besándolo en la mejilla mientras el bajista por fin podía dejar de fingir.
-No tenia derecho a tratarme así- susurró dolido tratando de aguantarse sus lágrimas, el rudo bajista de Gazette jamás lloraba ni menos frente a alguien, pero esta vez, no pudo aguantarse- No tenías el derecho de tratarme así Hiroto- seguía llorando mientras se limpiaba con sus manos las lágrimas que caían por su bello rostro y como el dolor aumentaba cada vez más.
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-Saga ¿qué ibas hacer?- preguntó extrañado el vocalista ya que había notado el tierno roce que le dio en sus labios y la cara de tomate que tenia ahora el otro le hacia dar una grata sospecha de que el bajo podría estar cambiando algo.
-…-se sentía como un niño atrapado con las manos en la masa, algo tenia que hacer para salir de esta situación vergonzosa y no se le ocurrió nada mas original que besar al menor con brusquedad, ingresando su lengua con fuerza dentro de la cavidad del vocal, que le trataba de corresponder apenas, ya que el que se encargaba de llevar el ritmo salvaje era Saga. Finalmente el aire se les hizo presente y el alice se separó con una sonrisa de autosuficiencia en los labios viendo lo agitado que estaba el otro- ¿Eso responde a tu pregunta?
-Supongo- respondió apenas ya que ese beso le había dado le encantó, ya estaba extrañando los besos salvajes de Saga, tal vez había decidido cambiarle su personalidad pero la manera de besar del castaño le fascinaba, así que por ahora la quería mantener así.
-Te Comiste todo veo
-Si sigues dejándome esa cantidad de comida me pondré obeso- le reclamó mientras lo seguía a la cocina y veía como Saga buscaba algo en el refrigerador.
-Pues yo no he comido casi nada, así que me tendrás que acompañar enano
-¿Acompañar?- preguntó confundido, ¿acaso le estaba pidiendo que comieran juntos? ¡¿Saga?!
-¿Algún problema con eso?- lo miró desafiante
-No es solo que….olvídalo- para qué torturarse la cabeza con las acciones del mayor, decidió sentarse a comer a su lado- Saga ¿donde dormirás hoy?
-En el sillón supongo, ya que si estoy a tu lado soy capaz de follarte ahí mismo- dijo simple mientras Ruki suspiraba, nuevamente volvía el Saga de siempre.
-Es tu casa no deberías dormir allí, yo con los medicamentos no siento tanto dolor como antes, puedo dormir esta noche en el sofá
-No trates de hacerte el valiente pitufo que no te funciona conmigo- habló mientras comía y el vocalista lo miraba con reproche por haberlo llamado así.
-Entonces…duerme conmigo
-¿Te me estas insinuando enano?- sonrió divertido, mientras el vocal se sonrojaba
-No seas idiota, habló del verbo dormir solamente o acaso no tienes ese significado en tu minúsculo vocabulario?
-Oye Takanori no me insultes ¿estamos?
-Tú empezaste
-aghh! Está bien, dormiré contigo si tantas ganas me tienes
-¡No las tengo!- le reclamó enojado pero con un gran sonrojo que puso reír al bajista.
-No te avergüences chibi, si se que soy irresistible, pero ten paciencia que cuando te mejores, te daré el mejor folle de tu mísera vida
-…-otra vez el sonrojo, aunque ya se estaba acostumbrando a las frases tan explicitas del bajista, además de que él tampoco era un santo ni un inocente, al menos debía agradecer que el alice estaba poniendo todo su empeño en cuidarlo y aunque se lo negara a muerte estaba seguro que con ese tierno roce que le dio, salió a flote el Saga tierno y tímido del pasado.
Finalmente terminaron de comer, el bajista fue el primero en entrar al baño para ponerse el pijama mientras el vocalista se acostaba en una de las orillas de la cama, por alguna razón estaba nervioso, si bien creía que Saga no le haría nada como lo prometió, el acostarse con la persona que te gusta lo ponía algo ansioso y excitado.
-Oye Ruki, no estoy tan gordo para que me dejes tanto espacio- habló el bajista al ver que el menor estaba prácticamente aferrado a la orilla contraria apunto de caerse.
