En una de las solitarias calles de ciudad domino, se estaba llevando acabo una calurosa y fuerte discusión entre una castaña y un pequeño tricolor, los sonoros gritos podían dejar impactado a cualquiera que pasase por allí, pero para suerte o desfortuna de los implicados nadie aparecía por la lejanía, pero cierto chico empezaba a desesperarse con las acusaciones exageradas de la chica de nombre Anzu
Crees que no te vi sonreírle a esa idiota Yuugi?!, no quieras pretender conmigo!, desde cuando me engañas con ella?! ERES UN CINICO!!!-justo cuando la atrevida castaña iba a plantarle una fuerte bofetada al chico frente a ella el ágil pequeño logro retener su mano con firmeza antes de que esta le diera alcance
CUANTAS VECES TENGO QUE DECIRTELO!! SOLO LA ESTABA SALUDANDO ES SOLO UNA COMPAÑERA DE TRABAJO POR TODOS LOS CIELOS ANZU TUS MALDITOS CELOS SIN JUSTIFICASION YA ME TIENEN ARTO!!
Si no fueras un total mujeriego no tendríamos que vivir estas cuestiones-dijo la oji-azul cruzándose de brazos
Que?-el pequeño no daba crédito a lo que oía, se sentía realmente ridículo, ¿por que tenia que soportaba toda esa situación? Esa relación se había vuelto por demás enfermiza!, un suspiro escapo de su boca, se lo tenia bien merecido, sabia de ante mano que nunca a amado ala castaña, simplemente, quería disipar los sentimientos que le causaban cierta persona, pero fue inútil, estos solo se aferraron cada vez mas a su corazón hasta llegar a un punto que jamás imagino, cada mañana deseaba despertar en sus brazos y cada noche desea fervientemente dormir a su lado, lo amaba no cabía duda, y sabia que había traicionado su corazón al estar con otra persona pero….
¿Que te pasa? ¿Por qué te has quedado callado?-dijo la chica altaneramente esperando que de nueva cuenta el chico cayera rendido a sus pies como lo había hecho en contadas ocasiones
Anzu-la llamo con voz gruesa, poco usual en yuugi-terminamos
Aquellas palabras fueron como un rayo que atravieso su mente realmente no se esperaba eso-por…por…que?-logro articular la oji-azul
Por que no te amo…yo-cerro sus ojos fuertemente para conseguir la fortaleza necesaria para lo que seguía-nunca te ame en realidad…solo trataba de olvidarlo…perdóname-dijo finalmente mirándola con decisión dado media vuelta para marcharse, dejando ala castaña totalmente destrozada, no solo por que Yuugi corto con ella si no porque, según lo que logro entender la estaba cambiando… por un chico, cayo de rodillas sintiéndose realmente humillada, mirando como Yuugi se perdía en la lejanía, se juro a si misma que desaparecería por completo de la vida del tricolor para hacerlo sufrir cada día de su miserable vida con su ausencia(NA-estas bien perdida hija XD)
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Por su parte, el pequeño ya había llegado ala casa-tienda que compartía con su abuelito...Y con el, sabia de ante mano que su abuelo se había ido a una expedición del antiguo Egipto, por lo que “el” estaba a cargo, entonces lo mas seguro es que le esperara un fuerte regaño departe suya por llegar a tan avanzadas horas de la noche, el chico no pudo evitar formar una media sonrisa en los labios, aun enojado el no dejaba de lucir encantador , para Yuugi no había ser mas perfecto que el en la tierra
Ya llegue-saludo en tono de voz normal mientras ingresaba ala pequeña casa, pero no recibió contestación así que decidió ingresar a la salita para ver si daba con quien buscaba y así fue, se encontraba en el mudillo sillón rojo que tanto le gusta usar, pero al parecer el joven se había quedado dormido esperándolo, se quedo observándolo por unos momentos el estaba recostado de lado, con unos traviesos mechones que tapaban un poco su rostro mientras sus manos descansaban ala altura de su cara
Atemu-susurro casi inaudible mientras se colocaba de cuisillas delante de el lo miro con infinita ternura mientras retiraba los mechones rubios de su rostro, Atemu sonrió entre sueños ante esta caricia-si tan solo lo supieras…-poco a poco comenzó a acercar su rostro para poder probar sus labios, pero para su mala suerte el reloj viejo de la salita emitió un chirriante sonido, rompiendo el momento mágico que tanto había esperado, miro con recelo el bendito reloj mientras ágilmente adoptaba la posición que tenia anteriormente aprovechando que el oji-rubi estaba abriendo los ojos perezosamente
¿Yuugi?-pronuncio el oji-rubi mientras se terminaba de desperezar
Si, soy yo siento haber llegado tan tarde-se disculpo el menor un poco apenado
No importa-dijo con una falsa sonrisa esto sorprendió un poco al pequeño pero nada dijo-¿Cómo te fue con Anzu?
