En el Cairo existía un palacio en ruinas, con más de 5000 años de antigüedad. El palacio después de estar deshabitado por décadas paso hacer patrimonio de la nación egipcia. Una pareja de exenticos multimillonarios egipcios, decidió cómprala, al ver que era muy visitada y así hacerse más ricos de lo que ya eran. A pesar de que el gobierno no acedia fácilmente, con una buena cantidad de dinero que le entregaron, aceptaron, y así se puso la obra en marcha, reconstruyendo cada cuarto, pared, estancia del palacio igual, haciéndolo hoy en día el más famoso hotel del Cairo, “Hotel Luxor”, siendo el más visitado, por el hecho de saber que en la antigüedad fue residencia del Faraón Tutankamon. Dejándoles más dinero del que invirtieron.
En una de la suit, se encontraba un joven de cabello azulado, algo rebelde con unos ojos color turquesa y atractivo cuerpo, sentado en una cómoda silla de caoba, tapizado con un fino tapis color chocolate, dándole un toque rustico a las habitaciones. Dejo la taza de té hirviendo en una mesita, se levanta y dio unos cuantos pasos, hasta llegar a su closet para abrirlo y sacar un maletín negro de donde extrajo una fotografía.
El joven de no más de 30 años de edad, se dirigió a sentarse a su cómoda cama, para mirar la fotografía. La foto era de un joven de no más de 18 años de edad, atractivo, con el cabello rubio ondulado, tez blanca y unos luceros color azul cielo, - Hyoga- dijo, dejando escapar un suspiro y una lagrima gruesa que rodo por su mejilla, al recordar el gran amor de su vida que había fallecido hace 12 años atrás, en un accidente aéreo cuando venía de pasar las vacaciones de Rusia.
Nunca y hasta la fecha pudo superar la perdida de aquel amor. A pesar de su tragedia acabo sus estudios de doctor en genética y inseminación artificial, logrando abrir “la clínica hope”, la más famosa y respetable de Grecia. Debido a su tragedia, su prioridad se dirigió a estudiar todo lo relacionado con la clonación, para poder crear una vida y así vencer a la muerte que era inevitable en la raza humana. En el momento que perdió a su amado, cerró la puerta de su corazón depositando todo su amor y cariño en su ahijado Kanon, que lo amaba como el hijo que nunca tuvo y ni tendría. También amaba a Saga, pero su predilecto era el otro.
-¡Milo!, ¡me largo de aquí!- dijo uno de los gemelos entrando ala suit con dos maletas en mano.
Milo fue sacado abruptamente de sus pensamientos, escondió la fotografía debajo de la almohada y se enjuagando las lágrimas discretamente para no ser delatado.
-¡calma muchacho!, que es eso de que te vas- pregunto Milo con un deje de sorpresa.
-mi padre no me cree, prefiere creerle a ese tipo, Milo por favor déjame quedarme en tu apartamento, mi padre me corrió de la casa y yo no pienso vivir con ese prostituto- dijo Kanon con un tono lleno de tristeza revuelto con rabia.
-no me gusta verte peleado con tu padre, ¡claro! Que puede mudarte, mi casa es tu casa hijo- dijo Milo embozando una sonrisa tranquilizadora.
-gracias padrino, es lo que ocupaba escuchar, me voy, en una hora sale el avión-
-vamos, te acompaño-
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En otra suit de aquel prestigiado hotel, se encontraba un joven de cabello largo y quebradizo, color azulado, piel bronceada, cuerpo atlético, con la mirada perdida hacia la nada, cuando el sonido del teléfono lo volvió a la realidad, para contestar.
-bueno-
-Saga ¿eres tú?-
-¿Quién habla?-
-soy Mu-
-estaba pensando en ti- dijo Saga dibujando una sonrisa en el rostro.
-no tengo mucho tiempo, ya no me busque, me puedes meter en un gran problema-
-¿Por qué?, te quiero volver a mirar, que te parece si nos vemos al rato en las ruinas-
-¡a solas!, ¡no!, no puede ser, viene alguien, tengo que colgar-
EN LA CASA DEL TIO DOKO
-Mu, ¿con quién estabas hablando? Pregunto Shion.
-con nadie-
-¿y porque esta ese directorio abierto?, contesto Shion dudoso.
-no se-, dijo apenas disimulando los nervios.
-Mmm…arréglate, Alde y yo vamos a ir al mercado, quiero que nos acompañes-
Cuando se retiro Shion del despacho del tío Doko, Mu tomo el teléfono para marcarle a Saga, dándole las instrucciones para que llegara al mercado. Por su bien había decidido ya no verlo, pero al recordar aquella mirada llena de dulzura y cariño no se pudo resistir a mirarlo otra vez.