-Di lo que quieras y déjame dormir joder- le respondió molesto pero por dentro estaba que se moría de la vergüenza.
-Vaya hace tiempo que extrañaba ese Ruki- rió
-Imbécil- sonrió de lado aun dándole al espalda al alice, de verdad se sentía a gusto con estar así con Saga, era un pervertido, arrogante y maniático, pero su compañía le agradaba, mientras mas compartía con él, mas le gustaba.
De pronto sintió como se acercaba, lo que provocó que se tensara y detuviera su respiración, no estaría pensando en…
-No tiene nada malo abrazar a mi juguete- le dijo el bajista, mientras lo acercaba mas a su cuerpo aspirando ese aroma que lo volvía loco- Ya te dije que no te haré nada por ahora- lo calmó haciendo que Ruki normalizara su respiración de seguro estaba rojo y le gustaba causar esas impresiones en el de Gazette- “Ya no hallo la hora para tenerte gimiendo bajo mío”
Por otro lado Ruki poco a poco fue cayendo en el sueño e incluso se dio vuelta para acurrucarse en el pecho del otro, buscando ese calor que el alice le brindaba y en donde éste se sonrojo por el acto del pequeño, nunca antes había recibido ese tipo de cariño.
-Si que eres extraño enanin- rió para sus adentros mientras acariciaba los cabellos del dormido menor y caía en un sueño profundo al igual que él.
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-Cielos Uruha, bebiste demasiado- decía el baterista mientras ayudaba a entrar al más alto a su departamento, al final lo único que había echo Nao era ver como su pareja bebía sin poder controlarse y lo besaba y acariciaba en pleno público, no es que al baterista le molestara eso, pero sentía que no era lo correcto, además que pasaría si Uruha se descontrolaba y lo hacían allí mismo, se armaría un gran escándalo.
Con una gran fuerza lo fue guiando a su habitación, en donde lo dejó en la cama y se dispuso a cerrar la puerta de su departamento.
-¡como te amooo Ositooo-chaaan!- canturreaba feliz el castaño mientras el pelirrojo se dirigía hacia el y le sacaba los zapatos- Naocito..¿que hac-ces? ¿Que que quieres violarme acasoo?
-Te saco los zapatos para que duermas mejor Shima- le dijo respondiéndole con paciencia, tenia experiencia en soportar a borrachos, ya lo había echo con Saga mas de una vez.
-Nee dormiraaas conmigo ¿no?- le sonrió tomando unos de sus brazos y acercándolo a él, quedando sus caras a poco cm de separación
-Uruha…estas demasiado cerca- lo regañó separándose y sacándose el mismo sus propios zapatos, la verdad no quería hacerlo de esta manera con el guitarrista, el no estaba acostumbrado al sexo duro y si Uruha estaba borracho estaba seguro que lo rompería y le haría esas cosas masoquistas que tanto le gustaban.
La primera vez que se había acostado con el, vagamente recordaba algo, pero las marcas, cicatrices, moretones y el enorme dolor en el trasero que tuvo durante una semana, eso si que lo recordaba perfectamente, además que después de eso no había vuelto a tener sexo con un hombre jamás, solo con chicas por supuesto.
-Naoooo ven aca a la camaaa- decía el mas alto haciendo pucheros adorables mientras el otro estaba buscando unas frazadas para irse a dormir en el sofá- No meee… dejes solo
-Shima mejor duérmete, no estás bien aho- fue interrumpido por los fuertes brazos del guitarrista que le hizo botar todas las frazadas al piso y el castaño no perdió tiempo para acariciar el pecho del mayor, sacándole ahogados gemidos y que su respiración empezara a agitarse- De..tente Shima
-Yo pienso que no quieres que me detenga- le besaba el cuello mientras le masajeaba por sobre la ropa su miembro viendo que aumentaba de forma considerable- Seré delicado, confía en mi Nao- lo dio vuelta para besarlo tiernamente, entrelazando la lengua del baterista y jugando con ella, mientras lo guiaba a la cama.
Al parecer el de Gazette se encontraba un poco mas lúcido y para que engañarse a si mismo si moría de ganas de hacer el amor con Uruha, nunca se había sentido tan excitado en toda la vida.
