Los 7 pilares Yagami. por sakuraakai

Los siete pilares yagamis, alguna ves as escuchado hablar de ellos? Estoy seguro que no.

Mi papá trato muchas veces de hablarme de ellos, pero yo simple mente lo ignoraba o me retiraba de ahí.

Fue hasta cuando los conocí que entendí su historia a la mala. siempre entiendo las cosas de ese modo.

Los 7 pilares son representado por los siete herederos de las llamas púrpuras.

Cada pilar representaba uno de los principios que rigen el código de Bushid.

Jin.

Gi.

Rei.

Chi.

Shin.

Chu.

Koh.

Cada uno representaba alguna de las virtudes.

Siete chicos entrenados para acabar y terminar con el pacto de sangre.

El antiguo de su familia ,el abuelo o el mas viejo como prefieran, es el que se encarga de tomar todas las decisiones ni para decidir que hacer el sábado por la tarde eran libres.

Eran tan iguales y diferentes a la ves, en busca de  su libertad e incapaces de defenderla, tan incomprendidos y solitarios. Nadie se atrevería a contradecirlos y menos a juzgar sus palabras.

Todo en ellos olía a perfección y dolor, causado por su propia sangre.

Desde su nacimiento condenados a un mundo de llanto.

Todos ellos deseaban ser amados y cuando lo eran huían a lo destruían, todo en ellos era contradictorio entre la razón, el corazón y el deber.

Juzgados por un mundo que no los entendió ni quería hacerlo.

Esta es su historia, de los chicos mas especiales y a los que yo ame.

Desde sus inicio la competencia siempre estuvo presente, y no era para menos todos sus padres deseaban que su hijo fuera la cabeza del clan. Aun que eso ya estaba dicho antes de su nacimiento.

El 20 enero nació el primer pilar un joven de ojos  color cielo.  aquel día se había podido ver el cielo a pesar de la nevada.

El antiguo de la familia tomo al pequeño capullo entre sus manos, sus ojos eran el mismo reflejo del cielo. Cualquiera lo hubiera dicho era un milagro como si el mismo cielo tomara el color de sus ojos reflejándolo.

Acaricio los abundantes cabellos.

Sora deberá ser tu nombre- el pequeño sonrió inocente sin saber su cruel destino.

El 28 de febrero nació el segundo pilar y el mas brillante de todos. Y su nombre era prueba de ello.

El abuelo solo miro al bebé, para su gusto demasiado pequeño, frágil y débil.

Padre no piensas darle tus bendiciones.- Souichiro miro a su padre no muy convencido de su hijo.

Tomo al pequeño en brazos, el pequeño puso una cara a la que no muchos lograrían resistirse y tomo con sus pequeñas manitas los dedos del mayor apretándolos con la mayor fuerza que podía para no dejarlos escapar.

Despeino los cabellos cafés del pequeño, ganándose una adorable sonrisa.

As de llamarte Light.

El  25 de marzo nació el que seria el líder.

Ese día todo era un escándalo, los preparativos y todo para su llegada era un día muy especial.

Cuando nació el pequeñín, era todo lo que quería el abuelo, cabellos rojizos como el fuego de gran abundancia, los ojos azules claros con un brillo de un ninja experto.

Aparte de todo había pesado 4 kilitos a diferencia de su primo que solo había pesado 2,5 kg. Algo ofensivo en comparativa de sus dos primos, pues sora había pesado 3,75kg.

El abuelo lo tomo entre brazos inspeccionándolo, era todo el orgullo y por que no decirlo su viva imagen.

Tu terminaras con el pacto eres el indicado- le decía al pequeño que no entendía mucho de lo que hablaba y solo deseaba volver a los brazos de mamá.

Deberás tener un nombre digno de ti, un nombre fuerte que te represente, serás Iori.- coloco en el cuello del pequeño un collar con forma de luna.

El 26 de marzo nació el cuarto pilar, al que no le dieron mucha importancia estaban mas entretenidos con el heredero que con un simple lacayo de el.

