Gaara se quedo en el mismo lugar, no sabia que sentir, no sabia por que lloraba, así que lo único que se le ocurrió en ese momento fue correr hasta su motocicleta, se subió y arranco.
Quería despejar su mente, quería olvidar todo lo relacionado a lo que acababa de ocurrir, así que aumento la velocidad. No quería pensar en las palabras que el rubio le había gritado.
Solo quería perderse y poder decidir que hacer, en la mañana, el último día en que estaría Sasori, su único amor en Japón.
***
No tuvieron clases debido a que todos los estudiantes de nivel prepa estaban en el aeropuerto para despedir a Sasori, todos les daban sus buenos deseos y algunos lo abrazaban.
Sasuke, Neji, Shino y Naruto estaban en la sala de espera, ya que ellos serian los últimos en despedirse del modelo. Naruto estaba realmente deprimido y sumido en sus pensamientos.
- El aura que te rodea es negra, ¿De que sirve que nosotros, el F4 brillemos si tu nos vienes a opacar?…
Sasuke había notado su tristeza casi desde que piso el aeropuerto, sin embargo no le había querido preguntar por miedo a que terminaran peleando, pero ya no podía mas, deseaba poder ayudarlo a recuperar el brillo de esos hermosos zafiros.
- Ne, Sasuke – estaba tan sumido en sus pensamientos que no se había dado cuenta que había usado el nombre de pila de su enemigo.
- Dime – su corazón comenzó a latir con rapidez cuando escucho de esos labios su nombre con tanta familiaridad.
- ¿Puedo hacerte una pregunta? – de verdad que su tristeza era palpable, incluso en su voz.
- De que sirve que te diga que no si como quiera lo harás – su pose era la de siempre, fría e inmutable, sin embargo por dentro sentía curiosidad de saber de que quería hablar el rubio – compórtate como siempre, esto no es propio de ti.
- ¿Suprimirías tus emociones y no los expresarías nunca, con tal de que la persona que amas sea feliz? – sus ojos estaban fijos en el suelo y no supo por que pero termino por decir lo que sentía - Cuando amas a alguien y tienes que dejarlo ir, duele aquí – tocándose donde está su corazón – además de sentir un nudo en el estomago, ¿Qué se puede hacer para que ya no duela?...
- Esas son dos preguntas y lo que haría es estar con esa persona, si uno ama a alguien debe de luchar para conseguir su amor, de esa manera ya no te dolerá su perdida, debes dar todo y si ves que no es suficiente entonces debes esforzarte mas – se lo decía con total seguridad – además de que siempre vivirás en el que hubiera pasado si se lo hubiera dicho y eso te mataría mas lentamente…
- Jeje, para ser una persona muy fría, pareciera que conoces del tema – suspira – sabes te admiro, yo no creo ser capaz de luchar por la persona que yo amo – su tristeza se reflejaba en sus ojos.
- Tal vez no necesites luchar mucho, tal vez esa persona ya está enamorada de ti – era más que obvio que estaba hablando de él.
- No lo creo, el ya está enamorado de otro persona – sus ojos eran de tristeza total.
Sasuke estaba a punto de decirle algo, pero se detuvo al ver que Naruto de repente se había levantado y comenzaba a caminar hacia donde se encontraba Sasori.
- Naruto-kun, me alegra que estés aquí – le dijo dándole un abrazo – se que esta es la ultima vez que nos veremos a si que espero y me permitas darte algo…
- No tienes por que…
- Por favor, como ultimo favor quiero que aceptes esto – le dio una bolsa – se que no estás acostumbrado a este tipo de ropa, pero sé que se te vera bien.
- Muchas gracias Sasori-san.
- Naruto-kun, prométeme que los cuidaras – le sonrió
- Hare lo que pueda – le dijo sinceramente.
No sabía que mas decirle, ya que aun quería que se quedara, pero en parte tenía razón Gaara, él no tenía por qué meterse en la relación que tenían esos dos.
- Neji, eres el mas noble entre los cuatro, no hagas cosas de las que después puedas arrepentirte – el los vio crecer por lo que los quería como si fueran sus hermanos pequeños.
- Así lo hare, cuídate – después de eso le dio un abrazo.
- Shino, te recomiendo que dejes de jugar con los sentimientos de las personas, un día encontraras a alguien y el te hará ver lo equivocado que estas…
- Sasori, está equivocado – le dio un abrazo, el pelirrojo ya no dijo nada.
- Sasuke…
- Sasori, ahórrate los comentarios… - le dijo en tono frio, sin embargo le dio un abrazo de despedida.
