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Hard-Love/Boy por UnknownOrchestra

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Notas del fanfic:

Esta vez, dejo los dramas para meterme a otros rubros... supongo que humor o un intento de ello, pero que espero que lo disfruten.

 

 

Notas del capitulo:

Luego de un tiempo sin escribir, traigo finalmente este fan fic que deja atras el drama que estaba agarrando a ultimos tiempos y que espero que sea de su agrado.

Hace no mucho recibí un regalo curioso de parte de una de mis fans, no se cual fue la finalidad de dicho regalo ni quien me lo hizo llegar, o si fue una equivocación y en vez de darme su presente me dio algo que compró para ella, sintiéndose después demasiado apenada para reclamarlo, pero la cuestión es que terminé con ese videojuego en mis manos durante un caluroso atardecer de primavera.

Hard-Love/Boy

1 NIVEL: Guardián de los Cerezos

El cielo se pintaba con tonalidades naranjas, marrones y rojizas. El aire estaba pesado a mi alrededor por el reciente entrenamiento que a penas acababa de terminar, y yo regresaba a las duchas en último al haberme quedado a arreglar detalles con el entrenador sobre el resto del equipo, como buen capitán. Tenía los hombros adoloridos de tanto batear, y es que, tras tantas peleas como parte de los Vongola, notaba con un toque de desagrado que mis dos grandes pasiones chocaban dentro de mi físico, al desequilibrarse la forma en que tomo el bat contra como sujeto la espada, obligándome a llevar durante la semana un régimen bastante apretado de entrenamiento, haciendo que por la mañana mi cuerpo no perdiera practica en el kendo, y por la tarde se sometiera a lo que desde temprana edad estuvo acostumbrado: el baseball.

Me tomé mi tiempo bajo el agua, en las duchas, a solas, y tras vestirme y echarme al hombro la maleta y la mochila, cerrando el cuarto del club, fui a cambiarme las zapatillas… y ahí estaba, en mi zapatera, un envoltorio sobrio y rectangular con una nota en forma de corazón: “De una admiradora secreta para Yamamoto-sempai”.

Di un rápido vistazo a mí alrededor.

Estaba completamente solo.

Cansado, metí el paquete en la mochila, e hice el cambio de zapatillas, saliendo de la escuela junto a un grupo de 3 integrantes del equipo de tennis a los que conocía por un amigo que teníamos en común, y entre platica y platica, me olvidé por completo del regalo que chocaba contra mis libros camino a casa.

8:34 de la noche.

Estaba solo en casa. Una hermana de mi madre se había enfermado y mi padre se ofreció a pasar la noche en el hospital con su marido para hacerle compañía mientras le cuidaba, así que tenía la casa para mi solo, aunque no tenía nada realmente en mente más que tal vez dormir hasta tarde viendo películas.

Bajé al comedor donde estaba la televisión y me acomodé en el kotatsu, con el mentón recargado en el dorso de los dedos entrelazados con los codos apoyados en la mesa, entretenido con un nuevo anime que se interpuso en mi camino para llegar al canal de películas. Al principio, me llamó la atención porque giraba entorno al baseball y tras los primeros minutos de verle, pensé que le perdería el gusto porque seguramente empezarían a sacar esos tiros imposibles, exagerados que siempre meten en los anime de deportes, pero curiosamente no pasó nada de eso y con una buena dosis de comedia de por medio, me propuse verla cuando me fuera posible o conseguir el manga… Ookiku Furikabutte… si… creo que algo así se llama.

Apagué la tv al finalizar “Mi vecino Totoro”. Estiré los brazos y me extendí sobre la mesa. El silencio de la casa se explayó sobre ese rincón de la casa hasta entonces dominado por el ruido de la tv.

Cerré los ojos. Mis pensamientos se dispersaron en el alfombrado de la noche.

Y fue entonces que en un chispazo me vino a la mente el regalo que recibí en la tarde y corrí a mi cuarto para sacarlo de la mochila. La nota estaba ligeramente arrugada, la quité y no encontré una pista mas de quien pudiera ser esa admiradora secreta, al reverso del papel, así que seguía en el anonimato –y así se mantuvo-. Busqué por el resto del empaque algún indicio, algo más… nada… solo papel café.

--Veamos que es… -Me dije y empecé a romper la envoltura.

