Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La Ilusión del Pianista por Okaru Sekai

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Una inspiración un tanto curiosa... el primer fic que subo a la red...

 

 

Llovía esa tarde, me encontraba esperando como cada miércoles luego de las 6pm a esa señora cuarentona con ningún talento especial, ninguna facción atractiva con la cual distraerme, ni siquiera un nombre interesante, pero era quien me enseñaba algo que a lo que le tengo un enorme cariño, la técnica para dominar un simple objeto mediante el cual mis más desenfrenados deseos o pensamientos se interpretaban en exuberantes sonidos armónicos o deliberantes... dos golpes en esa medianamente vieja puerta de madera difuminaron mis pensamientos, ¿Quién podía ser? Esa señora siempre irrumpía mis profundos vacíos con cuatro feroces golpes, como si su vida corriera peligro...

El joven muchacho, de mediana estatura con un cabello negro bastante revoltoso decide abrir la puerta con un mínimo de interés convencido de que será algún vendedor o religioso que harán perder su tiempo, en su recorrido hacía la puerta vislumbra un reloj que marca las 6:30pm y comienza a recordar lo puntual que es su profesora, el recorrido se hizo corto y no le dejo terminar sus pensamientos.

-    Buenas tardes, ¿qué se le ofrece?

-    Buenas tardes, ¿es usted el joven Sebastián?

Dudoso de confirmar o negar ante la pregunta de ese hombre con facciones delicadas pero realmente hermosas, una pulcritud devastadora y una mirada fría e intimidante, un rostro desconocido pero aun así conoce su nombre, decide, finalmente, seguir "el juego del destino" y contesta:

-    Hmm... sí soy yo, y, ¿usted es?

-  Su nuevo profesor de piano joven Sebastián, Léonard Eströffer a su servicio. -reverencia formal-

-   Nadie me ha informado de esto ¿le ha pasado algo a la señora Annette? -Annette, así se llamaba la cuarentona carente de algo interesante, ósea, su profesora de piano-

-  Me parece desconcertante que no se le haya informado con anterioridad, aquí le traigo una carta de su padre con la puntual petición de que sea yo quien sustituya a madame Annette.

- Ya veo, adelante -guiándolo hacia la sala donde se encuentra el objeto de interés común-. Así que Annette viajo fuera del país, jaja ojala se quede por allá lejos.

- He de suponer que no es un deseo con intenciones nefastas, usted tendrá sus razones por decir aquello -se detiene encantando ante el instrumento majestuoso- Ooh... es un Érard muy hermoso, como una virgen a punto de entregarse ante los deseos más bajos y carnales del ser humano... ahh... será un completo honor enseñarle jovencito.

Sebastián se sorprende por las palabras de su nuevo profesor, su mente joven, indiferente ante el mundo que pronto tendrá que vivir, sólo concluía que la música no era más que un medio de comunicación social con fin de lucro o prestigio, pero ese hombre que no tendría mas de 35 años, comparó un instrumento con una joven quinceañera al borde del deseo sexual, su mente se confundió, procedió instintivamente a sentarse frente a su preciado objeto...

-  Apuesto que son sólo habladurías... -pensó en voz alta-e...

-  -Con una sonrisa en su rostro, acercó su mano derecha al rostro de su aprendiz con una sutil delicadeza y un bajo coqueteo acercando también su rostro- jaja, claro un jovencito de 16 años, cuyo padre no tiene tiempo para él, no podría comprender lo que un hombre maduro ha experimentado a través de su vida con una jovencita o las sensuales caricias entre las teclas monocromáticas de un piano y un hombre.

- -Quita la mano con violencia de aquel hombre quien le acaba de insinuar que era un inmaduro- ¡claro que se lo que es el concretar mis deseos a través de la música, ¿Quién te crees que eres?!

-  Jajaja -disfrutando del espectáculo de un joven inmaduro-sólo soy su profesor, jovencito, sólo su profesor, ahora comencemos nos hemos retrasado 15 minutos en nuestra presentación y una charla sin sentido, quiero que interpretes esta canción -le pasa la partitura-

-  ¿Eh? Con la cua... quiero decir señora Annette estábamos viendo Mozart

-  Lo sé, y no es de mi agrado, si quiere puede practicarla en su tiempo libre, yo le enseñare Nocturne For Violin And Piano de Chopin.

-   No tengo quejas, tampoco me agradaba del todo, pero está canción va acompañada con violín.

- Lo sé, la próxima clase traeré mi violín, hoy quiero escucharlo sólo a usted.

-   Pero nunca había tocado en dúo...

-  ¿Para qué está un profesor?... -le sonríe coquetamente-

Un pequeño pero notorio rubor comienza a poseer sus mejillas y se da cuenta que este ser, sin conocerlo, le está dando lo que él buscó hace varios años, algo nuevo, un reto, dejar de guiarse por los protocolos, lo que todo adolescente desea en su vida, inmerso en está felicidad recientemente encontrada se ve interrumpido por un error propio...

- Vuele a comenzar, tu espalda más recta, la posición es esencial cuando deseas domar a la música, no dejes que tus pensamientos interfieran... -Se percata de las manos impecables, perfectas del joven Sebastián y le es imposible dejar pasar por alto aquel detalle- ooh... sus manos -se acerca al jovencito, colocando una mano sobre el piano y la otra sobre las mano derecha de su aprendiz, mientra la acaricia suavemente-... sus manos son perfectas...

- -Muy sonrojado y avergonzado quita la mano de su lugar-¡¡¿Qué intentas hacer?!!

Léonard se coloca de rodillas y despoja la mano izquierda perteneciente a su alumno, del instrumento, acercando sus labios lentamente a la piel de gallina de Sebastián...

- Sólo admiro las manos de un futuro gran pianista, oh joven que poco entiendes el mundo ¿es pecado reconocer el talento a través de las manos de un hombre? Y si fuese pecado lo cometería, Dios ya no está entre los hombres, ¡el pecado se adueño de nosotros hace años!... -se levanta y lo queda viendo como si esperase una reacción de su interlocutor-

Sebastián conocía muy bien que aquel concepto le pertenecía a un renombrado filósofo, también conocía a la perfección la retórica con la que jugaba su instructor, claro, es un joven de familia adinerada, lo cual significaba en esos tiempos, ser culto. Pero aun así, no podía despegar sus ojos de los delicados labios del fanfarrón que tenía por profesor, no dejaba de admirar la sutileza con la que decía aquellas expresiones, lo tenía dominado, en menos de una hora había caído en la trampa de su tutor, ¿Quién era ese hombre?, cada segundo que pasaba una nueva pregunta se adueñaba de su conciencia, cada minuto caía más profundo en sí mismo, él Sebastián Maximilian hijo de Horace Maximilian el mayor comerciante de Paris sucumbía ante un completo desconocido, mudo se quedó, no quería aceptar su posición, tenia mil argumentos de la misma índole con los cuales contestar aquellas palabras pero el real objetivo de ese hombre estaba hecho, un jaque mate limpio...

-   Sebastián continúe, aun nos quedan 20 minutos juntos...

-   S...Si... -procedió a seguir tocando-

Su control del tiempo, su exactitud en las palabras que pronunciaba, sus ojos carentes de vida, su elocuencia, su pulcra presentación, su total carencia de ignorancia, incluso sus caricias... pero lo que más le afecto a esa pobre alma inconciente del destino que comenzó a forjarle ese hombre fue: Su Poder, la forma en que lo dominaba a través de las palabras...

Notas finales:

Opiniones, criticas, comentarios son bienvenidos :), espero hayan disfrutado de este primer capítulo


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).