Termine con ella-dijo desviando la mirada
Eso sorprendió de sobremanera al oji-rubi-¿Por qué?-cuestiono
Por que lo nuestro ya no funciona…nunca funciono, yo amo a otra persona-el pequeño en ese punto sintió las incontenibles ganas de gritarle que lo amaba y asaltar sus labios de una vez por todas, pero con esfuerzo sobre humano logro contenerse
Ya veo-bajo su mirada por unos segundos pero enseguida levanto la mirada en forma decidida, esta reacción confundió un poco al amatista pero prefirió no tomarlo en cuenta
Ya es muy tarde-dijo de repente el mayor-será mejor irnos a dormir Yuugi
Si-dijo Yugi feliz, quizás nunca encontraría el valor para declararse y hacer realidad sus mas dulces fantasías con Atemu , pero el solo hecho de dormir en la misma habitación con el lo llenaba de dicha, llegaron ala humilde habitación que compartían ambos sin siquiera cenar, al parecer ambos carecían de apetito así que solo se dispusieron a acurrucarse en sus lechos y dispusieron a dejarse llevar por los brazos de Morfeo
Yuugi miro inquisitivamente el lecho donde se encontraba Atemu, el chico se había colocado dándole la espalda, con la cabeza del lado de la pared-seguramente tiene cosas que pensar-se dijo mentalmente-me pregunto si el ya estará enamorado de otra persona…. ¿pero que pienso? Nunca antes lo había pensado, ¿Por qué estoy preguntándome eso justo ahora?, aunque-miro de nueva cuenta a su objetivo, ya que había desviado su mirada involuntariamente con sus pensamientos-si el es feliz con alguien mas no me importa, su felicidad siempre será la mía, aunque nunca me ame como yo lo amo-con tristeza marcada en sus ojos comenzó a cerrar sus ojos calmadamente y esperando ansiosamente que el cansancio se apoderara de el y pudiera soñar de nuevo con su dulce amor, sabia que era el único lugar donde Atemu solo podía pertenecerle a el, en sus sueños.
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Ala mañana siguiente era domingo por lo que a los habitantes de la casa no les tocaba trabajar, el primero en despertarse fue Atemu al parecer le tocaba hacer la cena, pero estaba algo distinto, casi no había articulado palabras desde la platica que tuvieron anoche, el pequeño Yuugi podía percibirlo, lo miro intensamente pero el mayor no lo percibió estaba concentrado en hacer los panqueques que comerían su hikari estaba dándole la espalda al menor mientras el aluido esperaba sentado en el pequeño comedor desayunaron en silencio, pero para el amatista no tenían que haber palabras el solo hecho de estar con el le era suficiente, pero eso no significaba que no le extrañara el comportamiento de su yami últimamente siempre había sido igual cada fatídica mañana….
Quizás piense en su persona amada-pensó tristemente el pequeño-que suerte, me gustaría ocupar su lugar
El día transcurrió normalmente pero el cielo se haba nublado, dando a conocer que se avecinaba una tormenta, Yuugi miro el cielo con fastidio, odiaba que hubieran tormentas, los rayos siempre terminaban tensándolo, se sintió ridículo por un momento ya tenia 24 años y aun no podía superar eso, realmente el colmo de sus desgracias, camino desgranadamente hacia la cocina en busca de una galleta, pero algo lo detuvo en su transcurso, voces provenientes de la salita al parecer se hundió tanto en sus propios asuntos que no oyó que el oji-rubi había recibido visitas, miro discretamente en la habitación de quienes se trataban y vio que se trataban de Bakura y Marik junto con un nervioso faraón , cabe mencionar que los tres estaban sentados en el mismo sillón y el tricolor estaba en medio
Son ese par de locos-se dijo yuugi- ¿que le estarán asiendo a mí querido Atemu? Al parecer lo están interrogando-curioso se quedo en silencio y se
oculto para poder espiar la conversación y que no lo atraparan infragante
Y dinos faraón, ¿Quién te gusta?-ante esta pregunta hecha por Marik yuugi agudizo mas sus oídos esperando ansioso la respuesta de su yami
Ese es mi secreto-yuugi suspiro desilusionado, cuando su guardián usaba ese tono de voz decidió era por que ninguna fuerza sobre la tierra lo haría hablar-además-yuugi de inmediato regreso su atención ala conversación-el ama a alguien mas
¿Ya te lo dijo?-cuestiono Bakura – el asintió-¿pero tu nunca le dijiste nada?- nuevo asentir- pues que esperabas!!, tal vez simplemente esta confundido-el aludido negó con la cabeza quedadamente
imposible la forma en que lo dijo, el brillo en sus ojos, en vedad esta enamorado y yo-ambos yamis lo miraban con curiosidad, al parecer estaba abriendo su corazón con cada palabra-yo no voy a empañarle la felicidad tan solo por que a mi corazón se le ocurrió amarle-agrego con una falsa sonrisa-por eso..No le diré nada
A bueno-dijo de repente marik-¿por que no buscas una relación de amor salvaje y loca para olvidarlo? Escuche que Zirgifred a sido rechazado por el neko nuevamente en la reciente reunión que tuvieron en Kansas
