Capítulo único Si, acepto…
Era un día histórico en la comunidad mágica, se veía un ambiente feliz porque hoy se conmemoraría una de las más grandes fiestas en años, así que toda la gente lucía sus mejores trajes y ni mencionar Hogsmeade, de seguro toda la gente comprando regalos lujosos para los futuros esposos. Pero para mi no era más que un día cualquiera, el día que perdería a la persona que más he amado en este miserable mundo, y ese alguien soy yo Severus Snape.
Aquí estoy, con mi amargura, tristeza, soledad y desesperación leyendo la carta de invitación a la boda del ser que amo: el famoso “niño que vivió”, ahora mayormente conocido como “el salvador de mundo mágico”. En poco tiempo será el esposo del hijo del mortífago Lucius Malfoy, el heredero de Slytherin, esperando que sea la hora exacta para que él pueda decir el famoso “Si, acepto”, para que forme pareja con el chico de cabello platinado y ojos grises, pero ¿Por qué no soy yo el que esta con él en el altar?
Veamos… mi amor por él. Mi inmenso amor surgió desde el primer momento que lo vi, pero nunca lo confesé, de hecho aún es secreto. Siempre lo protegí, intenté que nadie le hiciera daño, inclusive arriesgue mi vida por él, pero nunca se dio cuenta. Lo ame por su gran parecido a padre: James Potter, otra gran decepción, otro amor imposible; pero con Harry era imposible una relación. En primera la edad ¡YO BIEN PODRÍA SER SU PADRE!, y en segunda su novio: Draco Malfoy.
Ellos descubrieron su mutuo amor en su sexto curso. Ambos se gustaban, lo daban a notar a leguas. Así lo veía yo desde años anteriores, pero ese año los dos dieron a conocer su relación, sin importar los comentarios por el mundo mágico o por los chismes que nunca faltaban. A ellos solamente les importaba su amor y ahora se estaban casando para formar su familia feliz; eso fue un golpe bajo para mi, y me pregunto ¿Esto sería distinto si yo le hubiera confesado mi amor? Sinceramente lo dudo…
¿Aún no les he dicho el por qué de una familia feliz? ¡Oh! Bueno, les explicaré. Cierto día, bueno noche, me encontraba patrullando por los corredores del castillo, era el último año de escuela para Harry, mi Harry, así que quería confesarle algunas cosillas acerca me mi, acerca de la persona que amaba, pero era imposible, al menos eso era lo que yo pensaba…
Se sentía demasiado frío, ya que empezaba el invierno. Eran vacaciones, pronto sería Navidad, así que la mayoría de los alumnos ya estaban con sus respectivas familias, por eso se me hizo extraño ver a un estudiante fuera de su casa, era de Gryffindor estaba solo, se veía un tanto nervioso, así que decidí acercarme a ver quién era, y porque estaba así. ¿Acaso había pasado algo? No lo creía, pero era mejor asegurarse.
Duele el amor sin ti
Duele hasta matar
—No deberías estar fuera de tu casa… ¿¡Potter!? ¿Qué hace aquí? ¿No sabe que es peligroso? —Reclamé, era obvia mi preocupación, ¿Qué le había pasado? ¿Acaso se había peleado con Draco?
—Ah… lo siento profesor Snape, yo… yo ya me iba…— ¿Qué le pasaba? Ese no era su típico comportamiento para conmigo. Apenas había notado mi presencia y su expresión sólo transmitía tristeza. Me dolía verle así.
Siento la humedad en mí
De verte llorar, ni hablar
Si es que tú te vas de aquí
Creo que a mí me va a sufrir.
De pronto y de la nada, sentí un par de frágiles brazos rodear mi cuerpo.
¡¿Qué le pasaba?!
—Esto es grave profesor yo… no se que me pasa — él seguía llorando y abrazándome; no soportaba verlo así, hacia añicos mi alma. Deseaba que aquel momento durase para siempre .Y de pronto, ese abrazo se fue como llegó; se empezó a alejar de mí y lo miré fijamente, nuestros labios estaban a escasos centímetros. Al parecer no había vuelta atrás.
