-maldito Itachi- me repetía mentalmente- solo por que es el favorito de papa se cree que puede hacerlo todo- refunfuñaba mientras pateaba una piedra
Era lo mismo en todas los entrenamientos, el era el que sobresalía de todo el clan y yo, quedaba en segundo plano, “deberías ser mas como tu hermano”, como odiaba esas palabras, ¡el y yo somos muy distintos! Pero nadie lo entendía. Me acerque a un riachuelo para mojarme la cara y bajarme el enojo. De pronto a lo lejos escuche el tronar de la ramas, voltee rápidamente y me encontré con un zorro rojo que eran raros por esta región.
-“si lo logro atrapar todos verán mi supremacía”
Tome un kunai de mi bolsillo y con cautela me acerque a el y…
-¡te tengo!- arrojando me encima de el
Este de empezó a retorcer y a mover como loco hasta que me mordió en el hombro derecho
-aaahh- grite
Y veía como a lo lejos se iba el maldito animal, me sentía humillado, tenia que atraparlo esto ya era personal, rompí un poco de mi camisa y la coloque en la herida para poder seguir al zorro.
Me sentía cansado, tenía sed, hambre, y lo peor de todo es que ya ni sabia donde estaba, se me aguaron un poco los ojos, pero no iba llorar no señor un Uchiha que se respeta no haría eso, de pronto escuche un quejido de algún animal, seguí el sonido, no podía creer la buena suerte que tenia, ¡el maldito zorro de pacotilla estaba atrapado en una red!, estaba emocionado, volví a tomar otro kunai me acerque con cautela, sentía como me corazón latía a mas no poder, podía dejar de ser el tonto hermano de Itachi, pero justo cuando lo iba a apuñalar, fiiuu
-¡¿pero que demonios’?!- había quedado en la misma posición que el zorro colgado en un maldito árbol- ¡auxilio ayúdenme!- gritaba con desesperación para ver si alguien me podía ayudar pero nadie vino a mi auxilio.
Un rato después toda mi fuerza y mis ganas se habían ido, estaba solo, y muy lejos de casa, ya no traía más armas, por lo que podía ver estas trampas eran muy viejas, de pronto sentí mis mejillas mojadas, de seguro me veía patético pero ya no me importaba.
-oe te encuentras bien- me gritaba un chico desde el suelo- espera ya te bajo- en un rápido movimiento el chico saco un kunai y rompió las cuerdas de la trampa con gran maestría
-¡auch!- me quejaba ya que había caído se sentón
-dime te encuentra bien- levante mi vista, y rápidamente me puse en una posición de defensa
- y a ti que te pasa dattebayo- me miraba con mucha intriga el chico
-ese cabello y esos ojos, ¡eres del clan Namikase!- lo miraba con odio
-¿eh? Así es, pero, ¿como lo supiste?
-como no voy a saber quienes son mis enemigos- empezando a correr hacia el con mi puño en alto
-¿enserio?- esquivando fácilmente mi ataque - es cierto ahora, que lo dices te pareces a los del clan Uchiha.
-y hasta ahora te das cuenta- puse mis manos en el suelo y para darle una patada, pero este la detuvo en seco mandándome al piso.
Era bastante fuerte, posiblemente igual que Itachi pero, ¡el era mas chico que yo!, una rabia se apodero de mi, pronto me puse de pie y volví atacarlo obteniendo el mismo resultado.
-¡maldición!- golpeando el suelo, acaso era tan débil que ni podía derrotar a ese chiquillo
-nee ya acabaste- extendiéndome la mano, pero yo la aparte levantándome por mi cuenta
-¡que rayos de pasa por que no me atacas!- liberando mi frustración
-¿eh?, ¿Por qué debería de atacarte?
-…- estaba sorprendido- por que somos enemigos
-pues tu no me haz hecho nada, así que ¿Cómo serias mi enemigo?
- ¡por que tu clan expulso al mió de la aldea de Konoha!, por eso tu eres mi enemigo
-mmm- dejándose caer en el suelo-pues que quieres que te diga, “lo siento”, pues ya -est…-recibiendo un puñetazo que lo mando muy lejos
- Que acaso eres idiota, ¡un lo siento no resuelve nada!