En el camino hacia el mercado, Mu iba muy pensativo.
-Mu, ¿de quién estas enamorado?, si pensaste que ya se nos avía olvidado estas muy equivocado, dijo Aldebarán.
-No estoy enamorado, lo dije… en un arranque de desesperación, para evitar que me casen-
-eso no es cierto Mu, tu nos estas ocultando algo- dijo Shion.
-de quien podría estar enamorado, no he conocido a nadie-
-soy tu primo Mu, dime, confía en mí-
-ya vieron que hermoso oro está ahí en ese puesto- dijo Mu apuntando
Ya en el mercado Mu, se dispuso a seguirles el rollo, para evitar que siguieran con el interrogatorio. De repente voltea encontrando un par de pupilas verde claro, gira su cabeza para observar a los otros dos que se encontraban muy entretenidos mirando el oro y se escapa con Saga dirigiéndose a las ruinas.
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- sabes, no paro de pensar en ti, lo digo enserio, es todo el tiempo-
Yo también, será porque eres griego y te pareces mas a mí, que los de mi familia, o será que estando cercas de ti recuero mi vida en Grecia-dijo Mu con un deje de nostalgia.
-solo es por eso…Mmm-
-siento…como…como si ya te conociera, de otra vida-
-¿crees que la gente vive varias vidas?
-¡claro!, eso tenlo por seguro, ¿tu no?-
-la verdad nunca me había puesto a pensar en eso, pero ahora que te conozco quizás sea verdad- contesto Saga acercándose más a él-no sé lo que sea, pero yo me acuerdo de ti, no solo en mi mente sino también aquí-dijo tocándose el corazón y cerrando por completo la distancia entre los dos para robarle un beso.
-lo sé, el mío también-dijo Mu desviando el beso-¡me voy!
-¡espera!, es gracioso, dices que tu mentalidad es diferente a la de tu familia y piensas igual a ellos-
-¡eso no es cierto!, no pienso igual-
-si no es cierto dame un beso-dijo Saga rosando los labios de Mu.
-¡no!, un beso no…no es correcto-dijo Mu girando el rostro.
-lo es-
-Me voy, antes de que Shion note mi ausencia-
-quiero verte de nuevo-
-yo te hablo, no me sigas-
EN EL MERCADO
-¡Alde!, ¿Dónde está Mu?-pregunto Shion mirando hacia todos lados.
-no sé, hace un rato estaba aquí-
-Hay que buscarlo, si llegamos a la casa sin él, Sidi Doko, me va a sacrificar como un carnero-
-¡te lo dije!, Mu nos va a traer problemas, desde que llego una sombra negra se poso sobre la casa, ya miraste, me quito a mi novio y me dejo al feo- dijo Alde enfurecido.
-no digas eso, hay que comprenderlo, toda su vida se la paso rodeado de occidentales, imagínate todas las mañas que le habrán pegado, es una oveja descarriada-
-de que hablan- dijo Mu acabando de entrar.
¡MU!, dijeron los dos al mismo tiempo.
-¿Dónde te metiste?, nos tenias muy preocupados, dijo Alde al borde de un ataque de histeria.
-estaba en el puesto de al lado, mirando el oro-
-pero si te buscamos por todos lados y no te vimos- contesto Shion
-de seguro no me vieron, por los nervios que traían- dijo Mu sofocando una risita.
-lo bueno que ya estas con nosotros, vámonos antes de que Sidi Doko vuelva loca a Kalila-dijo suspirando de alivio-
EN LA CASA DE TIO DOKO
-muchimacha acusi Sidi Doko mujijaja Mu y Alde, cochimacha asichi de vichu- dijo Kalila en su idioma natal, (según yo en árabe jejeje).
-¡Kalila!, hucha, hucha, vete, vete, no molestes, niños, síganme su tío quiere hablar con ustedes-.
Caminaron por un angosto pasillo decorado por muchas plantas, pasaron por un patio decorado con una fuente grande en medio que estaba rodeado por varias mujeres cantando alegremente, para entrar a una sala grande, donde se encontraba el Tío Doko esperando su te. Al entrar Sidi Doko les pidió que se sentaran, mientras Shion servía el té, les pregunto sobre el Corán, gracias "Ala" que Mu le avía dado unas leídas al libro, saliendo bien librado.
-me da gusto que hayan estudiado el Corán, eso habla muy bien de ustedes, pero no les he pedido que vinieran nomas por eso, quiero saber si ya están conformes con su destino-
-bueno...tío...ya no me molesta tanto que me casen con el feo, aunque toda vía no le creo a doña Saori, ella me odia- dijo Alde con timidez.
