El día que decidí mudarme de casa de mis padres, no creí que mi vida llegaría a cambiar demasiado, abordaba un taxi rumbo a lo que seria mi nuevo hogar, había sido un viaje largo, me sentía cansado y fastidiado, no me gustaba permanecer tanto tiempo dentro de un carro, pero al menos iba feliz ya que por fin me había decidido salir de casa de mis padres para vivir solo, ya que el ambiente que había en casa de mis padres no era nada de mi agrado, desde que era pequeño me exigían demasiado, escogían todo por mi, nunca pude hacer algo que en verdad me gustara desde pequeño se la pasaron presionándome con mis estudios querían controlar cada cosa que sucedía en mi vida, pero por fin llego un día en el que me sentí muy aliviado ese día mi padre me dijo que como regalo de cumpleaños me había comprado una casa para que yo pudiera vivir solo, como en verdad lo deseaba, menciono que la casa se encontraba en un pueblo no algo “decente” odiaba que se expresará de esa forma de las demás personas el echo de que en la familia de la que procedemos sea una de las mas importantes y ricas de la ciudad no le daba el derecho a hacer menos a los demás!!... Nunca pude entender porque simplemente no era mas amable con todos tuvieran o no dinero…la voz del señor que conducía el taxi me saco de mis pensamientos, me indico que ya habíamos llegado a nuestro destino, le di las gracias pagándole y bajándome del vehículo, me quede sin palabras al mirar aquella casa que tenia en frente, no esperaba menos de mis padre, yo le había pedido una casa normal y el en cambio me dio una como para 7 personas, al menos la ubicación en perfecta, suspire, como a mi me gusta, en un lugar tranquilo, al menos después de todo tendría la paz que siempre quise, sin escuchar las discusiones de mis padres y mucho menos las ordenes, saque la llave de mi bolsillo delantero, camine hasta la puerta metí la llave y abrí la puerta me lleve de nuevo una sorpresa al ver que mis maletas ya se encontraban ahí pero eso no era todo la casa ya estaba arreglada, en ella había todo lo que pudiera querer incluso lo que no quisiera.
-Creo que mis padres exageraron mas de la cuenta- dije para después comenzar a recorrer la casa – mmm… me pregunto cual será mi habitación?..-hablaba conmigo mismo, recorrí cada una de las habitaciones que había en la casa subí por las escaleras, al llegar al segundo piso revise los cuartos que había ahí, hasta llegar a uno, el cual me llamo mucho la atención al mirar que dentro de este no había nada… se encontraba vacio, a acepción de una pequeña nota pegada en la pared, me acerque a ella, la arranque de la pared y comencé a leerla…
Hijo espero que sea de tu agrada la casa
Que escogimos tu madre y yo
Dejamos esta habitación vacía
Para que tú puedas acoplarla a tu gusto
Y te sientas mucho más cómodo en tu nuevo hogar
Pero no dudes en llamarnos si es que necesitas algo mas
-Sr. Souki
-Después de todo… tienen sus momentos amables- sonriendo levemente- Bueno creo que será una tarde larga mmm…debo salir a comprar una cama! – Sonreí- y tal vez una que otra cosilla para adornar mi recamara- Salí de la habitación rumbo a las escaleras, bajándolas, cuando llegue a la mitad de ellas recordé que había dejado las llaves en el suelo junto con la note, volví a subir entrar a la habitación y tomarlas, baje a toda prisa, note que en un mueble cerca de la entrada se encontraba un llave, con un control que al parecer pertenecía a la cochera- No se atrevió – dije con algo de enfado en mi voz, Salí de la casa rumbo a la cochera presione el botón que se encontraba en el control junto a las llaves, la puerta de la cochera comenzó abrirse, camine hasta ella –No puedo creerlo, si lo hizo- en mi voz se noto algo de desilusión- En verdad que no puedo creerlo- Volví a repetir- Le dije claramente a mi padre que no quería algo así – mire con descontento aquel carro que se encontraba frente a mi un Bugatti Veyron color azul- Se supone que no quiero llamar la atención en este lugar- un suspiro salió de mis labios mire dentro del automóvil, había otra nota de mi padre comencé a leerla…
-Se que me habías mencionada mil veces que no querías esta clase de cosas
Pero me fue imposible evitarlo, no iba a permitir que mi único hijo
Saliera a la calle, sin carro, viéndose como un pobre
Tienes que mantener la imagen de la familia
Y te advierto que si no usas el carro me veré obligado
Hacerte regresar a la casa aunque tenga que forzarte
-Sr. Souki
