No dijo nada, ni siquiera se giro, no había necesidad, sentía la presencia de los demás alumnos detrás de el.
- ¡¡¡TARJETA ROJA!!!! – Gritaba un chico mientras corría por todos los pasillos de la escuela – A UZUMAKI NARUTO LE HAN DADO UNA TARJETA ROJA.
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- Hoy mismo se tienen que deshacer de él – decía Sasuke de manera fría a sus amigos.
Estaban en su comedor particular tomando té, este era servido por alumnos a los que tenían de meseros, Neji tomaba su tasa con delicadeza mientras olía el agradable olor a menta que despedía, Shino bebía la infusión poco a poco saboreándolo y al igual que Shino bebía de su tasa, pero él se encontraba sentado en el barandal del pequeño balcón que tenían en esa área. Después de unos breves minutos Neji y Shino se miraron por unos segundos para después ambos dejar sus tasas en la mesa para iniciar una conversación…
- Esta es la primera vez que un chico lindo recibe la tarjeta… - decía Shino
- Sin contar con que es un doncel, es la primera vez que conozco a uno de cerca, son muy pocos los que actualmente hay… - Neji había investigado un poco al nuevo estudiante.
- Eso no me interesa – Sasuke parecía molesto – se atrevió a gritarme, algo que jamás he permitido y menos a alguien tan insignificante como el.
Neji y Shino se llevaron sus tazas a sus labios pensando en lo infantil que a veces se portaba Sasuke, mientras Gaara solo lo miraba fijamente.
***
Naruto solo se quedo de pie esperando a que algo pasara, se giro lentamente y vio como era rodeado por los chicos. Pero para su sorpresa cada uno se retiraba a sus salones debido a que la campana comenzó a sonar.
A Naruto se le hizo raro pero aun así decidió estar alerta no creyó que realmente lo fuera a pasar bien después de lo sucedido ayer. Se dirigió su salón y al llegar a la puerta la corrió una vez dentro. Al momento, sólo sintió como algo duro pero que al estrellarse en su cabeza se rompía.
Toco su cabeza desconcertado y vio que era clara de huevo, lo que le habían lanzado a la cabeza había sido un huevo, no solo uno se corrigió a si mismo ya que inmediatamente comenzó a sentir como mas de esos objetos blancos se estrellaban contra el, en menos de un minuto estaba totalmente sucio, escuchó pasos aproximándose, y no fue el único porque el ataque cesó de inmediato. La puerta se abría de a poco…
- ¿Uzumaki-kun que espera para tomar su asiento…?
- Pero que acaso no se da cuenta ttebayo – le preguntó alterado.
- Uzumaki-kun la clase va a comenzar valla a su asiento…
- Es que acaso no va hacer nada ttebayo, ellos me arrojaron…-intentó excusarse molesto.
- ¡Uzumaki-kun! – gritó el maestro – salga de inmediato del salón…
Naruto con toda la dignidad salió del salón, era inútil tratar de convencer a un maestro que le ayudara, estaba claro y más cuando recordó que los mismos maestros les temían a esos cuatro idiotas.
Corrió nuevamente, quería alejarse para poder planear con calma lo que haría, llegó a las mismas escaleras que la vez anterior, pero no entró, algo lo detenía.
Un sonido, alguien tocaba, una melodía hermosa y triste, un violín, ¿quien en esa escuela podría tocar de esa forma?, sintió curiosidad y lo mas despacio que pudo abrió la puerta y se topó con la imagen mas hermosa que se hubiera imaginado.
Gaara, tocaba con los ojos cerrados un hermoso violín, sentía que las notas salían directamente de su alma, un alma triste y que deseaba encontrar la calidez que perdió, sin pensarlo Naruto se fue acercando poco a poco hasta que estuvo a un lado de él.
Inmediatamente se vio sumergido por la música y cerró los ojos para poder sentir más de los deseos de quien la interpretaba de manera tan sincera, quedando tan sumergido en la magia que no se dio cuenta cuando el pelirrojo dejó de tocar.
Sin embargo el otro si se dio cuenta de que alguien estaba ahí, se giró para verlo detenidamente, sin embargo la expresión melancólica de su rostro jamás cambio, viendo que el chico al parecer seguía en su mundo decidió hablarle para dejar algo en claro.
- Oye - su voz sonó fría y algo distante.
Naruto al escuchar la voz abrió los ojos de repente y giró para toparse con unos ojos aguamarina que lo miraban directamente, Gaara notó las manchas de su ropa, de hecho aun escurría algo de un liquido amarillo por su rostro y tenia pedacitos de cascarones en su cabello y se acerco poco a poco, haciendo que Naruto se sonrojara de inmediato, este no le dio importancia y comenzó a quitar los cascarones de su pelo, después sacó un pañuelo de su pantalón y comenzó a limpiarle su rostro.
- Disculpa ttebayo– Naruto apenas y si pudo articular esa palabra ya que sentía su corazón latir demasiado rápido.
- Sabes como se preparan los Hot Cakes…
Esa pregunta descoloco y extrañó mucho a Naruto pero aun así decidió contestarle.
