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-ciel?...-
-quiero…quiero morir…-
El hombre siente el dolor…la culpa quiere llegar pero se niega a dejarla, no tiene nada que lamentar.
-déjate de estupideces, es solo una fiesta. Después nos iremos…- ve al chico delante suyo sonreír triste, derrotado.
-me dejarías morir?....-
-ya hemos llegado. Hablaremos de eso en casa, compórtate…-
La sonrisa de ciel no se apaga….tiene que terminar de alguna forma…
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-como lograste que nos dejaran pasar….?-
-un político algo importante me debía un favor…-
-“algo” importante?- sebastian le sonríe burlón, ese sujeto estaba loco.
-deben de llegar pronto. Ya vimos a la madre-
-sola. No me interesa ella lo sabes.-
-paciencia amigo la noche es joven, nadie te lo dijo?-
Undertaker toma una copa y se marcha a paso lento pero seguro mientras el termina la suya de un último trago…
No sonreiría, esa noche sería la última…tenía que salir bien de alguna forma.
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El discurso el suave y decidido…su padre permanece en lo alto de las escaleras mientras rachel a su lado sonríe amable, todos oyen con atención. Tiene una manera de hacer que todos le oigan extasiados y atentos. Es maravilloso. La copa en su mano izquierda tintinea destellos de glamour.
La verdad es que el no tiene la mas mínima idea de que trata la fiesta ni sus palabras pero reconoce el clímax cuando vincent sonríe plácidamente a la mujer a su lado y después baja la mirada hasta el con gesto de orgullo y ternura. Adora esa expresión tan paternal.
Traga duro esforzándose por devolver el mismo gesto, capta imperceptiblemente un casi suspiro en toda la habitación, los gestos se suavizan y todos en el cuarto les aman y envidian en misma manera.
“me dejarías morir…?”
Ciel nota ilógicamente una presencia distinta, no hipnotizada como los demás, casi huele el descontento flotando solo entre toda la estancia de conformismo. La mirada tras su nuca le quema y mata….lo sabe. El, está ahí…viéndolo sonreír falsamente con ojos rotos y soñadores, en el próximo descuido gira sobre sus talones y se pierde entre la gente idiotizada….los odia, los odia tanto….
No quiere ser visto, no de esa manera tan…humillante…
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El moreno le intenta seguir con disimulo, pero la cabellera gris amenaza con perderse entre la multitud….a veces desearía que ciel fuera un poco más alto…había olvidado el color tan excéntrico del menor….es negro o al menos debería serlo, pero tiene ese azul oscuro que lo hace lucir un poco más parecido al gris…un gris con ligueros destellos verdosos….destellos que de repente se pierden. Empuja con ganas a un grupo de mujeres de su camino ignorando los comentarios ofendidos y las miradas horrorizadas…
Ciel….ciel se le había perdido entre la multitud como agua resbalando entre sus dedos…como siempre.
“es que nunca tendremos nuestro para “siempre”? nunca podernos vernos con devoción y terminar al fin, juntos?”
Quiere gritar, el aire le falta. Se ahoga.
Recuerda esta sensación….
Jimmy es el enemigo (y el aire se va) ciel aparece entre gritos (luego el aire se vuelve denso) ciel se le ofrece con dolor, de rodillas entre sus piernas (“puedo hacerlo solo elimina las visitas de padres, si?” mientras, el aire se evapora) ciel le mira como si temiera lo que le podría hacer( “está bien, no dolerá…”) la mujer mueve coquetamente su cabello oscuro y corto, precioso pero no igual(“cómo te llamas” “no es tu asunto” “y como quieres que me llame” “por hoy ciel estaría bien” luego viene un beso repugnante y el aire cada vez mas escaso..)Luego ciel se fue (“se ha ido doctor, su padre le agradece su magnífico trabajo” es abrupto, no hay mas, sin oxigeno) entonces la vida es gris y los años se arrastran lastimosamente (cuanto puedes vivir sin respirar…sin más que existir? “no lo sé, my friend, no lo sé”) hay un trueno estremecedor en medio de la noche, la sombra se mueve rápida y torpemente…agitado exige un rescate, un pasaje a cualquier lugar(como se atreven a negárselo, no ven la sombra tras sus ojos…al otro lado del azul…no) ”está bien” dice de nuevo, mas para si que para el otro(“no podría soportarlo más…gracias por aparecer”)
Pero se fue…se fue de nuevo.
Pero sabe dónde encontrarlo.
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Es jalado sin piedad hacia una habitación, pero no se queja sella sus labios con orgullo y soberbia es poca la que le queda pero la hace rendir. Incluso cuando es tirado contra la pared y unas manos le sujetan las muñecas obligándole a subirlas, el cuerpo es más grande, mas fuerte…mas como un hombre, maldice su baja estatura como a veces suele recordar.
-qué demonios crees que estás haciendo!!?- la voz de vincent el fría pero furiosa, sonríe con placer. No es el único que puede perder los estribos no es el único frágil aunque seguramente si el mas adolorido.
