Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Apariencias por NeSLY

[Reviews - 27]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

APARIENCIAS

Mascara 2: …Y de buenas intenciones está lleno el paraíso.


-Un chico serio-
-No, mejor uno que decide reivindicarse-
-¿Y si finge que perdió la memoria? Sería mucho más fácil-
-Y si… finge que le agarró la madurez de repente-

Gaara apoyó la quijada sobre su mano y sin el menor problema y con toda la confianza que Naruto le permitía, se sentó sobre las piernas del rubio, obviando por supuesto como su habitación se silencio de inmediato y los otros cuatro muchachos que también se encontraban dentro los veían fijamente, agarró un poco de fruta picada y la llevo a su boca, para luego ofrecerle un pequeño trozo de manzana a su ojiazul hermano, quien abrió la boca gustoso.

-Definitivamente…- Kiba como siempre fue el primero en salir de su estupor –Tienen que dejar de hacer ese tipo de escenitas-
-Kiba-kun tiene razón- una azorada Hinata desviaba la mirada de aquella escena, esencialmente por que luchaba con todas sus fuerzas por no sacar su celular y fotografiar aquella imagen tan extrañamente excitante –Aquello puede malinterpretarse-

-Pero… Somos así de cercanos- Gaara no dudó en pasar los brazos por el cuello de Naruto y ofrecer la mejor cara inocente que tenía mientras Naruto tan solo sonreía despreocupadamente
-En serio… deja de comportarte así, Gaara- Shino bajó reflexivamente sus gafas, tan solo para ponerle un poco de seriedad al asunto
-Son demasiado problemáticos, además dudo que a Neji, siendo tan él, le agrade esas confiancitas que tienes con el problemático de Naruto-

-Naruto- rebatió el rubio –Solo Naruto, no soy el problemático de Naruto-
-Como sea… Yo todavía tengo una duda- Kiba se levantó con cuidado y de inmediato se acercó a los dos hermanos que seguían en la misma posición -Todos aquí sabemos que no son hermanos de sangre, pero… ¿En verdad nunca han intentado algo?-

-¡Kiba-kun!-

Las risas no se hicieron esperar y el rostro sonrojado de Hinata fue el detonante para que el propio Gaara decidiera que la muchacha era verdaderamente tierna… tan distinta a Neji -¡Vamos Hinata! Si se nota a leguas que te mueres por tomarles una foto-
-¡Kiba!-
-Si quieres por nosotros no hay problema- Naruto se apegó más a Gaara y Hinata por un momento pensó que se desmayaría ante aquello, pero si se desmayaba…

…¿Quién tomaría la foto?

+++--+++

Iruka escuchó complacido desde el piso de abajo las voces y risas provenientes de la habitación de Gaara, le agradaba que su hogar se llenara de risas y diversión adolescente, tan fresco se encontraba el ambiente que no encontró mejor momento para continuar con su novela, la cual por culpa de Kakashi no había terminado de escribir.

Sin embargo al percibir el dulce aroma del flan que seguramente Kakashi debería estar preparando, todos sus planes se vinieron abajo, decidiendo que por el momento podría hacerle compañía al peliplateado, no lo comprendía y quizás nunca lo terminaría de comprender, el como un hombre fuerte y valiente como Kakashi, antes trabajando para el ejercito ahora podía acostumbrarse a una vida tan simple y sencilla.

Además de que le sorprendía el gran arte que poseía el hombre en sus manos a la hora de cocinar.

Cada una de esas cosas era un aliciente para continuar… Kakashi era quizás su aliciente más fuerte de todos, cuando lo vió concentrado en la forma que le daría al postre, no pudo evitar sonreír, aquella seriedad él la envidiaba tanto, si el tuviera un poquito de esa concentración en su trabajo, no estuviera apenas a la mitad de su libro.

Kakashi se percató de su presencia.

Y cuando los ojos de Kakashi le transmitieron paz, supo que cada distracción, siempre valía la pena.

