Las lágrimas se desbordan de mis ojos al contemplarte tan calmo y sumiso ante tus propios pensamientos. Tú no eres así amor.
Al fin me di cuenta que el único que te dañaba era yo, con mis estúpidas disculpas y mis mentiras, ¿En dónde dejé a mi querido y alegre pelirrojo? ¿En qué momento lo destruí de esta manera? Me siento culpable, demasiado, ¿Por qué no me di cuenta antes que te retenía a mi lado solamente por un capricho mío? Te hacía daño y no me daba cuenta, tú tampoco nunca me lo dijiste, ¿Tanto me amas? Me odio profundamente…
¿Cuánto tiempo hemos estado juntos? ¿Dos? ¿Cuatro años juntos? Ni siquiera eso soy capaz de recordar porque soy un imbécil aprovechador e infiel, lo lamento Ruki. Tantas promesas que nunca fui capaz de cumplir, la única escusa que te tengo es que la rutina me aburrió. ¿Pude en algún momento decirte que necesitaba un tiempo? Muchas… pero no quería hacerlo, no quería perderte y aún no entiendo la razón para ser tan controlador y posesivo contigo, es que te amo.
Me di cuenta muy tarde cuando ya los otros y otras estaban tomando control sobre mí terminando con dejarte solo, en nuestras citas, en nuestro aniversario… ¡Hasta en tu cumpleaños! Lo lamento mucho Ruki, debiste dejarme cuando también yo te aburrí, ¡¿Por qué no lo hiciste?!
Las lágrimas comenzaron ahora a rodear tu rostro, sonreíste melancólicamente, aún no te comprendía. Tantas veces me dijiste que si te era infiel me dejarías o me matarías, pero, ¿Por qué después de mi confesión estas tan calmo? ¿No te lo esperabas y estas… pensando que es una broma? ¡No te rías amor por favor!
.-Lo sabía…-.
Murmuraste con una aún más débil sonrisa, te limpiaste las lágrimas recostándote en la que alguna vez fue nuestra cama y reíste por la bajo, débilmente.
Yo no cabía en mi sorpresa, ¿lo sabía? ¿Y no hizo nada? ¡¡¿Qué te pasa por Dios Takanori?!! Ahora me esperaría cualquier cosa, que me pegaras, te fueras o me dijeras cosas hirientes, como que tu también me fuiste infiel, ¡Cualquier cosa es mejor a que te quedes tan quieto y callado!
.-Esperaba que me lo dijeras… no sabes cuánto he sufrido…-se tapó los ojos con el antebrazo riéndose con más ganas- soy tan estúpido…- varios lagrimones cayeron a los costados de su rostro mojando su almohadón favorito- pero…- se incorporó un poco mirándome suplicante- te amo demasiado…- se levantó de la cama y me rodeó con sus brazos fuertemente, lloró en mi torso con la cabeza apoyada bajo mi cuello, las lágrimas me mojaron la camisa que llevaba mientras con nerviosismo le acariciaba la espalda y enredaba mis dedos en sus cabellos semi rojos, lloré en silencio besándole la cabeza.-
.-Lo siento Ru…-me callé, no quería que me escuchara pedirle disculpas después de las miles que le he dado sin razón, levantó el rostro mirándome sin comprender, hasta que juntó sus deliciosos labios con los míos moviéndolos débilmente tratando de adentrarse en mi boca, con mucho esfuerzo y arrepentimiento me alejé de él. Observé en sus ojos tristeza y enfado y volvió a besarme demandantemente, consiguiendo que nuestras lenguas chocasen.-
Hace tiempo no había sentido este cosquilleo en mi estómago y el placer de besar a alguien. Siempre besos superficiales que en vez de ser eso es ganar tiempo para desvestir al otro, pero ahora no quería hacerlo. Quería solamente besarlo y abrazarlo sin separarme más de él, me sonrió cuando terminamos buscando aire. Una sonrisa tierna curvada con gran esfuerzo, pero esa tristeza seguía en sus hermosos ojos.-
.-No me dejes… onegai hago lo que quieras…- bajó la vista volviendo a hipar y botar lagrimones, me llevé una mano al rostro quitándome el mechón que cubría mi ojo, ¿Qué puedo hacer? Sé que lo he hecho sufrir, pero quiero estar con él. No volvería hacerlo. Pero sé que él siempre estará en veremos y me pondrá siempre a prueba a cualquier indicio, yo también lo haría.-
.-Taka yo…- baje la vista- no quiero hacerte sufrir, no quiero que estés siempre atento conmigo… quiero que seas libre y que con la persona que te merezca, déjame ir… -.
