El reloj del edificio marcaban las 8:00 p.m. en punto, y estaba ahí parado frente al elevador, con el corazón en la mano alterado por tantas emociones y la eterna espera, parezco un adolecente que se prepara para su primera cita.
El edificio es de reciente construcción, es uno de los proyectos más ambiciosos de la ciudad, con 40 pisos y sus acabados elegantes y vanguardistas es en verdad un lugar muy hermoso, y justo en la parte más alta se encuentra el lugar donde me espera mi Nowaki. Se trata de un restaurante de alta comida tradicional japonesa, con un ambiente romántico y que ofrece una vista maravillosa y exclusiva de toda la ciudad, es tanta la demanda del lugar que se necesita efectuar la reservación por lo menos con un mes de antelación.
De pronto escucho el timbre del elevador, se abre la puerta y me dispongo a entrar a la cabina que estaba fría y sola, no sin antes tomar una gran cantidad de aire. Mientras voy subiendo hasta el piso 40, comienzan a bombardearme los nervios y la angustia, a caso es tanta mi desesperación de verlo, es tanta mi necesidad de compartir un momento romántico con él, no, no puedo permitir que me vea en este estado tan débil, guarda la compostura me digo a mi mismo.
Me observo en el espejo del elevador y doy un último toque al look, cierro los ojos, tranquilizo el corazón y espero.
De pronto, se abre la puerta del elevador, a primera vista encuentro un largo corredor, perfectamente adornado con alfombras y obras de arte modernas, e iluminado tenuemente incitando de inmediato al ambiente romántico, al final del pasillo observo una figura masculina, perfectamente vestida con un traje negro, era Nowaki que me esperaba con un ramo de rosas rojas y una enorme sonrisa en sus labios. En cuanto lo veo, mi corazón y paso se aceleran, es como si una fuerza magnética atrajera mi cuerpo al suyo.
- Hiro-san, me alegro que vinieras, es un pequeño obsequio para ti.
- Gracias, pero no era necesario……
No me dejó terminar la oración cuando de pronto me tomó entre sus brazos, y sin mayor preámbulo me dio un apasionado beso, a lo cual simplemente no me pude resistir y correspondí con todo mi cariño.
- Discúlpame Hiro-san, no pude controlar mis impulsos, desde el momento que te vi, sólo pensaba en besarte, luces realmente hermoso esta noche.
- u\u, baka, u\u (le doy un pequeño golpe en su costado).
Después de nuestro singular saludo, pasamos al lugar, el hoster nos acomodo en nuestra mesa la cual estaba iluminada con velas y adornada con un pequeño centro de flores. El lugar resultó más hermoso y romántico de lo que imaginaba, ordenamos nuestros alimentos y Nowaki pidió una botella de Shochu.
Durante el trascurso de la cena, la plática fue muy buena, nos pusimos al tanto de nuestros asuntos cotidianos, de lo próximo por hacer y sobre todo, de lo mucho que nos extrañábamos, no parábamos de reír, de vernos a los ojos, de disimular algunas carisias debajo de la mesa.
Para el postre, ordenamos uno para compartir, y no tardaron en venir los jugueteos, el efecto de la bebida y la emoción de la cena, ya comenzaban a surtir efectos.
- Regreso en un momento, Nokawi.
- Si, Hiro-san ^^.
Me levante de la mesa, necesitaba refrescarme para disminuir un poco los mareos y la excitación del momento, fui a remojarme un poco la cara en los servicios, y durante el trayecto de regreso a la mesa, note una gran terraza que tenía el lugar, que de inmediato llamo mi atención y a la cual me dirigí.
El aire estaba fresco y corría alegremente por el lugar, cruce los brazos para darme un poco de calor y me acerque al barandal para apreciar esa magnífica vista, las luces de la ciudad, la luna y las estrellas brillando a mi alrededor, las caricias y compañía de Nowaki, en ese momento una sensación cálida que surgía de mi corazón, comenzó a recorrer todo mi cuerpo, en verdad me sentía tan feliz esa noche que unas lagrimas de alegría recorrieron mi rostro, no me puedo imaginar la vida sin él.
Inusitadamente comencé a sentir sus fuertes brazos rodeando mi cuerpo, brindándole calor al mío, sus formas y su aroma son imposibles de confundir, nos quedamos así por unos momentos disfrutando de la vista del lugar, y después de unos minutos susurrando en mi oído me dijo:
- Hiro-san, eres lo más importante para mí, quiero que esta sensación nunca termine, por eso……, quiero decirte algo importante.
Lentamente me volteo para verlo de frente, y sujetándome por las manos:
- Hiro-san, en esta noche estrellada y con la luna como testigo, quiero ratificarte por siempre mi amor, por eso quiero que aceptes y uses esta sortija, como un símbolo de mi amor, para que siempre que lo veas recuerdes este momento, recuerdes que eres sólo para mí, y que mi vida gira en todo momento en torno a ti (=O).
- Nowaki……… yo……
En ese momento se pone de rodillas, tomó la sortija, la cual era bastante gruesa y de color negro, con las orillas enmarcadas en platino, y cuidadosamente la colocó en el dedo anular de mi mano izquierda (definitivamente no era una sortija de matrimonio, etto, etto, puffffff), inmediatamente levanto la mano a la altura de mi corazón, el cual latía como si fuera a salir de mi pecho.
- Nowaki, me estas asustando, pasa algo *-*.
(Nowaki se pone de pie, sujeta mi mano izquierda y me hace que toque su pecho a la altura de su corazón, el cual latía a la par que el mío).
- Hiro-san, desde el momento en que te vi, sabía que eras para mí, y no quiero pensar que alguien más se fije en ti, ese era uno de mis mayores temores la última vez que nos separamos para continuar mis estudios en los EU.
- Nowaki quieres decir ……
- !!!!No te estoy diciendo que saldré del país como aquella vez!!!!
- *O*.
- Sólo quiero que recuerdes que te amo, estoy a punto de terminar mis estudios, ya pronto podremos estar más tiempo juntos, pero por ahora estaré más ocupado, tendré menos tiempo para verte, habrá periodos en los cuales no podre ir a casa ni comunicarme contigo, y no quiero perderte, no quiero que pienses que he dejado de quererte, no sé qué más puedo hacer (una lagrima corre por su rostro).
(Que esta persona sufra por mí, que esta persona me quiera tanto, me hace …… quererlo aún más, baka, u\u).
- Nowaki, tengo frío……
- Hi ^^
La velada continuó con una serie descontrolada de besos y caricias, no podíamos contenernos, y en cuanto cerramos la puerta del departamento, comenzó el desborde pasional de dos personas que se desean mutuamente y que entregan sus cuerpos al placer. Nowaki estaba más intenso que nunca, y yo más sumiso y dispuesto para hacer lo que me pidiera.
Fue una noche eterna que jamás olvidaré en mi vida, todo lo acontecido esa noche fue único, pero ahora que lo veo dormido, descansando, siento que ya lo comienzo a extrañar.
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