Era un día maravilloso el Wammy ´ s house, hermosas nubes blancas pintaban el cielo azul, las gotas de rocío refrescaban el pasto, los arboles lucían su bello color verde, el sol deslumbraba haciendo que un hermoso paisaje se adueñara del lugar. Los alumnos de la escuela recorrían los pasillos atareados ya que, tenían muchas obligaciones que cumplir, mientras que en una banca, cierto rubio miraba a un chico albino, Con unos profundos ojos negros, parecía tan inocente entre tantas personas, tan puro, tan…, lindo.
¡Las palabras sobraban! Aquel chico blanco como la nieve, con unos ojos negros como el color azabache de la noche, tan misterioso… era tan especial. El rubio aspiro el olor que desprendían las flores de cerezo.
–Si… tan solo te fijaras en mi–suspiró el chico cerrado delicadamente los ojos y apoyando las manos sobre sus rodillas.
–Near– dijo el rubio en un murmullo muy discreto y casi silencioso.
¡Pero claro! Como era de suponerse, el rubio de nombre Mello, no era muy claro o por decir que parecía que lo odiaba, Mello molestaba a Near todas las veces que podía: lo golpeaba, lo insultaba, le reclamaba por cosas que no había hecho.
A Mello le gustaba llamar la atención de manera negativa, como Near no le hacía caso, Mello quería que Near supiera que él estaba ahí, solo quería atención por parte del chico.
Mello, no era muy amable ni bueno que digamos, nadie se atrevía a hablarle, siempre tenía una mirada que intimidaba a cualquiera incluso a los maestros, bueno, tal vez ese era un defecto que tenía y también su ociosa manía de comer chocolate todo el día. A pesar de todo eso, Mello era el segundo en la línea de sucesión para ser el segundo ‘L’, eso quiere decir que, es el segundo chico más inteligente de la escuela, pero… ¿Quién era el primero?
Pues se trataba de Near, a lo mejor a parte de estar locamente enamorado de él, sentía algo de envidia.
¿Y el tercero? Era un hermoso chico pelirrojo llamado Matt, es el único amigo que Mello tiene, ya que, casi nadie le dirigía la palabra.
Mello suele desquitarse con Matt por cualquier cosa.
–…–
La campanilla de La escuela anunciaba la hora del almuerzo, mientras que Mello se despejaba de sus pensamientos, se estiraba y daba un gran bostezo y Near simplemente se levanto del suelo, recogió las piezas de puzle que había en el suelo, Se tardó mucho lo que causó que Mello se ofuscara y se desesperaba un poco, ya todos los alumnos estaban en el comedor, Mello se quedo a solas con Near en el patío…
Pero Near ni si quiera volteó a mirar a Mello y estaba a punto de irse..
–¡Hey enano!– levantó la voz Mello, cosa que hiciera que las palabras de Mello le retumbaran a Near en la cabeza.
–¿si?– preguntó Near con un tono de paciencia y desviando la mirada a Mello
Mello frunció el seño, se paró firme, dio un paso hacia a delante, levantó la barbilla y dijo:
–¿no te vas a ir así como así? ¿verdad?
Near sintió frío en la garganta y como se exaltaba un poco.
–si, ¿por que Mello?
Ese comentario ofendió al rubio, Mello no se quedó de brazos cruzados, caminó hacia el albino, lo tomó con violencia por el cuello de la camisa, lo vió con una mirada amenazadora y lo golpeó en la cara.
Se podían notar los ojos llenos de lagrimas de Near , Mello quedó impactado por su extraordinaria belleza se veía inocente y tierno pero no se sacio de ver al albino llorar de dolor ya que, lo agarro
–¡MELLO! ¡NO! ¡YA DETENTE¡ ¡ME DUELE MUCHO¡
Al final el rubio finalizó con una patada en el vientre del muchacho, sacándole el aire a Near.
Near quedó el suelo llorando y gimiendo de dolor, estaba confundido, no sabía por qué Mello lo trataba de esa manera tan inhumana, Near no tenía amigos que lo consolaran así que se sentía aún más triste
Mello tomó la barbilla de Near con mucha fuerza, lastimándolo,
–si le dices algo a alguien te ira peor, oíste
Near asintió afirmativamente
–¡OISTE!
–si, MELLO
Near se quedó en el suelo llorando y gimiendo, Near sollozaba sin parar y se preguntaba una y otra vez por qué Mello lo trataba así, él no se lo merecía, el no había hecho nada, pero Mello no pensaba igual.
*¿Por qué? ¿Por qué tenía que ser la persona a la que amo?*
Mientras tanto Mello pensaba:
*Por Dios Near ¿no te das cuenta de lo bello que te ves llorando?*
Mello se metió al comedor mientras cierto pelirrojo lo esperaba sentado en una banca reservada especialmente para ellos.
–¡que paso! ¿Dónde estabas Mello?
–eso no importa, ¿compraste mi almuerzo?
–si, aquí esta–decía Matt dándole una casuela con comida
Mientras comían, Mello decidió contarle a Matt lo sucedido con Near.
–Aún no entiendo por que tratas mal a Near ¿el no te hace nada, o si?
–simplemente me cae mal ¿Qué no puede caerme mal alguien?
–si, pero alguien que te haga cosas malas ¿no?
…
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