-Maldición, creí que me dejaría en paz cuando viviera solo, creo que no tengo opción- dije algo frustrado- al menos me servirá para ir a comprar lo que necesito- Tome asiento en el Bugatti, encendí el motor y me puse en marcha a lo que al menos tenia idea era el centro del pueblo, al fin llegue con algo de dificultad ya que aun era nuevo en ese lugar la verdad no lo conocía y tuve que detenerme a preguntar varias veces, me encamine a varios establecimientos comprando las cosas que iba a necesitar, lo ultimo que compre fue el televisor al salir del establecimiento el local que se encontraba frente a mi llamo mi atención, se trataba de una veterinaria, aun recuerdo que desde pequeño siempre quise tener un perro pero mi padre jamás me dejo ya que por desgracia el odia a los animales, claro con la excepción de que estos lo hagan mas rico entonces si los ama, me hacer que hasta la veterinaria, mire por el ventanal y note que en una pequeña caja se encontraban unos cachorros una sonrisa se escapo de mis labios al verlos- me vendría bien tener algo de compañía en esa enorme casa- pronuncie para después entrar, una campana que se encontraba encima de la puerta dio en evidencia que iba entrando a la tienda, un señor de edad media salió hacia el mostrador .
-Buenos días jovencito, en que puedo ayudarlo- me saludo amablemente mostrándome una sonrisa
- vine en busca de un perro- anuncie
-aquí tenemos una variedad de perros, como cual desea obte….- el señor no término de decirme la frase ya que un ladrido de perro lo interrumpió- calla – vi como el señor gritaba en dirección a una jaula...
-¿que clase de perro es?- pregunte mientras me acercaba hacia la jaula.
-Es un Husky Siberiano
-Me agrada-tome la perilla de la puerta de la jaula y la abrí.
-¡Joven no agá eso! - grito asustado – ese perro es muy agresivo, tenga cuidado
-¿¿Agresivo??- dije para después dejar salir al animal.
-cuida…do- note que el tono de voz del señor cambio al ver que el perro que había dejado salir se comportaba de una manera diferente, lo mire, tenia unos ojos azul claro muy hermosos, su pelaje era suave y color negro con blanco, al instante me di cuenta de que ese perro era perfecto para mi – lo compro- dije sin dudar
- no creo que sea buena idea…-
-pues….-pensé en algo que decir para convencer al señor- no dicen que el cliente siempre tiene la razón….Y a mi me parece buena idea, también es “a lo que el cliente pida”…-
-mmm…de acuerdo- al fin logre convencerlo, después de todo-pero…- ahí no…ahí viene el pero creí que ya lo tenia resuelto todo
-no se preocupe- respondí rápidamente antes de que se arrepintiera de vendérmelo- si algo llega a pasar, no lo are responsable- al parecer esas ultimas palabras lo habían confundido
- de acuerdo…-
Al fin logre convencerlo, compre lo necesario para la estadía del Husky en mi casa, como alimento, algunos juguetes, una cama y esas cosas, después de escoger las cosas, me encamine a pagar- ¿cuanto será de todo esto? – le pregunte mientras le mostraba las cosas
-¿Es usted de la familia de los Sasaki?- la pregunta me tomo por sorpresa
- aah?.. No se que habla- dije confundido, con un tono de curiosidad
-comprendo… es que su aspecto se me hizo muy familiar igual que el de esa familia-
-Quienes son los Sasaki?- El señor había despertado una gran curiosidad en mi
-Los Sasaki son la familia mas distinguida del pueblo- no se porque esa frase que me dijo me recordó mucho a mi familia- es la mas elegante una familia con mucho dinero-hizo una pequeña pausa- en lo personal son algo extraños no suelen socializar con nadie
-Ahh… ok- fue lo único que pude pronunciar a decir verdad a mi no me gustaba meterme en los asuntos de las demás personas, saque dinero de mi billetera y le page, espere a que me diera el cambio, en cuanto me lo dio lo tome y salí a toda prisa de ah, no quería empezar a crear mala fama en el pueblo, camine hacia el Bugatti, subí al Husky en la parte delantera mientras acomodaba las demás cosas en la trasera, me acomodé en el lugar de copiloto y en cuanto introduje la llave no dude en acelerar , quería llegar lo antes posible a mi casa, el calor ya me había sofocado y lo peor aun tenia mas cosas que hacer en mi casa, en cuanto me estacione frente a la cochera tome algunas cosas y las baje camine hasta la puerta junto con Husky quien me iba detrás de mi, en cuanto abrí la puerta el perro entro corriendo, entre y me dirigí justo a la sala, donde coloque la cama del perro aun lado del sofá, entre a la cocina