El beso que comenzó tierno poco después se volvió mas brusco, ninguno de los dos quería dar victoria y sus lenguas luchaban por el poderío, moviéndose en la cavidad de cada uno y sacándoles gemidos ahogados a ambos.
Se separaban y se volvían a besar mientras el guitarrista se encargaba de retirar cada prenda del más bajo y este acariciaba los finos cabellos de su cabeza, colgándose de su cuello, correspondiéndole a sus apasionados besos y estremeciéndose al contacto de las manos frías de Uruha que ahora recorrían su pecho desnudo con lentitud.
Ambos cayeron a la cama, Uruha quedó sobre el baterista, mientras éste se perdía en la mirada gatuna que le daba el más alto, tenerlo sobre suyo lo excitaba demasiado.
El castaño sonrió y le dio suave beso para luego ir recorriendo con lentitud su cuello lamiéndole, degustándolo, besándolo y dándole unos pequeños mordiscos que hacían que el mayor enloqueciera y lo hizo aun mas cuando sintió que las manos del otro peñiscaba sus pezones poniéndolos duros y firmes, provocando que Nao se volviera loco.
-Uru…Uruha- una y otra vez decía su nombre agitado mientras sentía como el mayor succionaba su cuello dejando esas marcas de que le pertenecía.
-Me encantas- nuevamente lo besó para finalmente sacarle el pantalón y el mismo se sacaba su camisa dejando ver su sexy cuerpo que el Alice miraba como en trance.
El guitarrista sonrío y nuevamente quedó sobre él para ir recorriendo despacio con su lengua el pecho de Nao llegando a sus pezones succionándolo con fuerzas, mientras que frotaba su ya notable erección, contra la pelvis de Nao que ese roce lo excitaba de sobremanera, a pesar de que él seguía en boxer y su pareja con los pantalones puestos.
-Shima..ahh shima- acariciaba los cabellos del otro, sintiendo como terminaba con un pezón para seguir con otro, pero esta vez con una de sus manos desvistió por completo a Nao, quedando completamente desnudo frente a él.
-Eres hermoso Naoyuki- le susurró al odio para luego lamer su lóbulo de la oreja, mientras Nao recorría la espalda del guitarrista y esta vez era él, el que le dejaba marcas en el cuello de este- ahh! Eso dolió ¿sabes?- se quejó por una mordida que le había dado Nao y que ahora la lamia con sensualidad, el no seria el único que quedaría marcado.
Al ver esas caricias tan sensuales que le daba el mayor, pensó que ya no aguantaría mucho, se separó de el por un rato sacándose el mismo sus pantalones y boxers donde dejó en evidencia la enorme excitación que tenia mientras, Nao lo miraba con algo de nerviosismo, Uruha era enorme.
-No te preocupes- le sonrió mientras lo abrazaba provocando que ambos miembros chocaran que hizo escapar unos gemidos a ambos- Esta vez seré delicado- lo besó ingresando a la tibia calidad del baterista mientras lo masturbaba- Lo prometí ¿recuerdas?
Nao asintió y vio como el guitarrista le mostraba sus dedos y los ingresaba en la boca, el alice no perdió tiempo para lamerlos mientras que el guitarrista lo seguía masturbando sacando gemidos en otro.
-ahh..Shima no..no sigas- se detuvo en su tarea para apoyarse mejor en la cama, mientras el guitarrista decidió cambiar de táctica y obligó a que el baterista apoyara su espalda en el respaldar de la cama mientras él se agachaba para engullirse el miembro del alice de una sola vez- ahh..Shima..nhhh
Estaba gimiendo como una puta, el ritmo como succionaba el mas alto su miembro le hacia perder la cordura, en cualquier momento iba a terminar.
-ahhh!- finalmente se corrió dentro de la boca del castaño que recibió gustoso todo lo que brindó su baterista que lo miraba notablemente sonrojado.
-Sigamos en lo que estamos ¿no Nao?- le dijo con una voz sexy en donde le pelirrojo no perdió tiempo y se puso en cuatro haciéndole entender al otro que estaba listo.
