Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

“Segundas oportunidades…” por Haruhi27

[Reviews - 32]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno aqui les dejo el cap 2 de esta nueva historia... y pido perdon de antemano por que me estoy atrazando un poco con las actualizaciones de los fic... pero estoy a fulll con un monton de cosas de la facu... y mis mussas andan medio estraviadas T_T

se las dedico a todos ustedes que dia a dia me brindan su apoyo

 

 

 

 

 

 

 

 

CAP 2

 

 

 

     

 

 

 

La mañana de por si era muy tranquila, pero para Ikki no lo era, el mayor estaba furioso y en esos momentos se desquitaba golpeando uno de los muros del patio trasero del colegio.

 

 

 

-          ya Ikki… tranquilízate…ya vez que no paso a mayores…- un pelicastaño intentaba tranquilizarlo.

 

-          ¡Aioros!...no me pidas que me tranquilice….si no fuera por que Milo fue a sacar fotocopias para la siguiente clase… Shun… mi Shun…él…él…- Ikki no se atrevía ni a pensar en lo que le pudieron haber hecho. El peliazul aun no podía creer lo que Milo le había contado.

 

 

 

Flas back

 

 

 

Milo ingreso al aula y se sentó en su lugar, todo hasta ahí parecía tranquilo. Ikki como de costumbre estaba sentado en los bancos del fondo de la clase junto a los mas vagos.  Mientras reía a carcajada con Aioros y los gemelos, recibió un papel, que fue pasado de mano en mano hasta llegar a él. El mismo era un mensaje de Milo que le decía que debían hablar y finalizaba con un “urgente”. Ikki miro a su amigo quien a su vez también lo veía con el rostro preocupado. Así que ni bien dio por terminada la clase, tanto Ikki como Milo salieron disimuladamente del aula para encontrase en los pasillos internos del edificio viejo del colegio.

 

 

 

-¿Qué es eso tan urgente que quieres contarme? – Ikki era de los que iban derecho al grano.

 

- No creo que esto valla a gustarte mucho…pero…- no sabía Milo como abarcar el tema sin que su amigo explotara de la furia por lo que debía contarle.

 

-Ya Milo…dime que es…- ansioso

 

- Es sobre Shun….Ikki

 

-¿Qué pasa con él? – el que el tema tuviese que ver con su hermano le preocupo,

 

- Cuando Salí… a hacer las copias pase por el baño y me lo encontré…

 

- Aja… ¿y con eso que?

 

- Bueno Ikki….él no estaba solo…

 

-¿Ha no?... ¿y con quien estaba?

 

- Con Jabu…- respondió secamente

 

-¿Con Jabu…? – eso empezó ya no le gusto nada, pues conocía la reputación de este - ¿Qué hacia con él?

 

- Mira Ikki será mejor que te relajes….aunque de seguro no lo harás…pero…no se me ocurre como contarte esto…

 

- ¡Milo!…¡¡ya!!…estas empezando a preocuparme…

 

- ¡Jabu intento abusar de Shun! – soltó el escorpión expulsando todo el aire de sus pulmones. Al fin y al cabo no había maneras sutiles de explicar lo que tenia que contarle a Ikki. Y la cara de Ikki se transfiguro. Cerró fuertemente los ojos y presiono los puños lastimándose en el proceso las palmas de las manos.

 

- ¡¡¡Yo lo MATOOOO!!! – grito Ikki enfurecido y comenzó a caminar rumbo al aula de Jabu. Pero en el trayecto fue detenido por el abrazo de Milo…

 

- ¡Ya detente!… ¡no lo hagas!….y déjame terminar de hablar Ikki…- pidió el escorpión.

 

- ¡Terminar de explicar ¿Qué?!...estas loco… ese idiota le hizo daño a Shun – la ira de Ikki era muy grande.