No contesta, porque no puede gritar ni golpear. Porque no puede evitarlo pero puede rebelarse silenciosamente. Por primera vez siente que quizá no sea tan inútil…tan roto. Sonríe con ganas, por primera vez vicent le ve una verdadera sonrisa, cínica y orgullosa.
Sin poderlo soportar alza la mano derecha y le golpea, solo una bofetada, nunca ha sido del tipo que golpea, pero ciel le desespera tanto…
-no creas que irte a medio discurso paso inadvertido, como te has atrevido a dejarme con la palabra en la boca…y en público! Ciel debes a haber enloquecido.- está un poco asustado además de enojado, la mejilla pálida toma rápidamente un color rosa fuerte, desearía no haberlo hecho desearía no….desearía que ciel quitara ese gesto de su rostro…tan demente.
Le toma de los hombros y le sacude como si le intentara despertar de un mal sueño o quizá mejor visto fue su mal sueño. Ese no era SU ciel. Este frente a él solo se ensancha mas y mas la sonrisa, más cruel y burlista. Sin creerse del todo la rebeldía le tira al suelo, no le quiere tratar de esa forma. Podrían ser más suaves y románticos, incluso había pedido que enfriaran champare. Pero ciel lo tenía que arruinar todo. Tal vez..
-oh ciel, lo siento…esto no hace falta…vamos levántate, te ayudare- pero jamás lo hace, ciel se revuelve enfurecido y se levanta a tropezones, le ve tambalearse, supone que quizá le golpeo demasiado fuerte, se lo indican el color cada vez mas rojo de la mejilla como la mirada más desquiciada, ciel aprieta los labios como si se tuviera que contener. Por un momento cree que romperá a llorar.
“ha pasado antes, quizá le he vuelto a asustar” si bien este no había tenido una crisis de llanto en tiempo quizá la mala costumbre había vuelto. Podría lidiar con eso, ya lo había hecho antes. Podría con ello…pero no con la risa.
Era la mejor carcajada de su vida…la cosa más divertida. Vincent asustado? Asustado de el!! El! El que no es más que un complemento, un mocoso sucio que se deja usar…el que es solo una ramera a domicilio. Se rie todavía más cuando le ve arremeter contra el en un tacleo de película, esta vez cae de espalda pero solo puede reir. Burlarse…
Incluso cuando unas manos furiosas le toman del cuello de la camisa y oye el corbata junto con los dos primeros botones desgarrarse, igual que la piel de su cuello por unos labios demandantes y mordidas enérgicas.
-no te creas tan especial mocoso, no pareces recordar lo único para lo que sirves, si te he dejado revolcar con medio estado es solo para que llegues a mi cama con más experiencia…vulgar ramera-
El límite estaba cruzado. Roto. Ambos lo reconocieron.
Ciel ya no reía sin embargo conservo la mueca lo mejor posible.
Vincent lo sabía, había ido muy lejos. No podía evitar pensar en lo estúpido de la situación, el le ha hecho cosas a ciel que sabe serian más que reprobables, ha sido cruel, aprovechado, ha sido indiferente y abusivo, le ha humillado y usado de tantas formas que a veces descubre que no tiene alguna petición que sorprenda al menor. Ciel cede ante todo, sin importar que sea, así es como ha sido, a veces cuando le tiene lejos por algún tiempo se pone a recordar, fantasea, rememora todo lo que le ha hecho hacer y se avergüenza un poco…hasta el punto de no querer pensarlo mucho, hasta el punto de sentirse asqueroso. Es solo que ciel es tan…suyo…tan especial. El chico despierta todo lo oscuro que pueda tener dentro, lo quiere a su lado por eso, porque solo con el puede ser tan monstruoso como quiera, pero a la vez lo odia por no poder controlarse…le aborrece por despertar cada bajo instinto.
Debería pedir disculpas, lo sabe, porque las únicas reglas que prometió nunca romper se quebraron. Puede verlo en los ojos azules bajo el, le ha roto. La única dignidad…la única cosa que mantenía al chico en un solo pedazo. El único juramento…
Quiere decir algo, por primera vez en años en verdad siente culpa.
-dijiste…me dijiste!...-
Ese es el verdadero ataque de llanto, la histeria.
A veces recuerda el primer dia del secuestro, vio llegar al chico dormido, le colocaron en la habitación más cómoda posible y le pasaron llave a la puerta. Era el plan. Le recuerda gritar histérico tras la puerta. Ese día se queda esperando al otro lado, intentando consolarle sin tener que hablarle, ciel grito hasta perder la voz en gimoteos suplicas y lamentos. Fue la primera vez que lo sintió, recuerda la culpa por ese sentimiento es solo que ese llanto era tan…sugestivo…tan provocativo. Al otro dia sin resistirse abrió la puerta y entro, sin pensarlo realmente solo para encontrarle tirado en el suelo indefenso y apetecible, tan patéticamente hermoso con sus ojos llenos de lágrimas y esperanza mientras le abraza con fuerza.