donde acomode la despensa, junto con el alimento y juguetes del Husky, ya terminando eso subí por las escaleras rumbo a mi habitación, acomode las cosas que había comprado, al terminar baje rumbo a mi auto, donde aun se encontraba la televisión, la tome y me volví a dirigir hacia mi habitación ya me encontraba cansado de subí y bajar las escaleras, coloque la tele enzima de un mueble acomodándola para que estuviera frente a mi cama, me senté en el suelo para poder descansar pero así como me senté tuve que levantarme, alguien tocaba la puerta, tenia tanta pereza de bajar a abrir, además quien podría ser, algún vendedor deduje, pero después recordé que se podrían tratar de las personas que traería la base de la cama junto con el colchón, baje a toda prisa hacia la puerta, la abrí y en cuanto el joven me vio, me acerco una tablilla con una hoja
-Firme aquí- me entrego un pluma
-claro…- tome la pluma y leí, era el recibo de entrega, así que firme sin protestar, en cuanto firme otro sujeto se acerco y unos mas bajo del camión, los 3 bajaron la base y el colchón, les indique donde se encontraba mi recamara, la subieron bastante rápido, en cuanto terminaron su trabajo les di las gracias y se marcharon sin decir nada, yo me quede dentro de mi habitación para comenzar la remodelación de esta, seria una larga tarde así que para no aburrirme puse algo de música, la primera canción que salió de mi repertorio fue la de AN CAFÉ “Pierced” esa canción me gustaba mucho me recordaba en parte a todo lo que había vivido y que aun sentía, mi viejo hogar, y lo que seria desde ese momento mi vieja vida, comenzó a trabajar en la remodelación acomodando todo, moviéndolo de un lugar a otro, comencé a pintar la recamara un color verde oscuro no era raro que pintara mi habitación de ese color ya que el verde siempre a sido mi color favorito.
Sentí que alguien jalaba de mi pantalón gire un poco y mire detrás de mi, me di cuenta de que se trataba de husky
-¿Que pasa amigo….tienes hambre? – le pregunte, claro como si el me fuera a contestar, mire hacia el reloj y note que pasaban ya de la 1 de la madrugada – Vaya ya es tarde no me cuenta – Salí de mi habitación dirigiéndome hacia la cocina, tome uno de los recipientes del perro y serví alimento junto con agua del otro lado, puse el plato en el suelo, el Husky se acerco en cuanto olio la comida- Es verdad aun no te eh puesto nombre, como podre llamarte…- me puse a pensar en una cantidad de nombres, pero todos eran raros y no quería algo tan complicado y mucho menos raro, quería algo simple que pudiera recordar a todo momento – Hoshi….- pronuncie – me agrada como suena, te llamaras Hoshi….- Mire el reloj de mi muñeca ya había pasado media hora, subí rápidamente las escaleras hacia el baño, tendría que tomar un baño después del día tan agitado que tuve además, mañana seria mi primer día de clases y no quería ir mal presentado a la escuela, bueno al menos no quería que los demás pensaran que era una persona sucia, reí al imaginarme que los demás pensaran eso de mi, llene la tina con agua tibia, me desvestí a toda prisa y entre en ella, el agua estaba tan exquisita, tibia como a mi me gustaba, me relaje en la tina dejando que al gua recorriera cada rincón de mi cuerpo, Salí de la tina y me senté en un pequeño banco , tome la esponja y comencé a enjabonarme, me puse shampoo en la cabeza, me enjugue, termine mi baño, tome un atolla y me seque para después enrollara en mi cintura, Salí del baño y fui en dirección a mi habitación que se encontraba a dos puertas de mi habitación, entre y tome mi cambio de ropa, mire el reloj ya pasaban de las 2 am, ya era hora de acostarme no quería llegar tarde el primer día de clases, tome mi mochila, metí en ella algunos papeles que me faltaba de entregar en la escuela, algunas plumas y una libreta, aun no sabia que era lo que tenia que llevar exactamente a la escuela, en cuanto termine me avente en la cama me encontraba exhausto hundí mi cara en la almohada para poder conciliar el sueño, sentí como alguien lamia mi mano mire y era Hoshi le hice una señal de que subiera en la cama junto conmigo, se acostó a un lado de mi, volví acomodarme para dormir, creo que en cuanto cerré los ojos caí rendido, porque no supe que paso después de eso, al mañana siguiente sentía que alguien me empujaba pero la verdad tenia tanta pereza de mirar quien era, cada vez los empujones eran mas fuertes, hasta que llegue a perder el equilibrio y caí de la cama.
