Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Pasatiempo por SpicaDice

[Reviews - 222]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Gracias a todos lo que han leído!!

Estaba sentado en su templo, era una mañana común. Había asistido al entrenamiento diario, que transcurrió sin ninguna novedad; se había despedido de sus compañeros para regresar a su templo y poder tomar un baño, pero uno de ellos al despedirse para también retirarse a su templo, le dedico una sonrisa cómplice, que paso desapercibida a todos los demás; algo que agradecía; respondiendo con una tímida sonrisa.

 

Después de su baño se sentó en la estancia de su templo para leer un libro, pero ni siquiera logro abrirlo, en cuanto se sentó quedo sumido en sus pensamientos. No se terminaba de explicar cómo se había metido en ese lio, pero se consolaba con el pensamiento de que tal vez todo fuera una simple broma que se le había ocurrido a su compañero para pasar el rato y quizá reírse un poco de él.

 

Y ahí estaba sentado, convenciéndose de que era una broma y que podía olvidarlo, disponiéndose a tomar su libro para comenzar a leer; cuando sintió que alguien entraba a su templo y oyó que lo llamaban.

 

-          Shaka, ¿estás aquí?- Era la voz de Aioria, que lo llamaba al tiempo que entraba al sexto templo.

 

-          Si,.. adelante pasa.- Respondía mientras se decía a si mismo que solo iba a saludarlo o quizás necesitaría algo.

 

-          Vaya, aquí estas.- Dijo Aioria después de ojear el templo y encontrarlo sentado en un sillón. - ¿Cómo estás?- Pregunto mientras se sentaba, al ver que Shaka le señalaba un sillón frente a él indicándole que se sentara.

 

-          Bien, gracias,… ¿Te puedo ayudar en algo?- Titubeo al preguntarle, esperando que no dijera nada que no quisiera escuchar.

 

-          No, solo quería saludarte,…

 

Shaka emitió un suspiro aliviado, pensando en que ya podía olvidar esa loca idea, acomodándose más en el sillón con una apenas visible sonrisa de satisfacción, pero su alivio se fue tan rápido como había llegado.

 

-          Y hablar sobre nuestro nuevo proyecto o pasatiempo, lo que prefieras,… ¿no lo habrás olvidado?- Continuo Aioria viendo la cara de decepción y frustración de Shaka, que además había abierto repentinamente los ojos.

 

-          No, claro que no,… como podría.- Respondió resignado a seguirle el juego,.. por un tiempo.- ¿Por qué no pasamos a la cocina?, podríamos tomar algo mientras me cuentas que es lo que has estado pensando.

 

Shaka había hablado con un tono de paciencia, cerrando los ojos y levantándose pesadamente del sillón para dirigirse hacia la cocina a preparar un café.

 

Aioria lo seguía, pero lo miraba fijamente, parecía que súbitamente se hubiera dado cuenta de lo apuesto que era cuando se le veía mas de cerca, lo sabía, pero ahora lo notaba realmente; veía su dorado cabello moverse con gracia sobre su espalda mientras caminaba, sus largas piernas tan estilizadas que parecían perfectas, su…

 

-          ¿Te parece bien café?- Pregunto interrumpiendo los pensamientos de Aioria.

 

-          Me parece perfecto.- Respondió alejando esos pensamientos.

 

-          ¿Y qué es lo que has pensado?- Le pregunto a Aioria mientras acomodaba un par de tazas en la mesa y se sentaba en una de las sillas.

 

Aioria se acomodo en una silla frente a Shaka observando cómo preparaba y servía el café.

 

-          Bueno, creo que primero deberíamos identificar a nuestros objetivos.- Decía al tiempo que tomaba una taza de café de manos de Shaka.- Es decir, quienes son los que necesitarían de nuestra ayuda.- Corrigió al ver como Shaka levantaba una de sus cejas en señal de desaprobación.

 

Había fruncido el ceño al oír a su compañero, porque supo que realmente se estaba tomando en serio lo de su nuevo “pasatiempo” y pensaba ponerlo en práctica. Suspiro y se dijo que al menos debería hacer un último intento, quizá ese impulsivo, insensato, impetuoso, alocado, irreflexivo e imprudente caballero tuviera un momento de sensatez y se diera cuenta de que no era correcto intervenir en la vida amorosa de sus compañeros.

 

-          Entonces, ¿realmente piensas hacerlo?, ¿no lo has pensado mejor?, no me parece correcto intervenir en la vida de los demás.- Era su último intento, así que debía insistir.- ¿Por qué no lo piensas bien?, o quizá podríamos buscar algo más que hacer, ¿qué te parece?

 

-          Claro que no voy a hacerlo,  sería imprudente…

 

Shaka se sintió aliviado, pensó que al fin había reaccionado y ya estaba sintiéndose más cómodo, cuando…

 

-          … vamos a HACERLO, no tengo que pensarlo más, a mi no me parece una mala idea, por el contrario me parece estupenda.- Continuo Aioria, haciendo que Shaka abriera los ojos y pusiera cara de desesperanza.-  Además  de que tu ya habías aceptado y cuando un caballero da su palabra, no puede retractarse.- Decía mientras lo miraba inquisitivamente.- Y mucho menos el caballero de Virgo.- Remato.

 

No tuvo nada más que decir, se dio cuenta que le había ganado y no podía creerlo; no es que lo considerara torpe, pero no pensaba que sería más listo que él, se confió. Así es que no tenia mas opción, después de todo ya había dado su palabra (aunque no recordaba exactamente cuándo lo hizo) y era cierto no podía retractarse. Se dio por vencido dando un suspiro.

