Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EL MAR por Shaka_Rubi

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este relato nació apenas ayer por la tarde xD! Llegó de repente y no pude hacer nada para evitarlo, no es la gran cosa pero weee espero que alguien lea xDDD!

-¿Porqué?

Moviste ligeramente tu cabeza hacia mí al escuchar mi pregunta.

-¿Porqué que, Light?

-¿No podemos estar juntos?

Je…

Emitiste una pequeña sonrisilla sarcástica, de esas que ya conozco perfectamente, como cada uno de los relieves de tu cuerpo, tus lunares, tu olor, incluso las pocas pero existentes imperfecciones de tu indescriptible silueta, tan delicada, pero tan fuerte, por momentos hasta femenina… Eres como un efebo, como un ángel forjado por las manos de un supuesto Dios al que le lloran los enajenados y mediocres humanos. ¡No! ningún Dios podría haber creado una obra maestra como tú L, eres único, haz nacido solo para mí, por mi voluntad, por el único Dios que los mortales conocerán… Eres mi creación, estas aquí para complacerme, solo yo puedo destruirte, llevarte a la gloria o al infierno.

-Porque tú eres Kira.

Sabía que dirías eso, L, Ryuuzaki, Ryuga… cada una de tus caras, las conozco como a mi mismo.

L, esa simple y maldita letra que para mi es sinónimo de lujuria, ternura, miedo, incertidumbre, amor y el odio que jamás soñé sentir por alguien.

-Yo no soy Kira.

Te respondo sin emoción, no tengo la menor intención de convencerte, tú eres el único ser al que jamás pude engañar, hasta mi propio padre cayó en mis redes ¿y así se hace llamar policía? es simplemente otra molestia de la cual me desharé algún día. Nadie que no entienda el significado de la verdadera justicia merece vivir, ni tu mi amor.

Maldita sea L, si no fueras tan obstinado y estúpido, los dos con nuestra inteligencia e innegable superioridad podríamos gobernar este mundo. Limpiarlo de todas las malditas lacras que no merecen siquiera pisar el suelo que seres majestuosos como nosotros pisamos. L escúchame, quédate conmigo, evítame la pena de matarte, te quiero para mí.

-Light-kun ¿Para qué me trajiste a este lugar?

-Yo solo deseaba ver un ocaso junto a ti.

Oh L, pareces un Dios, el sol te baña con destellos dorados, tu rebelde y negra cabellera es acariciada por el viento otoñal, cubriendo tu excepcional rostro, no puedo verte porque me das la espalda, pero mi cerebro en capaz de reproducir esa divina imagen. Las olas se acercan con lentitud para acabar rotas en la orilla, a nuestros pies. Ese manto de agua coloreado de dorado, las olas danzando con delicadeza, no puedo negarlo, es hermoso, e impregnado con tu silueta... es simplemente sublime. Cerré mis ojos, deleitándome con la belleza del momento, todo esto parece hecho especialmente para nosotros. Al abrirlos estas ahí, no te has movido ni un centímetro te vez tan…

Frágil

Esa era la palabra, luces tan frágil amor. Es la imagen que siempre has querido mostrar ¿verdad cariñito? Una fragilidad inexistente, como un junco que a pesar de ser movido por las más temibles ventiscas continúa ahí, impávido. Porque incluso en la cama a pesar de ser tú el que recibe mis envestidas, siempre L, siempre eres quien lleva la situación hacia donde te da la gana, y es así porque sabes que yo te lo permito, me vuelven loco todas esas expresiones de perversión que hemos aprendido juntos.

Dominación

Sumisión

Dominación

Sumisión

Son las palabras que definen nuestra relación, la cual esta regida por un amor tan excelso que ni el más grandioso de los escritores ha logrado describir y un odio tan grande que ni siquiera el asesino más brutal a sentido por la humanidad.

Acorto la distancia que nos mantiene separados con ligeros pasos que tú percibes porque noto como giras lentamente tu cabeza hacia mí. Te abrazó al fin, saltas asustado e intentas separarte de mí, yo no voy a permitir eso, aferro con fuerza tu cintura. Gimes de dolor.

-No te entiendo Light-kun, no te entiendo.

Dices inerte entre mis brazos, mientras el viento con olor a mar lleva tus palabras.

-Esta muy tranquilo hoy.

No me respondes, te limitas a tomar mis frías manos entre tus delgados y tibios dedos.

-Quizás sabía que veníamos.

Sonríes con melancolía.

-Ryuuzaki… te amo.

Confieso al fin, no te mentí y tú lo sabes, esa verdad es tan autentica como el hecho de que soy Kira.

Bajas entonces la mirada, una traviesa ave cruza por sobre nuestras cabezas, quizás se ha perdido en medio de una migración. Migrar… Ojala nosotros pudiéramos irnos lejos a un lugar donde solo habitemos tu y yo, nadie más, nadie que profane el mundo maravilloso que solo nos podría pertenecer.

-Yo también te amo Light…

Eso es lo que necesitaba oír de tus labios, tus ojos ya me lo habían contado todo muy a su pesar, pero tu boca, siempre se mantuvo sellada. Siento como el calor de tus dedos se va disipando, me has soltado, pero solo fue un instante. Posas tus enjutos brazos alrededor de mi cuello, siento tu abdomen chocar contra el mío, irremediablemente un cosquilleo se instala en mi entrepierna. ¿Tanto poder ejerces sobre mí? Y aún así me atrevo a llamar Dios, cuando tan solo el roce de tu cuerpo me rebaja a la repugnante naturaleza de los demás hombres. ¿Pero que más da si eres tú?, un ser muy superior a los otros insípidos mortales. Mi mente se queda en blanco al sentir tus tibios y húmedos labios presionando los míos, solo existimos el mar, el viento tu y yo amado mío. Respondo las atenciones de tu boca con la misma cadencia, tu lengua recorre hasta el más mínimo rincón de mi cavidad bucal.

