Rikkai dai Fuzoku : Guerreros
¿Dime porque tu dolor hoy te encadena?
Que en tus ojos hay una sombra de gran pena…
No quisiera verte así aunque quieras disimularlo,
Si es que tan triste estas para que quieres callarlo…
(Fragmento de Chiquitita de Abba)
Dolía, como nunca dolía, dolía el alma, dolía el orgullo, el cuerpo…el corazón.
Había perdido ese juego contra un niño que llegó ese año, ¿Quién era el para arrebatarle su sueño? ¿Quién se creía el para quitarle la gloria al hijo de dios?
No, estaba mal y lo sabía. El chiquillo había ganado justamente pero es que dolía tanto el saberse el responsable de la caída de su equipo…Pasó en los regionales y nuevamente le ocurría en las nacionales.
Acababa de salir de las canchas, justo cuando había recibido el trofeo del segundo lugar se había desaparecido, sin decirle a nadie, deseaba estar solo, no quería verse derrotado frente a su equipo, mucho menos frente a él.
Divagaba, ¿o es que se atormentaba?...no era humillación, era coraje, bendito coraje y dolor.
Cobarde, se llamaba, cobarde, se sentía.
¿Dónde quedaba el gran Yukimura Seiichi? ¿Aquel niño prodigio que todo el circuito temía? Solo quedaba la sombra del todo poderoso…ya no quedaba nada más.
Rabia sentía, rabia inundaba.
-Me pregunto… ¿esto fue lo que sentiste aquella vez?- Palabras al viento esclavas del dolor…
-¿Así te sentiste corazón?...- que terminan ante la presencia del emperador…
-Perdóname…- melancolía en carne viva
-…- que un fuerte abrazo no pueda calmar-
No es tu culpa, lamentablemente todo el equipo bajo la guardia**
-Pero tú obtuviste tu revancha contra Tezuka-
-Aunque es lo que deseaba de nada me sirve-
-¿Porque perdimos?-
-No...-
-¿Entonces?-
-Si te veo caer, no importa, juntos nos levantaremos, no hay necesidad de que te castigues-
-Sanada…-
-Déjame compartir tu pena Yukimura-
Y entre tanto dolor… el beso que liberó…
++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Era tarde, el astro se escondía dando paso a la soberana de la noche, en el firmamento se podrían apreciar algunos tapices brillantes...Y en medio de todo, el amor de los amantes.
-Gen..Genichirou- pequeño susurro que escapaba de los labios delgados
-Shh… pronto Yukimura…muy pronto-
Cuerpos calientes que buscaban contacto, el de cabellera azul atrapado por el cuerpo dominante. Manos grandes y fuertes oprimían la piel blanca y delicada. Genichirou exploraba mientras Seiichi aguantaba.
Respiraciones agitadas, piernas entrelazadas y un sube y baja que aceleraba corazones, piel desnuda, tanto morena como porcelana, se amaban, se querían, se buscaban. El emperador lamía lascivamente el cuello del hijo de dios…torturaba.
Sábanas retorcidas culpa de la actividad volcánica, mayor que ahora se entretenía succionando los botones rosados del más bajo, menor que intentaba callar los gemidos que le provocaba el más alto.
-Gen…no puedo…-
Voz suplicante pero a la vez tan excitante, Yukimura aclamando atención, Sanada desbordando pasión.
-Te amo Yukimura-
Voz ronca y palpitante, delirante…confesión recibida por un beso demandante, labios unidos que encajaban perfectamente, segundos pasaban y las lenguas de ambos se encontraban, gemidos ahogados por las gargantas de los guerreros…luchaban, se saboreaban, se deleitaban. Aumento de temperatura provocado por el intenso beso, intercambio de fluidos que terminaban bajo el mentón del pequeño…y entre tanto amor…
Sanada bajaba por el cuerpo esbelto, aspiraba el aroma a flores que desprendía su tormento, que mezclado con el sudor hacia que perdiera la razón. Miradas encontradas con verdadero amor, que se fundían y se quemaban, que gritaban presas de la pasión.
Yukimura que sentía cada espasmo, que se excitaba mientras su guerrero bajaba, mientras tocaba, mientras llegaba…miembro que palpitaba altivamente, reclamando la atención que era otorgada al resto del cuerpo.