+++--+++

-Bueno, vamos directo al punto- Shikamaru tomó la batuta de la conversación, sentándose sobre la amplia cama de su amigo pelirrojo –Obviamente no se por que me involucro, pero que más da…-
-¿Tu no sabes?- esta vez fue Kiba quien elevó una ceja –Tú mas que sea eres su amigo, yo soy amigo de Naruto y no se que hago aquí-

-¡Como sea!- Naruto sonrió ampliamente antes de mirarlos a todos y cerciorándole a los demás el por que estaban ahí en ese momento –Neji-sempai es demasiado inteligente así que el que Gaara de repente haya decidido cambiar, eso nunca se lo va a creer-
-En realidad yo pienso que será más difícil que eso- todos los presentes ubicaron de inmediato a la única mujer del grupo quien nerviosamente entrelazaba sus manos –Neji-niisan es a veces… muy obstinado-
-¿A que te refieres?- Gaara de inmediato centró su atención en Hinata –Es tu primo, tu lo conoces mejor que todos nosotros-

-…l… te odia-

Y las palabras quedaron colgando en el aire –Genial…- Naruto observó a Gaara quien con una sonrisa arrogante tan solo se apoyó en el espaldar de la silla en la que ahora se encontraba –Entre más difícil mejor-
-¡Gaara-kun!-
-Soy así de sincero Hinata-
-Si estoy aquí es por que creo que no hay nadie mejor para él que tú, creo sinceramente que tú eres él único quien puede darle un poco de alegría y vitalidad a su vida, sacarlo de su constante seriedad y…-

-¿Y que?-
-No importa- Hinata volvió a sonreír –El caso es que pienso que debe ser todo un proceso para que crea en tu cambio y puedas siquiera entablar una conversación decente con él, conversación que no debe incluir la palabra sexo por un buen tiempo-
-Eso para Gaara es imposible- Shino tan solo sonrió levemente en cuanto sintió la mirada asesina del pelirrojo.

-Necesitamos que Neji-sempai vea que Gaara puede querer a alguien- Naruto comenzó a caminar por la habitación fijando su mirada en las paredes de la habitación, impregnada por supuesto por la elegancia que Gaara siempre destilaba –Que puede sufrir, necesitamos lograr que Neji extienda su instinto de protección que solo usa en Hannabi y Hinata, para que llegue también hasta Gaara-

-¡¿Quieres hacerme ver patético?!-
-¿Tienes otra opción? Necesitas un cambio drástico, por que Neji odia todo de ti- Shino volvió a mirarlo con seriedad, logrando que Gaara callara –Entonces tienes que mostrarle tu verdadero yo, el que solo nosotros conocemos y no finjas que eres incapaz de sentir, por que nosotros no te lo creemos-

Por primera vez… Gaara odió que sus amigos supieran tanto de él.

+++-++++

Sintió el sudor escurrir por su espalda, el sol de la mañana golpearle en la cara directamente y por supuesto en cuanto vió la pequeña pelota verde volar hacía él, no dudo en saltar levemente y pegar con la raqueta lo suficientemente fuerte como para que su hermano no pudiera rebotarla, cuando la pelota tocó el suelo varios metros lejos de Itachi, Sasuke no dudó en sonreír satisfactoriamente.

-Buen tiro, hermanito-
-No me digas así, idiota-
-Es extraño- el cambio brusco de conversación por parte de Itachi, indudablemente lo extraño –Supuse que estarías quejándote por un buen tiempo por que te traje a Japón. Y sin embargo extrañamente has dejado de quejarte… como si anduvieras en algo-

-No es de tu incumbencia Itachi-
-Eres mi hermano-
-Cuando te conviene- dejó la raqueta sobre la mesa, a conciencia de que Itachi lo seguía con la mirada mientras tomaba agua, maldito estúpido ¿Cómo podía darse cuenta de que cada cosa que hacía? ¿Por qué tenía que ser tan transparente ante Itachi?

Y como cada día, como se le venía haciendo costumbre.

Sasuke maldijo a Itachi y continuó pensando en como apresurar un encuentro con Uzumaki.

+++--+++


-Un amigo… ¿Para que quieres que contacte a un amigo mayor que yo y de confianza?-
-Tú solo hazlo Gaara, confía en nosotros-
-Pero…-
-Haz que te vaya a dejar al instituto y cuando yo te llame que ingrese contigo, confía en mi Gaara, así como yo confiaré en ti para que me ayudes con Sakura-


Gaara suspiró una vez más, hace cerca de unos veinte minutos que Naruto ya se había marchado con sus amigos, consultó su reloj una vez más y miró entre las calles para que poder divisar el carro que el día de hoy vendría a recogerlo, un amigo de confianza había dicho Naruto, pues amigos con mucha confianza era lo que más tenía, pero si era para lo que se estaba imaginando quien mejor que aquel dueño del descapotable negro que en este momento estacionaba su auto frente a él.

-Tanto tiempo, Gaara- el pelinegro frente a él bajó del auto con aquel infaltable aire de elegancia, y cuando sus ojos negros lo enfocaron luego de que se quitara las gafas, no pudo sino sonreír gustoso. Lo había conocido hace dos años durante un viaje escolar fuera del país, los mejores tres días que pudo vivir en Francia, la experiencia que había adquirido con aquel azabache eran invaluables.