- Frio como siembre…
Escucharon el llamado a los pasajeros, por lo que todos le dieron los últimos abrazos a la persona que ya no volverían a ver. Sasori durante el trayecto volteaba a los alrededores, sinceramente le había dolido el que su hermano, amigo y casi hijo no hubiera ido a despedirlo.
Los chicos al ver que Sasori se alejaba para tomar el avión comenzaron a caminar hacia la salida, sin embargo el F4 llevaban su conversación…
- Bastardo despiadado, ¿Por qué no llego? – Neji no podía creer que Gaara fuera a dejarlo ir sin si quiera despedirse.
- ¿Qué les dije? – Sasuke, les había dicho que no iría – ustedes dicen que tengo la personalidad mas cruel, pero yo les dije que el que tenia la personalidad mas malvada era Gaara.
- Parece el mas tranquilo, pero cuando te da la espalda muestra lo aterrador que es – Shino se acomodo los lentes.
- Tal vez le afecto demasiado así que prefirió no venir… - Neji estaba preocupado por su amigo a pesar de que su rostro no mostrara ningún tipo de sentimiento.
- Saben que es de mala educación hablar de alguien a sus espaldas, con estos amigos…
Ya no dijo mas, todos se habían detenido en cuanto escucharon la voz inconfundible de su amigo y los tres tenían una pequeña sonrisa en el rostro. Sin embargo naruto, comenzó a desahogarse…
- ¿Por qué llegas hasta ahora? – en su voz había rabia – lo dejaras de ir así de simple, sin decirle lo que sientes, prefieres morir por culpa de esos sentimientos, ese es todo el amor que dices profesarle, ¿Por qué no lo sigues?, ¿Por qué no vas detrás de él?, ¿Qué esperas?, ¡date prisa!...
- Naruto – el rubio pensaba seguir con sus reclamos para hacerlo entender que debía pelear por lo que el otro amaba, sin embargo al escuchar por primera vez su nombre de labios del pelirrojo se quedo pasmado – eres un chico especial – después de decir eso le enseño el boleto de avión que traía consigo – Es para el vuelo que viene – se sonrió al ver la cara que había puesto el de ojos zafiro.
- Gaara, ¿Desde a qué hora estas aquí?...
- Como desde hace tres horas Neji, ¿Por qué la pregunta?
- Llegaste antes que nosotros – se encontraba sorprendido, pero como siempre no lo demostraba.
- ¿Dónde estabas?, te estuvimos buscando por todos lados…
- Mmm, detrás de esa columna – le señalo el lugar.
- Me alegra de que vallas detrás de él – el blondo estaba contento, sin embargo la tristeza de saber que probablemente no lo volvería ver, lo consumía, sin embargo decidió no demostrárselo al pelirrojo.
- Todo te lo debo a ti – lo abrazo de forma tierna y le dio un beso en la frente – cuídate, ya no estaré cerca para poder ayudarte, eres el chico mas interesante, es un alivio haber conocido a un chico como tu, amable, sincero y sin malicia.
Después de decir eso, tomo una pequeña maleta y se fue, dejando a Sasuke molesto por el beso que le había dado al rubio y aun rubio algo sonrojado por lo que acababa de escuchar…
- ¡GAARA! – le grito el azabache antes de que se perdiera de vista - ¡suerte y no dudes en hablarnos si ocurre algo, de inmediato estaremos ahí!, ¡Cuídate!
Gaara solo levanto su brazo agitándolo, para demostrarle que lo había escuchado, después de eso, esperaron desde la parte de afuera, del aeropuerto a que el avión despegara. Después de que vieron el suceso, Sasuke se fue hasta donde estaba Naruto, este se había quedado un poco retirado de donde se encontraban ellos.
- Naruto – le dijo volteándolo para que lo viera a los ojos y poniendo sus brazos a los lados para que no pudiera escapar – voy a decirte una cosa y quiero que la escuches bien porque será la última vez que te lo diga.
Naruto estaba completamente en blanco, ya que la actitud del azabache lo descoloco, por lo que se aferro a la malla que protegía el lugar.
- Dime – fue lo único que alcanzo a decir, ya que Sasuke estaba comenzando a invadir su espacio personal.
- Yo… - se acerco a su oído para que solo el escuchara.
Pero con lo que no conto el Teme es que en ese preciso momento paso un avión y por ese motivo a pesar de la cercanía que tenia con el rubio, este no escucho nada.
***
Naruto se sentía triste, a partir de ese día ya no vería al pelirrojo, ya no estaría ahí para ayudarlo o para animarlo con una simple mueca, ya no estaría para oírlo tocar, sin embargo, decidió poner todo su empeño en no dejarse caer ante nadie, en dejar la tristeza aun lado, tomo su mochila y salió de su casa con decisión, no se dejaría pisotear ante ninguno.