-no le levantes falsos a doña Saori, es una mujer muy respetable, acuérdate que el día que te presentes con Ala, tu lengua va hablar por ti y le va a decir todas las cosas malas que has dicho-
-lo siento tío, no va a volver a ocurrir-dijo agachando la cabeza
-y tu, Mu-
-¡no lo acepto!, ¡no lo acepto tío!-, dijo Mu desafiándolo con la mirada.
-Alde, retírate, la semana que entra va a venir tu novio a llevarte a comprar el oro que acordamos-
-¡me encanta el oro!, voy a escoger muchas cosas, dijo Alde embozando una sonrisa y retirándose.
-Mu, yo solo quiero mostrarte en donde están los peligros de la vida, para que tú puedas desviarlos-
-¿¡cuales peligros!?, tío, en donde ves peligro-
-en el amor Mu, piensas en el amor como un occidental, por eso no quieres casarte con Shaka, no te sientes emocionado, lo suficiente como el protagonista de una película o novela romántica-
-¿y tu quisieras que estuviera enamorado de un hombre que apenas se su nombre?-
-quisiera que estuvieras enamorado con la idea del matrimonio, tener hijos, formar una familia-
-tío pero yo no puedo aceptar una boda sin amor, ¡no lo acepto!, ¡nunca lo aceptare!- dijo Mu con hastió-sé que mi madre se caso así, que toda mi familia se caso así, pero yo no lo acepto tío, solo entiendo el matrimonio por amor-
-el amor es obra del tiempo, te acabas acostumbrando a esa persona, te gustaran sus cualidades, te apegaras a él, ¡eso es amor! Y no esa demencia, esa locura que el occidental llama amor-
-y si me enamoro tío Doko, si me enamoro de un hombre que no escogiste para mi, ¿Qué pasaría?-dijo Mu desafiándolo otra vez con la mirada.
-¿¡porque!?, ye existe ese hombre- pregunto Doko levantándose del sillón y acercándole a Mu.
-no…no existe, solo fue una suposición, dijo Mu bajando la mirada-¿pero podría suceder?, verdad-
-si eso sucediera, estarías poniendo tu inteligencia al servicio de tus sentidos, debe ser al rever, el amor es traicionero, recuérdalo-
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En Grecia Kanon se dirigió a su casa para recoger sus pertenencias y así mudarse con su padrino. Al llega el taxi se detuvo en un portón grande, dos hombres vestidos de traje negro y corbata, abrieron las puertas para dejar entrar el taxi, dejando ver una mansión hermosa estilo posmoderno. Al bajase del auto, Kanon se encamino a la entrada principal, entrando a un tipo “lobby” muy amplio, que se dividía en varias direcciones, siendo recibido por una señora ya mayor de edad, de tez bronceada, cabello color grisáceo, recogido en un chongo bajo, ojos color ámbar, vestida con una falda color verde, que le llegaba a media rodilla, una blusa de cuello de tortuga color blanca y unas cuantas arrugas que dibujaba el rostro al sonreír.
-me extrañaste- dijo Kanon, abrasándola para levantarla y girarla en el viento.
-¡Ay!, ¡muchacho!, me vas a marear, ¡bájame!- gritaba Sandra entre carcajadas-¿Dónde están tu padre y hermano?
-no regresaron con migo-
-¿y tu porque regresaste sin ellos? Pregunto con sorpresa.
-me pelee con mi padre, nana arregla unas maletas con ropa, me voy a vivir con Milo- dijo Kanon subiendo las blancas escaleras.
-¡QUE!- grito Sandra, a punto de desmallarse- muchacho que paso, ¿Por qué te vas?, dijo siguiéndolo-es por el novio de tu padre verdad, si ya sabía yo desde que lo conocí, no iba a traer nada bueno a esta familia-.
-le atinaste nana-
-cuéntame hijito, ¿Qué paso?, ¿Qué te hizo?- dijo mordiéndose el labio inferior y apunto de soltar el llanto.
-hablo Aiorios-
-¡NO ME CAMBIES EL TEMA!, pero si hablo, y dijo que te comunicaras con él en cuanto llegaras, pero primero explícame, no me dejes con la duda, ¡niño!
-deja le hablo, ándale nana, arréglalas para ya marcharme- dijo Kanon sacando el celular de el bolsillo de su pantalón.