El abuelo seguía apreciando a su sucesor como para ver a alguien mas.

El pequeño a pesar de que la mayoría serian capaz de negarlo, era mas saludable que el resto, había pesado 4 kg, su piel era blanca contrastando con sus cabellos color vino tinto y ojos color miel.

El abuelo no le dio importancia como tampoco nombre alguno.

Su madre decidió darle el nombre de izumo al heredero de ojos mas impresionantes de todos.

El 19 de octubre nació el quinto pilar, si alguno había ofendido al abuelo quedaba olvidado frente a este pequeño.

Solo miraba al nenuco, mas pequeño que cualquiera de los otros, estaba totalmente arrugadito, el doctor no le daba mucho tiempo de vida  tenia HPPR.

Podían tratarlo pero era demasiado débil, y si viviera no seria por mucho tiempo.

Es un yagami puede con esto.

El pequeño estaba conectado a varios tubos que le proporcionaban el oxigeno.

En esos momentos mas que odiar al pequeño odiaba a su mamá, ella y sus malditas pastillas le estaban quitando a su nieto.

El pequeño lloraba, al ver los ojos de su abuelo sobre el se cayo dejando ver sus inmensos ojos plateados como la misma luna.

Tsuki era el único nombre capaz de describir  al pequeño.

El 11 de diciembre nació el sexto pilar. Un bebé bastante grande y robusto, de cabellos rubios y hermosos ojos púrpuras.

Su nombre será murasakīro.

El 31 de diciembre nació el séptimo pilar, casi año nuevo.

Un bebé tamaño promedio, todo en el era normal, otra desilusión.

No tenia nada que lo hiciera único ni especial.

Todo en el era mortal.

Había nacido sano eso no cabía duda tenia un gran pulmón. Dando por echo que el nombre mas adecuado seria Ume Ken.

Se entendía bien por que Ken pero Ume, nadie lo entendió, el pequeño reía con gracia cada que le decían ume.

2 años después el 5 junio nació el mas chico de los yagamis y hermano de murasakīro.

Todo mundo celebraba su llegada.

El pequeño era una dulzura y con todos los rasgos yagami, cabellos rojizos claros y hermosos ojos azules.

El abuelo estaba tan feliz que no tomo en cuenta que el nombre que le dio era de mujer. El pequeño cleo. Aun que su nombre lo representaba bastante.

Ese es el principio de su historia.

Sus padres se encargaron de hacerlos a la mayoría de ellos infelices en el transcurso de los primeros 16 años.

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Sonaban las campanas anunciando la hora de entrada a la escuela.

En las puertas de la escuela llega una limosina negra con las insignias de la familia yagami.

El chofer bajo a abrirle al pasajero. De ella salió un joven de escasos 16 años de edad, cabellos lacios pegados en su cara color vino tinto, bostezo cansado serrado sus ojos color miel y tal vez los mas impresionantes de todos los yagamis.

Señor yagami Izumo pasare a las 2 por usted. –hizo una reverencia.

No, hoy tengo clases de escritura antigua, si antigua eso era.- tomo su mochila y la maleta de la computadora.

Entonces pasare a las 4 por usted.- le quita las cosas de las manos encaminándolo a su aula.

Bueno fuera salir a las 4 pasa a las 5.- camina un paso a delante de el chofer.

Se escucha el chillido de las llantas de un auto tratando de estacionarse.

Písale vamos tarde, mas rápido.- gritaba un joven.

Fue su culpa joven debió levantarse mas temprano.- pisaba el acelerador como loco.

Ya lo se pero es que estoy cansado, no me dejan ni dormir a gusto.- decía con líneas azules en la cabeza.- tu crees hasta nos tienen una sorpresa preparada, como si no supiera lo que planean.- se agarra con fuerza del sillón mientras se estacionan.- yo me voy solo.- abre la puerta y sale disparado a su salón.

Señorito Cleo. espere- con el almuerzo en manos y gotas en la cabeza.