El contenido del regalo fue, sin duda alguna, el que se llevó las palmas dentro de todos los que he recibido en los últimos años y siguientes. Era un videojuego.

Quizás, lo mas extraño no es que fuera un videojuego, sino… lo primero que llamaba la atención… era la portada: Un par de chicos de grandes ojos sujetándose las manos  -ambos me hicieron sentir un ligero deja vú, por el parecido con dos personas que conozco- y uno de mirada feroz sosteniendo una espada saltando desde detrás, todo con pantallas de colores rosas, flores y chispitas… -¿no creen que en verdad es para llamar la atención de cualquiera?-.

--¿Espadachín, estas listo para conseguir el corazón de tu…? ¿uke? –Leí la frase introductoria, debajo del titulo de “Hard-Love/Boy”, cuyo significado intenté pasar maratónicamente por alto.

Se que la palabra –uke- me suena conocida de algo, pero no consigo recordar de donde por más que me esfuerzo.

Me encojó de hombros y recuerdo que hace unas semanas, a mi viejo le entró la venita de adolecente y compró una consola, justo la necesaria para este videojuego, así que al son de “no hay pretextos y seria de mala educación no jugarlo luego de lo que habrá costado”, empecé a buscarle el sentido al aparato hasta que conseguí echarlo a andar junto con el juego.

En lo que pasaba la introducción fui a la cocina por un bocadillo de media noche, y al regresar, estaba en un vistoso menú de colores pastel.

--Haber… -tomé el control- “Inicio”

Lo primero era crear el personaje que seria, al que le di mi nombre y traté de formarle un parecido a mí, solo para sentirme mas identificado con el juego y ver si así le agarraba el gusto a algo que por primera vez jugaba.

Las reglas que venían enseguida eran sencillas: elegir que respuesta o acción se realizaba y algunas técnicas para los mini-juegos de combate que estaban dentro de la historia. Nada que no pudiera aprenderme en una o dos leídas y la pequeña sección de prueba.

>> S T A R <<

La historia, iniciaba conmigo –el personaje- deambulando en las calles nocturnas de Tokyo, con una katana en la espalda y las manos en los bolsillos.

Mi primera elección a realizar, era si entraba o no a una tienda de 24 horas. Di “entrar” y enseguida me llevó con el tendero que me preguntaba que es lo que deseaba, iniciando una conversación conmigo antes de que unos delincuentes entraran a asaltar. Mi siguiente elección era combatir, quedarme quieto a ver lo que hacían o salir huyendo. Hice lo primero y los maldosos huyeron… el joven tendero me dio las gracias y me invitó a tomar un té en la trastienda, acepte, y fui recibido por uno de los chicos de la portada que me fue presentado como el hermano menor del tendero… Yamashita Tsunayoshi.

               --¡¿Tsuna?! –No solo el nombre era parecido, sino el físico, que luego de saber su nombre, me recordaba aun mas al conocido Decimo Vongola.- Wow… que coincidencias hay. –Reí, siguiendo la conversación donde se explicaba que teníamos la misma edad, y a partir del siguiente día, ambos iniciaríamos clases en la misma preparatoria. El tendero sonreía pero las imágenes se intercalaban con la mirada temblorosa y el rostro sonrojado de Tsuna… Tsuna… Tsuna… será mejor que no piense mucho en eso.

Al salir y pasar al siguiente día, a mitad de camino a la escuela -luego de salvar a un gatito moe-, me encontré con Tsuna, decidiendo andar con él lo que restaba del trayecto. Al entrar a la preparatoria, Tsuna se despidió luego de que eligiera ir a ver el dojo donde mi personaje practicaba kendo. Un recorrido entre arboles de cerezo floreciendo resplandecientes, hizo preámbulo para entrar al dojo y ver una imagen que hizo que el control resbalara de mis manos, cayendo a salvo sobre lo mullido del kotatsu.

En el tatami, yacía el segundo personaje que aparecía en la portada. Estaba… desnudo… de lado, con un rostro sereno, dormido. De rasgos finos y delicados, evocaba la esencia de quien esta sumergido en un sueño profundo y apacible, un chico de mi edad con un aire de una criatura hermosamente feroz que ahora reposaba sin gruñir, ocultando y disfrazando en un velo de ternura, su carácter. Un par de orejas puntiagudas sobresalían de entre su cabello cenizo. Su piel blanca relucía bajo los rayos del sol que se filtraban por las ventanas altas, y de la parte baja de su espalda, brotaba una cola de gato.