¿De nuevo? Esta el la onceaba vez este año!! Ese peli rosado pierde su tiempo no le llega ni a los talones al perro – Bakura siente un fuerte golpe en la cabeza
Respeta a mis amigos ¿quieres?-reclamo el oji-rubi
Perdón su majestad- replico en claro tono burlón-quise decir el respetable joven Katsuya Jounochi-recalco lo ultimo cómicamente
Mucho mejor-dijo mirándolo de reojo
Pero enserio faraón, ¿no crees que deberías buscarte a alguien mas?-negó con la cabeza-¿porque?-cuestiono Marik
Por que aunque se que el no me ama y que quizás nunca me amara mis sentimientos por el siguen igual de intensos y mi lugar esta siempre a su lado sin importar lo que pase-añadió sinceramente ambos yamis se miraron entre si-además no quiero robarles su nuevo objetivo amoroso “Zigfried Shreader”-ante este comentario ambos jóvenes se alteraron
Bera bera bera bera bera hablas demasiado faraón inútil!!!-dijeron ambos al unisonó-ante este acto los tres comenzaron a reír divertidos
Yuugi por su parte no podía creer lo que había escuchado, cualquier oportunidad cual vaga que fuese que tuviera con Atemu se había roto no podía evitar sentirse triste pero las palabras de Atemu dirijas su ser amado lo habían conmovido bastante eso, era exactamente lo que sentía por el, las palabras textuales que siempre busco decirle y no pudo evitar sentirse orgulloso de el aunque esas palabras no hubieran sido para el…
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la tarde ya estaba muy avanzada y los yamis ya se habían retirado a sus casas con sus amados hikaris, la tormenta ya estaba dando rienda suelta y el pequeño Yuugi seguía en sus cavilaciones.
Por su parte Atemu se encontraba algo aburrido así que encendió el televisor de la pequeña sala en busca de un interesante programa que ver
Yuugi se dirigió nervioso ala salita, sentía que todo su cuerpo temblaba pero estaba decidido, sabia de ante mano que seria rechazado pero, necesitaba que el lo supiera, necesitaba que el supiera cuanto lo quería con eso se conformaba
¿Yuugi?-pregunto el ex-gobernante al notar su presencia en la habitación, el pequeño solo se acerco lenta y silenciosamente, pero con paso decidido, mientras el pequeño llevaba acabo su gran Azaña la mala suerte hizo acto de presencia, se oyó el fuerte sonido de un rayo seguido con un apagón, el pequeño no pudo evitar inmutarse ante esto
Debió haberse fundido un fusible-comento el mayor- lo mejor será esperar a que amaine un poco la tormenta para poder cambiarlo-el chico asintió levemente-no temas Yuugi-ante este comentario el amatista se sonrojo un poco el ya había descubierto su temor infantil a ese tipo de cosas-ven-llamo cariñosamente mientras le hacia espacio en el pequeño sillón para que se colocase junto a el solo la luz de la luna los iluminaba, estuvieron así por unos momentos, en silencio, hasta que el pequeño decidió romper el silencio
Atemu-llamo un poco inseguro
¿Qué sucede hikari?-el pequeño no respondió-¿te duele algo?-cuestiono un poco alarmado pues el aluido tenia los ojos vidriosos
El amatista solamente negó con la cabeza quedadamente poco a poco, lo encaro de nueva cuenta-yo...-las lagrimas comenzaban a surcar pequeños caminos y sin dudarlo se arrojo a el abrazándolo
Atemu no pudo evitar sorprenderse, Yuugi nunca le había mostrado esas confianzas…
¿Yuugi?-articulo bastante sonrojado ante el contacto de su hikari, pero ente puso dos de sus dedos en sus labios indicándole que no dijera nada, de nueva cuenta el menor se acurruco en su pecho mientras sentía que unas palaras brotaban de su boca
Quiero abrazarte-suavemente ejerció un poco mas de presión en su abrazo-déjame abrazarte
Kimi wo suki ni natte dorekurai tat su no kana?
Kimochi fukurande yuku bakari de
Kimi wa kono omoi kidzuiteiru no kana?
Yuki noyouni tada shizuka ni
Furitsu tsudzukete yusu
El pequeño sonrio al sentir que su amado le estaba correspondiendo el abrazo
Hold me tight konna omoi nara
Dareka wo suki ni naru kimochi
shiritaku nokatta yo
dareka wo suki ni Naru kimochi
shiritaku natta yo
Se que no me amas, pero yo si te amo, siempre te he amado y siempre te amare
Aibou-pronuncio el mayor viéndolo con asombro
Mi yami- y poco a poco fueron acortando distancia para fundirse en un tierno y dulce beso
I love you namida tomadari
Konnan ja kimi no koto
Shirazuni ireba yokata yo
Terminada la dulce caricia Yuugi lo miro sorprendido, el le había correspondido el beso
Yo también te amo mi hikari-contesto el oji-rubi con una dulce sonrisa
Las lagrimas de felicidad no tardaron en hacerse presente el los ojos del amatista mientras lanzaba un infantil gritito y lo tumbaba en el mudillo sillón aferrándose a su cuerpo
Hold me tight
I love you
FIN
Amor Yaoi
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