La comunicación se había mantenido, en especial por que el azabache era un hombre de negocios que viajaba a cada momento y sus encuentros esporádicos siempre habían sido excelentes. Por eso apenas se enteró que iba a quedarse en Japón por un buen tiempo, el primero en su lista sin pensarlo dos veces fue él.

-Igualmente… Itachi-

+++--+++

-Voy a matar a Gaara- Naruto se quejó una vez más, su estilo no había cambiado demasiado su camisa de algodón ahora un poco más apegada al cuerpo, y no una talla más grande como solía usar por comodidad y su Jean con varios bolsillos que no sabía con que llenar, aunque Gaara le había especificado que los bolsillos no eran para llenar, sino para lucirlos… ¿Quién quiere lucir bolsillos?

…Vaya estupidez

-Únete al club- la voz de Neji logró sacarle una sonrisa al rubio, tanto odio por una persona que no le había hecho nada, no podía ser más que las ganas de intentar aplastar un sentimiento que empezaba a crecer en contra de su voluntad
-Neji-niisan… no digas esas cosas-
-Naruto…-

El rubio dirigió su mirada hacia la entrada del instituto luego de que Kiba discretamente lo hubiera llamado, tal y como esperaba de Gaara, un descapotable negro se estacionó ante el asombro de todos, en especial al ver a los dos ocupantes del auto, su mirada se dirigió casi de inmediato hacia Neji y cuando lo observó arrugar ligeramente el entrecejo, Naruto pudo comprobar con satisfacción que su teoría era correcta.

Nadie podía odiar a alguien tan solo por que si.

-Vamos adentro- Neji giró sin siquiera comprobar si alguien lo seguía, Hinata le mandó una discreta mirada antes de seguir a su primo y Naruto tan solo amplió su sonrisa, pasando su brazo por encima de los hombros de Kiba quien seguía sin comprender la situación.

-¡Gaara!-

Agitó su brazo con fuerza en forma de saludo y cuando su hermano le sonrió supo que algo que no sabía estaba sucediendo, aunque a juzgar por la situación era un poco extraño que medio instituto se le quedara viendo con tanta atención… pero seguramente se debía a su grito.

+++--+++

-¡¿Lo viste?!-
-Por supuesto que si, yo sabía que en algún momento su parentesco con Gaara-sempai tenía que salir a la luz-
-¡Es que esa camisa le quedaba tan… Wow!-
-Definitivamente lo suyo no es vestir sport, sino vestir casual-
-¿Casual? Lo de Gaara-sempai y Naruto es permanecer sin camisa todo el día-

Sakura arrugó el entrecejo confusa.

Desde que había entrado al instituto venía escuchando las mismas conversaciones y risitas nerviosas por parte de sus compañeras, que Naruto esto, que Naruto lo otro, que la camisa de Naruto, que Naruto sin camisa, que Gaara y el chico guapísimo del descapotable, al parecer los hermanitos el día de hoy eran la sensación del momento.

-Ino- saludó a su amiga, quien reunida con varias de sus compañeras reía abiertamente
-Hola Sakura-
-¿Sabes por que todo el mundo habla de Naruto hoy?- Sakura pudo percibir como Ino desviaba la mirada un poco sonrojada
-¿No lo has visto?-
-No-

-¡Pues no sabes de lo que te has perdido!- una de sus compañeras habló imprevistamente aumentando la risa en las demás –No se que le ha pasado pero el día de hoy Naruto ha venido con una camisa de su talla ¡Por fin! Y no una de esas exageradas con colores chillones, no, esta vez ha venido con una camisa azul oscuro y un jean color crema que… destaca varios de sus atributos- las risas se volvieron a escuchar y Sakura por un momento intentó imaginar al rubio, sin embargo imaginarlo fue casi imposible.

-Tienes que verlo- Ino la agarro de los hombros directo a su salón y en el momento en el que estaba dispuesta a entrar, su cuerpo retrocedió instintivamente al ver de reojo a uno de sus compañeros salir. Sus ojos verdes se abrieron por completo ante la imagen que tenía ante sus ojos.

El rubio extrañamente… lucía bien, sus ojos azules combinaban con la camisa con marca de dragones plateado que viajaban por los pectorales que ahora que lo notaba el rubio, si tenía, y si, las muchachas tenían razón, ese pantalón destacaba muchas cosas interesantes.