Ese día su papá lo fue a dejar en un carro prestado, por lo que solo lo dejo cerca de la escuela, el blondo caminaba de lo mas tranquilo, cuando de repente un auto se apareció tapándole el paso, alzo la vista para ver a la persona que se bajaba del auto…
- Hola, dobe, valla coincidencia no – la verdad es que había estado esperando, desde la puerta de su casa, los había seguido en su auto, por eso pudo taparle el paso, decir que era una coincidencia y ofrecerse a llevarlo hasta la escuela.
- Ahí no – fue lo único que alcanzo a decir antes de dar media vuelta y salir corriendo.
Sasuke lo único que alcanzo a realizar después de ver la huida de Naruto fue seguirlo, así que los dos se encontraban en una carrera aparentemente sin fin, lo que ninguno de los dos se dio cuenta es que en cuanto comenzaron a correr un auto deportivo ultimo modelo color plata que se dirigía hacia el colegio, había frenado y dado vuelta en u.
Naruto corrió con todas sus fuerzas, había pensado dar vuelta en la esquina e intentar perderse entre las pocas personas que estarían ahí, sin embargo en cuanto dio la vuelta avanzo sol unos 10 pasos mas antes de detener su carrera y ver a un hombre alto vestido de forma elegante y con el cabello negro, largo y brilloso atado en una coleta baja.
Se quedo se piedra, y para su sorpresa su cuerpo parecía no reaccionar a pesar de que lo único que podía ver de ese hombre era su espalda.
- ¡NARUTO! – escucho la inconfundible voz de sasuke.
Se estaba acercando a donde el estaba, pero su cuerpo seguía sin querer moverse, pero vio que el hombre movió su brazo y sus dedos se juntaron, lo vio en cámara lenta, el rostro del pelinegro se dejo ver y el hombre le soltó un puñetazo que por el impacto y la velocidad, el azabache menor quedara tirado.
Sasuke se sorprendió, y alzo sus ojos para ver el rostro del que se había atrevido a pegarle y en cuanto lo vio su rostro se compuso en una mueca.
- ¡ESO DUELE ANIKI!... – el moreno alto solo se quito los lentes que traía y le dedico una sonrisa de superioridad.
¿Aniki?, resonó en la cabeza del rubio, no podía ser…
Pero se callo al ver como el hombre, simplemente le daba una patada en el rostro a Sasuke y apenas pudo reaccionar, cuando lo tomo del brazo y lo subió al auto deportivo, el rubio prefirió no decir nada y dejarse hacer, la verdad es que no quería terminar como el Teme.
Itachi en cuanto estuvo frente al volante arranco derrapando las llantas debido a la alta velocidad, el Kitsune rezaba por llegar vivo a donde fuera que lo llevara.
- Sabes, Naruto-kun hace días que quería conocerte – la voz varonil pero algo delicada le sonó algo extraña.
- ¿Cómo es que…
- Se tu nombre? – le dijo con una sonrisa de medio lado – Sasori, me comento del pequeño descubrimiento de Gaara, algo que me pareció sinceramente raro, me conto todo lo que el mapache le platico, por lo que me dio curiosidad y quería conocerte, así que hoy te saltas clases, pasaras el día con migo.
- Pero es que ya he faltado mucho y no voy…
- Todo esta arreglado, ya veras que no pasa nada y en cuanto a si te atrasas, yo te ayudare a estudiar, le dije a mi marido que tenia ganas de pasar unos días con mi familia y mi lindo rubio me lo concedió.
- ¿Esta casado? – le dio curiosidad.
- Si, me case muy joven, tendría 18 años cuando contraje nupcias con mi esposo Deidara - sonrió algo melancólico.
- Pero si usted es el hermano mayor, ¿Por qué Sasuke es el heredero? – no sabia el motivo, pero su boca soltaba las preguntas ella sola.
- Jajajaja, bueno veras, yo puedo engendrar, por eso mis padres prefirieron arreglar un matrimonio para mi…
- Yo también puedo…
- ¿Así?, pues al parecer nos entenderemos mejor de lo que pensé…
Le sonrió de forma conciliadora, lo llevo a un restaurant para que desayunaran, después lo llevo de compras y le regalo, ropa y artículos, aun que el rubio no quería, Itachi lo logro convencer, ambos platicaban de sus vidas, pero el que mas lo hacia era Naruto.
El azabache se intereso por el chico y decidió que si su hermano realmente estaba enamorado de él, lo ayudaría a que estuvieran juntos, el haría lo que fuera por la felicidad de su hermanito, el no dejaría que su madre dispusiera de su vida así como había echo con la suya.