 

-          Está bien, dime que es lo que hay que hacer.- Shaka al fin se había resignado.

 

-          Como ya te dije, debemos reconocer primero nuestros objetivos.- Respondía con una sonrisa triunfal y ya sin reprimir el termino de “objetivos”.- Hasta ahora solo tenemos a Shion y a Dohko, pero por eso estoy aquí, para que ubiquemos a los demás.

 

-          Pensé que solo serian ellos… Además de que no creo que haya más “objetivos”, como tú los llamas.- Completo viendo que Aioria iba a reprocharle el que solo considerará a Shion y Dohko.- Por cierto no me gusta eso de “objetivos”.

 

-          Te equivocas, si hay mas objetivos,… y no creo que este mal llamarlos así, si alguien nos llegara a oír, nunca sospecharían a lo que nos referimos.- Justifico Aioria.- Y sobre que no hay más, podría mencionarte dos parejas más de las que casi estoy seguro.

 

-          ¿Cuáles?- Pregunto con duda Shaka porque él no había notado ninguna actitud sospechosa o extraña en sus compañeros.

 

-          Bueno, una de ellas es Afrodita y DM, me parece increíble que no lo hayas notado.- Señalo sorprendido Aioria.- Creo que ya todos lo sospechan, ¿en realidad no lo has notado?

 

-          No, ¿qué es lo que no he notado?- Indago aún incrédulo Shaka.

 

-          Por ejemplo, que Afrodita deja todos los días una rosa roja, como descuidadamente en la entrada del cuarto templo y que DM finge que las tira, pero las pone en un pequeño jarrón en su habitación. ¿No te parece qué es algo sospechoso?

 

-          Vaya, ahora tengo más preguntas.- Dijo ya más interesado Shaka.- ¿Cómo sabes que Afrodita deja todos los días una rosa para DM?, y ¿Por qué aseguras que DM las guarda en su habitación?, ¿has estado en ella?

 

-           Bueno,…- Empezó sonrojado Aioria.- Lo de Afrodita lo sé porque todos los días lo veo pasar por mi templo y dirigirse al de DM y  lo sé porque lo he observado desde mi templo y lo he visto dejar la rosa en la entrada y regresar a su templo…

 

-          Seguro, y ¿lo demás?

 

-          Y lo demás lo sé porque en una ocasión pude entrar en la recamara de DM.- Dijo Aioria sonriendo.

 

-          ¿En serio?, ¿por qué?, claro si no te molesta contarme.- Le pregunto Shaka interesado.

 

-          Veras, una de las veces que vi como Afrodita pasaba por mi templo rumbo al suyo, pude ver como DM estaba tras una de las columnas esperándolo, vio como dejaba la rosa y se alejaba; en cuanto vio que estaba lo bastante lejos salió para recoger la rosa y estaba tan ensimismado que ni noto cuando lo seguí y vi como dejaba la rosa en un jarrón.- Le conto Aioria con la mayor naturalidad.

 

-          No puedo creer que entraras a su templo sin permiso y que los estuvieras espiando, ¿acaso no los respetas?- Le pregunto Shaka entre sorprendido e indignado.

 

-          Claro que los respeto, pero ¿qué más podía hacer si se portaban tan misteriosos?- Dijo encogiéndose de hombros.

 

-          Además, gracias a eso ahora estoy seguro de que ambos se atraen y podemos ayudarlos.

 

-          Definitivamente te queda bastante bien el que te llamen “Gato”, eres demasiado curioso.- Shaka comprendiendo que no tenia caso reñir a Aioria, que después de todo era bastante simpático.

 

-          Y la otra pareja es Camus y Milo, de esa no puedo darte pruebas, pero lo sospecho.- Decía al tiempo que recargaba uno de sus codos en la mesa y recargaba su mentón en la mano.- Lo digo por sus actitudes, Milo lo ve con ojos como de borrego y Camus como que no lo nota, pero a veces lo mira fijamente.

 

-          Realmente me sorprendes, ¿Cómo es que notas todo eso?

 

-          Fácil, en las reuniones con el patriarca, son muy aburridas y en algo tengo que entretenerme.- Respondió Aioria mientras se recargaba en la silla.- Bueno, esas son las dos parejas que he notado, ¿y tú?, ¿realmente no has notado nada?

 

-          Pues no, siempre pongo atención en las reuniones y no acostumbro espiar a mis compañeros.- Indicó Shaka mirando de reojo a Aioria.

 

-          Es por eso que estas tan aburrido.- Le respondió Aioria.- Pero eso se puede remediar, hoy tenemos reunión con el patriarca en la tarde, tu misión es poner atención en los demás y ver si puedes descubrir más “objetivos”. Yo hare lo mismo.

 

-          Supongo que no tiene caso negarme,.. lo intentare.- Dijo Shaka alzando la vista.

 

-          Excelente.- Aioria se levantaba de la silla y se disponía a salir.- Entonces al terminar la reunión nos veremos de nuevo aquí para hablar sobre lo que hayamos descubierto, ¿te parece bien?

 

-          Si no hay más remedio.- Respondió Shaka mientras ligeramente alzaba los hombros.

 

-          Hasta la noche.

 

Shaka vio salir a Aioria de la habitación haciendo un ademan con la mano en señal de despedida. Levantaba la mesa mientras pensaba que tal vez no sería una idea tan mala, Aioria parecía divertirse. Solo que aún no sabía cómo haría para notar esas actitudes “sospechosas” de las que hablaba Aioria.

 

 

----


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).