-Sa…Sakura-chan- aunque su voz seguía siendo la misma, lo notó extrañamente serio y por algún motivo aquello le resultó extrañamente atrayente
-Hola… Na…- y Sakura se odió, se odió por mucho al no poder recordar su nombre
-Naruto, Sakura-chan. Me llamo Naruto, Uzumaki Naruto- la sonrisa que se apoderó de aquellos labios enfrente de ella la hicieron estremecerse –Si quieres… yo podría ayudarte a recordarlo-

La mano del rubio viajó por su mejilla, en algún otro momento se hubiera alejado, pero la estupefacción era tanta que tan solo atinó a mantenerse en pie, el muchacho que ella conocía era lo suficientemente infantil e ingenuo como para hacer ese tipo de cosas.

Naruto no era un casanova.

La risa fresca de Naruto llamó la atención de muchas que se encontraban cerca, y así como había llegado, Naruto se marchó, aunque inmediatamente se hubiera marchado, Sakura está segura de que a lo lejos logró escuchar varios:

‘Naruto-sempai’

-Con permiso- Sakura volvió a dar un salto al notar que se encontraba cerca de la puerta y en cuanto vió a Uchiha Sasuke intentando entrar al salón con la maleta a su espalda, Sakura no pudo evitar pensar que su instituto era el mejor de todos, chico guapo, tras chico guapo.

Su vida estudiantil no podía ser mejor.

+++--+++

-No seas patético, Naruto- el rubio miró con determinación al pelirrojo, quien apoyado en una de las paredes y con sus brazos cruzados enarcaba una ceja
-La toque Gaara… tú no entiendes como me siento. Por que tú tocas, no sientes-
-¿Insinúas que jamás he sentido nervios, o que mi cuerpo se eleva, que mi corazón se agita, que la respiración se entrecorta, o las maripositas estúpidas en mi estómago?-

-Basta Gaara- se encontraban en el baño, Gaara lo había interceptado en cuanto lo vió caminar apresurado por los pasillos, con las manos temblorosas y levemente sonrojado
-Esas son estupideces, Naruto. Todas esas sensaciones las produces tú mismo a través de tu cerebro. Tú decides como sentirte-
-He dicho que basta, Gaara-

-Estúpido-

Y el golpe de Naruto en la mejilla de Gaara fue inexorable. Sabaku retrocedió varios pasos hacía atrás y cuando pudo percibir la mirada arrepentida de su hermano se adelantó un par de pasos, los suficientes como para poder levantar su mano y poder plantar una cachetada lo suficientemente fuerte como para que Naruto no se atreviera a volver a dejarse llevar por sus impulsos.

-Si vas a continuar actuando como un completo idiota, entonces dejemos esto aquí. Sakura no vale tanto la pena-
-Lo vale- Gaara tan solo rodó los ojos, Naruto se estaba obsesionando y eso no era bueno, tan solo esperaba que se estuviera obsesionando con el rechazo, más no con la muchacha. Con un brazo atrajo el cuerpo de Naruto al suyo y lo abrazó tan fuerte como deseaba hacerlo.

-Eres un completo idiota Naruto-

+++--+++


-Los chicos que le gustan a Sakura son aquellos que ella no puede manejar, aquellos que se toman la vida libremente. Es decir, Sakura es una masoquista, le gustan los hombres como yo o como los Uchiha. Le gusta lo que no puede tener. Ignórala y la tendrás a tus pies-


Miró una vez más la puerta de su salón, cerró los ojos por un breve segundo y cuando los abrió, sonrió de aquella manera que Gaara le había enseñado, fingir no era lo suyo, pero Sakura valía la pena y de eso estaba más que seguro, en el momento en que abrió la puerta y el profesor detuvo la clase, fue muy conciente de las miradas y los susurros que su sola presencia provocó, extrañamente aquello le agradó.

-Disculpe, me sentí un poco mal y tuve que ir al baño-
-Esta bien Uzumaki-kun, toma asiento-

Asintió con gracia y a diferencia del día anterior se sentó junto al Uchiha con toda la intención de sociabilizar, Gaara se lo había dejado bien en claro, tenía que aprender del maestro y Uchiha Sasuke era el típico chico insoportable para los chicos, pero el novio perfecto para las chicas.

Lo que no comprendió muy bien fue el por que, Sasuke lo miraba como si estuviera molesto. Hasta donde recordaba no se lo había topado desde el día anterior, así que algo malo, esta seguro no ha hecho.

