Era de noche, la luna iluminaba el cielo y las estrellas parecían estar a solo unos metros.
Una estrella fugaz callo, y una joven de largo cabello rubio le pidió un deseo mientras una lágrima rodaba por sus mejillas.
La chica, sentada en el techo de su casa, quería llorar, pero algo se lo impedía, miraba al cielo, como buscando respuesta a algo que ni ella misma sabia.
Sus hermosos ojos celestes, se nublaban mas con cada tímida lagrima que aparecía y que no podía controlar.
A lo lejos una muchacha de cabello rosa la observaba preocupada, sin saber si acercarse o no a la destrozada rubia.
Los ojos de la pelirrosa, de un hermoso color verde claro, expresaban preocupación y tristeza.
Mientras tanto la rubia no aguanto más las lágrimas y estallo en llanto, culpándose por lo que tanto la atormentaba.
La pelirrosa al verla no aguanto mas y se acerco a la rubia lo mas rápido que pudo, secándose las temerosas lagrimas que habían comenzado a caer.
-Ino!- dijo tan pronto llego al lado de la rubia.
-Sa... Sakura?... que haces aquí?- dijo secándose las lagrimas disimuladamente.
-no trates de disimular conmigo- le dijo la pelirrosa tiernamente, mientras le tomaba las manos reconfortándola.
-arigato... Sakura- tras decir estas palabras, la rubia rompió en llanto. La pelirrosa la abrazo lo más fuerte que pudo.
Al rato Ino fue quien rompió el abrazo se seco las lagrimas y aun con ganas de llorar, miro a Sakura.
-porque no puedo ser feliz?- dijo mirando hacia el suelo
-lo dices por... “ella”?- al oír esas palabras la rubia levanto la cara sorprendida y miro a la pelirrosa que ahora tenia sus ojos clavados al suelo y comenzaba a llorar.
-que... sabes tu de... de todo esto?- pregunto la rubia
-todo Ino... “ella” me lo contó todo...antes de...- no pudo terminar la frase.
En ese momento la rubia se puso de pie, miro la luna y nuevas lágrimas comenzaban a salir, cerro los ojos.
-ella debe estar allí, mirándonos desde la alta luna-
-Ino, yo...?- la pelirrosa se puso de pie le tomo las manos a la rubia y la miro a los ojos.
-yo... que puedo hacer por ti?- eso no era lo que ella quería decir en realidad, pero no tenia el valor para confesarle toda la verdad.
-no te preocupes- dijo la rubia con una sonrisa –con que estés aquí me haces sentir mejor-
-Ino...- suspiro la pelirrosa. La rubia continuaba con la mirada pérdida en la luna, y en aquel deseo que le había pedido a esa estrella fugaz.
-lo sabes todo, Sakura?- pregunto la rubia rompiendo el silencio que se había apoderado de ellas.
-bueno... solo lo... que ella me contó...- respondió la pelirrosa
-y has vuelto a hablar con ella?- pregunto temiendo la respuesta de la chica.
-etto... no... Desde que...-
-lo supuse...- la interrumpió la rubia –entonces no lo sabes...- nuevamente sus ojos comenzaron a humedecerse, pero se resistía a llorar.
-que es lo que no se?- pregunto Sakura mirando a Ino fijamente.
-hace unos momentos vi caer una estrella fugaz...- dijo la rubia contemplando el cielo.
-y eso que tiene que ver con esto?- exclamo la pelirrosa
-y le pedí un deseo...- continúo la rubia sin hacer caso a las palabras de Sakura. –le pedí que por favor me llevara donde esta “ella”- no pudo contener mas tiempo el llanto.
-“donde... esta... “ella”...”?- repitió Sakura –porque le tienes que pedir a una estrella que te lleve donde “ella”??- pregunto extrañada la pelirrosa.
La rubia miro a Sakura, dio un fuerte suspiro.
-yo la amaba...- dijo Ino con la voz entrecortada –yo la amaba, como nunca ame a nadie-
-la... a-m-a-b-a-s?- los ojos de la pelirrosa se abrieron de par en par, estaba sorprendida, pero de algún modo extrañamente feliz.
-y fue mi culpa que “ella”... se fuera- la rubia apretó su puño con fuerza.
-tu...culpa...porque?- pregunto la pelirrosa.
-todo comenzó al inicio de la escuela. Cuando “ella” llego, tu te acercaste a “ella” amablemente, en ese tiempo me aleje un poco de ti, no sabia por que lo hacia... pero un día lo descubrí... desde el momento en que llego, comencé a sentir cosas, su forma de ser, todo en ella me gustaba, la encontraba perfecta, y al darme cuenta de eso, me quise acercar a “ella”...
La pelirrosa la observaba atenta.
-... los días pasaban y yo sentía que este sentimiento hacia “ella” crecía cada vez más, pero lo ocultaba, por miedo o por vergüenza...-
La rubia se detuvo, tomo aire –supongo que esto “ella” no te lo contó... verdad?-
-n... no... –
La rubia dio un largo suspiro y continúo...