-¿¿Qué?? – me levante exaltado, mirando a todos lados hasta que mis ojos se posaron el Hoshi, supuse que había sido el quien me había empujado, ya que no había nadie mas cerca de mi en ese momento, me estire tratando de quitar el sueño que aun tenia, mire atreves de la ventana el día estaba nublado, como a mi me gustaba, mi familia me decía que era una persona rara, ya que siempre me gustaba que estuviera nublado y lluvioso, eran mis días preferidos y en este pueblo la mayor parte del día estaba nublado, aunque dependía también en la ubicación donde uno estuviera, camine hacia el mueble donde estaba la tele y levante el reloj me exalte cuando vi la hora, - ¡¡¡las 6:30!!! – tenia solo media hora para llegar a la escuela, tome lo primero que encontré de ropa me cambie rápidamente, tome mi mochila y salí a toda prisa hacia mi Bugatti, acelere a toda prisa, tenia solo 20 minutos para llegar a tiempo, lo bueno es que ya sabia donde estaba la escuela había venido antes de mudarme, estacione mi auto en le primer lugar vacio que vi, no tenia tiempo para ponerme a buscar n buen lugar, baje del auto, camine hacia la escuela, sintiendo como las miradas de todos me seguían en cada paso que daba, trate de no darle importancia, pero no pude , sentir aquellas miradas me incomodaron, camine mas rápido y mi equilibrio me traiciono, resbale, maldije a la acera mientras me ponía de pie.
-jaja- escuche una risa detrás de mi- aun sigues siendo algo torpe- mire por encima de mi hombro
- ¡¿¿Rika??!- dije sorprendido
-¡Hola! – Me saludo con una gran sonrisa
- ¿Que haces aquí?-
- pues… aquí vivo, ¿que no te acuerdas…?-
- aahh!, si ya lo recordé, hace 6 años que no te veía, has crecido bastante- reí avergonzado – No tenia idea de que estudiaras aquí en “Stylte”-
- Creo que olvide mencionarte eso en los mails que te mande
-Me alegra verte- le di un fuerte abrazo que ella correspondió- así no me sentiré tan solo- así era me parecía increíble ver a Rika después de tanto tiempo, antes solíamos vivir en la misma calle si casa estaba frente a la mía, éramos los mejores amigos, solo esperaba que eso no cambiara después de este tiempo que no nos vimos.
-Retomaremos el tiempo perdido- me sonrió- ahora veamos ¿en que clases estas?
- aun no se, aun tengo que llevar algunos papeles a la dirección-
- bueno, en ese caso te acompaño- volvió a sonreírme, aun recordaba esa linda sonrisa que me hacia avergonzar
Ambos caminamos al interior del edificio, ya dentro el ambiente era cálido, y se veía mucho mas grande de lo que lucia por fuera, caminamos hasta llegar a una oficina que al parecer era la dirección, tocamos hasta que una voz nos autorizo pasar, ya dentro vi a una señora lucia como de 38 años su cabello era rojo, traía una gafas, vi como andaba ocupada caminando de un lugar a otro acomodando los papeles, parecía que tenia mucho trabajo su escritorio se encontraba repleto de filas de papeles.