+++--+++

-Vaya… ¿Quién podía pensarlo? Bastó con que te vistieras como gente para que te volvieras popular- Naruto miró a Kiba, el castaño comía tranquilamente la manzana en sus manos ignorando por completo su mirada
-Lo cual demuestra que la polaridad no es más que un asco-

-Gaara- Naruto se alegró de verlo, en especial por que al parecer aquel golpe había quedado en el olvido, y cuando Gaara se sentó a su lado, Naruto deseó tanto poder abrazarlo -¿Cómo no te cansas de esas niñitas que están todo el día ‘Sempai’ ‘Sempai’?-

-No lo sé… costumbre tal vez- Gaara empezó a beber el jugo encartonado en sus manos y cuando notó que la mirada azul de Naruto se perdía entre la gente, no le tomó mucho darse cuenta hacía quien iba dirigida –Naruto… ¿Qué te he dicho?-
-Ignorarla, lo sé, pero…-

-¿Y como vas con Uchiha?-
-No lo sé es muy raro dattebayo-
-No digas dattebayo, eso es extraño y recuerda que ahora tienes que fingir que eres perfecto- Naruto tan solo rodó los ojos

-Como sea, ayer Sasuke incluso hasta me ayudó y hoy me ignoró por completo como si hubiera hecho algo malo y solo yo tuviera la culpa ¡¿En serio me tengo que comportar así, dattebayo?!-

Gaara no dudo en golpear en la cabeza al rubio quien arrugó el entrecejo enojado –Perfecto, Naruto- le recordó el pelirrojo –Nada de gritos y nada de ‘dattebayo’- Naruto chasqueó la lengua, inconforme con como tenía comportarse ahora y cuando sintió una mirada sobre su cuerpo giró tan solo para encontrarse con el montón de estudiantes a su espalda, e ignorando la mirada de varias chicas a su alrededor, por alguna razón lo primero que interceptaron sus ojos, fue la imagen de Uchiha Sasuke girando su rostro hacía la ventana más cercana.

+++--+++


-Muy bien Hyuuga-kun. Toma asiento-

Neji asintió ante las palabras de su profesor y dejó el marcador sobre el escritorio, dejando atrás el extenso ejercicio de álgebra recién realizado, aunque no quiso su mirada se deslizo levemente hacía la parte de atrás del otro lado de su asiento, donde un concentrado Sabaku se encontraba mirando por la ventana, concentrado en la clase obviamente no, más bien se encontraba encerrado en sus pensamientos.

Tomó asiento en su lugar y luego de recibir un par de felicitaciones por parte de sus compañeros, esta vez concientemente deslizó su mirada hacia el pelirrojo quien continuaba con la misma posición, nunca hasta ahora lo había visto tan serio, por lo general cuando por error su mirada lo buscaba, la mirada de Gaara siempre estaba sobre su cuerpo, con aquel destello de deseo que Neji había aprendido a odiar.

-Sabaku-kun a la pizarra- y como era de esperarse, Gaara tardó en reaccionar, Neji afiló su mirada de seguro el muy desvergonzado estaba planeando algo, eso tenía que ser, Sabaku no Gaara no podía cambiar simplemente de la noche a la mañana –Sabaku-kun- el amor es lo único que puede cambiar irremediablemente a las personas, eso había escuchado una vez, pero Gaara sencillamente no se enamora -¡Sabaku!-

-Si-

Lo vió levantarse, ahora que lo notaba en todo el día el pelirrojo no lo había mirado o siquiera llamado su atención, el día de hoy Sabaku no Gaara tan solo le había dado un día de paz, y Neji sinceramente se lo agradecía, escuchó el ejercicio que le habían dictado al pelirrojo con el firme propósito de terminarlo antes que el muchacho, sin embargo cuando observó los números en la pizarra, notó que el pelirrojo escribía con mucha elegancia y que sus letras y números eran… buenos.

Tenía una buena caligrafía.

Y antes de que se diera cuenta. Gaara había terminado el ejercicio, y él… él no había copiado nada.

+++--+++


-Destaca, Naruto. Pero no como solías hacerlo, si nadan, sé el primero en llegar, si juegan fútbol, sé el goleador. Eres bueno en los deportes, debido a tu hiperactividad siempre lo has sido, tu meta no es solo volver loca a Sakura, tienes que lograr que medio instituto te ame. Eso le encantara a Sakura. Ser la envidia de todo el instituto-


-¡A tu derecha!-

La voz de Kiba en aquel momento fue tan oportuna, corrió con la pelota a sus pies por todo el césped, esquivando a varios de sus compañeros de salón, entre ellos al Uchiha, el cual para su desgracia a pesar de que no logró quitarle el balón, si logró golpearlo en el brazo lo suficientemente fuerte como para que la piel se le amoratara levemente, tal pareciera que la intención de Sasuke nunca fue robarle el balón, sino más bien golpearlo.

