LAZOS DE LA DIOSA
1.Inicio.
Era media tarde y el sol bañaba su hermosa piel mientas se alejaba del edificio . Su cabello, plateado y extenso, ondulaba al mandato del viento mientras intentaba recordar la razón por la cual había ido a verla, pero no lograda encontrar en su memoria respuesta a tal pregunta y por eso seguía rebanándose los sesos mientras continuaba caminando. Una sombra aparece frente a él y extiende su mano para rozarle la cara pero la aparta de un golpe.
-¿Que quieres?-dice de mal humor-No ves que estoy ocupado.
-Si, lo veo muy bien, Sefirot.-dice el recién llegado con una sonrisa burlona.
-Tan gracioso como siempre, Génesis.
Antes de que Sefirot pueda apartarlo, Génesis se acerca a él y roza sus labios con la punta de sus dedos.
-Tan solitario como siempre.-comenta Génesis más para él mismo que para Sefirot.
Sefirot observa ahora interesado a Génesis, intentando comprender la mente de este y entenderlo completamente.
-¿No crees que ya hemos corrido demasiados riesgos por hoy?-pregunta Génesis sobresaltando a Sefirot-También e de mencionar que no tienes el camuflaje activado.
-Ni tú.- observa Sefirot acariciando el corto y rojizo cabello de Génesis.
Se siguen observando intensamente asta que empiezan a notar como el sol se va ocultando para dejar paso a la luna. Sefirot roza delicadamente el rostro de Génesis mientras este hace lo mismo con él y, por arte de magia, aparecen dos personas realmente diferentes en los lugares donde tendrían que estar Génesis y Sefirot. En el lugar donde debía estar Sefirot a aparecido un chico alto y corpulento, su cabello no es largo ni plateado sino corto y violáceo, sus ojos ya no son de un intrigante y claro azul sino de un escalofriante y misterioso verde. En el lugar donde debería estar Génesis a aparecido un chico un poco mas bajo que este, su cabello ya no es rojo como el fuego sino marrón tierra y mucho mas largo, asta posarse delicadamente en sus hombros, y sus ojos ya no son azul celeste sino de un rojo llameante que parece quemar, como había sido el color de pelo de Génesis. Estos dos nuevos chicos se siguen mirando intensamente como Sefirot y Génesis pero lo único que cambia, aparte de que se miran con un color de ojos diferente, es que se están rozando las mejillas.
-Recuerda que ahora no me llamo Génesis sino Lucne.- El otro chico pone mala cara-Y tu ya no te llamas Sefirot sino Marcus.
Lentamente Marcus acerca su mano derecha a la cabeza de Lucne y encierra un mechón del cabello de este en su puño.
-No creo que me de acostumbrado a esto.-dice Marcus en un susurro casi inaudible-Te veo tan diferente que si no fuera por que me sigues mirando con esa ternura no te reconocería.
Lucne suspira brevemente mientras disfruta del roce de los dedos de Marcus contra su cabello.
-A mi me da igual que aspecto tengas mientras sigas siendo mio.-dice mientras lo encierra entre sus brazos en ademan posesivo-Yo solo te quiero a ti.-dice enterrando su rostro en su musculoso y trabajado pecho.
Marcus libera el mechón que tenia cautivo y Lucne gime brevemente descontento pero Marcus lo atrae hacia si con ambos bracos y lo acuna meciéndolo delicadamente como a un dulce e inocente chiquillo.
-Quiero que cuando estemos solos me dejes llamarte por tu verdadero nombre y tu me llames a mi por mi nombre real.-susurra suplicante mientras lo sigue meciendo lentamente.
-Si.-responde Lucne apretándose mas a su pecho deseando quedarse pegado eternamente en este.
Cariñosa y lentamente Marcus alega a Lucne asta poder ver su rostro y con dulzura acerca sus labios a los de este y lo besa. Lucne se abraza ferozmente a Marcus deseando fundirse con él y con afán prolonga el beso asta que no le queda mas aire y cede. Se separa de Marcus y descubre la hermosa y juguetona sonrisa que empieza a aflorar por la comisura de sus labios. Sin decir nada más Lucne coge la mano de Marcus y caminan con lentitud por las ahora oscurecidas, desiertas y destruidas calles de Midgar.