-levantándose- ¿y esto si?, si es así- extendiendo sus brazos- pues golpéame todo lo que quieras
-…-no sabia que decir
-ya ves como tampoco eso resuelve nada- tomando mi kunai del suelo, arrojándolo a la trampa del zorro
-oye por que lo liberas- enojado- ese era mi zorro
-ah, gomene pensé que también había caído por accidente- dan dome una enorme sonrisa
Debía que admitir que ese niño era extraño de repente decía cosas impresionantes y otras bastante estupidas
-dime en que piensas- con su cara casi chocando con la mía
-haciéndome para tras- nada que te incumba
-uuaahh-gritando con mucho terror- tienes lastimado tu hombro- señalándolo- ven vamos a curártelo- jalándome del brazo
-oye espera… -tratando de soltarme
Sin lograr nada
Un rato después, estábamos en la orilla de un enorme río, el ya me había curado y ahora se encontraba pescando.
No entendía el por que de su actitud, “tu no me haz hecho nada” esas palabras rondaban por mi mente, específicamente yo no le he hecho nada pero, mi clan a causado muchos conflictos en Konoha, ¡hasta hemos provocado una guerra! y el no me odia por todas las muertes de los suyos
-ya traje algo de comer- mostrándome el montón de pescados- solo hay que hacer una fogata- juntando unas cuantas ramas- por cierto me llamo Naruto- dándome su mano
Yo solo voltee hacia otro lado sin tomarle atención
-haciendo un puchero-sabes cuando haces esto, tienes que dar tu mano y presentarte
Lo mire de reojo, por lo que veía si no le decía me estaría molestando todo el rato
-Sasuke- correspondiendo el saludo
-muy bien Sasuke- dándome una enorme sonrisa
Era enserio que no entendía a este chico
Se paso un rato, y veía como ese “idiota” como ahora lo catalogaba trataba de hacer
fuego sin ningún éxito
-secándose el sudor- nee hubiera puesto mas atención a Iruka- sensei- se reprochaba a si mismo
-sentándose todo exhausto- y ¿Por qué tu clan odia tanto al mió?
-con una venita- que acaso no escuchaste lo que te dije antes
-mmm, la verdad no mucho-confirmado era un idiota- pero me lo podrías repetir
-tu clan culpo al mió de alta traición y fue por eso que los expulsaron
-mmm, ya veo, pero entonces por que me odias a mi, solo por que soy del clan Namikase o tal vez sea por otra cosa
-…-sin decir nada
-acostándose en el suelo mirando al cielo- sabes mi padre dice que hay que dejar las cosas del pasado en el pasado
-y eso es por…- sin entenderle
-si mira eso paso mucho antes que nosotros 2 naciéramos no-retomando su posición
-...- viéndolo
-entonces no veo por que no somos amigos
-…- eso me había tomado por sorpresa- ser amigos, ¡que tonterías dices!
-enojado- ¿Por qué no?
-es cierto lo que dices, ambos no nos hemos hecho nada, pero…
-pero que
-acaso mi clan no atacado a tu aldea matando a muchas personas, eso no es una buena excusa para odiarme
-ocultando su mirada con el flequillo- tal vez tengas razón, pero, si yo te culpo de algo que no hiciste y te empiezo a odiar, seria un círculo que no podría acabar.
Me quede sin palabras, este chico que tanto me podría llegar a impresionar, ese razonamiento jamás se me hubiera ido a la cabeza
-por eso ¡que tal si somos amigos dattebayo!
-jum- levantándome
-oye mínimo dígnate a responder- me puse frente a el y empecé hacer unos cuantos sellos con mis manos- oye- nervioso- no… no te pongas así
-¡katon kouka kyuu no jutsu!
-uuaahh-protegiéndose con sus brazos-¿eh?, no me queme
-oye tonto-llamando su atención- crees que así esta bien la fogata
-…-sorprendido-ja ja,-viéndome con gran alegría- creo que esta un poco pequeña no
-mph-ingrato-pues entonces hazla tu idiota- disgustado
-a quien rayos le dices idiota, teme-enojado
Y así estuvimos peleando por un buen rato, pusimos los pescados a cocer y los comimos con gran afán, pronto cayo la noche, y ahora que lo pensaba, no sabia como regresar a casa.
-oye
-mmm
-me.. me.. Podrías ayudar a regresar a casa-con mi cara toda sonrojada
-¿no sabes como regresar?-no crea que lo voy a repetir- jajaja creo que el dobe eres tu jajaa
-con un tic en el ojo- me vas a ayudar si o no
-si
Así apagamos la fogata y me guío a una bifurcación del río.