-¡Tu puedes Naruto-kun!-

Intentó no distraerse más y continuó corriendo hacía el arco, donde un expectante Chouji lo esperaba con los brazos extendidos, era particularmente inusual el como las chicas habían dejado sus ejercicios de rutina para arremolinarse alrededor de la cancha tan solo para observar su partido durante la clase de deportes, incluyendo al profesor que las ignoraba por completo, concentrado en el juego.

Su patada fue certera. Y como era de esperarse los gritos casi lo dejan sordo, el pitido del silbato se esparció por todo el campo y el tan solo levantó su puño con una amplia sonrisa, nada de celebraciones exageradas, tenía que grabarse cada una de esas indicaciones. Kiba saltó sobre su espalda con un aire juguetón y los gritos por parte de las muchachas crecieron todavía más.

Buscó a Hinata entre la multitud y cuando la vió a una prudente distancia de Sakura, su sonrisa se amplió todavía más.

-Ignórala, Naruto. Ignórala todo lo que puedas, Pero… -

Corrió lo más rápido que pudo hacia donde se encontraba la muchacha, de reojo pudo ver como Sakura retrocedía un paso instintivamente por que de seguro debió haber supuesto que iría hacia ella, alzó a Hinata entre sus brazos y le dio un par de vueltas antes de abrazarla con fuerza, la risa suave de la pelinegra llegó directamente a sus oídos y él se sintió tan seguro en ese momento.

-Uzumaki no has ganado la copa mundial así que deja la exageración- la voz de su profesor fue seca y algo burlona al mismo tiempo, tanto que le hizo darse cuenta que sus palabras salían solas
-Pero el cuerpo de Hina-chan es tan cálido- y se abrazó más a la muchacha quien ya se encontraba sonrojada por sus palabras
-¡Naruto-kun!-

Las risas leves no se hicieron esperar y a pesar de que no soltó a Hinata en ningún momento, giró deliberadamente hacía donde se encontraba Sakura y cuando vió a Ino con el entrecejo arrugado, decidió que más luego hablaría con ella.

Sin soltarse de Hinata se concentró en Sakura y cuando la muchacha se dio cuenta de que llevaban un par de segundo mirándose a los ojos desvió la mirada, pero tal y como supuso los ojos de verdes de Haruno volvieron a buscarlo y cuando fue conciente de esa mirada, le sonrió peligrosamente logrando arrancarle un sonrojo a la muchacha y luego de eso… simplemente la ignoró.


-…De vez en cuando dale dosis de esperanza. Se enloquecerá por completo-


+++--+++

Gaara guardó en su casillero el libro de Química, suspiró con cansancio y miró la camisa que había dejado el día anterior en el casillero, la tomó con cuidado y la guardó dentro de la maleta, cuando llegara a su casa la dejaría en la lavadora, consultó con su reloj y sonrió al notar que en cualquier momento llegaría Itachi, cerró el casillero y al ver a Naruto en la entrada del instituto agitando su brazo, sonrió.

Vio a Neji saliendo de la oficina de rectorado, cerró sus ojos y apretó sus puños, luchando contra sus instintos que gritaban por ir a incordiar al castaño, sin embargo y de acuerdo al plan, respiro profundo y paso frente a él, como si salir del instituto fuera urgente.

+++--+++

-Así que el hermano menor de Gaa-chan-
-¿Gaa-chan?- Naruto apretó la mano del mayor en señal de saludo y sonrió divertido al escuchar el apelativo que Itachi usaba con su hermano
-¿Ya se han conocido?-
-Si, Gaa-chan-

-Itachi- regaño el pelirrojo mirando agresivamente al mayor quien alzó sus hombros desinteresándose por el asunto, Gaara tan solo suspiró
-Por cierto no me habías dicho que tenías un hermano tan crecidito-
-Mantén los pantalones en su lugar, Itachi- el azabache tan solo rodó los ojos subiéndose al auto e invitando a los adolescentes a que hicieran lo mismo.

+++--+++

La mansión Uchiha era verdaderamente imponente, y por que no decirlo un tanto intimidante también, las cosas se parecen a su dueño, Naruto nunca pensó que aquella frase se sintiera tan real en aquel momento cuando sus pies bajaron del auto y lo primero que enfocaron sus ojos fue la gran mansión, sin contar con los empleados que se apresuraron en servirle.

-Gaara…- susurró bajamente mientras aprovechaba que Itachi daba un par de órdenes con respecto a la cena al que parecía ser el chef -¿Por qué no me dijiste que tenías amigos tan… con tanto…?-
-¿Millonarios?- Gaara sonrió –Hay que cultivar todo tipo de amistades, Naruto- lo vió desenvolverse con tranquilidad dentro de la mansión y Naruto jamás se sintió tan pequeño en un lugar.