Las campanas seguían sonando mientras corría por las escaleras destino al infierno perdón al aula.

Tomo asiento en su lugar el profesor no había llegado por suerte, eso de ser bueno le ayudaba con el karma.

Volteo hacia la ventana para mirar a sora y de reojo a alguien que le gustaba pero tenia que disimular.

Sora miro el reloj contando los minutos que llegaba tarde su  primo que era todo un genio, no cabía duda estaba adelantado, pero lo que tenia de listo lo tenia de loco.

Sora kun buen día.- sonrió alegre.

O hayou gozaimasu Cleo Chan.

No me digas Chan- ponía pucheros y caras de lo mas adorables.

En eso entra el profesor al aula,- buenos días jóvenes.- toma asiento en su lugar para después empezar a tomar lista.

Se ve como abren la puerta de golpe dejando ver a un joven alto de inmensos ojos color ciruelo.

Me da permiso de pasar profesor?- respiraba agitado.

Joven yagami otra vez tarde.- miraba sus apuntes.

Aun no llega a mi nombre, había mucho trafico mas aparte se poncho una llanta.

Debería inventarse nuevas excusas.- acomodo sus lentes.

No son excusas señor, en mi familia tenemos limitada las mentiras.- recuperaba el aire en los pulmones.

Como sea joven Yagami que sea la ultima vez que llega a estas horas.

Si profesor, mientras la naturaleza no se interponga en mi camino yo llegare temprano.- camino a su butaca al lado de sora.

Are de cuenta que no escuche eso señor yagami.

Como usted diga profesor.

Joven yagami evíteme malestares e ya cállese.- empezó a dar la clase, mientras que al fondo cerca de la ventana.

Qué creen que sea la sorpresa?- pregunto sora.

Ojala que nos recompensen por todo nuestro esfuerzo.- dijo el ciruelo, llevándose una paleta de caramelo a la boca.

Por que lo dudo.- con líneas azules y enormes gotas en su cabeza, si una cosa era seguro es que nunca los iban a premiar al menos no con algo que ellos consideraran premio. Kiro lo había dicho miles de veces no esperes mucho de ellos.

No creo que sea algo que nos agrade- dijo el oji azul de cabellos púrpuras.

Mínimo que brille – dijo ken en un suspiro.

No todo lo que brilla es bueno- dijo el menor mirando hacia la ventana y de paso a ese chico que tanto le gustaba.

No todo es bueno pero que lindo luce con el brillo verdad cleo chan- miro al joven que veía su primito.

El no brilla.- inflo los cachetes con aparente enojo.

Sonaron las campanas anunciando el tan deseado receso.

En una mesa se encontraban reunidos los primos.

Mientras no me perjudique su sorpresa que hagan lo que quieran.- tomo un sorbo a su jugo el joven rubio.

Kiro kun es lógico que lo que planean esos ancianos es algo malo y perjudicial- dijo el ciruelo con cara de malicia.

Saco un cigarrillo llevándoselo a la boca no tenia nada que decir esta vez no sabia lo que planeaban.

Iori sama tu deberías saber algo- dijo el menor con brillo en los ojos.

Dio otra bocanada a su cigarro- lo han ocultado muy bien y no logre sacarles información.

El oji miel solo los miraba, no planeaba decirles nada sufrirían traumas sicológicos si les dijera.

Izumo tu no sabes nada?- pegunto sora, tomo una galletita de animalito.

De todos modos hoy lo sabrán.-  bebió su malteada ignorándolos.

El pelirrojo lo miro intrigado, izumo lo sabia y no pensaba decirles,- que es lo qué sabes izumo sam?

Solo te lo diré a ti por respeto.- caminaron a un lugar apartado de los demás a lo lejos paresia que al líder le iba dar un infarto de la impresión eso no era posible.

Qué será?- se golpeaba la cabeza no era justo no saber nada por que tenían que saber y no decirles al final también son familia no.

Deja de complicarte ken kun no te lo dirán de todas formas- dijo el menor dándole palmadas en la espalda.

