Se veía dos siluetas caminar en el bosque en la oscuridad de la noche siendo reflejados por la hermosa luz de la luna se detuvieron en medio de un claro y se abrazaron, aunque se viera hermoso, para ellos era lo mas doloroso y nostálgico que harían en sus vidas…
…o al menos lo que quedaba de una de ellas.
El rubio empezó a cantar una canción k ambos conocían y les dolía escucharla pero era lo mas cercano a lo que ellos vivian
Para que............
Para que no me olvides
Te dejare mis versos escritos en el viento
Que enredara tu pelo
Y si al volver al día en que nos conocimos
Sientes algo en el pecho es mi voz que te llama
El azabache lo miraba atentamente, le encantaba como cantaba el rubio, espero a que pausara para el poder cantar lo que seguía
Para que no me olvides
Se encargara la luna de susurrar mi nombre
De acariciarte el alma
Lo interrumpió el rubio y cantaba con más intensidad, las lágrimas en sus hermosos ojos azules ya no se hacían esperar, según la descripción de Itachi los ojos de Deidara eran tan intensos y profundos como el mar azul que hacían temblar y embelesaban a cualquiera.
Y si al volver al día en que nos conocimos
Sientes algo en el pecho es mi voz que se apaga
El azabache limpiaba las lagrimas del menor y como vio que el rubio no seguía por su llanto quiso seguir el, odiaba verlo llorar, sabia que por egoísta hacia sufrir a Deidara, debió alejarlo cuando pudo pero no cambiaba la felicidad que ahora sentía estando con el rubio a su lado, ojala no se acabara nunca pero en el mundo nada es eterno y el pelinegro lo sabe perfectamente, el tendrá que partir algún día.
Y si es que hoy debo partir debo alejarme de tu amor
Tendremos la eternidad para extrañarnos
Te llevare mi corazón
Hizo una pausa para darse un respiro, era un Uchiha no se permitía llorar aunque lo deseara con toda el alma en este momento, el rubio se acercó un poco mas y puso su frente en el pecho del otro así sintiendo los latidos del mayor y cantando ya desanimado la siguiente parte.
Y tú una rosa me darás
Pero con ella moriré cuando la cortes
Esta frase les hizo sentir mal, sabían por la promesa que hicieron cuando Itachi le conto toda la verdad a Deidara, una rosa indicaría el adiós de Itachi, al rubio le partía el corazón ese hecho empezaron a llorar ambos al tiempo se abrazaron no aguantaban mas se necesitaban uno con el otro, se vieron y cada uno le limpio las lagrimas a su acompañante para luego durar en un largo, profundo, tierno y a la vez doloroso beso en el que se transmitían cada sentimiento que tenían por el otro.
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Ya pasado un mes Deidara sintió que algo no cuadraba asi que paso a buscar a Itachi a su alcoba le daba un mal presentimiento así que quería ir a ver que todo estaba normal, entro a la alcoba de Itachi pero lo que vio no le gusto nada
Se acerco rápido a la cama y tomo la rosa con la carta la cual decía una parte de la canción que cantaban cada noche
“Y si es que hoy debo partir debo alejarme de tu amor
Tendremos la eternidad para extrañarnos”
El rubio salió de la cueva llorando al claro del bosque donde siempre cantaban y lloro en silencio por un buen rato hasta que tobi llego a anunciarle que el líder los llamo a una reunión importante.
Deidara no soltaba su rosa, y se alegro tanto al ver que Itachi estaba en la reunión, aunque fuera un holograma le decía que aun estaba vivo, sonrió y lo miro con amor e Itachi correspondió.
Se entero que Sasuke estaba rondando y se le cruzo la idea d matarlo así no le quitaría la vida a su Itachi y decidido fue, el azabache preocupado estaba pero dijo que así tendría que pasar, no soportaría que Deidara quedara sufriendo por su culpa, pero ahora no se perdonaba que entregara su vida por el, ¿por k entregarla?, Itachi sabia perfectamente que Sasuke era fuerte y Deidara no podría ganarle, salió una lagrima en silencio y todos los hologramas desaparecieron.
“Te llevare mi corazón y tu una rosa me darás
Pero con ella moriré cuando la cortes”
Con la rosa en las manos Deidara se enfrentaba a Sasuke se sentía muerto en vida, pero matar a este Uchiha le daba esperanzas de estar con su Itachi mientras Itachi se sentaba lejos de allí a pensar en todo lo que había vivido últimamente con Deidara, como se entregaban cada noche, como cantaban juntos, su peleas, sus reconciliaciones, las ocurrencias de su rubio angel, recordando todo hasta el mas minimo detalle de su estadia con el rubio, sus ojos, sus manos, su sonrisa, su cuerpo, recordando todo salían lagrimas en silencio, el fin estaba muy cerca y todo esto dolia, la separación de dos corazones, es algo que aun el mas cruel ser no aguantaría.
Para que no me olvides
Te dejare mis versos escritos en el viento
Que enredara tu pelo
Pasaba una ráfaga de viento a la cual Itachi dedico unos versos para Deidara “mi dulce ángel que por mi te entregas deja ese sufrimiento escapa y se feliz sin mi” se veía como la ráfaga pasaba donde estaba el rubio y el azabache menor enfrentándose alborotando el cabello rubio y dándole la calidez de una caricia al mismo, en medio de dolor y sangre siguio con su batalla, aunque ya no le quedaran casi fuerzas tenia que ganar para estar con Itachi siempre.
Y si al volver al día en que nos conocimos
Sientes algo en el pecho es mi voz que te llama
El azabache mayor dejo escapar con un suspiro y en susurro el nombre del ojiazul “Deidara” y el ojiazul sintió un calor envolverle el corazón, sabia que Itachi estaba pronunciando su nombre, significaría el fin y esto lo embargo de gran tristeza, fuerza ya no quedaba casi solo el sentimiento, tirado en el suelo enfrente de Sasuke, seria perfecto si tuviera un poco mas de fuerza, Sasuke estaba debilitado pero el se sentía aun peor.
Sientes algo en el pecho
Es mi voz
Es mi voz que se apaga
Las esperanzas se esfumaron, no estaría con Itachi, y un acto de puro orgullo, dolor, desesperación y de impulsividad estaba a punto de cometer, su explosión, moriría con su arte como siempre soño, pero a costa de dejar a Itachi morir en manos de Sasuke, dejar su felicidad en la tierra.
Era el ultimo momento de vida del rubio un solo pensamiento y un solo sentimiento, el amor no acabaría hay sabia que se recordarían por siempre y al menos Itachi sobreviviría pensando en el y si no les quedaba todo el tiempo del mundo en el lugar después de la muerte...un ultimo susurro y una ráfaga de viendo cruzándose “te…te amo Itachi”.
El azabache mayor sintió el calor en su corazón y luego el vacio, había terminado y con un mar de lagrimas en su rostro ahora sabia lo que había sucedido y ahora Deidara había muerto.