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Pirates por hollow

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INTRODUCCIÓN.


Un niño pequeño, de pelo negro como el carbón, ojos violetas como las lilas y piel bronceada por el sol, estaba sentado en el suelo jugando con un cochecito de madera. Un hombre de edad avanzada estaba sentado en un banco al lado del niño. Tenia un pedazo de madera en la mano con una forma indeterminada mientras que en la otra mantenia bien sujeta una navaja con la que iba quitando pedazos y le iba dando forma.


Tenia el pelo negro con canas blancas al igual que su espesa baraba. Era un hombre fornido que daba a entender que se alimentaba bien y sus ojos tenian un tono azul intenso.


El niño se acerco al hombre y se sento en el banco a su lado.


-¿Tio?


El hombre giro su rostro y miro al niño sonriente.


-Dime.


-¿Me puedes volver a contar la historia?


El hombre sonrio divertido y dejo la madera a un lado. Cojio al pequeño por las axilas y lo sento en sus rodillas.


-Claro que puedo contartela.- Se aclaro la garganta y se dispuso a enpezar el relato que el niño había escuchado un millar de veces pero aun así no se cansaba de oir.- En el mar existe un barco herrante capitaneado por un demonio. El mejor luchador del mundo, nunca nadie lo había vencido aunque tampoco nadie se atrevia a desafiarlo. Su ferocidad y crueldad en la lucha son bien conocidas en todo el mar. Su tripulación era muy poca pero eran leales y todos muy buenos en la lucha, ya sea con espada o cuerpo a cuerpo. Son una banda temida y por sus cabezas piden una suma desorbitada de oro aunque la cabeza que mas vale es la de su capitan.


-¿Como es el capitan? Tu lo conociste ¿no tio?


-Si, yo lo conoci. De aquella era muy joven y yo ya tenia mis años. Recuerdo que siempre llevaba una capa negra a los hombros y un gran sombrero. Ocultaba su rostro pero aun así recuerdo que su pelo era tan negro como el tuyo y sus ojos eran del color del fuego y su piel era blanca como la mejor de las porcelanas. Era verdaderamente un hombre atractivo pero lo envolvia un aura de misterio y peligro que aterraba.


-Cuentame lo que paso ese día.


El hombre volvio a sonreir. El niño era muy persistente y aun teniendo 6 años su voz sonaba autoritaria. Era digno hijo de su padre.


-Te lo contare. Un día en concreto a presencia del capitán del navio Noir, llego un hombre que queria vencerlo en combate. El capitán estaba en su camarote cuando escucho los gritos del hombre. Salio a cubierta muy cabreado ya que le gusta el silencio del barco. Al verlo el hombre sonrio y lo reto ante todos. El capitán del Noir acepto el reto y sacando su hermosa espada dio comienzo el combate. Fue una lucha bastante corta, la verdad, vencio el capitán del Noir y nos ordeno que nos llevasemos a nuestro capitán al barco. Yo era uno de los marineros, estabamos a punto de partir cuando la figura del capitán del Noir aparecio en cubierta. Todos nos asustamos, sabiamos que era un hombre cruel y sanginario y cuando nuestro primer oficial intento salir a su encuentro aparecio de la escotilla una mujer.


>> Aun recuerdo su belleza, tenia los ojos lilas y el pelo rubio, su piel estaba ligeramente bronceada. La mujer, que después supe que se llamaba Ilea, se acerco al hombre y hizo una reverencia el se la correspondio y le ofrecio un brazo que ella acepto. Antes de marcharse Ilea me llamo con la mano y por primera vez escuche la voz de los angeles.


>> -Andy, ¿te vienes con migo?


>> Me quede estupefacto. No sabia que decir. De entre toda la gente me llamo a mi y tan siquiera nos conocimos. Tmbién escuche la voz del capitán, era suave y melodiosa, desprendia un poco de frialdad.


>> -Ella quiere que vengas, seras bienvenido en nuestra tripulación.


>> No pude decir que no y acepte. Navege en el navio de Noir y descubri con sorpresa que su capitán no era tan frio y cruel como decian. Con Ilea se comportaba igual que un jovencito enamorado, era dulce y tierno y con su tripulación era agradable y gracioso. Rossel, un marine de su tripulación, me contó que Azazel, nuestro valiente capitán, era una persona amable y muy gentil. Se portaba muy bien con todos ellos. Era una buena persona y si alguno de ellos tenia algun problema el los ayudaba sin ningun esfuerzo. Sin ningun problema era capaz de recibir una bala por uno de ellos.


-¿Y que paso después?


Andy sonrio y acaricio la mejilla del niño, que estaba tan suave como la de un bebe y eso que ya tenia sus 5 añitos.


-Después Ilea se quedo enbarazada de un niño y Azazel para que ella no tuviese complicaciones se la llevo a tierra y allí paso todo el embarazo, en una pequeña casita conectada al mar por un acantilado.


-¡Se parece a nuestra casa!- dijo emocionado.


El hombre sonrio.


-Te estas adelantando a la historia. Bueno sigamos... como iba diciendo vivian en una casa igual a esta todos juntos. Cuando el niño nacio Azazel tuvo que irse porque no sabian como la marina los había encontrado. En el parto hubo un problema y Ilea murio nada más el niño dio su primer grito. Cuando Azazel volvio se encontro con un niño y a Ilea muerta. Se llevo una gran impresión pero aun así cargo a su bebe en brazos, le hizo unas carantoñas y esa misma noche le hicieron el funeral marino a Ilea. Azazel se marcho después de estar una semana junto a su hijo ya no podia estar más tiempo en tierra, el era un hombre de mar y además la marina lo buscaba. Antes de irse le puso nombre a su hijo y me lo encargo. Es una pena que no te acuerdes de tu padre, Lorcan.


El niño sonrio triste pero aun así le dio un abrazo a Andy y le dio las gracias por contarle la historia de sus padres. Muchas veces le intento preguntar mas cosas sobre su padre pero lo único que le contaba aparte de esa historia era de que los escondio bien y borro todas las pistas para que los marines no los encontraran. También le preguntaba cuando iba a volver a por el y lo iba a llevar al mar y si iban a tener muchas aventuras Andy le contestaba que algun día no seria su padre quien iria a verlo si no que el mismo iba a buscarlo y entonces soñaba en el día en que el estaria al lado de su padre en el navio Noir. Y ese día no iba a tardar en llegar...


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