.-¡SABES QUE ME HACE MAL ESTAR LEJOS DE TI! ¡¿Por qué no lo entiendes?! ¡Quiero que estés a mi lado y no me dejes! aunque todo lo que ha pasado siempre estará allí, ¡¡Siguiéndonos a AMBOS!! ¡Yo también tengo la culpa por no darte lo que necesitabas!- gritó ya encolerizado, me sentí aliviado al fin veía a mi verdadero Ruki- Yo nunca quise atenderte por el miedo… tengo miedo…- y volvió a su estado reprimido y llorando, lo abracé fuerte.-
.-Tú no tienes la culpa, yo la tengo por ser un maldito necesitado que trataba de obligarte a que te me entregaras… yo… eso no se le hace a la persona que uno ama… por eso no te merezco ¡Deberías saberlo bien si fueras un poco más inteligente en este ámbito te hubieras ido ya!- lloré nuevamente- ¡Eres un masoquista Ruki!- se agarró aún más fuerte a mí y soltó una pequeña risilla desganada.-
.-Lo sé…-.
Volvió a besarme, arrastrándome con él hasta la cama. Cayó de espaldas sobre las sábanas tirándome de la camisa cayendo encima de él, aún besándonos. Sentí de pronto que me convertía en un manojo de nervios al estar así con él, su mano aún me sujetaba fuertemente del cuello de la camisa mientras que la otra torpemente la desabotonaba desde abajo, acarició mi torso mientras lo hacía. Comenzó a relajarse y me soltó del cuello y ayudaba a la otra mano hacer su labor, hasta que me desprendió de la camisa tirándola a algún lugar de la cama.
Me separé lentamente de él buscando entre cortadamente que el oxígeno llegara a mis pulmones, Ruki estaba sonrojado con las manos transformadas en firmes puños sobre su regazo, vibraba levemente, está asustado. Como la primera vez que traté de poseerlo…Me asusté quitándome de encima, sorprendido estiró la mano agarrándome la muñeca y volviendo a jalarme para quedar sobre él, me besó.
.-No te vayas-.
Tomó mis manos y comenzó a deslizarlas por debajo de su pijama de seda negro, me ruboricé cuando de sus labios salió un suspiro con mi nombre, sentía su suave y tersa piel bajo las palmas de mis manos. Su piel ardía y complementaba la sudoración de mis manos al tocarle, me quemaba y excitaba salvajemente. Ruki era demasiado especial para mí.
.-Reita…-.
Suspiró en mi oído haciéndome reaccionar…
.-¡Ruki!- me levanté a duras penas de la cama tratando de no aplastarlo, me miró triste desde su posición, los borbotones volvieron a salir de sus ojos.-
.-¿Es que ya ni siquiera quieres hacérmelo?- lloró sentándose y mirándome fijamente, sentí grandes deseos de abrazarlo, pero le estaría haciendo daño y es lo que ahora menos quiero hacerle.-
.-No sabes cuánto… he deseado para que…pero… no…- me costaba unir las palabras de verdad tenía que alejarme lo más posible de él, debía por lo menos ayudar en algo en su felicidad.-
.-Entonces tómame Akira…- dijo muy seguro tomándome las manos, acariciándolas.- Tómame y olvida que alguna vez pasamos por esto… todo el mundo merece segunda oportunidad y yo deseo dártela… confío en ti Reita…- me sonrió dulcemente.-
-Yo… ¡N-no!- me tome la cabeza con ambas manos pensando si debía o no, ¿Qué sucedería después? Para cuando quise volver a la vida real y salir de mis cavilaciones lo tenía sobre mí, besándome todo el torso exquisitamente.-
Me tenía más allá del cielo, sentía que podía tocarlo y me sentía tan pecador que las llamas me quemaban la espalda, ¿Alguien puede hacerte subir al cielo y bajarte rápidamente al infierno? Ruki podía hacer aquello y mucho más, lo estaba disfrutando tanto…
.-¡Argh!- gemí al sentir sus escurridizas manos desabrochándome el pantalón pasando a llevar mi adolorido amiguito.- (x3)
.-Mm… Rei-chaan~ necesita atención…- hizo un gesto infantil indicándome con su índice mi parte baja, me sonrojé furiosamente mientras se acercaba y me besaba los labios, agradecí el gesto.-
.-¿Rei-chan?- me atreví a preguntar luego que se separó de mí dejándome respirar.-
.-Sip, así lo llame, ¿Te molesta Aki-chan?- rió de forma infantil, odiaba que me dijera así pero negué con la cabeza rápidamente.-
.-Llámalo como quieras Taka-chan- le guiñé un ojo e infló las mejillas haciéndole ver gracioso.-
.-¡No me llames así Aki-chan!- chilló molesto- sino esto…- me agarró fuertemente haciéndome aullar de dolor- se queda sin jugar ¬¬- bufé molesto y deje que hiciera lo que quisiera, ¡MOMENTO! ¿Yo estaba hace un rato arrepentido y llorando, no? ¿Cuándo…volvimos a…?