-Ahh…

Me has hecho gemir una vez más, sonríes satisfecho, me maravillo al ver tus mejillas rojas y tu boca entreabierta dejando escapar tu dulce aliento, desearía hacerte el amor aquí mismo. Pero no, no estoy conforme con esto, quiero que seas tu L, el que ahora me desee tanto como yo a ti.

Me acerco nuevamente a tus labios, cierras instintivamente los ojos, hasta ahora mis brazos se han mantenido rígidos y mis manos quietas a los costados de mis muslos, pero no más. Con lentitud y delicadeza poso mis frías manos en tus tersas mejillas, sufres un respingo al sentirlas, pero no abres los ojos, sabes que me gusta verte así. Beso tu frente con devoción, desciendo de nueva cuenta hasta tus labios y dejo escapar un suave suspiro, mi aliento choca contra tu boca, te muerdes el labio inferior, y yo sonrío de medio lado…

Ya estas ansioso mi amor.

Ya no puedo más y cada célula de mi cuerpo me exige sentirte. Paso mi lengua con lentitud sobre tus adictivos labios, solo la punta, una y otra vez, dibujando un sendero que solo tú conoces, te oigo gemir… Eso me enciende como no tienes idea, ya basta de juegos. Introduzco mi lengua en tu boca, tú no dudas en darle entrada y ahora si, sin más preámbulos te beso con deseo, pasión, furia y amor, todos esos confusos y contradictorios sentimientos se mezclan cada vez que nos unimos, porque así somos nosotros, así es nuestra relación y no deseamos que cambie. Con una ansiedad casi bestial rodeo tu breve cintura y te aferro a mí y me doy cuenta de la única verdad que nos rodea, que nos persigue como la muerte misma.

No, no hay futuro para nosotros L, tienes razón.

Pronto morirás y será porque yo lo deseo, tú lo has querido de este modo. Tú te has revelado ante Dios, este Dios que deseaba que reinaras a su lado.

Cuando al fin separamos nuestros labios tú te adhieres aún más a mí, escondes tu rostro en el hueco de mi cuello, te siento temblar y entonces creo que el mundo ya es mío. Todo el tiempo mantengo los ojos cerrados, me encuentro sumergido en un éxtasis solo comparable al que experimenté la primera vez que ejecuté mi juicio con la Death Note.

-Ya es hora de irnos Light-kun.

Dices mientras te separas de mi cuerpo. Abro los ojos y noto que ya ha oscurecido, entonces en contra de mí voluntad una especie de desasosiego me invade. Miró con detalle tu peculiar andar, como de forma despreocupada calzas tus roídos zapatos blancos, esos que quizás tienen diez años, total que solo de vez en cuando los utilizas.

-Si tienes razón.

Me dirijo hacia a ti para repetir la acción de ponerme los zapatos, no quiero hacerlo, la arena húmeda y fría besando las plantas de mis pies se siente tan bien.

-Light-kun, fue agradable esto ¿sabes?

Me confesaste sin voltear a verme con intención de tomar el camino de regreso al auto negro en donde Watari-san nos espera.

-Sabia que te gustaría pero quería que fuera una sorpresa, por otro lado tenía miedo que rechazaras mi idea, con eso de tener a Kira al asecho.

-¿Kira? Ah Kira lo tengo a mi lado Light-kun…


Eres un desgraciado L, ni en estos momentos dejas de recordarme aquello.

-Yo no soy…

La humedad de tus labios me hace callar, otra vez estoy aquí bebiendo de ti, totalmente trasportado a tu mundo, simplemente disfrutando de tu calidez, mueves tus labios de forma suave, tu lengua sale y entra con una cadencia enloquecedora de mi boca, me besas de una forma tierna y delicada, me has hecho tuyo con este beso L.

-No digas nada, Light-kun esta fue una hermosa despedida.

Abrí mis ojos como platos, ¿tú ya sabes que tu fin esta próximo?, otra vez te adelantaste a los hechos L, otra vez lees en mi mirada mis intenciones y movimientos, que lastima que no puedas hacer nada, eso también ya es de tu conocimiento, tu muerte es inevitable. Mantengo mi boca cerrada, no me apetece mentir en estos momentos.

Agachas la cabeza y te quedas parado frente a mí unos momentos, no puedo ver tu cara, la oscuridad de la noche y tus mechones negros cubren tu rostro, levante mi diestra para tocar tu mejilla, pero tu mano no me lo permite, me has apartado con un algo de violencia, eso me ha fastidiado.

-Vámonos ya Light-kun.

Y subes la pequeña elevación de arena que nos oculta del mundo.

-L, mentiría si dijera que no te amo y que no ansió tu muerte, soy muy contradictorio… los Dioses tenemos que hacer sacrificios.

Procedo a seguirte, tu ya estas demasiado lejos de mí.
Esta imposible historia nuestra es eso, solo nuestra. En realidad este mar, la muerte, tú mi querido L y yo somos los únicos testigos.









Notas finales: Espero que alguien haya leido, espero sus opiniones, aunque dudo que haya alguna jajaja!

Nos leemos pronto!

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).