Aunque si se ponía a pensar… prefería la calidez de su hogar. Donde si gritaba un poco, desde donde se encontrara Iruka, Kakashi, Temari o incluso hasta el propio Gaara lo escuchaban.

-Bien tu llamada me continúa teniendo intrigado, Gaara- Itachi tomó asiento con sutileza y cruzó sus piernas con elegancia mientras el pelirrojo sonreía levemente
-Hay… alguien que me esta causando unos cuantos problemas. Así que necesito tu ayuda Itachi-
-Interesante… ¿Qué es lo que quieres, que lo destruya financieramente?-

Naruto se estremeció ante la simplicidad con la que habló el mayor.

-Eh… ¿Podrías decirme donde esta el baño?-
-Claro, Naru-chan- la ceja izquierda de Naruto tembló
-Tiene la mala costumbre de acortar nombres Naruto, vete acostumbrando- Itachi tan solo sonrió
-Segundo piso al fondo, el de aquí lo están reparando- Itachi observó a Naruto perderse por las escaleras así que decidió retomar la conversación –Bien. Decías…-

-No quiero que lo destruyas. Tan solo quiero que me prestes un poco de tu presencia-

Itachi enarcó una ceja. Cuando Gaara planeaba algo, podía ser peligroso, incluso mucho más que él.

+++--+++

Mojó su rostro una vez más.

Vió el reflejo en el espejo.

No había cambiado demasiado, tan solo un poco de su ropa, y tan solo un poco menos de cabello, que el día anterior Hinata había cortado en la habitación de Gaara. No era el cambio asombroso, quizás Gaara tenía razón y todo dependía de la actitud y la apariencia, tenía que comportarse como un reverendo idiota, prepotente y perfecto para llegar al corazón de Sakura.

La idea de que ese tipo de chicos le gustaban a la pelirosa, no le gustó.

Sacudió un poco su cabeza y miró la pequeña vista que le ofrecía la ventana, suspiró maravillando ante lo increíble que era ese lugar y en lo mucho que le gustaría pasar un par de días por ahí, después de todo un poco de lujo de vez en cuando no hace daño. Sonrió ante sus pensamientos y decidió regresar al salón donde se encontraban Gaara e Itachi.

Pero cuando otra puerta cercana a donde él se encontraba se abrió, instintivamente Naruto se detuvo, Uchiha Sasuke apareció ante sus ojos, vestido apenas con un pantalón de dormir y con una bandeja en las manos, seguramente había estado comiendo algo, puesto que también llevaba un vaso en las manos, debió suponer por el apellido que Itachi y Sasuke podían ser parientes.

-Tu…- la voz grave de Sasuke se escuchó especialmente abrasadora -¿Qué haces aquí?- quizás por que todavía estaba medio dormido, y sin pretenderlo los ojos de Naruto recorrieron discretamente los abdominales del azabache, notando con disgusto que el Uchiha tenía los músculos un tanto más marcados que él.

-Yo… vine con tú hermano-
-¿Itachi?-
-Si, pero también…-

-Olvídalo- Sasuke movió unos cuantos de sus mechones que caían desordenadamente por su rostro, lo cual le daba una amplia muestra a Naruto de que el Uchiha menor seguramente acababa de levantarse –De seguro todavía estoy medio dormido…-
-¿Que?- las palabras dichas por Sasuke, aunque no las escucho bien, fueron medio entendibles, y Naruto prefirió no creer lo que sus oídos acababan de escuchar.

-¡Sasuke, hoy cenamos lasaña! Así que no quiero malas caras por que hay visita-

Inmediatamente, los ojos de Sasuke se abrieron más de lo habitual.

-Eres real…- Naruto de inmediato se sintió incómodo, los ojos de Sasuke lo traspasaban con una facilidad realmente asombrosa
-¡Por supuesto que si, idiota!-
-Mmh… y yo que pensé que seguía dormido-

Sasuke bostezó discretamente, con educación para ser más exactos.

-¿So…ñabas conmigo?-

Sasuke volvió a bostezar, esta vez a diferencia de la vez anterior, el muchacho se permitió ingresar a su habitación nuevamente, para luego salir con las manos vacías y agarrar a Naruto por el brazo, haciéndolo ingresar a su habitación con toda la tranquilidad que poseía.

-Si, soñaba contigo. Muchas… cosas interesantes-

Cuando la puerta dentro de la habitación de Sasuke fue cerrada, por el mismo, Naruto por algún motivo sintió que debía huir.