“tranquilo todo estará bien” -porque me haces esto, no ves que no quiero- piensa algo, dice una cosa y hace otra, ciel le intenta explicar que paso con voz ronca y suplicante, unos hombres y el secuestro y y y…bueno no recuerda que más le dijo, no cree dejarle continuar.
Un beso, el chiquillo le ve con ojos grandes y sorprendidos. Le da un segundo y el chico le mira confundido.
“como no entiendes lo que me haces…?” le da un tercero solo que esta vez le abraza y tumba sobre la cama, le muerde los labios mientras acaricia las lagrimas, siente como ingenuo abre la boca para hablar, jamás se entera si para quejarse o gritar, cuela su propia lengua devorando la más pequeña y asustada.
Y el tiempo pasó, ciel le miraba como si fuese su peor pesadilla hecha realidad.
“te lo prometo pequeño todo estará bien…jamás te lastimare”
Ciel balbucea algo, sobre el doctor que tanto le fastidia, sobre unas noches de visita y una proposición (“le dije que lo haría si cancelaba la visitas…se lo prometí!!”)
“ese hombre no te volverá a lastimar ni mentir ciel, ya no se lo permitiré...”
(“pero…”)
“el solo te trato como una ramera…te dije lo que eran no? Nada importante, son solo basura…yo no te trataría así, porque para mí eres especial, yo te adoro ciel…jamás te lastimaría”
Y había mantenido la promesa, el nunca le había insultado…o golpeado. Hasta hoy…
Siente el golpe de regreso, una bofetada. Ni la mitad de fuerte o certera de la que el diera pero con el doble de sentimiento.
Miedo. Furia. Vergüenza. Decepción.
Rie desesperado, justo cuando cree que tocaron fondo ciel le demuestra que su actitud el sucia y baja incluso para el, para ellos. Su cerebro dice “lo siento” pero….
-tan ofendido solo por eso…pequeña cualquiera? No te hagas el ofendido pues conozco pocas putas a las que el titulo les quede tan bien como a ti! Tu que te revuelcas con ese cerdo de bata blanca!- ve al chico cubrirse el rostro y quedar inmóvil. Odia el ser ignorado, prefiere ser aborrecido…
Muerde el cuello pálido con saña, succiona y deja marcar dolosas le gustaría calmarse y medir perfectamente para ocultarlas bajo el smokin, es solo que esta tan molesto…le toma de la nuca justo como la primera vez y le besa con furia, devora toda la boca…no encuentra esta vez ninguna resistencia, supone que el golpe moral no ha dejado nada humano en ciel…o en lo que queda de el. Acaricia las piernas con fuerza o sería más correcto decir que las araña? Se restriega contra el sin ser rechazado pero sin sentir al chico reaccionar, eso solo le molesta mas, a ese punto deberían estarlo haciendo como bestias, ciel debería poner esa expresión del placer culposo que tanto le gusta, debería de buscarlo y temblar bajo el…pero no hay nada, el orgasmo le llego solo por roces y caricias a medias, espera ver una reacción de asco. Le ha usado peor que a un objeto, le ha usado como tal…pero igual no hay nada, ni siquiera esa mirada avergonzada y azulada después de cada ocasión. Decepción más que enojo, se levanta con rapidez y sin comentarios se retira al sanitario.
No hay nada que decir.
La primera vez que ciel llevo un amante a casa rachel enloqueció, el fue comprensivo y dulce. Cuando ella le abofeteo y llamo ramera él le defendió y furioso le grito que nunca volviera a referirse a el asi. Ciel solo bajo la cabeza todavía más avergonzado, no hubiese llegado tan lejos usualmente, lo usual seria ser neutro pero no puede evitar cierta carga al ver el problema del chico. Al fin y al cabo porque debería ser golpeado si solo hizo lo que le pidieron.
(-Es atractivo para ser solo un profesor, no crees?
” No lo sé.”
-Seguro? Ni siquiera lo has pensado?
“No, no lo he hecho.”
-Oh ciel no me molestare contigo.
“Pero yo en verdad….”
-Vamos ciel ser besado se siente bien verdad?
“Bueno, si…algo”.
- Imagina lo que debe ser besado por el.
“Ummmm”.
-Se sentirá incluso mejor que esto.
“Pero y si….”
- Tráelo a casa ciel, no habrá problemas…además cuando te he mentido, seguro lo disfrutaras.
“Está bien.”
-Genial solo dime cuando vendrá, no creo que rechace el conocernos mejor, al fin y al cabo no todos los días te invitan tan buenas compañías.
“Que le diré para que venga aquí?”.
-Solo dile que tu padre tiene asuntos que le gustaría tratar, acerca de ti y tus estudios.
“Bien”.
- Lo harás?…..