-¡Ah…!- me deslizó rápidamente los pantalones quitándomelos, quedándome solamente con mis bóxers negros, tomándole aquellas mágicas manos invertí los papeles quedándome yo sobre su pequeño cuerpo, besándole desesperadamente.-
Con poco esfuerzo me deshice de esa camiseta de seda, dejándole el torso descubierto, y con la misma rapidez le quité aquellos pequeños pantaloncillos que usaba de pijama, me deleité al verlo solamente en ropa interior, un fuego comenzó a crecer en mí y los nervios también. Ruki se removía en las sábanas incómodo y un deje de temor en sus ojos.-
.-No te lastimaré Taka-.
Solo eso bastó para que sus músculos se relajaran, con nerviosismo comenzó a recorrerme con las yemas de sus dedos, provocándome escalofríos y que se me erizara de forma momentánea la piel, sonreí complacido. Me acerqué a una de sus tetillas reparando en que se había tensado de nuevo al recibir mi aliento en su desnuda piel, la besé, mordisqué, lamí y succioné provocando hermosos gemidos de parte de mi pequeño Uke que sonrojado comenzó a pedirme más atenciones…
…No se las negué, hice la misma atención a su otra tetilla ahora con más experiencia en sus puntos débiles recibiendo aquellos hermosos ruiditos que salían de sus labios, mi excitación ya comenzaba a llegar a su límite y si no lo penetraba pronto supuse que en cualquier momento me correría solo.-
.-Argh Rei…-gimió cuando de un tirón lo deje sin prenda alguna, extasiándome con su perfecto y pequeño cuerpo, muy… bien dotado. Me sonrojé mientras que él por todos los medios trataba de taparse y dejarme sin esa maravillosa vista- ¡Deja de mirarme! ¡Que estoy gordo!- dijo avergonzado pegándome una patada en mis partes bajas.-
.-¡ARGH RUKI!- chillé adolorido, se incorporó rápidamente preocupado preguntándome como me sentía, lo miré con un grito reprimido en mi garganta-.
-¡Gomen ne Aki-chan!- se disculpó besándome. Intensifiqué el beso tratando por todos los medios posibles olvidarme de ese dolor que me dejo sin el poder de concebir hijos, adiós a mi sueño… ¡MOMENTO NUEVAMENTE! (x3) ¿Mi Ruki podrá tener hijos? *-*! Hace tiempo en un documental dijeron que algunos hombres podían concebir hijos, ¿Takachan podrá? ¡OLVIDALO! Ò.Ó
.-Mmm… me duele T-T- susurré, me miró apenado y luego de desilusiones sentí como con fuerza me retiraba mi última prenda también- ¿Qué haces…? ¡Ah!- gemí al sentir las paredes de su húmeda boca aprisionar a Rei-chan… me acostumbre a decirle así ¿Ok? E lindo *-*!