—Harry yo he querido decirte algo desde inicios de este curso, pero no había tenido oportunidad hasta hoy
—Ah, si claro profesor… puede decírmelo —ambos estábamos tan cerca que podíamos sentir la respiración del otro, nada en el mundo nos podría separar, eso pensaba
—Yo… yo siempre te he…
Hoy quisiera detener el tiempo
La distancia entre los dos
Pero se apagó la luz del cielo
Ya no sale más el sol
— ¡Señor Potter, Profesor Snape! ¿Me podrían explicar que hacen aquí? —De la nada apareció la directora McGonagall, arruinando mi gran confesión de amor — creo que demasiado tarde para un encuentro casual…
— Disculpe directora, pero lo que paso es que me encontraba patrullando por el castillo cuando me encontré a Ha… Potter así que le pregunte que le ocurría… — en ese momento busque su mirada, pero el seguía con la mirada ausente, así que preferí seguir con mi discurso, pero el me robó la palabra
— Profesora yo… tengo un problema, pero me gustaría hablarlo en privado, por favor — obviamente se refería por mi presencia, en ese momento me sentí en un estorbo, así que salí con una derrota mas en mi vida… me encamine a mi dormitorio, obviamente Harry no me iba a contar nada, posiblemente por mi actitud hacia el desde primer año o por la simple razón de que no confiaba en mi…
A las dos semanas todo había quedado olvidado, pero algo ocurrió yo iba caminado hacia la siguiente clase de pociones “Pociones séptimo año”, detrás de mi estaba la pareja favorita Draco Malfoy con su “novio”, como me desesperaban sus cursilerías, probablemente eran celos, pero me irritaban, de hecho lo siguen logrando… bueno ellos iban detrás de mi, hasta que el señor Potter, salvador del mundo mágico se desvaneció y perdió todo el color, era algo nuevo, el nunca se enfermaba, mucho menos se desmayaba al menos que hubiera un dementor cerca de ahí pero eso era imposible… fue increíble lo rápido que llegue a su lado, realmente ni yo lo creía, tenía que hacer algo rápido, porque toda la gente se había reunido y todos lo miraban como el centro de atención, como lo que siempre había sido…
Soy fragilidad sin ti
¿Cómo superar el fin?
¿Dónde es que dañé? No sé
Y el recuperar se fue.
Lo cargue y lo iba a llevar a la enfermería hasta que…
— Profesor Snape, lleve a Potter a la dirección, ahí los espero — apareció de la nada, ¡DE NUEVO!
— Pero directora, tengo que llevarlo a la enfer… — ni siquiera pude reclamar bien, enseguida ella dio las ordenes y tuve que acatarlas enseguida
— ¡Pero nada! Los espero en mi despacho… — se veía preocupada, detrás de esa mascara de enojo estaba preocupada por Potter.
— Esta bien… — a las órdenes del mando supremo no hay nada que hacer, así que seguí sus órdenes como lo que eran: ordenes, así que me encamine hacia su despacho…
En el despacho, prepare una poción para poder despertar a Harry de su repentino desmayo, hizo una cara muy cómica, no quiero imaginar el sabor de la poción…
— Bien, ¿Podrían explicarme que es lo que paso? — exigí, sentía una gran preocupación por Harry, y realmente estaba molesto así que espere a que ambos me respondieran..
— Puede ver señor Potter, que mis sospechas, como le dije aquel día, creo que son ciertas — claramente me estaba ignorando, wow que agradable sorpresa ¬¬”
— Lo se directora, y me haré responsable de esto, lo afrontare sin importar sus consecuencias, se que es una noticia muy fuerte, pero se me hace maravilloso y no pienso… no pienso… — de nuevo lloraba, ¿porque tenía tantos cambios de humor?
— ¿No piensas que Harry? — ¡diablos! Ya había hablado, ¡no debí abrir mi boca! ¡Debí haberme quedado callado!
— No pienso abortar, este bebe fue hecho con amor y no lo pienso matar, si a su… padre no le parece la idea de tenerlo, creo que lo podré criar solo… — o.O nunca me espere tal respuesta, era algo que rompía por completo mi sueño, sentí que mi mundo se venia abajo y lo peor del caso no podía hacer absolutamente nada, me sentía impotente, hasta que lo vi romper en llanto desesperado, tal vez eran las hormonas, a lo mejor la emoción o la tristeza por el posible rechazo de su pareja, pero verlo en esa situación me rompía el corazón, no quedaba más que decirle , que Draco no lo rechazaría, ambos se amaban y el era lógico que lo aceptaría…
Ni tú ni yo somos culpables
Pero somos vulnerables
Son las cosas de la vida
¿Qué me queda por vivir?