” Si, lo hare”)
Al terminar esta exactamente de la misma firma que hace un poco mas de media hora elegante e impecable, al menos rachel siempre les consigue una buena imagen, por el contrario ciel permanece sentado en el suelo, exactamente donde lo dejo, exactamente con la misma imagen, rachel enloquecerá cuando vea el traje roto pero sabe que lo haría mucho más si supiera cómo llegaron hasta ese punto.
-rachel enloquecerá cuando te vea el traje…- lo comenta solo porque ver actuar a ciel como si no estuviera presente es la cosa que mas le molesta. Nota que el chico ya se recupero lo suficiente para dignarse a levantar la vista, por un segundo desearía que no lo hiciera.
-creo que ella se pondría peor si supiera como llegue a esta imagen tan poco gramorosa- ciel le habla directamente sin rencor o cariño mas como si fuera un conocido lejano repitiendo exactamente su pensamiento anterior, no le reclama pero las mordeduras en su cuello y labios lucen lo suficientemente rojas y dolorosas para hacerlo por si mismas igual que el golpe en la mejilla que ha tomado un todo mas violeta que rosa. Quiere besar el moretón pero la apatía del chico le mantiene clavado en su sitio. Este vuelve a ignorarle mientras sigue intentando en vano darle a la corbata una apariencia más discreta a pesar de no ser más que un jirón de algodón entre sus dedos. Odia ser ignorado….mejor ser odiado.
Finge un suspiro demasiado alto solo para llamarle la atención.
-había preparado champañe para ambos pero viendo como van las cosas…toma…- camina hasta mientras busca en los bolsillos internos de su chaqueta o al menos lo finge pues sabe perfectamente donde esta lo que busca. Los ojos azules son expectantes y rencorosos, ciel sabe lo que le dará, la última gran humillación para coronar la noche. Toma los 150 dólares del bolsillo, pero decide ir un poco más lejos. Por eso solo le tira 50 a la cara. –los 100 dejémoselo para aquel que en verdad los trabajo…te parece? El mesonero de afuera es realmente agradable, quizá el si los valga…-
Se da la vuelta para irse, no quiere estar más con el chico, sabe que sería todavía más cruel…
-el se los merece más, es cierto…quedarse quieto mientras eres violado es una estupidez…lo acabo de notar.
Asi que esas tenían, habían pasado tanto tiempo fingiendo para no llamarse como son. El titulo le hace real. Lo hace verdadero.
-si yo soy una ramera tu eres solo un violador-
Furia, pero ha sido suficiente, para poder salir de ese cuarto y continuar con la fiesta debe resistir… rebusca en otro bolsillo. Saca el contenido y sin girarse a verlo lo tira en sus manos.
-considéralo propina…solo para que no te muestres tan miserablemente en público-
-iré a la terraza un rato…cuando acabe la fiesta…avísame- no obtiene respuestas.
Una pequeña bolsita de polvos mágicos descansa a su lado….
-me dejarías morir?...- la misma pregunta de nuevo, sabe que ha sido escuchado aun asi vincent solo se va.
Nunca más su padre.
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Solo faltan un par de pisos, sabe donde le hallara, lo puede sentir, azul y perfecto. Su esencia a tristeza su alma desdichada y cínica…le desea con tanta desesperación.
“Ciel….”
Corre con desespero, son solo una par de pisos pero lo siente tan eterno y largo. El ascensor no es lo suficientemente rápido mientras que las escaleras se vuelven incontables pero al menos en las segundas no tendrá que fingir…que saludar educadamente.
Así que corre.
“ciel….”
Está en el último piso, un par de escalones más y la azotea se abre ante él, el cielo oscuro, las estrellas casi imperceptibles. El aire de la noche…
-ciel…!- al fin puede decirlo, puede dejar que el nombre salga de sus labios en tono de suplica, de ruego de piedad…
Pero ciel no le corresponde, permanece acostado con los ojos cerrados, mirando las estrellas imaginarias tras sus parpados. Por un momento piensa que el menor le ignora, después cree que quizá no ha sido oído, quizá a ciel ni le importa. Como cuando tomo sus cosas en el único momento que fue lo suficientemente descuidado para no pasar seguro y llave a cada puerta. Quiso creer que el chico no se iría, que ya estaban bien. Era un doctor lógicamente ciel volvería a su tortura solo por no saber cómo evitarlo. Lo sabia pero el amor te ciega tanto.
Te vuelve cruel, te vuelve estúpido…ingenuo, despiadado. Pero nada importa ciel no le mira y de repente los labios finos y algo azulados le aterran. El siempre luce un poco muerto, algo pálido, ojeroso, demasiado delgado, muy frio…tan lastimado, pero ahora le parece realmente muerto…
Sonríe…eso sería tan estúpido, no lleva ni cinco segundos viéndolo y comienza a delirar, así que se acerca a paso dudoso, moribundo porque esta igual de herido, su alma sangra pero la calma, en un par de pasos más tomara el cuerpo frio contra el y entonces podrá respirar.