-¡Ay!, muchacho, no cambias-
-¡amor!, te extrañe-dijo Kanon dibujando una sonrisa en su rostro-¡claro que trate de comunicarme!, pero en donde estaba, casi no había señal, ¡una fiesta!, por tu cumpleaños, en Rodorio, por supuesto que voy, no me la perdería por nada, si…digo… no, ¡como crees que se me olvido, lo que pasa es que he tenido mi mente ocupada en otra cosa, no….del trabajo no, luego te cuento, entonces te dejo, te mando mil besos-
-Mmm…Mmm…ahora resulta que te largas de farra y para acabarla de amolar fuera de la ciudad- dijo Sandra refunfuñando.
-nana, cuando vas a dejar de regañarme porque me gusta divertirme. Nana habla a la torre de control y avísales que de este sábado en ocho, me voy a llevar el helicóptero, que lo tengan preparado, salgo muy temprano para Rodorio, ya me imagino la cara que va aponer Aiorios, cuando me vea llegar en él, y piloteando, solo, sin nadie que me acompañe-
-¡QUE, QUE!, ¡estás loco!, ahora si me desmallo, vas hacer que me dé un paro cardiaco- dijo Sandra soltando la ropa que traía en la mano.
-Sandra, no te preocupes, ya estoy apto, para pilotear solo, nomas me faltan unas cuantas semanas para acabar el curso- dijo Kanon con un deje de superioridad.
-¡ME VALE UN CACAGUATE QUE YA CASI ACABES TU CURSO!, no vas a manejar ese artefacto del demonio sin que valla con tigo un maestro, o alguien que te vigile y ¡PUNTOOOOOOOOOO!, es mas deja le hablo al señor Aioria-.
-nana, suelta eso-dijo Kanon quitándole el teléfono –nanita, quien la quiere, quien la quiere más que yo…eh…viejita linda- dijo Kanon abrazándola y dándole muchos besos.
-¡basta!, niño, me haces cosquillas, vamos hacer una cosa, si consigues un piloto que te acompañe, no le hablo a tu padre, ¿Qué dices?-
-por supuesto que sí, de eso yo me encargo, nanita chula, vez nana nadie se puede resistir a mis encantos- {pensando, en que ningún pilo tete de quita, le iba a estropear la sorpresa que le tenía preparada a su amor}.
Pero lo que no se imaginaba, es que su vida estaba a punto de cambiar.
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Días después de la plática que sostuvieron Mu y el tío Doko, se encontraban esperando los dos primos a sus mutuos, futuros maridos, para ir al mercado a comprar el oro. Alde no dejaba de mirarse en el espejo, imaginándose todo su cuerpo lleno de joyas, mientras que Mu se encontraba, sentado en la cama, abrasando sus piernas y mirando por el ventanal. Shion entro avisándoles que Shaka y DM, se encontraban ya en la sala, Alde, bajo como alma que lleva el diablo, (claro con todo el oro que le van a regalar, hasta yo), Mu dejo salir un suspiro de resignación y se dispuso abajar.
En la sala se encontraba el tío Doko ultimando unos detalles de la boda, cuando llego Alde, el tío Doko se dispuso a presentar a DM con su futuro marido. DM, se quedo boquiabierto cuando miro la belleza de Aldebarán, tenía miedo de que le saliera horrendo, pero al mirar semejante hombre todo su temor se desvaneció. Shion entro a la sala y detrás de él, Mu tratando de retrasar el momento de conocer a ese individuo, pero el tío Doko, descubrió sus intenciones lo jala poniéndolo enfrente de Shaka.
-Mu, este es tu novio, Shaka, el es Mu mi sobrino- dijo Doko embozando una sonrisa
Mu miro a Shaka con desprecio, haciéndole notar todo el desprecio que sentía por obligarlo a casare con él. Shaka cuando lo miro se enamoro completamente de esas pupilas verdes que parecían jade, de esa piel tersa y blanca, de aquel cabello largo y lila, y de ese cuerpo frágil, delgado, amor a primera vista, pensó Shaka sin notar la forma en que lo miraba Mu. Se dispusieron a salir de la casa encaminándose al mercado acompañados por Shion y doña Saori.
En todo el camino las parejitas no dijeron palabras, Shaka estaba muy entretenido mirando al cual sería su futuro marido, Mu por su parte ni lo volteaba a ver. Alde, se encontraba debatiéndose con su coraje, Shaka el joven de larga cabellera dorada, ojos azul celeste, labios carnosos y antojadles y cuerpo de dios, se fuera a casar con la oveja negra de la familia y no con él.