Regresaron a la mesa con un pálido iori y un izumo con cara de lamento.

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bostezaba aburrido llevaba unas aproximadas 8 horas de viaje sin saber rumbo a donde pero por las vueltas que daban suponía con un 80% de posibilidades de ir a kyoto o algún bosque de por ahí el camino se había vuelto mas brusco hace unas 2 horas por lo tanto tenia que haber muchas rocas o de plano estaba en un lugar no muy bonito y peligroso.

Miraba al chofer, un joven de cabellera negra azabache y pequeños ojos azules casi negros.- tendría que sacarle la información a la buena.

Hace mucho frió aquí no lo cree?-se deslizo hasta el asiento del copiloto.

Joven yagami vuelva a su lugar,- miro al joven castaño ingeniándoselas para caber por el pequeño espacio entre ambos asientos.

Aquí esta el calefactor- señalo el aparato.

Es muy peligroso que vaya aquí.- incomodo por que uno de los pies del castaño estaba en una parte intima.

Miro su pie inconsciente sin haberlo notado antes, lo quito rápidamente sentándose bien en el asiento.

Señor vaya a su lugar- miraba el camino para no caer a ningún barranco.

Miro de reojo el paisaje era bosque.- haya se siente mas los baches. – froto sus brazos tratando de producir calor.

En  eso freno de golpe mientras le ponía el cinturón a light y de paso provocando que se activaran las bolsas de aire- abajo- tomo la cabeza de el castaño cubriéndola.

Miro con ojos grandes lo que pasaba, talvez una emboscada,  un secuestro o robo?.

Le quito el cinturón al joven y después lo tomo de la mano jalándolo fuera de la limosina.

Qué ra.... – quedaron muertas las palabras en el camino. – el auto exploto.

 Tomo la mano del menor corriendo hasta el bosque,- saco un shuriken en forma de estrella de seis picos lanzándolo contra los atacantes.

Corría lo mas que podía jalando al menor al interior del bosque, el camino era rocoso y difícil de andar por el.

Cubrió entre los árboles al castaño,  jalo al menor.- unos shurikes fueron a parar donde segundos antes estaba su cabeza.

Qué es lo que pasa?.- aparte de lo obvio, y donde estaba su papá por que no había ido con ellos?.

Joven yagami.- jalaba al menor, sabia que le exigía demasiado para su condición y no es que fuera mala solo que requería en esos momentos de mas fuerza.

Tomo de la cintura del oji miel poniéndole adelante para que ningún miserable ataque golpease  al joven y antes fuesen a parar en el.

Jaloneaba con gran fuerza al yagami haciéndolo avanzar mas rápido.

Abajo.- cubrió con su cuerpo a Light. – su cara fue a para al lodo a hora si estaba totalmente empapado y mugroso.

Se metieron al río que le llegaba a la cintura.

Esto será mas lento, la corriente es muy fuerte.- dijo el castaño tintineando sus dientes.

No iremos contra corriente.- tomo al joven por la cintura, se pego al muro tapándolos a la vista.

No e.. – le tapo la boca al castaño.

Lo miro con ojos asesinos.

No haga ruido- le dijo al oído en un susurro.

Seria mejor nadar por debajo del agua, pero no estaba seguro que el joven yagami estuviese de acuerdo o en su defecto no aguantase, aun que esa ultima no se le hacia lógico era un yagami podía nadar.

Tenían que llegar a la base al menos el joven light.

Llegaron a unas cataratas.

Tomo de la mano al castaño y después lo levanto para sacarlo del agua, seguido por el.

A donde vamos?.- estaba arto de no tener respuestas, estaba empapado y alguien lo quería matar.

Empujo al menor contra un árbol evitando otro ataque.

Cuántos son? Pensó el ninja para si.

Son 30 los que nos sigue, 10 a la derecha, 15 atrás y 5 que se quedaron atrás.- dijo el yagami, con la mano sujetando el brazo del mayor.

Miro al menor no tenia ni idea en que momento los había contado. – corrieron hacia unas rocas para cubrirse.