Las mejillas se me coloraron furiosamente, las manos me temblaban. Tenía la garganta seca.

Un pétalo de los cerezos cercanos se coló dentro y cayó sobre su mejilla expuesta, haciéndole abrir despacio los ojos, incorporándose lentamente, viendo a su alrededor adormilado antes de situar la mirada sobre mi, observándome de arriba a abajo, volviendo la mirada a su persona, advirtiendo despacio que estaba desnudo sin inmutarse.

Cuando la escena interactiva comenzó, cogí el control a prisa, con la boca abierta.

 

>>¿Quién eres? –Preguntó restregándose los ojos como un gato, conformé las esmeraldas que tenia por ojos quedaban al descubierto, alargando la mano para alcanzar su ropa y empezarse a vestir.

*Responder: Yamamoto Takeshi [X]

*Responder: No te interesa. Sal de aquí, idiota.

*No responder.

>>Se levanta buscando algo, yendo al fondo para recoger un bat.

*Preguntar: ¿Quién eres? [X]

*No preguntar

>> Erizawa Hayato–Tantea el bat en sus manos de forma sugestiva- Y tu ¡Eres un maldito pervertido!

Golpea a Yamamoto Takeshi y lo envía a la enfermería, inconsciente.

 

Al parecer, aunque no fuese mi culpa, acababa de ser tachado de pervertido… aunque eso no era lo que me importaba… lo realmente impresionante, era el parecido físico, de nombre y ciertamente de carácter de ese personaje con:

--¿Go… ku… de… ra? –Deletreé estupefacto.

En la pantalla apareció un recuadro para salvar el juego, y en lo que me debatía entre hacerlo o no, aun en medio del shock inicial, el teléfono sonó, haciéndome sobresaltar y soltar de nueva cuenta el control en tanto yo corría para responder.

Del otro lado de la línea, mi padre hablaba en un tono ronco por el sueño, diciéndome que todo estaba bien y que lamentaba llamar tan tarde para preguntar como estaba. Algo nervioso, fingiendo que era cosa de que el teléfono me despertara tan abruptamente, respondí que no había problema y colgamos tras un “buenas noches”.

Al volver, me encontré con que el juego fue guardado cuando cayó el control y la tecla correcta fue presionada… una gran coincidencia, tal vez tan grande como la del nombre de los dos personajes aquellos.

Regresé a la realidad abofeteándome –literalmente-, y con la mejilla ardiéndome por el golpe, busqué bajo el kotatsu la caja del videojuego, leyendo la contraportada:

--“Ninguna fujoshi puede perderse el inicio de esta saga que promete mucho” –Leí-¿“Yaoi, yaoi, puro yaoi insertado en una de las mejores historias postuladas para una saga del genero”?… ¡¿“HL/B es la promesa de la temporada”?!

Luego de los comentarios de diversas revistas, por cuyo nombre reconocí que era del tipo que le gustan a las chicas, seguí con el resumen de la historia, que me guio a la puerta de entrada al mundo al cual, había entrado sin saberlo:

“Yamashita Tsunayoshi y Erizawa Hayato son dos jóvenes herederos del clan Vongore, que compiten entre ellos para conseguir ser el sucesor del actual líder, pero para ello, tendrán que conseguir el amor de la reencarnación del Guardián de los Cerezos. El primero en conseguir su amor, lograra zafarse de la maldición que les asecha como herederos, para así reclamar su titulo y la felicidad, dejando al otro sumido en la miseria.

¡Conviértete en el Guardián de los Cerezos, joven espadachín, y descubre cual de ambos lograra cautivar tu corazón para que le salves, o si serás capaz de salvar a ambos!”

Y haciendo trabajar mi golpeado cerebro, concluí que:

-La admiradora, era una pervertida.

-El videojuego, era gay.

-Y yo, acaba de meterme en verdaderos problemas, porque ahora, Tsuna era un chico increíblemente adorable con unas mejillas sonrojadas preciosas, y Gokudera, tenía un trasero seductor y unos ojos felinos cargados de encanto… por lo que ¿ahora como podre verles a la cara a los Tsuna y Gokudera de la realidad, sin recordar ese juego porno gay?

 

 

Notas finales:

De antemano, agradezco su rewius, con cualquier comentario o critica que deseen dejar.

Y si... hice promoción de cierto anime xD...


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