Cuando ya se encontraban en el local, Shaka le dijo a Mu que escogiera lo que más quisiera. Aldebarán no ocupo que DM le digiera algo solo llego y empezó a escoger lo más bello y caro, Dm se encontraba preocupado, el no tenía mucho dinero para completar el dote, pero quería casarse, le pidió de favor a su hermano Shaka, que le prestara dinero, comiéndose su orgullo, tenía que reconocer que su hermano era más rico que él, pero Shaka le dijo que no podía, porque tenía que pagar la boda y pagar los pasajes de él y Mu para irse a vivir a Grecia. DM, le hablo a su hermana Saori para decirle que le digiera a Alde, que no tenía suficiente dinero para completar la dote, pidiéndole a Ala que aceptara comprarle menos oro.
-Alde, te están dando en bandeja de plata la oportunidad para cancelar la boda, si no cumple con lo acordado, se puede cancelar- le dijo Shion en un susurro.
-pero… y si ya no consigo marido, y me quedo como tu cuidando de una casa ajena y criando hijos ajenos-
-Dios, sabe porque hace las cosas, si ese es tu destino tienes que aceptarlo-
-No importa que no me cumpla con el dote, me caso-
Saori le hizo la seña a su hermano dándole entender que si acepto. DM, suspiro de alivio y le dio gracias a dios que no se quedaría cotorro. Saori metiéndose en lo que no le importaba, noto que Mu miraba con desprecio a su hermano y le dijo, a su hermano que Mu no le convenía.
-no sea tonto Shaka, que no notas como te mira Mu, ¡velo!, ni siquiera mira el oro-
-Saori, deja de ser si sañosa, no ves que apenas hoy lo conocí, no esperes que me mire de otra forma-
-Mmm…no te conviene, no te cases con el-
-Mu, que te sucede, puedes escoger lo que quieras, más de lo acordado, si tu quieres- dijo Shaka ignorando a su hermana y acercándose a Mu.
-¡no me interesa!, compra lo que te parezca- dijo Mu mirándolo con desdén.
-pero…a, ya entendí, tu tío me conto que toda tu vida viviste rodeado de occidentales, es normal que no te intereses estas cosas, “habbyby”, te voy a escoger las más hermosas joyas, para resaltar tu belleza, te voy hacer el hombre más rico y respetable de todo el Cairo “habbyby” (amor)-
-¡NO ME VOY A CASAR CON TIGO!- grito Mu saliendo de mercado.
-Shaka, ¡te lo dije!, ese joven no te conviene, ve nomas, que descaro, como se atreve a desafiarte, es un escuincle, pero cuando este enfrente de Ala, va a pagar esta humillación que nos hizo, se va quemar en el fuego…..
-¡V ASTA YA SAORI!- grito Shaka
-son los nervios….los nervios le hicieron decir eso, es normal en un jovencito de su edad, olvídalo Shaka, no le hagas caso- dijo Shion-
-¡cuales nervios!, no se quiere casar, no te cases Shaka, ni tu DM, si una manzana está podrida, pudre a las demás, yo sé lo que les digo, los crie desde que nacieron, tiene que hacerme caso-
-no…no…noooo, con Alde, no te metas, el es un buen muchacho y yo me voy a casar con el- dijo DM.
-¡ya!, Saori, Ala te va a condenar por esa lengua que tienes, entiendo Shion, no se preocupe- en el fondo de su corazón noto el desprecio de Mu, pero decidió olvidarlo, lo avía embrujado y no iba a desistir de la boda.
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Mu llego a su casa, subió las escalera rápido y entro a su cuarto, y se tiro en la cama para llorar amargamente -¡Saga!- dijo Mu levantándose de la cama, se limpio las la grimas con un pañuelo blanco, salió de la habitación. Con mucha cautela, se dirigió al despacho de tío Doko, al entrar tomo el teléfono y marco al hotel Luxor.
-Saga, no digas nada, no tengo mucho tiempo, nos vemos en las ruinas, mañana a las mismas horas de diario-
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En el hotel Luxor, Saga se quedo muy preocupado, noto que Mu estaba llorando, se dispuso ir a la casa de tío Doko, sin impórtale lo que le pudieran suceder, pero su plan se vino abajo cuando Milo se lo llevo al restauran donde se encontraba su padre con su novio, esperándolos.
Aioria y Afrodita, se encontraban muy acaramelados, riéndose y acariciándose, cuando Milo y Saga llegaron, Afro, empezó a planear la boda, el coctel seria en el centro de convecciones Olimpo, invitarían a mas de 1000 personas, sin incluir a los noticieros, quería aventar la casa por la ventana, su ajuar seria traído de Paris, su luna de Miel, seria en Venecia. Aioria sonreía y se llenaba de gozo su corazón tan solo de ver sonreír a su amado. Pero el que no estaba feliz era Saga, no porque no quisiera que se cara con Dita, de hecho le caía muy bien, sino por la forma en que trato a su hermano.