-Al fin….-
De arrodillas junto a él respira por primera vez y se calma. Los trozos filosos de aquello que ingenuos llaman corazón se reacomodan en su pecho. Pero no encajan y le sanan, al contrario se aprietan entre sí, empujándose y cortándose unos a los otros, clavándose y traicionándose al mismo tiempo. Creando heridas nuevas exquisitas y lacerantes. Sonríe complacido, adora tanto ese dolor, esa droga dañina y letal entre sus brazos…podría morir, desearía morir. Morir junto a ciel.
Morir con ciel.
Quizá matar a ciel no sea tan mala idea, si bien el pensamiento antes le escandalizaba un poco eso ya paso. Como no lo pensó antes. Morir era la única forma de no ser separados. Besa los labios azulados seguro de cómo debe terminar la historia, su historia, solo suya y del chico que abraza con desesperación.
Vuelve a besar los labios en un intento de calentarlos, estos vibran contra el casi nulamente. Un poco, con timidez. Se separa y quita la chaqueta con rapidez, abrigando al apático chico a ponérsela, lo rescuesta de si, abrazandole nuevamente, como debía ser, como habían nacido para estar. Recarga su espalda del borde del edificio acomodándose perfectamente el uno al otro. La temperatura es inclemente puede ver sus propios dedos tomas un suave azul.
Azul. Es gracioso, su vida ha estado plagado de ese color. Las aguas azules de tragaban a Jimmy sin compasión ni piedad, el azul de los ojos de un niño que llegara aterrado al hospital, el azul de la esperanza, el azul de la tristeza, el azul opaco de su vida sin el chiquillo, el azul centellante que amenazara con cegarle como un eclipse cuando le vio volver, el azul de sus ojos adoloridos y exigentes de venganza, el azul a punto de desaparecer que le miran en ese mismo instante, el azul de los labios que besa y saborea.
“sabes a muerte”
-sebas…tian.- la voz de ciel se deshace y desfigura.
“shhh…el silencio nos dejara descansar”
-estoy tan cansado….me dejarías morir?- el chico le mira con esos ojos que le enloquecen, sonríe para él, solo para él. Un último beso casto y suave. El que debería haber sido el primero.
Ambos lo saben, no queda nada que decir….
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El invierno llego temprano esa temporada. Fue un fin de semana realmente movido.
La mitad de las personas contemplan el cielo comprendidos por la pronta nieve que cae suave y silenciosa, los niños se muestran feliz, los adultos extrañados.
La otra mitad tampoco ha descansado precisamente….el policía y medios forenses de la más alta categoría no han podido dormir en esa mañana raramente nevada. El hijo del presidente ha muerto. Todos lo saben, claro aquellos que no hayan sido jalados por sus hijos o sobrinos desde temprano a la calle por muñecos de nieve y chocolates caliente.
El chico murió congelado para sorpresa de todos y para mayores dudas le han encontrado en la terraza del edificio abrazado a un hombre de casi tan buen re-nombre como el.
Todos se sienten escandalizados, pues el murió en el mismo sitio donde padre y madre estaban llevando a cabo su acostumbrada fiesta anual….
Algunos sienten lastima por la pareja sintiendo que a ellos la desgracia parece seguirles. Otros se muestran furiosos sin comprender como han podido continuar la fiesta sin notar la desaparición del menor. Y una pequeña parte se muerde la lengua y se retuerce en dudas y culpa.
Porque el escenario no es tan descabellado para los que han seguido la historia con bajo perfil, los guardaespaldas y negociadores encargados de vigilar y proteger a la familia de cerca, de mantener la bueno imagen. Los forenses no se pronuncian más que para dejar en claro que no fue un asesinato pero tampoco un suicidio. No se les permite dejar al público ningún detalle, la identidad del hombre que acompañaba al menor esta bajo el título de “un amigo de la familia muy cercano”.
La gran diseñadora rachel phantonhive ha cancelado todos sus desfiles, sus seguidores se muestran decepcionados pero comprensivos. La mujer ha salido del país y según fuentes seguras a pedido el divorcio de su marido.
El político vincent phantohive ha evitado pronunciarse al respecto…fuentes aseguran que el hombre no es el mismo, la tristeza de perder a su hijo le consumen. El divorcio es inminente. La querida pareja presidencial no volverá a estar junta.
Meses más tarde el hombre a renunciado a su puesto y dejado su cargo “a la orden”. Nuevas elecciones se producen en el país…el futuro político preocupa a muchos.
El jovencillo phantonhive y el hombre misterioso ahora conocido como el prestigioso doctor michaelis han tenido digna sepultura…uno junto al otro por respeto.
Entre los diversos cambios y los ánimos nacionales revueltos un hombre ha decidido hablar. El eminente forense ha hecho declaraciones controvertidas acerca de las autopsias. Sus palabras y afirmaciones se pierden entre el revuelo.
