CAPITULO DOS EL INICIO A UNA NUEVA VIDA.
Con pasos seguros se dirigió para abordar el autobús, estaba claro que si ponía un pie a bordo de ese autobús su vida cambiaria para siempre, dejando atrás amigos, su hogar y la persona mas importante para el, se odiaba por haber caído en las redes de un casanova, sus amigos le advirtieron pero su amor por ese hombre pudo mas. Jamás le perdonaría tal engaño y antes que fuera mas doloroso y le destrozara su corazón mas de lo que estaba
Sus pensamientos fueron interrumpidos por la llamada de la salida del autobús, se puso de pie y con pasos seguros y con la terminación de jamás volver a ver ese hombre que lo había traicionado y jugado con sus sentimientos de la manera mas cruel posible, nunca mas cairia en sus redes de nuevo, lo mejor seria desaparecer de su vida sin dejar rastro alguno, si, el también tenia orgullo, el nunca en su vida dependió de nadie y nunca lo haría, era cierto que tenia muchos amigos, pero la soledad que tenia dentro de corazón era enorme y cuando pensó que esa soledad se estaba esfumando volvió a su corazón en abrir y cerrar de ojos.
Subió y tomo asiento en su lugar, no dejaba de ver su anillo de matrimonio y con una sonrisa de ironía la saco de
su dedo, comenzó a leer cada palabra que contenía este en su interior “ te amo” kakashi, el autobús comenzó a moverse, dio un suspiro y guardo el anillo en la bolsa del pantalón su mirada se perdía en el paisaje dejo que las imágenes que le proporcionaba lo relajaran, dejando atrás sus problemas en sus labios se dibujo una pequeña sonrisa de melancolía, noto que sus mejillas se encontraban mojadas de nuevo esas malditas lagrimas hacían su aparición de nuevo, se regaño internamente por ser tan débil y dejarse llevar por ese maldito sentimiento. Seco sus lágrimas con el dorso de su mano y cerro los ojos para dormir un rato ya que el viaje era largo.
Mientras tanto en la misión hatake un peliplateado estaba al borde de la histeria miraba de nuevo el reloj que se encontraba en ese lugar el cual marcaban 1 am, casi se cumplirían 11 horas desde que iruka se fuera de la mansión, mando a sus mejores hombres a buscarlo pero era como si la propia tierra se lo hubiera tragado, sin dinero, sin ropa, sin ningún lugar a dónde ir a dormir, no podría ir lejos solo le quedaba pedir ayuda a sus amigos, pero no tampoco se encontraba con ninguno de ellos sus hombres vigilaron o interrogaron por el paradero del castaño “nada”, no sabían en donde estaba.
Desde un pequeño balcón de un hotel se encontraba viendo las estrellas y la luna, en su rostro aun se reflejaba su tristeza, saco el anillo de su bolsa del pantalón lo miro por unos segundos.
- adiós, ojala que seas feliz, como yo lo seré desde mañana dejándote atrás, are de cuenta que nunca nos conocimos, adiós para siempre kakashi- arrojo el anillo por los aires, se dio media vuelta para adentrarse a la habitación, se sentó a la orilla de la cama, saco el dinero y comenzó a contar el dinero que tenia le alcanza bien para pagar el alquiler de un departamento pequeño y para sus comidas, pero tenia que encontrar trabajo rápido si no quería verse en apuros económicos así que desde mañana empezaría a buscar trabajo y un departamento, se alegraba de a verle ocultado a kakashi que tenia una cuenta de ahorro en el banco, el cual junto cuando era soltero y trabajaba pero en cuanto se caso con kakashi el prohibió trabajar y lo mantenía ligeramente vigilado de sus movimientos algo que el siempre supo.
A la mañana siguiente se despertó temprano y con su lema de “el que madruga, kami lo ayuda”, se baño, se arreglo y desayuno algo ligero ya que últimamente ningún alimento le sentaba bien por las mañanas y con todo su optimismo que podía tener se fue en busca de trabajo y un lugar para vivir. Era mas de medio día y aun no encontraba nada por una extraña razón se le antojo una rebanada de pastel de duraznos, vio un pequeño restauran cruzando la calle fue hacia el local y entro.
- buenos días, ¿Qué desea tomar? – la chica se veía un poco ruborizada por la sonrisa que le dio el castaño.
- Mmm, me gustaría mucho una rebanada de pastel de durazno y un te de limón gracias. – rasco su nariz mientras pedía su orden algo que lo hacia ver realmente dulce.
- En un momento le traigo su orden – u///u
- “pensé que seria fácil encontrar un trabajo pero que veo que me equivoque” T.T.
- se encuentra bien – la mesera se había acerco con su orden y al ver la aura depresiva del joven se preocupo.
