Resonaba en su cabeza su rápido andar en los pasillos además de su respiración agitada, el sonido del timbre que indicaba el fin de las actividades escolares fue como una señal específica para cierto ojirojo que en cuanto aquel sonido pasó por sus oídos en tan solo tres apresurados movimientos tomó sus útiles los guardó en su mochila y salió del salón lo más rápido posible…de su mente no salía la imagen del rubio y la preocupación por su repentino decaimiento, ingresó a la enfermería y con una ligera reverencia saludó a la enfermera posteriormente cuestionándole acerca de Fye
-Flowright-kun? Acaba de llegar hace una hora-señaló la enfermera con una sonrisa algo compasiva al notar la obvia preocupación en el rostro del pelinegro –tú…-murmuró al reconocerlo –ya veo eres el de aquella vez-una sonrisa se formó en su rostro –tu nombre es Kurogane, verdad que sí Suwa-kun?
-cómo es que…-
POV Fye
Abrí mis párpados lentamente, por si sola una de mis manos se situó en mi frente demostrándome que la fiebre había cedido por fin. Lancé un leve suspiro y me estiré un poco, me sentía bastante relajado, sin embargo esto no me duró demasiado puesto que escuche repentinamente unos gritos-“algo muy raro en la enfermería”-pensé mientras me asomaba a ver lo que ocurría.
-e-eso no es de su incumbencia!!-exclamó un chico de cabellos negros dirigiendo su mirada rojiza a un costado
-no es necesario que te pongas tan nervioso solo bromeaba- dijo tranquilamente la enfermera mientras sacaba su cuaderno revisando la lista de alumnos que acudieron el respectivo día
-pero >.<!
- a ver… el único que se ha presentado el día de hoy al parecer es Flowright-kun, se encuentra en la penúltima cama del fondo a la izquierda
Solté un risa levemente por el rostro ruborizado de Kurogane, se veía tan divertido, sin embargo centré mi atención en ellos nuevamente al escuchar una carcajada de parte de la enfermera que tapaba el cuaderno evitando que Kurogane-el cual se encontraba inclinado en un intento por leer algo
-eso no es información que se le deba dar a un estudiante-aseguró ella con una sonrisa mientras Kurogane lanzaba un bufido por lo bajo -deberías ir a verlo ya es hora de volver a sus habitaciones-
-h-hai- dijo Kurogane mientras comenzaba a avanzar para recogerme…inmediatamente me dirigí de nuevo a la cama haciéndome el dormido.
Fin POV Fye
POV Kurogane
Ese intento de enfermera me tenía con la paciencia colmada, me intrigaba saber cómo y dónde estaba Fye, ya que me dejó sobresaltado el hecho de que se haya marchado del salón tan repentinamente, cruzando unas cuantas palabras con el profesor que no alcancé a escuchar, tuve que utilizar mi autocontrol para evitar salir junto con él, en fin ahora tampoco pude ver su estado que seguramente habría hallado en las anotaciones de la enfermera…demonios! Justo al antes de encaminarme hacia las camas logré oír algo que esclareció mis preguntas pero que sin lugar a dudas…
-no te preocupes, en este mismo momento ya debe encontrarse un poco más estable, no obstante…ha estado así ya bastantes veces de igual o peor manera-
-ya veo…gracias-susurré pasando por su lado apresurando el paso
…no me tranquilizó para nada.
Llegué a la susodicha cama hallando ahí efectivamente al pelirrubio que tanto conflicto en mi cabeza había causado, me senté justo a su lado sobre la cama mientras él se revolvía ligeramente entre las sábanas, se veía tan calmado pero…todavía se hallaba pálido.
-¿cómo puede ser que estés en peor estado que cuando me marché?-pregunté en un suspiro, no esperaba que me escuchara ni menos que me respondiera, tan sólo…lo dije porque sentía la necesidad de hacerlo-“además creo que mi ausencia tuvo algo que ver”- me sentí culpable y aunque me cueste admitirlo algo contento, eso significaba que el hecho de que esté a su lado no le era indiferente-“que gran egoísta puedo llegar a ser”-
-mnh…kuro-chan-susurró provocando que un intenso calor subiera a mi rostro menos mal que estaba dormido y no podía verme.