Vincent phanton desaparece un día después de entregar su alto cargo…después de eso no se ha sabido nada de el ni de la que fuera su esposa. Ambas estrellas se han apagado y prontos serán olvidadas. Pero aun hoy en dia se oye de vez en cuando la historia de la pareja en la azotea. Con el tiempo trascurriendo se han revelado poco a poco detalles de la vida y relación de ambos.
Algunas parejas han tomado la costumbre de reunirse en la terraza del mismo edificio para jurarse amor, para pactar estar juntos sobre todas las cosas…juntos incluso en la muerte.
También se dice que si ves a tu pareja en cualquier azotea o terraza durante el primer dia de invierno vuestro amor será eterno y nadie los separara, o que si comienza a nevar mientras están juntos están destinados a permanecer juntos. Algunos pocos han tenido la fortuna de vivir esa experiencia y todos han permanecido juntos…la leyenda continua.
Dicen que junto a los cadáveres había notas de despedida, o mensajes escritos en la nieve de su eterno amor pero nadie asegura nada, también dicen que ambos murieron sonriendo.
Yo sé que es verdad. Lo sé porque los conocí. Sé que sonrieron porque sabían que encontrarían su final uno junto al otro. Lo sé. Dos años más tarde he ido a la misma azotea con mi pareja actual y vimos nevar. Desde entonces hemos estado juntos. Estoy seguro que sebas-chan nos ha bendecido, y que el mocoso malvado nos ha dado el visto bueno…incluso si ha sido solo con un bufido.
Ellos nos mostraron el verdadero amor. Nosotros lo continuaremos, por ellos y por todos.
Porque les queríamos a ambos y sentimos no haberlo dicho…quizá si hubieran sentido más de nuestro apoyo y ayuda….ellos quizá….
-hubieran tomado el mismo camino…lo sabes verdad…?-
Undertaker me mira. Sonrió…le amo.
Le amo como sebastian amaba al chiquillo, le amo como este le amaba de vuelta.
Asiento y sonrió mas todavía, están juntos…lo sé.
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“sabes a muerte”
-sebas…tian.- la voz de ciel se deshace y desfigura.
“shhh…el silencio nos dejara permanecer”
-estoy tan cansado….me dejarías morir?- el chico le mira con esos ojos que le enloquecen, sonríe para él, solo para él. Le da un beso casto y suave. El que debería haber sido el primero.
Ciel llora y le abraza. Están tan agotados, pero estar juntos es una nueva respiración después de tanto tiempo. Después de toda una vida sin vivir.
-el me odia….y ella me odia…todos lo hacen! Todos sebastian! No importa lo que haga…porque…-
Besa las lágrimas, acaricia las mejillas. Le duele tanto pero se siente tan bien…
Ciel habla, ciel llora, el solo asiente y lo soporta. Deja que lo saque todo.
-tanto tiempo aguantando solo…déjame ayudar…déjame sufrir en tu lugar…si ciel?-
El tiempo pasa vertiginoso mientras las lágrimas se agotan y se congelan en las mejillas redondas y demacradas ojeras…
-como es que nadie parece notar que estoy muriendo…- silencio porque ninguno sabe la respuesta, el mundo continúa a pesar del dolor. Solo que no saben si eso es esperanzador y entristecedor….
El amanecer llega perezoso sin que ninguno llegue a dormir…
-me gustaría tanto sentirme seguro, no fingirlo. Me refiero a sentirme fuerte e independiente ser solo mío, pertenecerme…-
El sabe a lo que se refiere el chico pero no puede evitar la frustración.
-entonces sea mío…yo no deseo lastimarle…-
Ciel le mira con una sonrisa cruda y cansada. Recuperando algo de su brillo usual, cínico.
-he oído eso demasiado…además que tu no me darías libertad- quiso decir algo para contradecirlo, pero era cierto el tiempo que habían vivido juntos lo demostró, no era capaz de darle espacio, no era capaz de quitarle los ojos de encima o no enloquecer cada segundo que duda de su paradero. No había como contradecirlo asi que mejor excusarlo.
-es que he pasado tanto tiempo sin ti…sin mi señor que no se cómo dejarle ir….-
Silencio.
-demuéstrame tu confianza…- Sebastián estaba receloso con la dirección de la conversación. Mejor pensar como un medico. Confianza, ciel la necesitaba.