-padre, no te sientes mal, tu aquí muy feliz y Kanon triste por tu comportamiento, no tengo nada en contra tuya Afro, si mi hermano dijo la verdad o no, no sé, pero lo que sí creo es que si vas hacer parte de esta familia, deberías tratar de no echarle más leña al fuego y convencer a mi padre de que perdone a Kanon-
-¡SAGA!, no me vengas con eso, si no quieres que me enoje también con tigo-
-tranquilízate Aioria, Saga tiene razón, no puedes estar peleado con tu propio hijo-
-no quiero ofenderte Milo, ¡PERO NO TE METAS!, esto es un asunto familiar-
-¡A…a!, ahora resulta que yo no soy parte de esta familia-
-¡BASTA YA!-, dijo dita golpeando con sus puños la mesa –venimos a pasárnosla bien, no a discutir, tienes razón Saga, yo me siento culpable por lo que paso, pero no puedo convencer a tu padre, tu lo conoces mejor que yo, y cuando toma una decisión, no hay poder humano que lo haga cambiar de opinión-
-amor, tranquilízate, no te alteres te va hacer daño- dijo Aioria preocupado- ¡ya oyeron!, se acabo la discusión y si no te parece Saga, sigue el camino de tu hermano-
-está bien padre, por lo menos prométeme que vas arreglar las cosas con Kanon cuando lleguemos a Grecia-
-lo pensare-
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Al día siguiente Mu le pidió a Shion que lo acompañara al mercado, pero Shion está muy ocupado en la cocina, Mu insistió tanto que Shion le dijo que se llevara a un criado y así salió de su casa. Ya en el mercado Mu le dijo a sirviente, que lo esperara en ese lugar, que él tenía que ir a otro local, poniendo de escusa que no dejaban entrar al criado y así se dirigió a las ruinas.
-me besas- dijo mu mirando los zafiros de Saga, Saga se acerco a él, puso sus labios en los de Mu, besándolo muy tiernamente, como si fuera una flor que la tuviesen que tratar con delicadeza, poco a poco el beso paso hacer más ardiente, teniéndose que separar por la falta de oxigeno.
-Mu- dijo Saga con una dulce voz, expresando, todo el amor que sentía por el carnerito.
-me van a casar-
-¡a casar!-
-tío Doko arreglo mi boda con alguien que no conozco, estoy desesperado, Saga, jamás volveré a verte- dijo Mu sollozando.
-¡pero no puede hacerte eso!-
-por supuesto que si puede, si quiere casarme me casa-
-no lo entiendo Mu, estamos en el siglo veinte uno-
-aquí, las costumbres son muy diferentes que las tuyas, por eso vine aquí, a besarte, Saga…no me quiero morir sin saber cómo es un beso de amor, no tengo salida estoy en manos de mi tío-
-hay que volver a Grecia-
-ya no tengo mi casa de Grecia-
-la mía- contesto Saga.
-pero así, sin casarnos ¡no!, prefiero obedecer a mi tío-
- Mu, llegando a Grecia nos casamos- dijo Saga quitando un hilo de cabello del rostro.
-Saga, tú…me amas-
-¡te amo!, Mu, ¡te amo!, cásate con migo-
Saga cerro la distancia, entre los dos y alcanzo sus hombros con sus manos, cuando lo miro noto que el bajo sus ojos con timidez, sería su primera vez, le sobre cogía el corazón con un inmenso gozo, pero también se preocupo enormemente, no quería asustar a ese joven carnerito, al cual se había enamorado desde la primera vez que lo miro, levanto su mentón con una de sus manos, usando la otra para abrazar su diminuta cintura, le dio un beso ligero como una mariposa que se para en una flor. Mu levanto sus ojos acuosos verdes para mirar los de Saga, le dijo que continuara sin ocupar palabras. Pronto las caricias de Saga se volvieron más ardientes, sacándole a Mu muchos suspiros, Saga empezó a desabotonar la camisa de él, una vez terminada su labor, acostó a Mu sobre el piso, llenándolo de besos y caricia que desato un torrente de emociones en el. Mu estaba confundido, le gustaba lo que Saga le hacía sentir, pero estaba asustado, no sabía claramente el porqué de esas sensaciones. Cuando Saga noto que el miembro de Mu se endureció, le abrió la cremallera quitándole los pantalones y dejándolo en ropa interior, con su mano diestra acaricio en sima de unos pequeños bóxer, el miembro, Mu gemía de placer, se retorcía de un lado a otro, Saga apiadándose de mu le quita los bóxer y con su mano agarra el miembro erecto, para devorarlo de una tajada.
