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Yo y mi estúpida Muerte por xsaya

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Notas del capitulo:

Hola! gracias por leer y gracias por los revs...

lamento si tardé mucho en actualizar pero había tenido cosas importantes que atender antes de terminar el capi, pero bueno aquí está el 2° capitulo... espero que les guste

Ah por cierto, me dijeron por ahí que se les complican los dialogos, me gustaria saber por qué y cómo lo puedo solucionar!!

Sin más los dejo leer y espero que en ésta ocacion tenga mas opiniones en sus rev's, son lo más importante para mí, gracias ^^

-         Nos volvemos a ver... ¿ahora si te gusta mi ropa? – me preguntó con una cínica sonrisa en el rostro, no supe exactamente como reaccionar ante aquello, me quedé observando su atuendo como calificándolo para poder dar una respuesta a su pregunta, pero nada llegaba a mí –


 


-         Creo... – no es que no me gustara su ropa, llevaba un pantalón negro de vestir, una camisa blanca de manga larga con los primeros botones desabrochados, un chaleco negro, guantes negros de piel y una chaqueta negra e igualmente de piel, pero no pude decir más –


 


-         ¿Sólo dices “creo”? cuando nos vimos por vez primera casi me demandas por mi ropa y ahora que me visto bien a ojos de todos, tú vienes y dices sólo un “creo”


 


-         ¿Bueno y qué esperas que diga? Tampoco voy a alagarte por al parecer, aprender a vestirte bien en un día, sí, es admirable y creería que casi imposible si no fuera por ti... pero tampoco es para sentirte el rey del mundo – éste chico me exaspera rápido, vi que mi hermano daba la vuelta y se acercó a mi y al chico, del cual aún ni su nombre sé, mientras los otros tres se habían olvidado de mí por completo y habían ido por unos tragos –


 


-         ¿Qué pasa Taka-chan? – preguntó mi hermano al estar a un lado de nosotros –


 


-         Nada... sólo estábamos conociéndonos... – le respondí tranquilo –


 


-         Vaya manera de conocer gente la tuya, por eso no tienes novia


 


-         No necesito una novia, ni un osito de peluche...


 


-         Bueno ya... y ¿cómo se llama tu nuevo amigo? – preguntó al tiempo que dedicaba toda su atención al chico –


 


-         No se... – hice un puchero de fastidio ante eso, pues no sabía nada del chico y ya me estaba haciendo enojar -


 


-         Soy Suzuki Akira, un gusto en conocerlos... Matsumoto Takanori y Sakamoto Takashi, ¿no? – mi hermano y yo lo volteamos a ver completamente asombrados por lo que acabábamos de escuchar, pues ninguno de los dos había dicho nuestro nombre, cómo era posible qué él lo supiera, algo extraño pasa con él... o en el mejor de los casos le hablaron de nosotros –


 


-         Sí... esos mismos, ¿eres amigo del amigo de mi hermano? – preguntó tontamente Takashi –


 


-         Sí, bueno no, no del amigo que tú crees, soy amigo de Takashima, me trajo a la fiesta porque no quería que me quedara solo en casa, pero no conozco a Amane Shinji...- ¿cómo sabía que mi hermano se refería a Amane y no a Shima? ¡Ah!... este chico es desesperante, me voy de aquí, bueno esta bien no, ahí viene por quien vine –


 


-         Chicos ¿por qué no vienen con nosotros?, están realmente apartados... además un amigo te quiere conocer, Takanori - ¿cómo que un amigo suyo me quiere conocer?, ¡aish! Esto no va muy bien que digamos –


 


-         Bueno, ya que no quiero parecer un completo antisocial, iré contigo – dijo mi hermano sin perder ese aire arrogante que tiene, a lo que Amane sólo sonrió. Lo seguimos hasta donde se encontraban todos sus amigos, los cuales se veían con el mismo aire de superioridad y grandeza que Amane, en definitiva mi hermano encaja a la perfección con ellos –


 


-         Ellos son unos amigos de la universidad... – se dirigió a nosotros, presentándonos a los que eran sus amigos, los chicos más importantes y ricos de la región – Él es Kamijou Yuuji – nos dijo mientras señalaba a un chico de cabello castaño y poco quebrado, peinado perfectamente, de tez blanca, ojos celestes y expresión fuerte, al igual que la mirada, creo que es el chico que tiene mayor porte imponente de todos y su vestimenta es bastante elegante, nos saludo a los tres con una leve inclinación que le dio un aire de suma elegancia –  Él es Ogata Takahiro – esta vez señalo a un chico de cabello muy largo, liso, brilloso y negro, mirada penetrante y ojos delineados, su ropa era de suma elegancia: traje con chaleco incluido, un sombrero negro y un bastón de complemento – Él es... bueno, simplemente llámenlo Yuura – dijo al tiempo que señalaba a un tercero, un chico que parecía de infinita seriedad - Y por último, él es Karino Satoru... – terminó, lanzándome una mirada que me decía que él es el que está interesado en mí. Era un chico demasiado alto a mi lado, de tez pálida, ojos bastante delineados de negro y unas rastas cogidas en una coleta, el fleco lo llevaba lacio, ropa extravagante sin llegar a ser ridícula y con un porte imponente, pero en definitiva, lo que más llamaba la atención en él y con buena razón, era su cabello, vaya manera de hacer que las rastas se vean bien –