Y entonces, el preludio antes de la sinfonía…
El amante de mirada profunda engulló aquel ser tan vivo, extensión mediterránea del ser de ojos ardientes…y el concierto empezó…Suspiros, gemidos, inundaron la habitación, perfecta melodía para el amante que lamía gustoso ese pedazo de carne, que al pasar de cada minuto y lamida se sentía llegar, se sentía salir…
Semen que anunciaba el orgasmo…orgasmo que fue detenido por la mano del mayor…
-No Seiichi, lo haremos juntos…-
Sonrojo total, así era Sanada Genichirou, su Genichirou…amaba a ese hombre por su esencia, su gallardía, su honor…amaba terriblemente ese corazón que solo el tenis y él lo hacia latir a mil, amaba ese cuerpo no muy lejos de dios griego que solo su persona conocía y reconocía…él, Yukimura Seiichi.
Un dedo…
Dolor…
Dilatación…
Calor…
Y para aplacar la situación, un beso dulce.
Segundo dedo que entró para ayudar a su compañero, Seiichi gemía deliberadamente…
-mhg…Sa…sanada..-
Y Genichirou introducía el tercero…
-Yukimura, ya falta poco- lo miraba enternecido
Seguía dilatando, no quería lastimarlo, solo un poco más…solo unos círculos más, su propio miembro le decía que era hora, pero esperaba la señal de Yukimura.
Respiración errática
Y un movimiento…señal entendida, estaban listos.
Lento…
Pausado…
Al término de ser tormentoso.
Caballero galante introduciendo su palpitante miembro, entrada que se contraía, no lo rechazaba más si lo succionaba…se sentía apretado, se sentía extasiado, tiempo…
Manos entrelazadas, Sanada miraba a Yukimura, Yukimura miraba a Sanada…el emperador esperaba la aprobación y el hijo de dios solo un empuje de caderas dio.
Y empezó el vaivén, las embestidas eran lentas, suaves…Yukimura rodeó el cuello de Genichirou mientras besaba, su cara, mejillas, frente, nariz…labios. Sanada embestía, tomando fuertemente las caderas de Seiichi, arremetía tortuosamente, era exquisito, su piel, su olor, su todo…bajó la vista hasta el miembro de su compañero…palpitaba y necesitaba atención, llevó su mano hacia el…y el masaje empezó.
Habitación oscura solo impregnada con el olor a sexo, sudores…gemidos, jadeos…solo ocupada por dos amantes, dos guerreros...
-Genichirou…-
-Seiichi…-
Embestidas poderosas…que aumentaban por el anhelado clímax, cama que era sometida por altas presiones, hombres hermosos que se saboreaban, que tocaban la piel del contrario y que alcanzaban poco a poco la gloria que hace momentos les fue negada…una vez más, guerreros del campo de batalla. El mayor de cabellos oscuros aceleraba la penetración, el menor solo gemía, jadeaba y gemía de nuevo. Líquido pre seminal que escapaba de sus miembros, líquido que recorría las piernas de uno y líquido que mojaba la mano del otro.
…xtasis en los cuerpos de ambos…
-Gen…mgh…voy a…-
-Juntos Seii…chi juntos-
Arremetidas aceleradas…
Y de pronto…
Cuerpos fundidos…entregados al desborde de pasión.
Sonido ronco del emperador…
Un “Te amo” del hijo de Dios…
Cuerpos cansados…desparramados…
Y con un beso…sello de aquel encuentro…
++++++++++++++++++++++++++++++++++++
En la cama, las siluetas se dibujaban una contra otra…abrazadas…respirando lentamente…el cansancio venció y el sueño por fin dio tregua a los sentimientos.
++++++++++++++++++++++++++++++++++++
Día siguiente
Club de Tenis de la escuela secundaria Rikkai Dai Fuzoku
-Yanagi senpai- demonio – ¿que querrán buchou y fuckubuchou?...es muy temprano-
-No lo sé Akaya- the master- Pero hay un 99.97% de probabilidad de que sea importante
-Bah…No tengo ganas de…-
-¿Y así piensas llevar el año que viene al Rikkai Dai a lo mas alto Akaya?
Golpe seco
-Sa…sanada fuckubuchou…-
Equipo destronado…vencido por el Seigaku…y que anhelaba el tricampeonato
Todo titular y no titular se encontraban en esas canchas, todo el Rikkai Dai presenciaba la llegada de los mejores jugadores que habían llevado a la escuela a lo más alto…buchou y fuckubuchou…hijo de dios y el Emperador…Sanada y Yukimura.
-El Rikkai Dai Fuzoku no se queda aquí…- voz aterciopelada – Nos vencieron y tenemos que aceptar la realidad pero eso no significa que estemos derrotados-
- Este año no lo conseguimos…- voz gruesa – pero confiamos en los que vienen atrás… ¡porque en Rikkai Dai hay guerreros! Y les mostraremos la Supremacía del Campeón destronado-
¡POR LA GLORIA!
¡Todo un equipo unido!
Así es nuestro equipo de Guerreros…
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español