Mu se estremecía, temblaba, gemía y jadiaba de placer, sintió dentro de, él una especie de explosión, soltando en la boca de Saga el néctar tibio. Saga saboreo el regalo de Mu dejando un poco en su boca, para darle un beso a él. Saga se desnudo por completo, acostándose y subiendo encima de, él a Mu, para introducir un dedo en la entrada de él. Mu grito de dolor, se aferro más a la espalda de Saga, Saga lo beso para tranquilizarlo, luego sintió el cuerpo de Mu relajado eh introdujo otro dedo, moviéndolos en círculos, Mu gemía de placer indicándole a Saga que ya se estaba a acostumbrando, enseguida introdujo un tercer dedo, hasta tener bien dilatada la entrada. Saco los dedos para sustituirlo por su pene, y empezó a introducirlo muy despacio para evitar lastimar a su carnerito, hasta que ya estaba todo adentro, ¡dioses!, pensaba Saga, era tan estrecho, empezó sacarlo y a merlo despacio, poco a poco fue más rápido, moviendo las caderas con agilidad, Mu jadiaba y gemía, -¡ya no aguanto!- dijo entrecortado, Saga le decía que aguantara un rato más, hasta que los dos al mismo tiempo sintieron aquella explosión de sensaciones, derramando su semen dentó de Mu.
-ahora como voy a volver a mi casa, si el tío Doko se entera, no sé que sea capaz de hacerme, ¿Por qué tuve que venir?, ¿porque esta locura?-
-nada te va a suceder, mañana salimos para Grecia-
-¿¡como!? No tengo mi pasaporte, mi tío lo tiene junto con los demás documentos-
-¡mi padrino!, el conoce a mucha gente, el puede conseguir un pasaporte para ti, yo sé que si le dijo nos va ayudar, vamos al hotel-
-¡no!, no puedo escapar ahorita, la boda de Alde y mía esta programada para la siguiente semana, si escapo, el novio de mi primo ya no se va a casar con él y Alde me va a maldecir y yo no quiero que me maldiga-
-preocúpate por ti amor, entonces mañana nos vemos aquí a las 9 de la mañana, hoy hablo con Milo y nos largamos de aquí-
-¡Saga!- dijo Mu abrazándolo y besándole.
Cuando Mu regreso al mercado, se topo con la sorpresa de que el criado ya no estaba, se preocupo Mucho, pensó que si ya se había regresado a la casa, el tío Doko se pondría furioso por no llegar con él. Con todo el miedo que sentía se dispuso a ir a su casa, siendo recibido por un tío furioso.
-¿de dónde vienes?, ¿Por qué el criado regreso sin ti?, ¡CONTESTA!- grito Doko levantando la mano.
-Sidi, no lo golpe- dijo Shion protegiendo a Mu.
-perdón…ti…tío, me perdí- contesto Mu tartamudeando.
-¡NO TE CREO!, ¡DIME LA VERDAD!, con quien….
-¡es la verdad tío!-
-Sidi Doko, eso puede ser cierto, acuérdese que Mu todavía no se aprende el camino de regreso- dijo Shion abogando por Mu.
-Mmm…eso que te valga, de hoy en adelante no sales de esta casa si Shion no te acompaña, tus ojos, tu lengua y tus manos, van a decir todas las cosas malas que hesites aquí en la tierra y tu castigo va ser arder en las llamas de fuego del infierno y nunca tendrás paz-
Cuando se retiro Sidi Doko, empezó el reclamo de Shion
-estabas con el occidental, verdad-
Silencio
-eso quiere decir que si, ten cuidado, Sidi puede llegar a sospechar si no es que ya sospecha-
-co…como te enteraste, quien te dijo-
-mientras tú vas, yo ya fui y regrese dos veces, si Sidi Doko se entera sabes lo que te va hacer, te va encerrar en tu cuarto hasta que te pudras de viejo, por tu bien mas te vale que no lo vuelvas a ver, dijo Shion marchándose.
Mu se quedo pasmado, nunca imagino que Shion se fuera a enterar, pero algo dentro de él le decía que podía confiar plenamente en Shion.
En la noche ya que todos en la casa se avían acostados, Mu, se levanto de su cama observando que Alde estuviera bien dormido, para dirigirse al cuarto de Shion.