Eran demasiados y a ese paso los acorralarían, demonios si tan solo no lo arriesgara si peleara cuerpo a cuerpo, eso era prácticamente imposible, - lo miro de reojo respiraba agitado.- dividirse tampoco era buena idea irían tras le chico.

Lo mejor seria abrirse camino y eliminar de uno en uno.

Miro a  el chofer, estaba metido en sus pensamientos, y probablemente divagando que hacer. – si fuera sora o izumo no seria una carga- dijo inconsciente sin darse cuenta.

Joven yagami usted no es una carga, ellos si lo serian, tratarían de defenderse y terminaríamos peor.- al menos izumo pero constaba decir que era un gran peleador y podía defenderse bastante bien e cualquier situación, pero no podía decirle eso al castaño, de por si no podía sacar llamas a diferencia de sus primos que todos incluso el mas joven eran capaces.

Gracias por mentir- sonrió el oji miel.

Miro al joven, - salgamos de aquí.

Light salió y en ese momento salió un shuriken en dirección a su cabeza.

Señor,- corrió hasta el empujándolo y cubriendo con el brazo el ataque.

Agh.- se mordió el labio para aguantarse el dolor, había olvidado lo que sentía un shuriken clavado en la piel, tenia años sin sentirlo.

Con el otro brazo saco la estrella,- quédese abajo señor.

Afirmo solo con la cabeza, la sangre le había salpicado cayéndole en el rostro.

Metió la mano dentro de la camisa sacando un shuriken de tres astas y de muy buen tamaño. Desdoblo el arma dándole su verdadera forma.

Tomo posición de ataque, - tendría que pelear y defender a la vez, eran entrenados para eso pero nunca pensó en tener que llevarlo acabo.

Cubrió los shuriken dirigidos al señor yagami, regresándolos a sus adversarios.

Tomo la mano del menor y salto a las ramas.

Atrás- dijo el castaño.

Bloqueo el ataque rápidamente.

Adelante hay cuatro.- dijo al momento que se sujetaba del cuello del chofer que bien sabia que era un ninja.

Tomo de la cintura al oji miel cargándolo de lado.- joven puede ayudarme a sacar un kodaschi de mi espalda?.

Ssi- paso su mano por el hombro en busca de semejante arma que aun no entendía como la cargaba.- tomo el mango sacándola con cuidado.

Al tenerla completamente fuera se la entrego.

La tomo con la boca, después sujeto a light con fuerza.- sujétese. – dicho esto salto a otra rama.

Coloco el shuriken del otro constado. Tomo la cabeza del menor y cubrió sus ojos pegando su rostro a su pecho.

No deseaba que el joven viera su lado asesino, su papá lo había alejado de todo como para que el lo corrompiera.

Respetaba al señor yagami souichiro, fue el único que defendió a su hijo de todas esas tradiciones.

Agarro la kodachi sin mas se lanzo contra los ninjas, cortaba con gran destreza a su adversario, como si estuviese rebanando simples alimentos.

Salto clavándosela en el pecho a uno, después destajo el cuerpo.

Con rapidez deslizo el arma hacia atrás clavándola en el estomago de otro.

Otro salto, a una rama mas alta, corto un árbol llevándose con el a 2, giro la espada encajándola en la garganta de otro.

No podía ver nada mas que la tela de el ninja, sentía su corazón latir a gran velocidad, no se notaba en su pecho la agitación, pero escuchaba la rapidez con que palpitaba.

El brazo le dolía, si seguía así no aguantaría mas el peso de la kodachi,- salto al piso con gran destreza , empezó a correr esquivando y atacando, ya no podía bloquear requería de mucha resistencia y no le quedaba mucha.

Solo sentía los altibajos, no le permitían ver, aun que escuchaba todo el escándalo. Y por los movimientos sabia lo que pasaba.

Llego al limite un acantilado, salto sin pensarlo mucho.

Se mataron- dijo uno de ellos.

Al menos eso les espera.