- Se bate harina, mantequilla, leche y huevo, es como si fueran hacer un panque ttebayo…
- Pues parece fácil, bueno me voy… - decidió que lo mejor seria aclararlo después y sin mas como dijo subió las escaleras y se fue dejando a un muy sorprendido Naruto.
Tan sorprendido estaba que no se dio cuneta que Gaara había dejado su pañuelo en el barandal, pero antes de que el viento se lo llevara lo tomó y lo guardó en su bolsa. Estaba por irse cuando un sonido le llamo la atención, bajo la vista y encontró una revista abierta por la mitad, donde se veía a un joven muy guapo vestido de chef preparando unos Hot Cakes, pensó que tal ves por eso le pregunto, sin pensarlo tomo la revista y se la llevo con el para devolvérsela en otra ocasión.
Cuando llegó nuevamente al salón su escritorio había desaparecido junto con sus cosas, sabía quienes habían sido así que ya no dijo nada, solo salió corriendo y lo encontró todo en el basurero, se acerco para tomarlo, pero sintió como algo caía sobre el, vio que en la planta de arriba sus “compañeros” tenían el bote de desperdicio de la cocina en sus manos, estos se reían y noto como la chica soltaba el bote alcanzo a esquivarlo antes de que este lo golpeara. Al parecer ese día iba a ser de lo más largo.
Durante las clases, en cada momento que el profesor parecía mínimamente distraído, sus compañeros le arrojaban bolas ensalivadas de papel, que iban a impactar a su rostro.
- Quieren dejarlo ya ttebayo… - se levantó de su asiento
- Uzumaki-kun estamos en clase – al escuchar eso volvió a sentarse.
Eso ya no lo sorprendió, sabía que él estaba solo contra esa sección, bueno no completamente solo, contaba con su amiga Sakura o eso creía. Cuando termino la clase salió al patio y se sentó por un momento en una banca de los tantos jardines con los que contaba el instituto, cuando vio pasar a Sakura.
- Sakura-chan ttebayo – le llamó con voz alegre.
Pero esta sólo lo vio a los ojos agachó la mirada y camino recto, sin decirle nada, esto lo sorprendió mucho pues no pensó que la muchacha reaccionara de esa manera y más porque el se había metido en ese problema por culpa de ella. De pronto, sintió como alguien le arrojaba agua por la espalda empapándolo por completo, se giró y se topo con tres personas que él ya había notado y sabia eran sus compañeras.
- Vaya hasta la chica que defendiste sabe que lo mejor es alejarse de ti...
- Una sabía decisión por su parte...
- Porque no te largas de una vez pobretón, tú no perteneces a este colegio...
- No les daré gusto ttebayo– no Naruto Uzumaki jamás se daría por vencido – y de una vez les digo Karin, Ten Ten e Ino que tendrán que acostumbrarse a mi presencia ttabayo– después de decir eso se marcho, mucho más altivo de lo que sus compañeras esperaban.
Fue a otro de los jardines, pero se arrepintió por que de inmediato comenzo a ser perseguido por toda la escuela, al parecer le pasaría lo mismo que Asano-san, pero él no era tan débil. Luego de una larga carrera se veo rodeado por cinco chicos. Los cuales lo miraban de manera cruel y arrogante, eran más altos que él, no los había visto así que suponía eran de un grupo diferente.
- ¿Aun por aquí? esperábamos que te fueras desde la mañana...
- Eso ni lo piensen tteballo...
- Sabes no debiste gritarle a Uchiha-sama...
- Ni menciones a ese idiota con complejo de rey ttebayo– estaba molesto, furioso
- Eres un irrespetuoso – el chico se lanzó contra el.
Pero Naruto lo esquivó, y le dio un derechazo que dejó tirado al tipo, los otros al notarlo sin miramientos se lanzaron juntos contra Naruto, pero descubrieron que ese doncel lo único débil que tenía era su apariencia porque estaba claro que sabia defenderse bastante bien.
Estaba cansado, todo el día no habían dejado de molestarlo, pues bien, si ese imbécil quería guerra, guerra tendría y mas le valía estar preparado.
Se fue al salón y tomo de su carpeta una hoja color rojo y comenzó a escribir, para después dibujar algo.
En la hora de la salida Naruto llevaba una hoja de color rojo y en cuanto vio a la cusa de sus desgracias se encamino hacia él, noto que estaba al pendiente de lo que decían Neji y Shino la situación perfecta así que paso de largo y cuando estuvo a su lado le pego en la espalda la hoja de color rojo y sin decir mas apresuró el paso.
- Sasuke creo que alguien te dejo un hermoso recuerdo – dijo divertido Neji tomando la hoja y dándosela en la mano ya que él había notado la acción del rubio ya que este choco con su hombro sin querer para pasar entre ellos.
Sasuke se hubiera quedado con la boca abierta de no ser quien era, un ser frío y sin expresiones, no sabia que hacer, por primera vez en su vida alguien se atrevía a dejarle algo así:
Teme:
Esta es mi declaración de guerra y espero que estés preparado, porque ten por seguro que no faltare a la escuela sólo para cumplir un capricho a un crío.
El gran y único Uzumaki Naruto.
Y debajo del nombre se encontraba un espiral y debajo de este se podía ver a un zorro, un zorro con los ojos diabolicos perfectamente dibujado.
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