Duele el amor sin ti
Llueve hasta mojar
Duele el amor sin ti
Duele hasta matar
Duele el amor sin ti
Todo está tan gris
— Harry, siento que exageras un poco, Draco no rechazara a su hijo, y menos si es de ustedes dos, obviamente se aman — ¡como dolió decir esas palabras! — y si no quiere… puedes confiar en mi… — ¡que estupidez decir eso, ¿claro como abuelo no!? — pero me puedes decir ¿cómo ocurrió esto? — bueno yo sabía que Harry estaba esperando un bebe de Draco, pero ¿Cómo diablos paso eso? ¿Los hombres no se pueden embarazar o si?
— Bueno como paso… — empezó a hablar Harry, enseguida se ruborizó, no quise saber detalles…
— Como veras Snape, esa noche en que te encontraste a Harry, el venía hacía mi despacho, el suponía que se había intoxicado o algo así era una explicación lógica por los síntomas, que son nauseas, y la inflamación de la parte baja de su estomago, lo examine y tenía muy abultado el vientre, en ese momento pensé en un embarazo pero como tu, se me hizo imposible así que lo di como una opción, y decidí investigar, existen algunas personas del sexo masculino que tienen por así decirlo la bendición de tener vientre y poder quedar embarazados, como Harry, en el mundo mágico se les conoce como “hype” o “hypez” que significa “poder no común”, los cuales creo que posee el señor Potter…
— Claro algo no común, pero no imposible — dije sin darme cuenta de mis palabras
— Si, tienen toda la razón, pero, ¿como se lo digo a Draco, a mis amigos, a la comunidad mágica? — pregunto sumido en sus pensamientos y con una mano acariciándose el vientre, no había cosa más tierna en el mundo
Hoy quisiera detener el tiempo
La distancia entre los dos
Pero se apagó la luz del cielo
Ya no sale más el sol
— Bueno, lo primero es decirle a Draco, ¿no crees Harry? Y si usted gusta podemos mandarlo llamar, o podemos dejar que usted se lo diga en el momento que crea que es apropiado… — le comento la directora McGonagall
— No profesora, por favor llámelo — contesto volviendo de sus pensamientos, claramente se veía serio, como era este tema, era hora de enfrentar la realidad y el lo sabía
Al poco tiempo llego corriendo el heredero de Slytherin, con sus ojos grises y el cabello platinado, enseguida abrazo a su amor ¿Cuál sería su actitud? Esa era la pregunta que rodeaba mi mente, ya pronto descubriría mi respuesta
Soy fragilidad sin ti
¿Cómo superar el fin?
¿Dónde es que dañé? No sé
Y el recuperar se fue.
— Amor, tengo algo que decirte — empezó a hablar Harry, mire sus ojos verdes, iguales a los de Lily el me miro buscando mi aprobación, yo solo asentí y seguí escuchando su platica…
— Cielo dímelo, no me preocupes, ¡NO ME DIGAS QUE ES ALGO MALO! — dios, me hartaban sus cursilerías, celos malditos celos.
— No, Draco no es nada malo, no tienes que preocuparte, de hecho es una buena noticia — trate de decirlo lo más tranquilo que pude, pero creo que no soné muy convincente
— Es cierto vida, es una buena, no, excelente noticia, pero no se como te lo vallas a tomar… — y empezó a llorar de nuevo, era claro que sus hormonas no estaban bien aquel día
— Dímelo Harry — y enseguida limpio las lagrimas de su amante con su mano — ¿Qué ocurre?
— ¡¡Draco, yo estoy embarazado!! — y lo abrazo, no había escena donde se reflejara mejor su amor, como aquella, nunca lo había visto así — estoy esperando un bebe tuyo y mío, ¡amor estoy tan feliz, que no lo puedo explicar!
— Harry… yo, ¡dios mío! ¡No lo puedo creer es una excelente noticia, vida no me puedes hacer mas feliz! — ambos se fundieron en un beso tan apasionado que parecían una sola persona, ahí comprendí que yo había perdido la batalla, su amor era más fuerte que nada más en la Tierra, así que procedí a retirarme como buen perdedor, pero la voz de Draco me detuvo — Esperen, me gustaría que fueran testigos de esto… — enseguida se arrodillo frente a Harry, era lógico lo que pasaría le propondría matrimonio… — Harry, yo te amo más que a nada en el mundo entero, y con nuestro bebe en camino, me gustaría estar contigo el resto de mi vida… ¿Quieres casarte conmigo? — lo siguiente fue Harry llorando de emoción y ambos abrazándose y besándose.