Hace ya tanto tiempo que Génesis falsificó su muerte para alegarse de Shinra que le parece simplemente un mal sueño, aunque sigue echando de menos a su gran amigo de infancia Angeal, el cual resulto tener un destino bastante cruel, al igual que lo abrían tenido él mas Sefirot. Para Génesis y Sefirot poder estar juntos sin que nadie lo llegue a sospechar es mucho más de lo que podían haber imaginado gracias a la ayuda de una extraña y singular organización que oculta, no solo a ellos, sino a muchas mas personas, y proporciona una segunda e importante oportunidad y una nueva vida e identidad, algo que en sus situaciones nunca abrían podido tener. Para aquellas personas que no crean en la existencia de la Diosa deben saber que ella es tan real como la mismísima corriente vital, la cual no es como todos creen, un fluido constante que recorre todo el planeta, fuente de vida y origen de todos subseres, sino que es como un segundo mundo, el terreno de la diosa, donde esta gobierna y observa lo que sucede en el exterior. Por ello, cuando alguien muere y vuelve a la corriente vital es cuando comienza su segunda vida en los territorios de la diosa, pero no todos tienen la suerte de ser aceptados y hay es donde entra la organización Abertura. Esta organización se encarga de hacer los denominados camuflajes a sus protegidos y mantenerlos en funcionamiento si el propietario no tiene suficiente energía mako. A cambio, estes deben mantener su existencia y la de la organización en secreto. Génesis fue rechazado por la propia diosa y fue encontrado, inconsciente, por Áliet, la fundadora de la organización, y por eso sabe de su existencia. En cambio, Sefirot no fue rechazado por la diosa ya que, al tener genes de Jénova, puede viajar entre la corriente vital y el mundo real sin permiso de esta, pero como siempre lo perseguían y quería estar con Génesis acabó entrando en Abertura por su petición, que para aquel entonces ya se llamaba Lucne y tenia el camuflaje en funcionamiento continuo. Cuando Génesis vio a Sefirot se lanzo a sus brazos y al ser rechazado de un empujón que lo tiro al suelo perdió el control del camuflaje mostrando su verdadero aspecto y dejando verse ante Sefirot. La tensión, en esos instantes, fue terrible, puesto que Sefirot entro en shock al verlo y se quedo en blanco asta que, finalmente, se acerco a Génesis, le tendió la mano y este, al aceptarla y levantarse, fue encerrado entre los brazos de Sefirot, el cual no lo soltó asta que escucho carraspear a alguien tras él y, en un susurro que solo pudo oír Génesis le prometió:” Nunca mas nos separaran” y después se giraron para ver a la que seria su nueva y única “familia” y poder estar juntos para siempre.
Para Sefirot, revivir a su madre Jénova es algo que dejo de tener sentido al recuperar a la persona que mas a amado y amará en toda su vida pero aun así, sigue yendo a verla cada 3 meses a una fabrica que hay a las afueras de Midgar y, en esta ocasión, fue descubierto por Génesis, el cual camina entrelazando su mano derecha con la de Sefirot.
-¿Desde cuando lo sabes?-pregunta Sefirot sin mirar a Génesis.
-Desde hace 1 año.-comenta Génesis como si nada.
-QUEEEEEEEEEEEEE?-Sefirot suelta la mano de Génesis para ponerse enfrente de él-PERO SI ME INCORPORÉ HACE UN AÑO ESCASO.
Sefirot no puede creerse que Génesis lo siguiera cada tres meses y menos aun que lo diga con tanta tranquilidad.”Realmente es raro en su especie”comenta Sefirot para si mismo mientras se va calmando. Génesis sigue de pie observando como, lentamente, Sefirot se va calmando regresando a su normal y tranquilo carácter.
-¿Por qué me seguiste?
-Porque pensaba que me estabas engañando y te ibas a ver con tu amante-Génesis sigue sin inmutarse lo mas mínimo-Yo solo quería saber si con esa persona eras lo suficientemente feliz como para que te dejara marchar de mi lado.
Sefirot se le queda mirando un poco ido y, con lentitud, empieza a encajar la piezas que no había logrado ver.
-Eres realmente único-suspira-Te dije tantas veces que te amo y ¿aun no te lo crees?
Génesis parece empezar a reaccionar y ver lo que, con tanta paciencia, Sefirot le intento hacer entender.
-Entonces no venias aquí a ver a tu amante-dice para convencerse-Entonces todo fue mi imaginación...-ahora Génesis esta pensativo-La misión que duro 3 días, los cuales pasaste en un balneario con la reserva de una mujer, fueron imaginaciones mías.
Sefirot se queda paralizado
-¿Como sabes eso?-dice en un susurro.
-Era el tema de conversación en su momento y como no haces caso a los rumores ni te percataste de que todos los de la organización lo sabían...-se calla brevemente-...con todo lujo de detalles.
Silencio, incomodo, doloroso y muy difícil de romper. Ninguno de los dos habló pero tampoco se miraron y por ello en la mente de Génesis empezaron a aparecer las imagines que se había imaginado con los comentarios e historias que sus compañeros le contaron al saber que no tenia ni idea de la escapada de Sefirot. Aprieta los puños y sin poder evitarlo cae por su mejilla derecha una lagrima que choca contra el suelo, rompiendo el silencio y haciendo que Sefirot lo mire.
-Yo no quería ir-intenta explicarse Sefirot-pero Áliet me dijo que debía relajarme...Ya se que eso no lo justifica pero en el balneario no hice nada raro ni intimo con nadie.
Sefirot mira ahora dolido y derrotado a Génesis, con una mirada de desesperación que Génesis solo vio una única vez:”Realmente lo amo mas que a mi propia vida.”Génesis suspira y unos segundos después decide perdonarlo.
-Te creo-se acerca hacia Sefirot-Pero no estuve, ni por asomo, insinuando que, en el balneario, hubieras tenido relaciones sexuales, aunque no te abría costado mucho convencer a alguna inocente y dulce chica-comenta mientras roza su pecho.
-En eso tienes demasiada razón-roza el cabello de Génesis-¿Por que no vamos a una posada y regresamos mañana?
Génesis se queda mirando a Sefirot mientras piensa en su proposición.
-Contigo voy a donde quieras.
Con un hermoso y ágil movimiento, Sefirot coge el brazo de Génesis para sujetarlo debajo del suyo y después entrelazar sus manos.
-¿A donde?-Génesis mira brevemente a Sefirot.
-A la posada Luz Nocturna.
Después de que Sefirot comente esto inician su caminata con los camuflajes activados y sabiendo que ya no se llaman Sefirot y Génesis, puesto que esas personas murieron hace tiempo, sino que se llaman Marcus y Lucne.