- No es nada, “ debo preguntarle no pierdo nada “, disculpa, no sabes si de pura casualidad estén solicitando un ayudante-
- Mmm, bueno a decir verdad esta mañana vino el ayudante del chef y renuncio, siguieres puedo preguntarle a mi jefe, pero una pregunta sabes cocinar.- con un poco de duda
- Si, a mi me fascina cocinar, te lo agradecería muchísimo – con estrellitas en los ojos
- Ok O///O enseguida vuelvo.
Espero unos minutos que se le hicieron eternos, después de esos segundos la chica regreso y le dijo que la acompañara ya que el chef y su jefe querían hablar con el. Entraron ala cocina y vio dos hombres por uno de ellos era pelirrojo de ojos aquamarine eran realmente hermosos alrededor de ellos tenia una ligeras ojeras que lo hacían parecer un pequeño mapache su rostro mostraba seriedad absoluta a un lado de el se encontraba un rubio de ojos azules como el cielo en su rostro tenia tres marquitas en sus mejillas y con una sonrisa que deslumbraría a cualquiera.
- hola! Mi nombre es Uzumaki Naruto, pero puedes llamarme solo Naruto-kun – extendiéndole la mano – el es Sabaku no Gaara, nos dijo tenten que deseas trabajar – con pose seria.
- Mi nombre es Umino Iruka, Asi es, tengo experiencia trabajando en restauran, desde mesero hasta cocinero, tengo varias cartas de recomendación – el pobre castaño se sentía un poco nervioso por la mirada penetrante de esos ojos aquamarine.
- No es necesario, solo quiero ponerte a prueba si la pasas te quedas con el trabajo – por fin hablo el pelirrojo.- debes preparar…-
- ¡RAMEL! –UwU
- así es, ramel, ¿Qué? o.O, idiota no me hagas repetir tus palabras – regañando al pequeño rubio.
- …UwU° -
- perdón, por la interrupción preparas spaghetti ala boloñesa.- mostrándole el equipo que debería ocupar en la preparación del guiso.
- claro no se arrepentirán – y así comenzó a preparar el spaghetti bajo la mirada del rubio y del pelirrojo que no se perdían ningún detalle de la preparación de la pasta, pasaron unos minutos cuando esta estuvo lista sorprendiendo al pelirrojo por la rapidez que cocino.
- Listo, prueben – dejando sus platos de cada uno en su lugar.
- Wuuuuuaaaaaa- el rubio grito- esta delicioso jamás había probado algo igual – con estrellitas en los ojos – si esto sabe sabroso ya me imagino cuando prepares ramel **.
- …- gaara probó el platillo y quedo unos minutos meditando con los ojos cerrados- estas contratado – con una leve sonrisa en su rostro- debo de admitir que es el mejor que eh probado.
- En serio gracias, cuando puedo empezar – el castaño estaba emocionado.
- Si quieres mañana mismo – dijo el rubio.
- Muchas gracias no se arrepentirán – firmaron el contrato y le dieron los horarios de trabajo si por el fuera comenzaría a trabajar ese mismo día pero un tenia que encontrar un lugar en donde vivir ya que no se pasaría su vida viviendo en un hotel. Salio del restauran, casi paso toda la tarde buscando un departamento, había encontrado algunos pero la renta era muy alta o muy grande el departamento, lo que buscaba era un lugar pequeño pero cómodo después de unas horas miro un edificio en donde tenia desocupado un departamento entro y busco al casero el cual le mostró el pequeño departamento el cual contaba con un baño completo, una recamara amplia, un pequeño estudio, sala el cual contaba con un pequeño bacón con una vista fabulosa de la cual se enamoro y con eso estaba decidido en rentar el departamento el cual también contaba con muebles, se ahorraría un poco de dinero al no que tener que comprar muebles nuevos. Así que termino ese día feliz ya que había encontrado trabajo y un lugar bonito en donde vivir.
Había pasado un mes desde que el se marcho se encontraba cada día mas amargado según sus trabajadores, el no quería demostrar su frustración al no encontrar a su delfín pero le era imposible mas, en su pequeño mundo del peliplateado le era imposible que alguien fuera capaz de desafiarlo a el, nadie se había atrevido a retarlo de esa manera y menos humillarlo solo sus hombres de mas confianza y amigos sabían de la desaparición de su delfín a todos les había dicho que se encontraba en casa de sus padres algo que era mentira ya que iruka era huérfano, para acabar tenia que soportar a su gran amigo y rival el cual también se había enamorado del castaño.
- mi querido rival ¿Cómo te a tratado la vida este día? – mostrando su sonrisa colgate (ya saben de quien hablo verdad).
- ….- lo fulmino con la mirada.
- Entiendo por tu cara de pocos amigos que tienes, aun no lo haz encontrado verdad – tomo asiento en el gran sillón que se encontraba en el despachó.
- No deberías tomar del diario o te convertirás en alcohólico – y eso era verdad ya que el peliplateado siempre se le veía en bares, eso no era novedad ya que antes iba por busca de diversión, pero ahora era para desahogarse por su amado, - nuestros conocidos están sospechando que algo anda mal en tu matrimonio feliz – las ultimas palabras las dijo con burla lo que provoco que el peliplateado se fuera contra de el con el puño cerrado.