-Shion, puedo habar con tigo- dijo Mu tocando la puerta
-pasa muchacho-
-¡ayúdame!, es cierto que estoy enamorado, por favor, ayúdame a escapar con Saga-
Shion se quedo sin palabras cuando oyó, -¡Saga!, así se llama el occidental, es el muchacho que vino con el amigo de Sidi, verdad-
-Shion, tú me entiendes, alguna vez, tuviste mi edad, sueños, alguien a quien amar con toda el alma-
-yo…no sé, cuando llegue a esta casa era un niño y me mandaron a la cocina, puro trabajar, trabajar y trabajar- decía mientras una lagrima rodaba por la mejilla, -alguna vez un empleado de Sidi, quiso casarse con migo, pero en ese momento nació Alde, su madre falleció a dar a luz y a mí me mandaron a marruecos a criarlo, no me arrepiento, Ala tiene en una libreta escrito nuestro destino, por algo pasan las cosas, mañana Sidi Doko, va a viajar a Giza-
-¡gracias!, muchas gracias, sabía que podía contar con tigo-.
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Kanon se encontraba en el departamento de su padrino, arreglándose para ir a Rodorio, cuando salió del departamento se subió a su auto, para dirigirse a la pista aérea. Llegando a la pista aérea fue recibido por el controlador de tráfico aéreo, y lo llevo al helicóptero que utilizaría, dándole unas pequeñas instrucciones, antes de partir. Kanon se despidió con un fuerte apretón de manos y abordo el helicóptero, lo prendió y empezó a elevarse.
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Saga se encontraba esperando a Mu en las ruinas.
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Mu se encontraba en su cuarto esperando la señal de Shion, observaba el reloj, cada rato, ya marcaban las 9:00 am, de seguro ya esta esperándome, pensó. 9:20 marcaba el reloj, ya se encontraba desesperado en eso llega Shion para decirle, ”horita es cuando”, Mu agarro un pequeño morral en donde llevaba unas cuantas cosas, Shion bajo las escaleras primero para mirar que no estuviera nadie presente, abajo y con el camino libre le dijo a Mu que bajara, ya estaban a escasos centímetro de la puerta, cuando se apareció Alde entreteniendo a Shion, Mu se escondió detrás de una pared apretando fuertemente su morra para que no lo descubrieran, después de un rato Alde se fue a su habitación, dejando salir a Mu.
-nunca voy a olvidar lo que hiciste por mí, te quiero mucho-
-que Ala te proteja y me proteja, es un “jaram” muy grande lo que estoy haciendo, que seas muy feliz con el occidental, ve con dios- dijo Shion abrasando a Mu.
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10:00 am marcaba el reloj, sintió un dolor en el pecho -¡MU!- grito Saga tratando de sacar el dolor por ser plantado, salió corriendo des las ruinas, pero se paró a mirar un caballo negro, sin pensar que iba hacer, se subió al caballo y empezó a galopar en dirección al desierto.
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Kanon se encontraba piloteando feliz porque ya casi iba a ver a su gran amor, lo llevaría a pasear en el helicóptero por todo Rodorio, la voz del controlador de trafico aéreo, lo saco de sus cavilaciones para decirle que el clima estaba a punto de cambiar, iba a empezar una tormenta con fuertes vientos, y para que buscara un lugar plano para bajar mientras pasaba la tormenta, Kanon ignoro por completo lo que le dijeron, le faltaba medio camino, si alcanzo a llegar, pensó.
El cielo empezó a obscurecerse, y un fuerte viento empezó a soplar, unas gotas empezaron a caer al parabrisas, diciéndole que la tormenta estaba a punto de comenzar.
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Una tormenta de arena cubrió a Saga que no dejaba de galopear, siguió y siguió, sin importarle nada, con una de sus manos trato de cubrirse los ojos para evitar que entrara mas arena, el caballo se asusto con la tormenta y empezó a descontrolarse, Saga intentaba controlarlo con la mano que sostenía la rienda para que no reparara. (Que se levantara).
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Kanon trataba de controlar el helicóptero, la lluvia era demasiado fuerte, no lo dejaba ver a donde se dirigía, no obstante unas chipas salieron de la tabla de control, provocando que estallara, Kanon soltó el volante, para cubrirse el rostro pero el helicóptero se fue en pique impactándose contra la tierra y explotando.
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El caballo reparo, tumbando a Saga, al caer, se golpeo fuertemente en cabeza, Saga trato de pararse pero no pudo, se sentía muy aturdido, levanto la cabeza y miro a una caravana del desierto, acercándose a él, agudizo su vista y miro a un hombre con un pañuelo envuelto en la cabeza y tapado de la nariz para abajo con un velo, no sabía lo que estaba pasando, todo le daba vuelta, pero al mirar a ese hombre, miro en él a su hermano Kanon, como si se estuviera despidiendo de él, sin poder sostener mas la mirada, se desmallo.
Ya estaba escrito.
El destino decidió separarnos.
Todo el amor que sentíamos.
Se perdió, en el tiempo.
Ya estaba escrito
Dos corazones, latiendo.
En uno.
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