-Directora Caroline - hablo Rika
-Jovencita Rika, ¿en que puedo ayudarla?-
-A mi no, más bien a mi amigo, es nuevo en la escuela- me señalo
-Ya veo- me miro- ¿cual es su nombre jovencito?
-Cloud…. - me puse nervioso- Cloud Sakuma
- Si, ya se de quien se trata- vi como después de escuchar mi nombre se puso a buscar en los papeles, saco un folder color azul- ¿Traes los papeles que te faltan?
-Claro- rápidamente saque los papeles de mi mochila y se los entregue, los revisaba atentamente, uno por uno, sin perder algún detalle
- Todo, esta en orden, solo me falta entregarte tu hoja de horario- saco una hoja del folder azul y me la entrego
-yo la tomo- dijo Rika – nos retiramos, gracias por todo directora Caroline- nos despedimos, salimos de aquella habitación, solo veía a Rika mirando mi hoja e horario mientras murmuraba algo - estamos en la misma clase de gimnasia- dijo entusiasmada- también computación, artes y…- izo un pausa- escogiste la de criminología- note un tono de sorpresa en su voz.
- Si…-
- es hora de irnos-
- ¿a donde?-
-¡como que a donde…! No es obvio a clase, la primera que tendremos juntos es criminología- me tomo de la mano y corrimos hacia el salón al llegar me sentí aliviado de que el profesor aun no llegara, así no tendría mi primer retardo en mi primer día de clases, seguí a Rika hasta su asiento, me indico que me sentara a un lado de ella, los pupitres eran individuales, al sentarme, comenzó a hablar sin parar, hablo acerca de lo que había echo todo este tiempo que nos dejamos de ver, después de un rato perdí el hilo de la conversación, mire a los demás compañeros, permanecían sentados, alguno inmóviles, otros caminando de un lugar a otro, seguí observando hasta que mi mirada se detuvo en un pequeña figura, que se encontraba a una banca de mi, su mirada contemplaba lo que parecía ser el cielo fuera de la ventana, una parte de su cabello estaba teñido de rosa, y la otra era negra, lo que mas me llamo la atención fue la forma de su ropa, era extraña, extravagante, como a mi me gustaba, solo que yo no tenia el suficiente valor para usar ese tipo de ropa en publico, la miraba de arriba a bajo hasta que sentí que me observo y así fue, alce la mirada y nuestros ojos se encontraron, no pude evitar pensar en lo linda que era, su rostro era demasiado perfecto, parecía una linda muñeca de porcelana, sus grandes ojos color rosa me miraban fijamente, sentí como si tratara de saber lo que estaba pensando por la forma en que me miraba, desvié la mirada, aunque ya no la estaba mirando, sentía aun su mirada sobre mi, era demasiado penetrante tanto que me incomodaba.
-¿Cloud?- llamo- ¿Cloud me estas escuchando?-
-¿mande?, lo siento, me distraje un poco- me disculpe con Rika
-ya no importa-
-Oye…-
- ¿que pasa?-
-¿Quién es esa chica de cabello rosa?- le pregunte, solo vi como Rika reía ante aquella pregunta – ¿que es gracioso?- estaba confundido
-No es nada malo… es solo que… no es un chica, es un chico- respondió
-¡¡¿Un chico?!!- grite sin darme cuenta
-¡¡ush!! ¡Baja la voz!, ahora nos miran todos- dijo en voz baja- Si es un chico, su nombre es Keigo Sasaki
-Vaya….- después de decir eso, vi como Rika recobraba el tema de la conversación anterior, volví a mirar al “chico” pero ahora lucia diferente, parecía alterado, me pregunto que seria lo que lo había echo cambiar de estado, vi como se sostenía de la banca, juraría que estaba conteniéndose tratando de no abalanzarse sobre mi, un escalofrió recorrió mi cuerpo, poco a poco se ponía de pie aun mirándome con esa mirada de odio.
-¡¡Keigo!!- escuche la voz de un chico, busque de donde provenía esa voz, un chico de cabellera rosada, y ojos cristalinos color azul, se encontraba ahora frente a mi, me pregunte como había llegado ahí, no había escuchado que alguien se acercara, no deje de verlo, tenia un parecido a Keigo, el me miro, regalándome una gran sonrisa…nos quedamos mirando fijamente…..
Continuara…