- ¡CALLATE! – el cual nunca llego a su destino ya que este se cayo al suelo por el estado de ebriedad que se encontraba.
- Vamos, kakashi necesitas refrescarte – lo levanto y paso unos de sus brazos del peliplateado por sus hombros y lo llevo a su habitación.
- Dime gai, ¿Por qué lo hizo?, en verdad lo amo – con dificultad subían las escaleras Gai lo miro por rabito del ojo.
- …- medito unos segundos las palabras que le diría jamás había visto así a su amigo y rival ninguna mujer o doncel lo había hechizado de esa forma y lo entendía ya que el también amaba a iruka y desde que supo que se casaría con kakashi su corazón dejo de latir (literalmente hablando)- tu sabias el carácter de iruka-kun, el no tolera la traición y menos viniendo de un ser querido, jamás debiste engañarlo – lo metió en la bañera con todo y ropa – para el también debe ser duro al no estar a tu lado lo se, por que vi. en el la llama del amor – el pelinegro sonrió de lado y con esas palabras salio del baño dejando al peliplateado pensando en esas palabras, se dirigió hacia la cama se sentó en la orilla de esta y tomo con sus manos un pequeño porta retrato en el cual esta ese bello delfín sonriendo.
- Iruka, espero que te encuentres bien – pasando sus dedos sobre la imagen y posando uno de ellos sobre los labios del castaño.
Flash back
Era primavera en la cuidad festejaba el festival de hanami el cual consiste ver las flores florecer, un joven pelinegro con cejas algo extravagantes, vestido con un yukata verde recorría las calles llenas de gente en busca de sus amigos los cuales había perdido, habían quedado en ver juntos los fuegos artificiales a las orillas de un pequeño rió, se dirigió ahí para ver si ya se encontraban ahí lo cual nunca ocurrió,
- ¡AAHH! ¡CUIDADO!,- cuando iba dar un paso se quedo paralizado por el grito del menor.
- Eh?, ¿Qué pasa? – aun con el pie en el aire.
- Lo siento mucho – haciendo un a pequeña reverencia- es mi broche se me callo y por poco lo pisas, perdón por asustarlo – se agacho para recoger el broche y después se lo mostró, el pelinegro se quedo hipnotizado por el chico de 15 años que se encontraba a su lado, el cual tenia un kimono color perla con flores de sakura adorándolo, su cabello castaño largo los cuales caían juguetonamente sobre sus hombros haciendo lo ver mas angelical.
- “ es un angel” – no dejaba mirarlo algo que empezó a incomodar al castaño este trataba de reparar su broche, ese detalle lo noto el pelinegro – puedo – estirando su mano para tomar el broche roto.
- Si, gracias – le dio el broche sus dedos rozaron con los del pelinegro lo que provoco que este se sintiera nervioso.
- “me toco, ese angel me toco” – hizo su máximo esfuerzo en repararlo – ya esta – se acerco a el y se lo coloco en el cabello sus manos temblaban como gelatina – se hermoso en ti.
- Ahh, gracias …- sus mejillas se sonrojaron un poco al escuchar las palabras del pelinegro.
- Mi nombre Maito Gai mi querido …- tomando una de sus manos.
- Umino Iruka – U///U°
- Mi querido Iruka-kun- depositando un pequeño beso en el dorso de su mano.
- Mmm, bueno será que me vaya, nos veremos después Gai-san, – y se marcho dejando al pelinegro suspirando.
- Gai, en donde demonios te metiste estábamos buscándote como locos en todos los lugares- se acerco a su amigo el cual todavía tenia cara de enamorado - ¿Qué diablos te paso?- enmarcando una ceja.
- Solo me encontré con angel, kakashi solo fue un angel – dando otro suspiro.
- Mmm, mejor vamos los otros nos esperan.- llevando arrastras a su amigo enamorado.
Fin del flash back.
- iruka- dejando el porta retrato en su lugar, pasaron varios minutos para que saliera su amigo del baño.- ya que estas mejor será mejor que me marche nos vemos luego kakashi.- vio a su amigo que se encontraba en buen estado y dirigió hacia la puerta.
- ¿Por qué tu entendiste mejor el corazón de iruka y yo no? – su mirada se poso en el piso.
- “por que lo amo idiota, jamás me hubiera atrevido hacerle daño como tu lo hiciste”- claro que no podía decirle al peliplateado que amaba a su delfín, asi que trato de decirlo con otras palabras- deberías dejar vivir en tu pequeño mundo y ver a las personas como realmente son y te darías cuenta de los sentimientos de los demás – y con esas palabras se marcho de la habitación de la mansión.
- Me pregunto y si contigo hubiera sido mas feliz – aunque lo aceptaba del todo sabia que su amigo gai estaba completamente enamorado de su delfín desde un principio que le contó de su angel sabia que se trataba de iruka.
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