-claro…pero como…?-
-espérame abajo…en el auto, deja que sea yo mismo el que se vaya y te busque. O cada vez que huya deberás buscarme y guiarme…-
-no me molestaría hacerlo my lord! Las veces que sea necesario…-
-Sebastián ambos sabemos que no lo haces por mi…lo haces por ti, por miedo a perderme. Temes de mí y de lo que pueda hacer. Necesito que confíes en mi, son solo unos minutos…-
-dejarle ir…dejarte ir! Es como morir…porque me pides eso?-
-para que veas que yo también soy capaz de ir a ti…de volver, ambos lo necesitamos…-
-no, vendrás conmigo-
-entonces te odio. Llévame contigo si quieres, oblígame a hacer y ser lo que quieras pero ambos sabemos que jamás seré yo.-
-porque quieres que sea tan difícil…porque deseas que duela tanto, estamos juntos ahora! Podría ser sencillo-
-porque los dos hombres que he amado no me aman a mí! Ni tu ni vincent me ama. Pero están tan convencidos de que lo hacen que incluso yo lo creía. Desean tenerme, complacerme, dominarme…desean que sean lo único que pueda ver…y lo han logrado, durante años no he vivido más que para ustedes, para el recuerdo del padre que me quería, para el recuerdo del hombre que prometió salvarme…estoy tan asustados por que anoche note que el primero ya no existía y ahora estoy probando que el segundo desaparece poco a poco. Eso me aterra Sebastián.-
-no seas tonto, como podría ser verdad cuando te amo más que a mi vida…si vuelves a decir que no te amo no se qué hare…-
-te estoy perdiendo, me amas, te amo pero igual te pierdo…-
……..
….
…
-esta bien. Te esperare abajo. Te esperare siempre y para siempre.-
Ciel sonríe, con esperanza desde la primera vez que le conoce. Dejarle por poco que sea es una tortura, pero ver esa sonrisa lo vale. Vale el dolor y el sufrimiento. Vale la agonía y el amanecer violeta en el cielo.
Se levanta y acomoda la ropa con pereza solo por tener un motivo de continuar viéndolo, de retrasar la partida solo un segundo, el chico intenta levantarse y devolverle la chaqueta.
-no, me la darás en el carro, me gusta mucho y quería tenerla de vuelta…-es un pequeño pacto “me gustaría tenerte de vuelta”. Ciel solo asiente y permanece un rato sentado. Más tranquilo. –tómala…-
Un arma fina y delgada pende frente a su cara.
-ahora es mi turno de pedirte, si alguien intenta meterse en tu camino y evitar que vuelvas a mi…mátala. Dispárale sin compasión.-
Ciel asiente tomando el arma y guardándola en la chaqueta. Sonríe, disparara a cualquiera…no importa quien sea.
-te amo…-
Es absurda la manera en que el amor te cambia y muta. Es sorprendente y monstruoso, como una palabra tan sencilla de esa persona te hace vibrar y delirar. Oír a ciel decir que le ama sin la más minina vergüenza u orgullo u pretensión, sin ningún egoísmo…tiembla de placer ante la mirada azul y ahora trasparente sin poderse ni quererse contener se inclina una última vez, besando los labios más dulces que probara en su vida, suave y tierno un último beso.
-te amo- repite las palabras mágicas considerando indigno el solo decir un “yo también” observa exactamente las mismas reacciones en el cuerpo más pequeño.
Sonríen.
Entonces Sebastián se da la vuelta con rapidez intentando evitar volver la mirada. Lo ultimo que ve de ciel antes de abandonar el edificio es como este alza el rostro hacia el amanecer naranja en dirección al sol saliente, con los ojos cerrados y la primera expresión de paz de su vida. Le ve feliz y completo. Sin la cadenas que le condenaran durante años. Se fue sonriendo. Con la extraña y desconocida felicidad invadiéndole los cuerpos.
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-sebastian michaelis en el cargo de 18 asesinatos, entre los cuales se cuenta la muerte de rachel phanton. Como se declara…?-
-culpable su señoría….-
-la condena será cadena perpetua en un centro de ayuda mental, con opción a libertad condicional a los 20 años-
El golpe seco, dio por cerrado el juicio, mientras el condenado era conducido a cumplir condena. La jueza contempla por última vez al hombre, ese asesino a sangre fría, capaz de torturar y masacrar a mas de una docena de personas. El hombre de ojos tristes pero sonrisa amable…un hombre del cual perfectamente se habría enamorado en cualquier otra situación. Ese hombre que admite sin la más mínima culpa sus ruines actos. No puede evitar sentir un escalofrió cuando este le mira y le da una última sonrisa de ojos cerrados antes de abandonar finalmente la sala.
Era tan fácil sentir empatía por esa persona…
“porque era lo correcto, incluso si estaba mal…”
“lo amaba”
“era la única opción”
“no podía perdonarlos”
“no espero que me entiendan o perdonen a mi”
“sé que lo que hice estuvo mal, pero tenía que hacerlo”
“no lo lamento”
“debía hacerlo”
“está bien, merezco pagar…pero no por esas muertes si no por no protegerle”
“quería justicia, quiero justicia incluso contra mi”
Ese hombre. Ese hombre perseguiría a todos los presentes en la sala o del caso hasta sus últimos días. Algo oscuro y retorcido había despertado en todos los que habían tenido contacto con el. Algo que lucharía cada dia de su vida por mantener en la oscuridad de su mente.
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Apretó con fuerza el volante al ver por incontable vez al cielo, al edificio donde había dejado a ciel.
Vio caer el trozo de tela con rapidez, fácilmente reconoció su propia chaqueta cayendo y chocando contra el suelo después de ser alzada y bailada por el viento.