 

- Pero no lo hizo…Ikki…cálmate así termino de contarte…por favor…- lo miro seriamente – además si lo golpeas en frente de todos te expulsaran y no podrás cuidar de Shun

 

- De acuerdo – trato de calmarse y escucho todo lo que había sucedido en el baño. Cuando el escorpión termino de relatarle los hechos, Ikki estaba mas que agradecido con su amigo… - Gracias Milo…

 

- No tienes por que… además fue la excusa perfecta… hacia rato que quería molerlo a golpes. Y bueno… se dio la oportunidad…pero bueno ahora solo queda prestarle más atención a tu hermano. No creo que el idiota ese no intente nada de nuevo. – el escorpión no quería decirle a su amigo que en realidad la golpiza que le dio a Jabu fue mas por haberse atrevido a tocar al pequeño del cual se había enamorado ni bien lo había conocido. Pero jamás se acercaría a él porque una de las reglas no escritas entre amigos era: “no saldrás ni tendrás nada con los hermanos de tus amigos”. Milo jamás rompería una promesa hecha a su amigo, sin embargo la ira que sintió al ver aquella situación lo saco por completo de control, arriesgándose a que alguien lo viera y lo expulsara.

 

- Si lo se…- y cerro sus ojos para tratar de calmarse un poco.

 

 

 

 

 

La realidad era que desde que comenzaron las clases más de uno de los estudiantes del 5º año se había fijado en cierta criatura de ojos verdes y rostro de porcelana que él tanto amaba. Y habiéndose dado cuenta de ello Ikki les pidió a sus amigos y seguidores que fueran sus ojos cuando este no estaba presente para cuidar de su hermanito. Pero por lo visto ni eso alcanzaba… y para colmo de males este, seria el último año de Ikki en la secundaria. Por lo tanto para el próximo año Shun quedaría completamente solo y desprotegido. ¿Qué haría ahora para protegerlo? ¿Cómo haría para el próximo año?...

 

 

 

Fin flos back

 

 

 

Por otro lado tres jovencitos se alistaban para salir de clases e irse a almorzar en un local de comidas rápidas cercano.

 

Shun, Seiya y Hyoga ingresaron al local y en el mostrador pidieron la orden. Una vez que los tres tuvieron  aquello que querían, ósea una hamburguesa con papas fritas y una gaseosa, se sentaron junto a la ventana y comenzaron a conversar de trivialidades hasta que Hyoga miro seriamente a Shun.

 

 

 

-Shun prometiste contarnos lo que sucedió en los baños… ¿recuerdas?...- el rubio no permitiría que Shun debíase la conversación.

 

- Si es cierto Shun…será mejor que nos cuentes ¿Por qué llorabas?- inquirió Seiya preocupado por su amigo.

 

- Ok...ok... Pero júrenme que no le dirán nada a mi nisan…no quiero que se meta en problemas por mi culpa…- suplico al tiempo que tomaba un sorbo de su gaseosa.

 

-De acuerdo – prometieron ambos jóvenes que durante treinta minutos no articularon palabra alguna, mientras Shun les contaba lo sucedido. Al terminar su relato sus amigos quedaron mudos de la impresión y con rabia contenida. Morían por encontrase cara a cara con Jabu y molerlo a golpes.

 

- No…¡no lo puedo creer Shun…!...¡ese miserable…hijo…de…mmmm!...- Seiya miraba enojado su hamburguesa ya sin ganas de comerla, puesto que la noticia le quito el hambre.

 

- Tenemos que hacer algo Shun… esto no puede volver a pasar – Hyoga calmaba lentamente su sed de sangre y volvía a ser el ser frío que lo caracterizaba – esta vez tuviste mucha suerte de que ese peliazul estuviera cerca…

 

- Lo mejor es que no te separes de nosotros en todo el año…- decía Seiya sin mirarlo – total este es el ultimo año de instituto de ese…ese….- presionó el baso plástico con fuerza estrujándolo - ¡¡¡aaahhch!...ya ni se como insultarlo…todo insulto le queda chico….