-¿En serio?... Pues que interesante, pero ya me tengo que ir-
-¿No te intriga saber que soñaba?-
-¡No!-

Sasuke sonrió, por lo menos había logrado ponerlo nervioso y eso en un principio comenzaba a ser bueno, avanzó un paso y Naruto retrocedió otro. Oh… esto iba a ser verdaderamente entretenido -¿Por qué huyes?-
-No huyo, tú te acercas demasiado-
-Huyes… como un gatito asustadizo-

-Mira Uchiha…- Naruto se puso repentinamente serio –Acércate un paso más y te lanzo por esa preciosa ventana que hay a menos de dos metros de aquí- Sasuke afiló su mirada
-Creí que estabas nervioso-
-Creí que te alejarías, pero no lo has hecho. Y lo lamento por ti, pero no me interesas-

-¿Lo lamentas por mí?- Sasuke rió abiertamente en mucho tiempo, sintiendo verdadera gracia por las palabras dichas por el rubio –No te equivoques conmigo Uzumaki, mi interés por ti es meramente sexual-
-Entonces de una vez te digo- Naruto sonrió –No gastes energías en mí-
-Lo mismo te digo entonces-

Naruto arrugó el entrecejo molesto.

-Ya me tengo que ir-
-¿Por qué te gusta tanto esa tal Sakura?- Sasuke fingió jugar con una pequeña pluma que había sobre el escritorio, justo antes de que el rubio abandonara la habitación –Es insulsa, simple y nada espectacular. Hay incluso chicas más bonitas que ella-

-El que me guste o no, no es de tu incumbencia-
-Soñé que era el cumpleaños de Sakura y tú y yo lo hacíamos en su propia habitación- Naruto sintió una repentina excitación, que mentalmente maldijo -¿Retorcido, no?-
-¡Cállate ya, Uchiha!-

Cuando Sasuke volvió a sonreír, esta vez casi imperceptiblemente, Naruto quiso golpearlo.

Sin embargo, lo único que se vió capaz de hacer fue abrir la puerta y salir de aquella habitación lo antes posible, con las manos temblorosas y una ligera punzada en su entrepierna que empezaba a incomodarle demasiado, bajó lo más rápido que pudo las escaleras y cuando encontró a su hermano conversando con Itachi no pudo evitar sentirse aliviado.

-Me voy, nos vemos en la casa, Gaara-
-Pero… ¿No te quedas para cenar?- pudo sentir la mirada del pelirrojo sobre su cuerpo mientras recogía sus cosas por lo que el rubio tan solo se permitió respirar hondamente
-Recordé que me dejaron mucha tarea, tú quédate yo les aviso a Iruka y Kakashi-

-Pero Naru-chan…- Itachi inmediatamente intervino –Precisamente le contaba a Gaara del don especial de mi hermano menor-
-¡¿Es tu hermano?!-
-Si, no sabía que lo conocías-

-Sinceramente esperaba que fuera tu primo… no se parecen en nada- masculló esas palabras con molestia, lo suficientemente bajo como para que no lo escucharan
-Vaya… ¿Ya te vas, Uzumaki?- Naruto no tuvo que retroceder para suponer que Sasuke ya empezaba a bajar las escaleras, fingiendo como él solo, que nada sucedía.

-Con permiso-
-Naruto, espera- por suerte, Gaara fue el único que lo acompañó hasta la puerta, podía sentir la mirada desconcertada de Gaara, pero aún así Naruto solo quería llegar a su casa y darse una ducha, muy, muy fría –Te convendría llevarte bien con Sasuke…-

-¡Perdón… ¿Que?!-

Indignación, fue lo único que reflejó la voz de Naruto en ese instante, en el que su hermano arreglaba levemente el cuello de su camisa.

-Itachi dice, aunque yo creo en esas cosas, que Sasuke suele ver ciertas cosas-
-¿Ver?-
-Cosas que van a pasar y que no han sucedido- el cuerpo entero de Naruto se estremeció –Algo así como predecir el futuro. Quien sabe… quizás y él pueda ver si lo tuyo con Sakura funciona-

-¡Gaara!- Naruto pudo ver como su hermano retrocedía sorprendido –En serio tengo que irme- no quiso, en serio que no quiso, pero deliberadamente su mirada se deslizó al interior de la mansión donde un serio Sasuke lo miraba antes de girar y perderse entre los pasillos del lugar –Ahora, tengo que irme ahora. Nos vemos-

Y antes de que su hermano pudiera decirle algo más. Naruto empezó a correr.

Ese día, hasta que amaneció, Sakura no pasó por su mente un solo segundo.


FIN DE LA SEGUNDA MASCARA


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).