-... nos llevábamos muy bien, “ella” no sospechaba lo que sentía, ni tu...ni nadie... me prometí a mi misma que por la amistad que habíamos formado con “ella” y por la amistad que tenemos ambas desde hace tantos años, me olvidaría de este sentimiento... al comienzo funciono, o eso fue lo que yo creí, pero una noche me di cuenta que no podía seguir así, por mas que tratara de ocultarlo, no podía... no quería olvidarla... quería estar a su lado...decirle todo lo que sentía por ella...pero no podía...-
-... un día, cuando ya no aguantaba mas esta presión, me decidí, me dije a mi misma que se lo diría, sin importarme que pudiese perderla completamente... solo quería sentirla cerca solo por un momento... sentir su respiración cerca de mi... que me abrazara... pero otra vez algo me lo impidió...-
-... al llegar a mi casa, me encerré en mi habitación y llore como nunca antes lo había echo... mi corazón lo sentía muerto... fue entonces que me acorde de ti...-
-de...de mi?- exclamo sorprendida la pelirrosa.
-...así es, me acorde de ti y de todos los momentos que pasamos, no podía dejar que esto me afectara, así que por ti decidí seguir adelante...-
La pelirrosa asomo una tímida sonrisa y sus mejillas se sonrojaron.
-... por supuesto que me era muy difícil, la veía todos los días, su sonrisa, oía su voz decir mi nombre...- por unos segundos la rubia se quedo pensando
-... entonces llego el día... su cumpleaños, como bien sabes hizo una pequeña fiesta en su casa, en donde por supuesto asistimos las dos... todo estaba tranquilo, trataba de no pensar en nada mas que en divertirme... fue entonces que... me llamo a su habitación...-
-si, ya lo recuerdo...- susurro la pelirrosa.
-... me senté en su cama, mientras “ella” se mantuvo de pie dándome la espalda... yo estaba muy nerviosa... nunca antes había estado a solas con “ella”... pensé en que ese era el momento para confesarle mis sentimientos, pero ella comenzó a hablar...-
Los ojos de la rubia expresaban una enorme felicidad.
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-desde hace un tiempo que he pensado en decirte esto, pero no encontraba el momento preciso...y es que... yo... tu...-
**-... mientras buscaba las palabras precisas para hablarme mi corazón comenzaba a latir muy deprisa...-**
-... tu... me... me gustas...-
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-... aquellas hermosas palabras sonaron en mi cabeza... era como... como un sueño echo realidad... lo que yo tantas veces quise hacer, “ella” lo había echo... sinceramente no supe como reaccionar... así que le dije que también me gustaba... aunque lo que yo sentía por “ella” no se comparaba con esas palabras... por un momento ninguna dijo nada... creo que “ella” al igual que yo pensaba que hacer... fue entonces cuando me dijo –gracias-... esas palabras me dieron valor... en aquel momento me puse de pie me acerque a “ella”... la mire a los ojos... se sonrojo y creo que también yo... tome su cara entre mis mano y me comencé a acercar...-
La pelirrosa escuchaba atenta, era algo que jamás se hubiese imaginado.
-... por fin mí sueño se había cumplido, podía sentir su respiración, su corazón latir rápidamente y nuestros labios juntarse por primera vez...-
La rubia guardo silencio, tocaba sus labios con sus dedos, recordando aquel momento.
-... fue el momento mas feliz de toda mi vida, todas mis penas se desvanecieron con ese beso... al separarnos “ella” me sonrió y me abrazo... estaba feliz... tan feliz... que no pude evitar llorar...-
-luego... que paso?- pregunto la pelirrosa
-luego bajamos a la fiesta y no nos vimos en todo el fin de semana, tenia que ordenar mis sentimientos y asimilar aquel hermoso momento... por unos días seguimos como si no hubiese ocurrido nada, pero no soportaba la idea de tenerla cerca y no poder decirle cuanto la amaba... aunque... nunca se lo pude decir...-
-porque no? Si eso sentías...- pregunto la pelirrosa
-no lo se...cada vez que nos juntábamos “ella” lo decía, pero yo no podía, y no se porque... ni siquiera aquel día pude decírselo...-
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-Ino-chan, tengo algo que decirte...-
-que ocurre? Porque te pones tan triste?-
-Ino-chan... yo... me tengo que ir de aquí... a mi padre le ofrecieron un trabajo fuera del país y yo me tengo que ir con el...-
-Q...QUE!?... no puede ser... debe ser un error... es una broma... verdad... dime que es una broma...- la rubia comenzó a llorar desconsoladamente
-que mas quisiera yo que fuese una broma... pero no... Yo me voy y no hay nada que hacer... adiós... Ino-chan...-
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-... tras decir eso se fue... sin poder despedirme... quería correr hacia “ella”, y detenerla, pero no pude hacerlo...- la rubia lloraba por aquel recuerdo, tomo aire, miro su reloj. –mira la hora, ya casi es medianoche, será mejor que te vallas, tus padres deben estar preocupados-
-pe...pero- protesto la pelirrosa
-no te preocupes, estaré bien- dijo la rubia con una sonrisa en el rostro.