Ingresó un dedo a la entrada del pequeño lo que provocó que este arqueara de dolor, sin embargo lo aguantaría, estaba sobrexcitado y quería tener dentro al guitarrista de una vez por todas.
-Uruha..ahh.. hazlo ya
-Tengo que prepararte Nao- decía el otro mientras seguía moviendo su dedo dentro de la entrada del baterista y este respiraba agitado e impaciente, necesitaba a Uruha de una vez por todas, ya no podía esperar mas- Te dolerá sino hago esto
-Onegai…entra ahora Uru
El guitarrista se detuvo, el tampoco podía aguantarse demasiado, pero la entrada del pelirrojo aun seguía bastante contraída, si ingresaba así estaba seguro que lo rompería y lo menos que quería era hacerle eso.
Nao se dio cuenta la confusión que había en la mente Uruha, asi que dejo su posición para acercarse a él a gatas, dándole un tierno beso que dejó al más alto en las nubes.
-No te preocupes por mi…estaré bien- le sonrió mientras el guitarrista le correspondía la sonrisa y lo besaba en la comisura de los labios, recostándolo en la cama y comenzando a entrar lentamente en el.
-ahhh!- no podía evitarlo, le dolía demasiado y no pudo contener sus lagrimas, a Uruha también le estaba doliendo, el baterista era demasiado estrecho, igual que la otra vez.
-Relájate...Nao- le pidió al otro que no dejaba de llorar, pero en ningún momento se quejo ni dio a conocer su dolor, ni siquiera le pidió que se detuviera, solo seguía gimiendo y sollozando bajo el guitarrista.
-ahh…Shima- esta vez trató de relajarse y rápidamente el guitarrista aprovechó esto para ingresar por completo al cuerpo de su pareja lo que provocó un grito de dolor por parte de este, pero poco a poco su respiración se normalizaba y se acostumbraba a tener al menor dentro suyo.
-Te amo Nao- se acercó a besarlo mientras comenzaba a darle lentas pero certeras embestidas mientras los gemidos del baterista eran acallados por los besos del de Gazette.
De verdad ambos estaba al pleno éxtasis en ese instante, Nao sentía como el miembro de Uruha ingresaba y salía y al pasar el tiempo lo hacia un poco mas rápido y fuerte, lo que provocaba que una oleada de placer lo recorriera.
-ahh mas..ahh..sigue Shima- gemía agitado el baterista mientras se abrazaba al cuello del otro y este aceptaba a seguir sus ordenes. El ritmo de las embestidas que le daba al otro comenzaban a ser mas duras y aunque a Nao le dolía por montones, el placer que sentía era mucho mayor que el dolor.
Uruha salió para obligar a sentar al mayor sobre él, cosa que el otro no se negó y pudo sentir como el miembro del guitarrista tocaba ese punto que lo hacia volar a la locura del placer.
-ahh..shima nhh!- sentía como el guitarrista seguía embistiéndolo tomando sus caderas con fuerzas mientras el se movía al compás del ritmo que llevaba el otro.
Uruha jamás había tenido un mejor sexo que este, a pesar de que no había golpes ni sangre, estaba mucho mas excitado que lo estuvo antes…la razón: por primera vez lo estaba haciendo con la persona que le correspondía.
-Te amo..Kouyou ahhh- le susurraba mientras seguía gimiendo cerca de su oído trazándose al cuello del guitarrista y sintiendo como el otro lo embestía con más fuerza, llegando mas adentro.
Estuvieron así por un rato hasta que finalmente Nao terminó por llegar al clímax y sentía como Uruha lo jalaba hacia abajo llenándolo de su esencia para terminar por llegar al clímax también.
Ambos quedaron rendidos, no hacia faltas decir palabras, habían echo por fin el amor, algo que los dos tanto habían ansiado.
Uruha aun sin salir del baterista lo besó lentamente, compartiendo ese conocido roce de lenguas que le brindaba su pareja, llevándolo una vez más al paraíso.
Cuando terminaron de besarse, Uruha salió lentamente del cuerpo de Nao y lo ayudó a recostarse en la cama mientras los cubría a ambos con el cobertor para quedar finalmente dormidos en los brazos de Morfeo.