 


-         Un gusto en conocerlos... yo soy Sakamoto Takashi – como siempre, mi hermano no necesita de nadie más para socializar y volverse popular en menos de lo que dice su nombre –


 


-         ¡Ah! Él es Matsumoto Takanori – me presentó Amane, tocando ligeramente mi hombro y dirigiéndole una mirada cómplice a Karino – Y él es... – calló, confundido, pues se había dado cuenta de que realmente no sabía el nombre del chico que nos acompañaba –


 


-         Es un amigo de Shima, Suzuki Akira


 


 


Nos quedamos un rato platicando con todos ellos y bebiendo un tanto, pues Amane se encargaba de que nuestros vasos jamás se quedaran vacíos, lo malo es que yo no tomo mucho y se me sube en cuestión de segundos y al parecer Akira tampoco suele tomar mucho, pues ya está un tanto con el alcohol en la cabeza y sin poder caminar decentemente y derecho, me percaté de que no había visto a Kohara desde que se separaron de mí cuando me quede platicando con Akira, lo busqué con la mirada y fui a hallarlo platicando con un chico que jamás había visto, decidí ir con él, pero sentí como alguien tiró de mi camisa y volví la vista, encontrándome con Karino.


 


 


-         ¿Tan pronto te vas? – me preguntó con una ligera y sincera sonrisa –


 


-         Yo... sólo iba con un amigo


 


-         ¿Me vas a dejar solo? – ¿por qué me pregunta algo como eso? A veces odio a esta tipo de personas porque no sabes como decirles las cosas y es que no puedes negarles algo tan groseramente como desearías hacerlo –


 


-         No... – me limité a responder, más bien, no encontré otra respuesta –


 


-         Así que Takashi y tú son hermanos... – dijo calmadamente – Nunca te había visto en la universidad, ¿en qué área estás?


 


-         En la misma que ustedes, ciencia...


 


-         Uhm... me alegro – dijo y sonrió ampliamente, ahora que lo veo es realmente atractivo - ¿También eres de nuestra generación?


 


-         No, voy en segundo año, bueno, cuarto semestre – Karino, Amane, Shima y Shiroyama... y bueno, los demás amigos de Amane son alumnos de 6° semestre, por tanto un año superior a nosotros. Seguí platicando con él durante 2 horas, 2 horas en las que también bebí como nunca hasta llegar a tal grado de no saber exactamente lo que pasaba ni lo que decía, sólo contestaba sus preguntas como bien podía, 2 horas en las que al parecer el mundo decidió abandonarme pues no vi a ninguno de los chicos por ese tiempo –


 


-         Mmm... ¿te gusta Tora? – escuche otra de sus tantas preguntas –


 


-         ¿Quién es Tora? – pregunté y el soltó una gran carcajada, no es que estuviese evadiendo su pregunta, en verdad no sé quién es Tora –


 


-         Tora... Tora es Amane Shinji... así le llamamos, cuando pasen a 5° semestre verán que les asignan un sobrenombre, es como una tradición de la universidad – Ah, ahora entiendo por qué a Shima a veces le llaman Uruha y a su tonto novio, Aoi -


 


-         Ah... entonces la pregunta sería ¿te gusta Amane Shinji? – pregunté estúpidamente, pues ya no pensaba ni lo que salía de mi boca –


 


-         Aja... y la respuesta es...


 


-         Uhm... sí – dije de nuevo sin pensarlo lo suficiente –


 


-         ¿Y qué hay de mí?


 


-         No estas mal...


 


-         Pero...


 


-         Pero no eres Tora – respondí y el comenzó a reír fuertemente de nuevo –


 


-         Me agradas... más de lo que crees – se acercó rápidamente a mí hasta quedar tan cerca que podía sentir su respiración en mi rostro, y de un momento a otro sentí sus suaves labios sobre los míos, me quedé completamente rígido y sin saber qué hacer, tenía a uno de los chicos más populares y cotizados de toda la universidad besándome, y yo simplemente no sabía cómo reaccionar. Cerré los ojos por pura inercia y disponía a responder el beso cuando sentí que se apartó de mí, cuando abrí los ojos vi a mi hermano detrás de Karino, sosteniéndolo por el hombro delicadamente –


 


-         Los labios de Taka-chan son sólo míos – dijo sonriendo suavemente, yo sólo atiné a ruborizarme por su comentario y Karino lo miró desconcertado –


 


-         Es tu hermano...


 


-         Por algo existe el incesto


 


-         No creo que lo practiquen


 


-         Tú no sabes muchas cosas de nosotros


 


-         Takashi... – interrumpí, pues aquella conversación me estaba comprometiendo en demasía con mi hermano – Basta, será mejor que vayamos con los demás


 


-         Bien, como quieras, si nos disculpas Satoru – se despidió reacio de Karino –


 


-         Llámenme Ruka... – nos dijo y dio media vuelta volviendo con los suyos. Miré a mi hermano con reproche por lo que había dicho segundos atrás, estaba a punto de discutir la cuestión cuando comencé a escuchar un ajetreó proveniente de la parte del fondo del salón, miré a mi hermano quien estaba igual de sorprendido que yo y luego miramos hacia el fondo.