“la querría de vuelta”
Esta mal, estaba mal desde el momento en que la vislumbro.
Un disparo.
Una mancha oscura precipitándose al asfalto. Vincent, lo sabía antes de reconocerlo.
Silencio.
-vuelve…- sabía que no volvería.
Sonrió destrozado.
Un segundo disparo.
Silencio, y sus lágrimas corriendo….
Intento sonreír por él. Por ciel. Ciel que podría al fin descansar.
“estoy tan cansado”
“me gustaría sentirme seguro…..pertenecerme”
“ser solo mío al menos una vez”
“me dejarías morir?”
“disparare a cualquiera…quien sea…”
“te amo”
-a cualquiera eh? Incluso a ti mismo…-
Salió del auto ignorando los gritos y el escándalo, la gente corre y llora, nadie nota al hombre que camina tranquilamente entre la multitud, buscando.
Toma el abrigo y se lo coloca, buscando.
Encontrando.
“disparare a cualquiera que no me permita volver a tu lado….incluso a mí mismo, soy el único del que nunca me podre deshacer para ser feliz...No sé qué hago aquí. Pero como te amo. Incluso si corro como siempre. Te amo. Te amo sobre todo, incluso sobre la vida. Soy feliz. Soy tan feliz…volveré”
-lo fuiste ciel? Sonreíste antes de irte cierto…-
Entonces el también puede sonreir.
“no puedo dejarlo, dejarte, no puedo continuar asi….lo siento”
Corre hasta el auto, tiene que esperar.
-eres tan hermoso, cuando te miro a los ojos, eres como un ángel, tu piel me hace llorar, flotas como una pluma, en un hermoso mundo, desearía ser especial, eres tan malditamente perfecto, pero soy un gusano, soy un moustro, que rayos estoy haciando aquí, no pertenexco aquí…-
Canta un poco, esa canción le recuerda a ciel. Están perfecta para el, para ellos, para toda su vida.
“como crees que la querria sin ti?”
Entonces se distrae porque ella esta ahí, rubia y hermosa, con una expresión de horror en el rostro, a solo un par de metros parada en la entrada del hotel, con sus preciosos ojos que miran de techo al suelo. Los hombres de su vida se han ido. Por un instante siente compasión pues ve su propia culpa y miedo reflejados en esa cara que le recuerda a el.
Su ciel, el ciel que ella dejo morir. Entonces solo la odia. Odia esos ojos tan parecidos pero diferente de los que el anhela. La odia por que esa mirada se burla de el, de su amor.
Oye una ultima vez la melodía en su cabeza
“me dejarías morir?”
-si, lo haría. Lo haría porque te amo-
Apreta el acelerador con todas sus fuerzas, la multitud vuelve a gritar, y ve por ultima los ojos de rachel asustados y somprendidos, antes de abandonar toda vida.
Esta muerta, lo sabe, no intenta huir. La pena en el es su verdadera condena, ninguna otra tendría valor, al saberse solo. Esta triste pero completo. Esta seguro que asi se sintió ciel antes de partir. Realizado.
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-No se muere de tristeza.-
-dilo cuanto quieras pero si se puede…el murió de tristeza, murió de amor.-
-pero…!-
-querido yo mismo hice la autopsia, nuestro amigo era perfectamente sano, comía normalmente, dormía normalmente, no sufría ningún dolor físico…solo cerró los ojos y murió con una sonrisa.-
-era feliz…?-
-de alguna forma ambos lo fueron…-
-es impo…!-
-yo mismo los vi! Ambos sonreían grell…ambos estaban en paz…-
-si para ellos fue suficiente, entonces esta bien…-
-yo…-
-lo se, yo también los quería…-
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¡Pobres de aquellos que no sepan amar!
Pobres de sus almas lastimosas pues nunca sabrán
Mayor dicha o dolor no conocerán
Que un amor que los podría asesinar en alma.
De dolores, placeres y torturas.
De locuras, argumentos y temores.
Este amor es tan imperfecto y doloroso.
No lo cambiaría por nada ni toda una eternidad.
Perdóname si te amo demasiado
Perdóname si no te amo lo suficiente.
También si te lastime.
Mas no me perdones en verdad, pues con locura te ame y nunca me arrepentiré.
Estoy loco.
Me declaro culpable.
Condéname a tus abismos.
Hazme cada cosa reprochable
Para que querría luna o sol
Siendo tú mas valioso mi ruiseñor
Toda la luz que necesito
Re genera en tus pérfidos ojos.
Le amo.
Le amo.
No me perdones nunca.
Solo te amo.
-es hermoso…-
-me hubiese gustado que dijeras lo contrario…- el chico cierra los ojos quitándole importancia al asunto.
-“solo te amo” es la mejor parte…tan nuestro.-
Hay un beso sobre sus parpados, una sonrisa colándose entre sus labios.
“no me perdones nunca Sebastián, simplemente te amo”