Cuando Sakura se fue, Ino entro a su habitación, pero antes vio pasar otra estrella fugaz.
La chica estaba sola, sus padres se habían ido de vacaciones y no tenía hermanos, cuando se hubo tranquilizado tomo la decisión más importante de toda su vida, se acerco a su escritorio y comenzó a escribir una carta.
Al día siguiente Sakura la fue a buscar como todos los días para ir a clases, al ver que nadie le respondía se preocupo y vio que la puerta estaba abierta.
Entro rápidamente, subió a la habitación de Ino y no encontró a nadie, comenzó a buscar por toda la casa a su amiga, pero fue en vano la chica no estaba por ninguna parte.
Volvió a su habitación y se percato que encima del escritorio había una carta en la que decía: “para mi amiga Sakura”
Temiendo lo peor Sakura se sentó a la cama y comenzó a leer la carta...
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Sakura:
Si estas leyendo esta carta significa que yo ya no estoy cerca... ayer tome la decisión mas importante de toda mi vida y se que tu, mi mejor amiga me entenderás, pero antes te contare el final de la historia que te conté anoche.
-cuando se fue, no me dijo el día, ni la hora, y no me atrevía a ir a su casa, así que nada mas me resigne a haberla perdido para siempre... pero, cuando ya había perdido todas la esperanzas de volver a oír su voz, suena el teléfono.
-Ino-chan... este es mi adiós, hoy parto del país... y no... Podía irme sin decirte... que te... te amo... te llamare cuando llegue, adiós...-
Eso fue lo único que me dijo, y corto... no medio tiempo para hablarle, como había ocurrido antes... me resigne solo a esperar su llamado, que me avisara cuando llegase a su destino... pero aquel llamado jamás llego...-
Sakura, se que odias ver noticias, porque solo hablan cosas malas, pero por favor te pido que prendas el computador y veas un video que hay... hay una carpeta con el nombre de “ella”.
··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··CARTA··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*
La pelirrosa encendió el computador y abrió el video, era una noticia de muchos días.
··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*VÍDEO 1··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*
-un avión con destino a Francia, se acaba de estrellar, al parecer se les agoto el petróleo a mitad del viaje, hubo dos muertos, los demás pasajeros están heridos. Aun no se sabe la identidad de las personas fallecidas, pronto les daremos mas información...-
Sakura no entendía que tenía que ver así que vio un segundo video que estaba allí.
··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*VÍDEO 2··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*-ya tenemos la identidad de las dos personas fallecidas, uno es un hombre de aproximadamente 45 años de nombre Kamiyama Shoun, la otra es una joven de 16 años de nombre... Hyuuga Hinata...-
··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*FIN VIDEO 2··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··*··
-IMPOSIBLE!...NO PUEDE SER... HINA...HINATA ESTA...NO...- la pelirrosa sorprendida comenzó a llorar, pero se acordó de la carta y continuo leyéndola.
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Supongo que ya viste los videos... cuando lo supe quise morir, no quería creerlo, pero de algún modo tenia que seguir viviendo... eso fue lo que pensé... pero ya no lo creo así, ayer te hable de la estrella fugaz y mi deseo de estar con “ella” otra vez, pues en este momento mientras lees esta carta, espero estar reencontrándome con ella, para decirle al fin que la amo... sakura no quiero que por ningún motivo llores por mi, yo estaré bien, por fin podré ser feliz con la persona que amo... y podré decirle todos los días lo que siento por ella, sin vergüenza...
Bueno espero me perdones por no habértelo dicho, pero Dios lo quería así, estoy segura, ayer luego que fuiste me envió otra estrella fugaz para que me diera cuenta que el me apoya... te quiero mucho amiga... y nos volveremos a ver... te lo prometo...
INO =)
PD: dile a mis padres que los amo, dales una carta que escribí para ellos, esta en el cajón, ahí les explico el motivo de mi decisión...
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La pelirrosa lloraba desconsoladamente.
-porque... porque lo hiciste... ahora que hago yo...-
Sakura se quedo todo el día en la habitación de su amiga, al llegar la noche subió al techo, miro la luna.
-debes estar allí con “ella”... las dos felices... viviendo su amor... mientras yo estoy aquí... arrepentida de nunca haberte dicho que... te amo...- angustiadas lagrimas comenzaron a caer de los ojos de la pelirrosa, quien lloraba sin parar, abrazando el recuerdo de su amiga.
En ese momento una estrella fugaz cayo, significaba que la rubia se encontró con “ella” y ahora ambas están viviendo felices su amor, sin que nadie les diga nada...
-... siempre serás... mi estrella fugaz...-
Ambas viven ahora en la luna y lanzan estrellas fugaces para que todos aquellos que no se atreven a tomar decisiones, se llene de valor y hagan todo lo que desean...
Fin