 

-Tranquilo Seiya… ya paso…y ves…estoy bien…- decía Shun tomando la mano del pelicastaño para tranquilizarlo, haciendo que este se ruborizase por el contacto.

 

- Aun así…Shun…solo tuviste suerte y no creo que la tengas siempre…- ahora era Hyoga quien tomaba la otra mano libre de su amigo peliverde.- Además no sabemos si de verdad será el ultimo año de ese…puede que repita de año…

 

- No Hyoga…este es el ultimo año… no olvides que los de 5to año no pueden repetir…es mas pueden “llevarse hasta el recreo” a marzo y pasar toda una vida rindiendo las materias en calidad de libre. – le decía Shun con una pequeña sonrisa.

 

- Aun así… Shun – Seiya miro serio a Shun – quizás Jabu no este mas en el instituto…pero habrá mas sujetos como él… ¿o acaso crees que él es el único capas de semejante atrocidad?...

 

- No… no lo creo... Por eso es que tomare cartas en el asunto…- el peliverde palmo la mano de Seiya.

 

-¡¿Qué quieres decir con eso?!...¿que piensas hacer? – el rubio pregunto con curiosidad.

 

-No se si funcione pero al menos lo intentare…tomare clases de defensa personal

 

- No me lo tomes a mal…pero no creo que con eso alcance…- Seiya volvió a acomodarse mejor en su asiento y comenzar a comer.

 

- Lo se pero debo intentarlo… además no siempre estarán ustedes o mi hermano para cuidarme. ¿No creen?

 

- Tienes razón… aun así… no quiero que andes solo…mas vale prevenir que lamentar…- Hyoga desvió la vista hacia la ventana al tiempo que pasaba una mujer con su bebé en brazos – no quiero que nadie te lastime amigo…

 

- Lo se…y los quiero chicos…

 

Los tres jóvenes terminaron su almuerzo y de ahí se fueron directo al polideportivo donde tendría lugar sus clases de educación física.

 

 

 

Dos semanas después Shun había encontrado un buen club de Aikido, al cual también se habían unido sus dos amigos. Allí conocieron a Shiryu, un joven de origen chino de cabellos largos que iba avanzado en las clases por que el profesor era su padre. Doko era un excelente maestro para los jóvenes pues le tenia una paciencia infinita, en especial a Shun que le costaba horrores atacar a sus contrincantes sin que se lastimara en el proceso. Pero con el pasar de los meses los jóvenes amigos habían aprendido mucho y ya eran unos expertos.

 

Eso si…durante todos esos meses, después del incidente en el baño Jabu no volvió a acercarse al pequeño, de hecho casi nadie lo hacia, puesto que Ikki parecía un matón en el patio con sus amigos vigilando de cerca a su pequeño.

 

También mientras Ikki vigilaba a Shun, el pequeño por su parte junto con sus dos mejores amigos del instituto trataban de averiguar discretamente quien era el joven de cabellos azules que lo rescato tiempo atrás. Por eso através de una preceptora lograron averiguar su nombre y así Shun supo que Milo era compañero de clases de su hermano mayor.

 

En un principio Seiya y Hyoga pensaron que Shun solo quería saber el nombre de su salvador para agradecerle mejor su ayuda. Pero la realidad era que Shun desde el día que lo conoció no podía dejar de pensar en él. Se había enamorado de él…aunque el pequeño, poco sabia de ese sentimiento que de alguna manera lo llenaba y lo dejaba al mismo tiempo vacío.

 

Los días y los meses fueron pasando, y Shun se la pasaba distraído. Descubrió en ese tiempo cuanto le gustaba componer canciones de amor, y como comprenderán todas ellas eran pensadas en cierto peliazul que le había robado hasta el sueño. Cada día que pasaba era feliz de saber que ni bien habría los ojos era para ir al colegio, lugar donde podría verlo. Shun simplemente moría por solo verlo unos segundos al día, con eso era más que feliz.