— Vámonos Snape — me hablo la directora — dejémoslos tienen muchas cosas de que hablar — y así fue los dejamos en su mundo de felicidad
Ni tú ni yo somos culpables
Pero somos vulnerables
Son las cosas de la vida
¿Qué me queda por vivir?
Duele el amor sin ti
Llueve hasta mojar
Duele el amor sin ti
Duele hasta matar
Duele el amor sin ti
Todo está tan gris
• Fin del Flash Back
Y así llegamos al día de hoy, el día de la boda, en casa del padrino de Harry, el difunto Sirius Black, fue una decisión difícil el venir, pero lo tenía que hacer se que será difícil cerrar esta herida, pero lo lograre confió en eso…
La casa estaba adornada con gran variedad d flores, llegue y sentí un aroma fresco y agradable, había demasiadas sillas, ya me podía imaginar la cantidad de invitados que tendrían, enseguida me recibió Lupin y su hermosa esposa Tonks, ella traía en sus brazos a su pequeño hijo Ted, era algo extraño, enseguida que vi a algún conocido me sentí como en mi casa…
— Severus, que magnifica sorpresa, me imagine que no vendrías — me saludo Lupin y enseguida me abrazo, como si hubieran sido siglos desde que no me veía
— Pues ya ves los milagros existen… Hola Tonks, hola Ted! — era hermoso ese niño, tenía gran parecido con su madre…
— Hola Snape… los chicos estarán muy contentos de verte aquí…
— Si, si lo creo, por eso vine — intente sonreír pero creo que mis intentos fueron en vano…
Me invitaron a comer y enseguida me serví algunos guisos muggles, realmente sabían deliciosos, al poco rato empezó la ceremonia, fue muy rápida y por fin llego el momento crucial…
Siento la humedad en mí
De verte llorar, ni hablar
Si es que tú te vas de aquí
Creo que a mí me va a sufrir
— Señor Draco Malfoy, ¿acepta al señor Harry James Potter como su futuro esposo y jura protegerlo y amarlo toda la vida?
— Si, si acepto…
— Señor Harry James Potter ¿acepta al señor Draco Malfoy como su futuro esposo y jura serle fiel hasta que la muerte los separe
Siento la humedad en mí
De verte llorar, ni hablar
Si es que tú te vas de aquí
Creo que a mí me va a sufrir
— si, si acepto, yo lo amo y daría todo por el…
Ahí mi mundo se rompió en su totalidad, me perdí en la nada y espere a que la ceremonia terminara, los
felicitaría y me iría, no tenía nada que hacer ahí
— Harry, Draco muchas felicidades espero que pasen una vida larga y llena de lo mejor, yo me tengo que ir, pero espero se la pasen muy bien…
— Gracias Snape, por venir espero te la hayas pasado de maravilla… — me contesto Draco
— Disculpa Snape, ¿yo… podría hablar contigo? — me pidió Harry se veía feliz no me imagino que querría
— Claro Harry, vamos
— Yo, profesor aun recuerdo la noche en que nos encontramos en el castillo, y creo saber lo que me quería decir, se que es un sentimiento puro, y yo lo aceptaría, pero la verdad ahora tendré una familia con Draco, si tal ves no lo hubiera conocido a el, probablemente mi futuro sería con usted… yo igual lo quiero, pero no de la misma manera que usted a mi… espero que usted pueda ser feliz con una persona que realmente le corresponda, yo le deseo lo mejor… — y enseguida me abrazo, fue algo sorprendente ¿El realmente sabía mis sentimientos? ¿Desde cuando?
— Gracias Harry, yo te deseo lo mismo… — y ahí me fui, creo que fue lo mejor que pudo haber pasado, aun me duele pero tengo las esperanzas de encontrar a ese alguien, y vivir juntos hasta que la muerte nos separe…
Duele el amor sin ti
Llueve hasta mojar
Duele el amor sin ti,
Duele hasta matar
Duele el amor sin ti
Todo está tan gris
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