-mira si sigues el río te llevara al camino que debes de tomar-señalando
-gracias- empezando a caminar
-solo una cosa más Sasuke- parándome en seco- no te haría daño sonreír de vez en cuando
- volteándolo a ver -ya déjame en paz
-dime, vendrías mañana a jugar-
-sorprendido
-si es que…-con un de rubor en sus mejillas- me divertí mucho hoy-sonriendo
-jum- con una sonrisa de medio lado- ya veremos
-como que ya veremos- con un tic- enserio si serás teme- sacándome la lengua
-te veré en las trampas
-¿eh?
Se me olvido que es un idiota
-en donde nos conocimos
-a cuando te quedaste atrapado y te salve
-con una gotita en la cien- si allí
-mostrándome su dedo meñique – es una promesa
-si, si lo que digas- correspondiéndole
Y así tome el camino que me había mostrado, no tarde mucho en llegar al camino, que conectaba con la aldea, al llegar veía a todos celebrando muy contentos y felices, no le tome importancia y me dirigí a mi casa, al llegar recibí un fuerte abrazo por parte de me madre
-¿Dónde estabas Sasuke? Me tenías preocupada
-estuve jugando en el bosque- desviando la mirada
-déjalo es lo único que sabe hacer- se escuchaba una voz de tras de mi mama
-papa-mirándolo a loa ojos
Pero este rápidamente me dio la espalda, haciéndome sentir mal.
-deberías de ser mas como itachi- mirándome de reojo- el solo acabo con el Hokage
-“Itachi, itachi que no…”-analizando- atacaron al clan Namikase-sin poderlo creer
- hacéis Sasuke-saliendo del comedor Itachi- pero no solo al clan sino a toda la hoja, deberías de haber visto
-pe…pero como no sabia nada de eso
-tu no eres un ninja no debías de saberlo- me decía mi papa
Era algo que no me creía, el clan había atacado no solo a los Namikase sino a toda la hoja “por que soy del clan Namikase”
-“OH, no”- me decía para mi
Abrí la puerta y Salí de la aldea, ese chico debe de estar en problemas, corri, y corri hasta llegar otra vez a donde que de atrapado, estaba agitado, me preocupaba el hecho de que el estuviera muerto o herido pero no sabia como llegar a Konoha tenia que esperar a que el llegara, “es una promesa”, se me vinieron esas palabras a la mente, tenia frió, estaba cansado y con hambre pero debía de esperarlo.
Pasaron las horas, se hizo de día, cayo la tarde y el no apareció,” tu no me haz hecho nada, por que debería de odiarte” lo mas seguro es que ahora si me odie, en fuerte dolor llego a mi pecho, que me pasaba por que me dolía el que me odiara.
-con que aquí estabas tonto hermano menor
-volteando a ver- Itachi
-ya vamonos, mama esta muy preocupada- pero yo no me movía-que tienes te lastimaste-con preocupación
-dime Itachi- con un nudo en la garganta- mataron a todo el clan
-al Namikase, solo unos cuantos cobardes de los que no nos debemos de preocupar, pero eso no importa ya vamonos- llevándome en su espalda
Tenia que afrontarlo el ya me debe de odiar, no debería de importarme pero la verdad me dolía mucho eso.
A las pocas semanas la aldea de konoha ataco el clan en compensación de lo ocurrido por los Namikase, “seria un círculo que no podría acabar” tenía razón Naruto, en esta ocasión yo también tuve que pelear, y aunque no era tan bueno como Itachi en esta batalla descubrí mis grandes dotes de estratega, y fue así como pudimos expulsar a los de konoha, pero el precio fue alto, tanto así mis padres habían fallecido junto con otros del clan avivando mas el odio hacia los Namikase y a los de Konoha. Como nuestro padre era el líder del clan el próximo en subir era Itachi, así que el decidió mover el clan a otro lugar para recomponernos después de la guerra y se decidió ir hacia dirección al país de la hierba ya que era neutral, antes de salir decidí ir otra vez al lugar donde conocí a Naruto, ahora que lo pensaba no lo vi en la batalla, tal vez había muerto, un escalofrió recorrió mi cuerpo, lo dudaba mucho pude ver su despliegue de fuerza y de habilidades no habría muerto tan fácil, llegue rápido al lugar, solo pase un día con ese tonto y me traía nostalgia, solté unas pequeñas lagrimas que rápido seque con mi chaqueta, saque un kunai y escribí en un árbol, guarde el kunai y me fui del lugar era lo único que podía hacer y esperaba que lo viera pero la verdad el destino era incierto jamás pensé que a mis 9 años de edad tendría que vivir esto y solo espero que Naruto este con vida y que lo llegue a volver a ver.
“se que esto no resuelve nada pero…, lo siento Naruto y si quiero ser tu amigo”
atte.: Sasuke