 

Eso si nunca se animo a decir ni una palabra al respecto, pero como todo…tarde o temprano todo sale a la luz…

 

 

 

-¡Shun!...¡Shun!...- susurro Seiya desde el banco de al lado logrando obtener la atención del menor, quien hasta el momento tenia la cabeza baja mirando su propio cuaderno al tiempo que dibujaba corazones y un nombre en ellos – el profesor te habla…- termino de decir Seiya al tiempo que el peliverde levantaba la vista para toparse con lo fríos ojos del profesor de cívica y ética, Shaka.

 

- Joven Kido…estoy esperando su respuesta – Shaka llamo la atención de su alumno preocupado de que algo le estuviese pasando, puesto que siendo el pequeño uno de sus mejores estudiantes no estuviera prestando atención.

 

- Lo siento profesor… ¿me podría repetir la pregunta? – Shun se puso nervioso. No estaba acostumbrado a que le llamasen la atención.

 

- Que raro de usted tan distraído… ¿se siente bien? – pregunto el mayor acercándose al pequeño que ya estaba rojo de la vergüenza, y el profesor puso su mano sobre la frente. – Tiene la frente muy caliente…- declaro el rubio - ¡Hyoga! Acompañe a su compañero a la enfermería y avísele a la preceptora Marin que llame a sus padres o en su defecto a su hermano mayor para que lo lleve a casa.

 

-Si profesor…- Hyoga se levanto de su asiento y comenzó a ayudar al peliverde a juntar sus cosas. Luego sujeto a Shun por uno de sus brazos y lo saco del aula. – Shun… ¿Cómo te sientes?

 

-Estoy bien Hyoga… no es para tanto – respondió Shun al tiempo que entraba a la enfermería y le explicaban a la doctora June por que estaban ahí. Entonces la mujer le pidió a Shun que se recostara en la cama y le puso un termómetro.

 

- Yo me retiro…voy a avisarle a la preceptora…- Hyoga se disponía a salir pero la vos de la doctora lo detuvo.

 

- No deja…yo me encargo… quiero que te quedes con tu amigo hasta que venga…¿de acuerdo? – dejo la mujer tomando un maletín entre sus manos.

 

- ok…- respondió el rubio acomodándose en una de las sillas que estaban a un lado de la cama en donde Shun descansaba.

 

- No hace falta que te quedes Hyoga…yo estoy bien de seguro solo son unas líneas de fiebre… yo no me siento mal…solo un poco acalorado…

 

- Ni creas que te dejare solo…no seas tonto… además…así al menos ya no estaré en clases – se sonrío con picardía y se puso serio de un momento al otro - ¡oye! Shun… ¿puedo hacerte una pregunta?

 

- Si… - miraba a su compañero que parecía estar mentalmente pensando como le preguntaba lo que quería.

 

- ¿tu…tu estas enamorado verdad?... – miro a la cara de ese bello ángel que en esos momentos estaba recostado en una camilla con los ojos verdes bien abiertos haciendo contrastes con su hermosa piel tan blanca como la nieve.

 

- La verdad…creo que si…- saliendo del asombro por la pregunta de su amigo.

 

-¿Cómo que crees?... ¿lo estas o no?

 

-No lo se Hyoga…no se lo que es estar enamorado…nunca antes lo estuve… yo no se si lo que estoy sintiendo es amor, admiración, lujuria…o que se yo… no lo se… ni lo entiendo…- el pequeño movía la cabeza hacia los lados.

 

- haber… que tal si me dices…que es lo que sientes…quizás yo pueda… no se…ayudarte a descifrarlo…

 

- ¿tu has estado enamorado? – pregunto Shun ahora mas asombrado.

 

- ¿yo?... bueno si… lo he estado y lo sigo estando – confeso el rubio…

 

- ¿puedo saber de quien?- Shun estaba muy intrigado, jamás pensó que su amigo estuviese enamorado.

 

- ¿prometes no decirle a nadie?

 

- Lo prometo – dijo Shun llevando su mano derecha al corazón.