 


 


Kohara se encontraba peleando con un chico que al parecer se estaba ya un poco tomado, sólo podía escuchar los gritos de aquellos dos y de pronto Kohara arrojó lo que quedaba de bebida en su vaso al rostro del otro chico y éste empujó a Kohara que estuvo a punto de caer. Corrí hacia donde estaba mi amigo, no quería que se metiera en problemas así que estaba dispuesto a interferir en aquella pelea, mi hermano me siguió y cuando hube llegado al lugar Kohara ya se había levantado y golpeado al otro chico en el rostro, quien no perdió el tiempo y se fue contra él de igual modo.


 


 


-         Shima... ¿qué paso? – le pregunté cuando llegué, como única alternativa que tuve –


 


-         No lo se, y tampoco creo que sea tiempo de explicaciones... – tenía razón, teníamos que detener la pelea, uno de los amigos del chico con el que se estaba peleando Kohara se metió a la pelea, pues vio que su amigo iba perdiendo. No pensaba dejar que alguien más comenzara a pelear con mi amigo así que me metí también, cuando comencé a golpear al chico, sentí un inmenso dolor en la cabeza y supe que alguien me había golpeado con una botella por detrás, escuché un grito de mi hermano y segundos después me empujó hacia donde estaba Amane, quien acababa de llegar, él no me dejó volver a meterme e hizo que los hombres que trabajan para él separaran a los que en esos momentos ya se encontraban pelando, pero antes de que lograran sepáralos por completo uno de los chicos sacó una navaja de su bolsillo y apuñalo a uno de sus mismos amigos con el propósito de que lo soltaran pero sin éxito alguno –


 


-         Sáquenlos de aquí – dio la orden Amane y fue obedecido al instante -


 


-         Creo que también debemos irnos – dijo mi hermano con tono de enfado, mientras seguía revisando la herida en mi cabeza –


 


-         No te preocupes, no los mandaré a sacar – dijo Amane en tono burlón –


 


-         El chico está bastante herido, deberíamos pedir ayuda – Kohara como siempre preocupándose más por los demás antes que por él –


 


-         No te preocupes, él no morirá – dijo Akira con bastante seguridad –


 


-         ¿Cómo lo sabes? – pregunté tajante –


 


-         Sólo... lo sé – Shima lo miró entre enfadado y preocupado, sé que algo importante me están ocultando y pronto lo averiguaré, mientras me ocuparé de mi amigo –


 


-         Takashi estoy bien... – comenté ya fastidiado de que mi hermano no dejara de revisar mi herida. Me soltó por fin y me acerqué a Kohara, pero antes de poder siquiera preguntar algo, Karino llegó y me abrazó con tal fuerza que por un instante sentí un mayor dolor en la cabeza –


 


-         Takanori... ¿estas bien? – me preguntó soltándome ligeramente y mirándome de arriba abajo –


 


-         Sí... sólo quiero saber si Kohara está bien


 


-         No te preocupes por mí, Taka-chan.... no me hicieron nada... Akira me ayudo bastante - ¿cómo que Akira le ayudo? Yo ni vi que moviera un solo dedo –


 


-         Bien, será mejor que nos vayamos... – dijo Shima, y su novio se mostró de acuerdo –


 


-         ¿Por qué no se quedan esta noche? – nos preguntó amablemente el dueño de la mansión –


 


-         No queremos causar más problemas... – se apresuró a contestar Kohara –


 


-         Será mejor que se queden... además los problemas no los causaron ustedes o al menos eso alcancé a apreciar – después de pensarlo y discutirlo un poco decidimos quedarnos, Amane nos llevo a diferentes habitaciones pero negué a dejar a Kohara solo, así que compartiríamos la habitación. Shima se quedó hablando con Amane y Akira en el pasillo un rato, antes de entrar cada quien a su habitación –


 


-         Deben tener cuidado con ellos en la universidad – dijo Amane completamente sereno –


 


-         ¿Por qué? – preguntó Shima un tanto confundido –


 


-         Ellos no son de los que se quedan satisfechos cuando tienen una pelea y no ven que la ganen a todas luces


 


-         No creo que debamos preocuparnos por eso, tenemos un buen as bajo la manga, ¿no, Akira? – contestó Shima, con cierto aire de misterio en la voz –


 


-         No estoy seguro... no sabes todas las restricciones que hay, pero estarán bien, al menos vivirán un rato más – contestó, Shima sólo hizo un puchero de disgusto y Amane no entendía nada de lo que hablaban –


 


-         Pero gracias por preocuparte.... buenas noches – dijo y se retiró a su habitación junto con Akira, Amane sólo se quedó observando hasta que las dos siluetas desaparecieron por completo del oscuro pasillo - 


 

Notas finales:

bueno ya está, gracias por leerme!!

responderé todos sus comentarios!


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