-Kuro-sama…-repitió mi nombre con otro apodo, entreabriendo los ojos un poco, el calor que sentía en mi rostro se incrementó aún más por la imagen frente a mis ojos: Fye se encontraba con su pelo rubio algo alborotado observándome con sus orbes azules mientras los rayos del sol que desde el exterior traspasaban la ventana filtrándose por la cortina delineaban su silueta haciéndole lucir tan…encantador? no, no, esa palabra no encaja con la que utilizaría, a ver… la hacía lucir muy bien, sí creo que esa es la palabra más adecuada para describirlo (que no arruine mi orgullo como chico)aunque a estas alturas creo que ya use bastantes así, en verdad eso de que te guste alguien es tan…
-Kuro…- me llamó nuevamente mientras extendiendo una de sus manos jaló de una de las mangas del uniforme al parecer tratando de llamar mi atención
-pero qué… ¿sucede algo?-cuestioné aproximándome más a él, esperando por todo lo que me quisiera decir
- te sonrojaste…-declaró con una sonrisa juguetona en su rostro, fruncí el ceño levemente al momento que con unas de mis manos cerrada en un puño choqué suavemente la mejilla de Fye a modo de reprimenda
-baaka- fue lo único que argumenté, aunque tal parece que mi “reprimenda” tan sólo logró divertirlo más ya que una risa se le escapó de sus labios
-arigato…- soltó luego de detener su risa posando su mano sobre la mía, observándome de una manera que no logré descifrar del todo pero la sensación que me causó fue de completa serenidad y calidez, sin embargo eso desapareció al notar algo extraño en el ambiente y un ligero cambio en su mirada, además de que su mano presionó un poco la mía con algo de inquietud, sonreí levemente y deposité un beso en sus labios, ese ambiente desapareció dejando nuevamente la sensación anterior junto con una sonrisa marcada en el rostro de Fye, su mirada también volvió a la normalidad…
Nos marchamos de la enfermería dirigiéndonos a nuestra habitación, conversábamos en el camino observándonos en ocasiones y admirando en otras el paisaje lleno de estrellas que se vislumbraba por los ventanales en los pasillos. Finalmente llegamos a nuestra habitación, e inmediatamente nos alistamos para dormir, primero el pijama…
-…tranquilo no te observaré, de acuerdo?-dije mientras me giraba dándole la espalda tratando de calmar la tensión que hubo en él de repente en cuanto se despojó de la parte superior del uniforme y notó que se encontraba enfrente mío
-hai…-susurró algo apenado –lo siento-
-no tienes de que disculparte-aseguré mientras también me despojaba de mis ropas –“además soy responsable de que te incomode estar así frente a mí”-pensé, aunque lo sentí algo más fuerte para haberlo solo pensado
-n-no me incomoda-dijo por lo bajo
El ambiente se tensó un poco sin querer dije mi pensamiento en voz alta…decidí no contestarle. En cuanto cada uno se colocó su pijama apagué las luces, él se situó dentro su cama yo hice lo mismo…pero en la mía, aquello pareció desconcertarle un poco
-Kuro-ruro…etto…¿no dormirás conmigo?-me preguntó algo confuso
-desde ahora deberíamos dormir en camas separadas-
-pero…-
-Entiéndelo!-“maldición levanté la voz sin pensarlo”-
-hai…lo siento-dijo con una tristeza muy notable en su voz
-no estoy…-
-buenas noches-dijo rápidamente ocultándose entre sus sábanas
-b-buenas noches- lancé un gran suspiro, debería aprender a controlar un poco más mis impulsos-“se suponía que yo debería disculparme, no él”- pensé y me dispuse a dormir, sin embargo…
-soy un estúpido, yo le…-
- nunca lo entenderías…-
Nuevamente voces llenaron mi mente junto con un ligero mareo, rápidamente apoyé mi peso colocando ambas manos sobre la cama, debí esperarme que esto sucedería de nuevo como tantas otras veces, maldición! ¿Qué demonios significan esos fragmentos tan confusos? “al parecer nunca los entenderé del todo” ese pensamiento ya ha rondado por mi cabeza demasiadas veces como para contarlas, como si fuera la única conclusión que puedo sacar al respecto...aunque esta vez tan sólo escuché voces y ya no logré divisar nada en absoluto tal vez…ya no esté tan lejos de llegar al fondo de todo esto…
Pasó una hora aproximadamente y no lograba conciliar el sueño, repentinamente un ligero temblor y un fuerte sonido llamó mi atención, sin embargo Fye no dio ninguna señal de despertarse, acaso ¿tan sólo lo sentí yo?, espero que no, sin embargo sentí que debía ir a investigar lo que sucedía, era como si…algo allí me llamara, o algo así, no lo dudé más y tomado una chaqueta me dispuse a salir de la habitación, antes de salir le dirigí una mirada a Fye por un momento se me pasó la idea de regresar como si no hubiera escuchado nada y meterme en su cama, abrazándolo, disculpándome, sintiendo su calidez y su aroma…otro fuerte sonido me sacó de mis pensamientos…era verdad…no podía hacer tal cosa, era por su bien…además “hay un lugar al que debo ir ahora”-pensé con determinación y cerrando la puerta de la recamara y posteriormente saliendo del instituto, en cuanto estuve afuera vi lo que al parecer fue…una explosión pero…
-por esa dirección está mi casa…-mis sentidos no me respondieron y me quedé completamente atónito ante ese pensamiento.
Continuará…