 

-Bueno…no te rías…pero yo…yo… estoy enamorado…- y de pronto la puerta de la enfermería se abrió de par en par…

 

- ¡¡¡Shun!!!....¡¿estas bien?!....Marin me vino a buscar al aula y me dijo que no estas bien…. ¿que te duele?.... ¿te llevo al hospital? – Ikki había entrado como un huracán y revisaba de pies a cabeza a su pequeño ante la mirada divertida de Hyoga y de cierto peliazul que observaba la escena desde fuera de la habitación.

 

- ya nisan….solo es un poco de fiebre…- Shun trataba de quitarse de encima a su hermano al tiempo que lo tranquilizaba.

 

- Un poco de fiebre…. Es para preocuparse Shun…ahora descansa…yo iré por mis cosas al aula y nos vamos a casa…- y de la misma forma que entro se fue arrastrando a Milo con él.

 

- Jjajjaja… tu hermano es el mejor….jajjja

 

- No es gracioso… viste como se puso solo por un par de líneas de fiebre….ahora lo tendré torturándome todo el día en casa… pero…cambiando de tema- Shun hizo una pausa – aun no me has respondido…

 

- La respuesta tendrá que esperar amigo mío…ya que tú no me has contado lo que sientes…

 

- MMMmmm… pues diré que son muchas cosa Hyoga… solo se que si estoy triste solo me basta verlo uno segundos al día para ser feliz en lo que me reste del día, mi corazón late muy fuerte y alocadamente cuando esta en mi rango de visión. Tengo ganas de hablarle pero siento que si lo intento no me sale la voz y no se me ocurre siquiera de que hablar con él, quiero saber todo de él, lo que le gusta, lo que odia. Me angustio si pasa un día sin verlo. Quiero estrangular a las personas que se le acercan a hablar y me enferma ver como otros lo abrazan en forma afectiva…bueno son muchas cosas como veras…

 

- Yo diría que demasiadas… pero todo eso me suena a amor…¿es Milo cierto? – aquella otra pregunta lo tomo desprevenido al peliverde.

 

- Si… ¿Cómo lo sabes?

 

- Digamos que para mi era mas que obvio…nos conocemos desde hace tiempo…te he visto rechazar a un montón de pretendientes y se como miras a todos…ósea… nos ves como amigos y con cariño… pero en cambio a él… bueno cada vez que estamos en el patio y hablamos de algo te distraes al solo verlo…no apartas la mirada de el y te pones colorado cuando por casualidad se cruzan en algún pasillo… y por ultimo…- Hyoga toma el cuaderno y le muestra una hoja – aquí…claramente dice... Shun x Milo… - y el rubio sonríe al ver las mejillas coloradas como un tomate de su amigo.

 

-Hyoga… por favor no se lo digas a nadie… y menos que menos a mi hermano…él es su amigo…- pidió apenado.

 

- Descuida… jamás te delataría… no soy soplón

 

-Gracias…oye… tu no me has respondido…es tu turno….

 

- Bueno a mí… me gusta… tu hermano….- dijo apenado y desviando la vista

 

- ¡¡¡Ikki!!! – exclamo Shun al momento que su hermano entraba y Hyoga en un rápido movimiento escondió el cuaderno de su amigo

 

- ¡¿Qué pasa Shun?!... ¿te sientes peor?...- Ikki pregunto preocupado.

 

-No nisan…- Shun trato de tranquilizarse y mentir para que su hermano no se diera cuenta de nada. – solo es que te estabas tardando mucho…

 

- ¡A! eso… bueno es que mis amigos estaban preocupados por ti y me preguntaron que te había pasado… nada mas…bueno levántate y vamos a casa.

 

Shun se levanto de la cama mirando de reojo a su amigo quien le sonrío. Y así Shun e Ikki se fueron a su casa....

 

 

 

continuara...

Notas finales:

nos vemos...y espero que sea pronto....

mattane


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).