Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Sin ti no soy nada por Mirelle

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola!!

Bueno, los songfikis siempre se me ocurren cuando escucho la radio, y en este caso es eso lo que pasó =)

Espero que les guste ^^

Se lo dedico a lirionegro pk siempre se está pasando por mis fikis y quiere animarme cuando insisto en mis suicidios... ^w^ ¡¡Muchísimas gracias por permanecer a mí lado!! TTwTT

Notas del capitulo:

Los personajes no me pertenecen ^0^

Hola!!

Bueno, los songfikis siempre se me ocurren cuando escucho la radio, y en este caso es eso lo que pasó =)

Espero que les guste ^^

Se lo dedico a lirionegro pk siempre se está pasando por mis fikis y quiere animarme cuando insisto en mis suicidios... ^w^ ¡¡Muchísimas gracias por permanecer a mí lado!! TTwTT

Sin ti no soy nada.

 

Me despierto en la cama, solo, sin nadie al lado de me abrace como solías hacerlo tú. No recuerdo qué estúpida excusa me diste para irte, pero sé que cualquiera que me recuerde tu ausencia se va a llevar un buen golpe. Como ese estúpido de Naruto, que desde que te fuiste hace cinco días no para de decirme que debería haberme ido contigo.

 

Sin ti no soy nada,
Una gota de lluvia mojando mi cara
Mi mundo es pequeño y mi corazón pedacitos de hielo

 

Me visto y bajo a desayunar un poco más animado, pero enseguida se me pasan los pocos ánimos que pudiese tener al ver que no estás en la mesa comiendo una tostada mientras lees el periódico.

 

Me siento en tu silla y siento como una sensación cálida. ¿Sigues ahí? Por supuesto que sé la respuesta, pero no quiero razonar. Me abrazo a la silla, en busca de más calidez y siento como si tus fornidos y musculosos brazos me rodeasen y me aportasen el calor que me hace falta para vivir.

 

Lloro unos segundos recordándote y cuando me doy cuenta de mi estado, me levanto rápidamente, protegiendo mi orgullo de miradas invisibles. Me seco las lágrimas y me voy arriba, buscando mi cartera para ir a la universidad como cada mañana.

 

Tarde me doy cuenta de que me faltan tres minutos para que empiecen las clases. Acostumbrado a que me lleves en tu moto y pueda ir abrazado a ti, no me he percatado de que me he levantado demasiado tarde y de que tendré que andar.

 

Ni siquiera lo intento.

 

Me saltaré las clases hoy.

 

Voy al baño por última vez y me doy cuenta de que tengo ojeras y no me sé atar la puñetera corbata. Siempre lo hacías tú con una sonrisa. Te gustaba hacerlo antes de besarme y sacarme la ropa poco a poco para una sesión de “ejercicios matutinos”. Me friego el cabello, despeinándolo y me miro con una sonrisa triste. Suelo quedar así en esos “ejercicios”.

 

Salgo a la calle e intento no pensar en ti, pero me siento vacío si no lo hago. Sin ti no soy nada.

Solía pensar que el amor no es real,
Una ilusión que siempre se acaba
Y ahora sin ti no soy nada
Sin ti niña mala,
Sin ti niña triste
Que abraza su almohada
Tirada en la cama,
Mirando la tele y no viendo nada
Amar por amar y romper a llorar
En lo más cierto y profundo del alma,

 

Es definitivo. Lo noto cuando camino sin rumbo, encontrándome a desconocidos que me saludan con una sonrisa. Conocidos tuyos, de mi hermano, que creen que te daré saludos de sus partes. Ni siquiera me molesto en devolverles el saludo. Me siento vacío, sólo.

Sin ti no soy nada

Los días desde que te marchaste de mi lado pasan lentamente. Cinco, seis, siete… perdí la cuenta. ¿Por qué te fuiste? ¿Tanto me odiabas? Creía que juntos estábamos bien, pero resulta que tú no querías estar conmigo… Me siento tan triste, ¡¡pero sobretodo vacío!!

 

¿Por qué te llamo y no apareces? ¿Es que mi voz ya no sirve? ¿O es que he perdido el alma? ¿Mi cuerpo tampoco es suficiente para saciar tu sed…? ¡¡Imbécil!!

 

Sigo pensando un rato más pero no comprendo por qué me dejaste por él.


Los días que pasan,
Las luces del alba,
Mi alma, mi cuerpo, mi voz, no sirven de nada
Porque yo sin ti no soy nada
Sin ti no soy nada
Sin ti no soy nada

 

-Tienes mala cara. – me asegura Sakura cuando aparezco en su casa. Hacía tres días que no iba a clases y ella me había llamado preocupada. Había aprovechado que estaba por la zona de su casa y la había visitado.

 

Me invitó a entrar y como si fuese un perro, entré. Me invitó a una cerveza y como si fuese un esclavo al que le ordenan una orden, bebí. El calor de mi cuerpo cuando llevaba ya siete cervezas en el cuerpo compensó la falta de calor que me habías dejado tú. Y cuando ya no diferenciaba las cosas de mí alrededor, Sakura atacó.

 

Me empujó sobre el sofá y se sentó a horcajadas sobre mí, agarrándome las manos sobre mi cabeza.

Me siento tan rara,
Las noches de juerga se vuelven amargas
Me río sin ganas con una sonrisa pintada en la cara
Soy sólo un actor que olvidó su guión,
Al fin y al cabo son sólo palabras que no dicen nada
Los días que pasan,
Las luces del alba,
Mi alma, mi cuerpo, mi voz, no sirven de nada
Qué no daría yo por tener tu mirada,
Por ser como siempre los dos
Mientras todo cambia
Porque yo sin ti no soy nada

Empezó a besar mi cuello, me sacó la camiseta a tirones y mordía mi pecho salvajemente. Yo sólo me imaginaba que esas asquerosas babas que dejaba por todo mi cuerpo eran tu deliciosa saliva y que los dientes que no paraban de morderme, era tu esponjosa lengua acariciándome para hacerme llegar al placer.

 

Pero entonces, noté como el peso que me ahogaba y no me dejaba respirar, desaparecía. Delante de mí estabas tú, sujetándola a ella del cuello y lanzándola lejos. Oí como se rompían los cristales de algo, pero ya no me importaba. Me levanté rápidamente y me abracé a tu pecho. Noté tu tensión.

 

Estabas enfadado, pero me dio igual.

 

-Ya volví del viaje, pero no te había encontrado, Sasuke. ¿Quién se hubiese imaginado que habías venido a casa de Sakura para que te violase?

 

-Itachi, no te vuelvas a ir, no me cambies por él. – pedí mientras lloraba. Me acariciaste la cabeza y me alzaste en brazos.

 

-No deberías ponerte celoso del trabajo, Sasuke.

 

-Ni tú de Sakura.


Sin ti no soy nada

 

Me habías llevado todo el camino de vuelta a casa en tus brazos y yo me encontraba bien abrazado a ti. La calidez había vuelto. Me tiraste sobre la cama e hiciste conmigo lo que tenías tantas ganas de hacer desde que te marchaste de mí lado.

 

-No te… ug… vuelvas a… ¡ah! Ir… - te pedí, mientras te introducías dentro de mí. Sonreíste con esa sonrisa que me encantaba y me besaste.

 

-La próxima vez te llevaré conmigo. Odio esas ojeras que tienes…

 

-uny… Itachi….

 

Lo sabes, aunque no te lo diga, lo sabes…


Sin ti no soy nada.

 

Fin.

Notas finales:

¿Reviews?


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).