Habían pasado ya dos semanas después del incidente en los baños... Naruto había faltado un par de veces al Club de Natación y es que lo que más necesitaba era tiempo para acomodar las cosas en su cabeza...
¿Le había gustado? De eso no había duda alguna... ¿Deseaba ver de nuevo a Sasuke? Temía por la reacción de aquel... Aunque siendo honestos, él había puesto también de su parte para que se diera ese avance...
Sin más en la cabeza que esa incertudumbre, se dirigía a su casa, después de un día pesado en el colegio... La monotonía parecía de vuelta en su vida... ¡Por favor, había que admitirlo! Aquel día le había encantado y le hacía sentirse bien el sólo recordarlo.
Tomó, pues, el tren, sin saber lo que se encontraría. O mejor dicho, sin saber a quién se encontraría...
- T-tú?! - Sorprendido, ahí, sentado frente a él, estaba el chico que ocupaba sus pensamientos...
-Shhhh! Qué escandaloso eres! - Le respondió algo fríamente el pelinegro, chasqueó la lengua y prosiguió: -¿Nos conocemos?
Al rubio parecía como si le hubieran echado un balde de agua fría, tan bien que la había pasado la otra vez y aquel fingía no conocerlo. Dió media vuelta y buscó un asiento lejano a aquel azabache.
Bajó algo confundido y caminaba por una calle despejada, sintió una presencia detrás suya, pero le resto importancia, hasta que unos brazos le rodearon la cintura y sintió un aliento detrás de su cuello.
- ¿N-nani'!- De reojo pudo ver a aquel chico, con la sonrisa de aquella vez... acaso...?
- D-dobe, no esperaba verte nuevamente...- Acarició su abdomen
- T-tú... Teme! ¿por qué me tratas como a un...- Se detuvo... Era obvio que SI era un desconocido, no tenía punto de reclamo...
- ¿Cómo a un desconocido? Creo que acabas de darte cuenta de que eso somos, prácticamente...
- iee! ¿Por qué me tratas como si nunca antes nos hubiéramos visto?
-Gomen, pensé que te gustaba la discreción, Naruto...
Se sonrojó, era obvio que el Uchiha lo recordaba, o al menos lo suficiente.
- No volviste a la natación, ¿sucede algo?- Cuestionó el pelinegro
- N-n-no es nada, yo sólo...- Sus mejillas arreboladas lo decían todo por él, tenía tantas ganas de verlo y ahora que lo tenía en frente no sabía que hacer.
- Dime una cosa... ¿Te gustó, verdad?
- Es obvio! - Contestó, casi a gritos el rubió, se sonrojó aún más de la sinceridad y de la rapidez con la que contestó. Sasuke sólo sonreía, triunfalmente.
- Aunque...
-Aunque... ¿qué? - Preguntó Naruto
- Yo me quedé con muchas, bastantes ganas, sabes? - Para cuando se dió cuenta Sasuke frotaba sus caderas a las suyas y sus manos jugueteaban por su pecho...
Ya que estaban cerca de casa de Naruto y este vivía solo, no tuvo problema alguno en invitar a Sasuke, honestamente, hasta se moría de las ganas por continuar lo de hacía 2 semanas...
Sin preguntar nada más, fueron al dormitorio del rubio, ahí Sasuke tomó a Naruto de las caderas y empezó a friccionar, a acercar sus cuerpos mientras se contoneaban, Naruto no dejaba de jadear mientras desabrochaba la camisa del ojinegro y este bajaba sus manos hasta el trasero del rubio.
- Lo de hace dos semanas... Yo...- Dijo, de repente el rubio
- Uh? -
- Déjame terminar, si? - Dijo con una voz muy sensual Naruto, al tiempo que bajaba por las caderas de Sasuke, este le miraba, curioso.
Bajó los pantalones del Uchiha y se asombró de ver aquel miembro excitado, demandando atención. Puso su lengua sobre él y suavemente fue bajando, lamiendo. Sasuke gemía sin control, era tan delicioso, lo había esperado por mucho tiempo. Con una mano sobre la rubia cabellera, le indicó que continuara, Naruto lamía cada vez más ávidamente, casi desesperadamente.
- N-no aguantaré más yo... Ahhh!- Sasuke se vino en la boca del rubio, mientras este lamía todo rastro de semen, estaba tan excitado por lo acontecido
Sasuke lo tomó de ambas manos y lo subió hasta quedar frente a frente, le besó entonces, un suave beso que se volvió desenfrenado y salvaje, metía su lengua en la cavidad bucal de Naruto, saboreando su popia esencia, degustando la lengua del Uzumaki mientras con una mano masturbaba al rubio, se sentó a horcajadas sobre él y le preguntó:
- ¿P-Puedo...?
El rubio asintió con la cabeza, la verdad es que le fascinaba la idea de haberse topado a Sasuke nuevamente, esta vez no desperdiciaría la oportunidad
Sasuke friccionaba su miembro a la entrada de Naruto, al ver sus ojos entrecerrados y su boca entreabierta, emitiendo sonoros gemidos, no dudo en embestirlo. Naruto gimió fuertemente mientras Sasuke lamía su cuello, tratando de calmarlo.
- Sigue, por favor - Dijo el rubio, una vez se había acostumbrado. Sasuke empujó más rápido y cada vez más fuerte, Naruto gemía sin control, estrechando más a Sasuke. El ojinegro levantó ambas piernas del rubio y las puso a la altura de sus hombros, haciendo más profundo el contacto.
- Ahhh, más... Yo... Ahhh!- El rubio jadeaba sin control mientras Sasuke sentía que ambos se vendrían en cualquier momento, sentir esa estrechez tan cálida era muy placentero, lo más placentero que había probado.
- Naruto ahhhh!- Gimió al momento de venirse, el rubio terminó también al sentir a Sasuke venirse en su interior. Ambos abrazados, perlados de sudor y jadeantes.
- ¿Te quedas? - Cuestionó el rubio
- ¿No tienes ningún inconveniente en que lo haga?
- No, de hecho yo...
- Tú ¿qué?
- Quédate - Le abrazó, el Uchiha se extrañó de este gesto, pero también le gustó. Había mucho, mucho de qué hablar...