Continuó atendiendo a mi Rei-chan hasta que sin poder aguantarlo más me vine dentro de su boca, pero pareció no molestarle. Volvió a besarme con mi esencia aún escurriéndole por la comisura de sus labios, mi sabor no era tan malo orgullo al 110% xD.-
Siguió besándome hasta que no pudimos respirar, con un gran sonrojo en sus mejillas volvió a hablar:
.-¿Todavía te duele?- preguntó bajando la cabeza tomando entre sus manos aquel que pronto nos haría felices a ambos (x3) negué suavemente con la cabeza.-
.-Ya no… gracias- volví a recostarlo, volví a recorrerlo con mi lengua hasta que tuve que hacer su mismo trabajo, sonrojado a más no poder se corrió en nuestras sábanas manchándolas, ¿Qué importaba? Lo besé en los labios y luego de separarnos comenzó a besarme el pecho y a morderme el cuello, mientras yo ensalivaba tres de mis dedos de mi mano diestra.
Cuando ya estuve seguro adentre uno de ellos en su estrecha y virginal entrada, sus uñas se clavaron dolorosa pero excitantemente en mi espalda, supongo futuras marcas- ¿Duele mucho?- asintió aún escondido en mi cuello, respirando agitadamente y soltando pequeños y casi inaudibles alaridos de dolor.-
.-Ya no duele tanto…- ante aquella afirmación adentré el segundo, recibiendo más arañazos, que con esfuerzo logre superar, pronto adentré el tercero haciendo movimiento de tijeras dentro de este, escuchando sus fuertes chillidos- N-No…- masculló entre dientes, pero era normal… pronto lo llevaría al cielo.-
.-Esta listo, sino quieres…- negó rotundamente, se recostó nuevamente haciéndome una seña para que entrara. Haciendo que me abrazara comencé a adentrar a Rei-chan a su interior. Las estreches de su entrada me hizo delirar, era completamente delicioso. Con sus manos trataba de apartarme, pero ya no lo haría, besé sus labios tratando de que se olvidara del dolor, hasta que empujó fuertemente haciéndome gemir complacido, eso me dio a entender que ya no le dolía y comencé a moverme dentro suyo.-
Nuestros gemidos inundaban la gran habitación de nuestro departamento, me pedía que fuera más rápido, que fuera más profundo… tantas cosas que yo complacido obedecía para satisfacerle. Juntos llegamos a nuestro segundo y delicioso orgasmo, las paredes me aprisionaban de la manera más dolorosa y exquisita que pude haber sentido con cualquiera de los que me hubiera acostado antes. Cuando ya me veía venir comencé a masturbarlo ágilmente haciendo que se viniera en mi mano y segundos después correrme dentro de él, gritándonos al mismo tiempo un `te amo´
Agotado caí sobre ti tratando dificultosamente de que mi peso no te molestara. Me quité de encima acostándome a tu lado, frunciste levemente el ceño.-
.-¿Por qué te quitaste de encima?-.
.-No quiero aplastarte…-.
.-¿Tú?- rió- Eres una pluma, casi no sentía tu peso…- con una mano se tapó el rostro sonrojado- fue delicioso Akira… te amo- me abrazó posesivamente, y luego recordé mi infidelidad y lo que recién habíamos hecho.-
.-¿Crees que te arrepentirás de acostarte con un infiel?-.
Su silencio se me hizo incómodo, ¿Se habría arrepentido ya?
.-Nunca te consideré un infiel… olvidémonos de eso ¿quieres?- con dificultad logró tapar nuestra desnudez quedándose pegado a mí besándome el cuello, yo por mi parte solo le acariciaba la espalda y lo acercaba aún más a mí tratando que no se fuera de mi lado.-
.-Temo perderte…Ruki de verdad creo que eres un idiota…- susurré en su oído soltando una pequeña y nerviosa risa.-
.-También lo sé… pero soy capaz de todo para que te quedes a mi lado Akira…-
Iba a decirle algo más cuando me di cuenta que se había quedado dormido en mi regazo, suspiré, ¿Era acaso este un nuevo comienzo? El timbre de mensaje me alertó:
Aoi se fue a tomar, ¿Quieres venir Rei-chan? La pasaremos bien…
Uruha
Furioso conmigo mismo tiré el teléfono a algún lugar remoto de la habitación haciéndose añicos, si Takanori era capaz de darme otra oportunidad de estar a su lado no la desaprovecharía, haría todo lo que está a mi alcance para permanecer a su lado…
.-Akira te amo…-