Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Tú, mi primera decisión por Sweet Happiness

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

 

 

 Sin duda estaba nervioso. Me encontraba frente a la puerta de la sala de ensayo de the GazettE para hacer una pregunta que me llevaría a mucho o a nada. Nao se había ofrecido a acompañarme, pero estaba claro que aquello debería hacerlo solo, así probaría una vez más cuan interesado estaba en esa persona.


 Todo empezó cuando mis compañeros de banda me contaron que pasarían el año nuevo con sus respectivos novios. Así supe que tendría que estar solo en nochevieja, al igual que el misterioso bajista de the GazettE. Con esta situación pensé que podría invitar a Reita para que pasásemos el año nuevo juntos.


 La verdad es que esto no se me ocurrió a mí, sino a Nao. Él se sentía algo culpable por el hecho de que yo iba a estar sin compañía, y ya que sabía que a mi me gustaba Reita desde hace tiempo, le formuló un pequeño “cuestionario” a Ruki. De aquella forma descubrió que el bajista de la banda de su novio también estaría solo y que no tenía grandes planes.  En resumen, como lo dijo Nao, era mi oportunidad perfecta para “atacar”.


 Dudé un poco ante su plan, ya que no me sentía preparado para confesar los sentimientos que albergaba en mi corazón desde ya hacía tiempo, sin embargo, ahí fue cuando Nao me preguntó “¿Realmente lo amas?”. Me enojé un poco, el mismo me decía que lo aburría cuando hablaba tanto de Reita, ¿y aún así ponía en duda mis sentimientos? Aquello me dio la fuerza necesaria para tomar la decisión correcta; le preguntaría a Reita si quería ir a mi casa para celebrar el año nuevo.


 Se escuchaba la música desde afuera, y su potente bajo, Dios, aquel sonido me llevaba al cielo. Mi corazón latía rápidamente, estaba totalmente nervioso.


- Bien chicos, es todo por hoy. Mañana tenemos el último ensayo, por favor lleguen a tiempo. El que se atrase tendrá que hacer trabajo extra, ya me voy a encargar yo - se escuchaba hablar a Kai desde el interior de la sala

- Sii Kai - dijeron los demás al unísono


 Escuché que unos pasos se dirigían hacia la puerta, por lo cual me aparté.


- Hola Hiroto - me saludó Ruki con una sonrisa - ¿vienes a hacer la pregunta, verdad?

- ¿Eh? - pregunté algo confundido - ¿Nao te contó?

- Si, pero no te preocupes, no le he dicho nada a nadie. Aunque aquí todos saben lo que sientes por Reita, menos él por supuesto. Es un tremendo cabezota. Tan solo hace falta que le des un empujoncito para que entienda todo, así que ánimo.

- Gracias - ¿TODOS lo sabían? Me sentí realmente avergonzado, sobre todo cuando cada vez que salía uno de los de the GazettE me saludaba diciéndome cosas como “¡Suerte!” o “¿Ya te animaste?”


 El penúltimo en salir fue Kai. Me preguntó (aunque más sonó como una afirmación) si esperaba a Reita, y me dijo que pronto saldría. Me despedí de él y seguí esperando.


 Cuando por fin salió sentí que iba a estallar por los nervios. Intenté focalizarme y comencé a hablarle.


- Hola

- Hola Hiroto, ¿Cómo has estado?

- Bien, ¿y tú?

- Muy bien

- Ehh Reita… quiero preguntarte algo

- Dime

- Bien, Nao me contó que Ruki le había dicho que pasarías el año nuevo solo, entonces pensé que quizás te gustaría ir a mi casa aquel día ya que yo también estaré solo

- ¿De verdad? ¡Claro que me gustaría! ¿A qué hora tengo que estar allá?

- ¿A las 21:00 estaría bien?

- Si, por supuesto. ¿Me das tu dirección?

- Claro - tomé una libretita de la mochila que andaba trayendo y escribí mi dirección. Le entregué el papel, el cual observó durante un momento. Luego su mirada se dirigió a mí y sonrió.

- Agradezco realmente tu invitación, la pasaremos bien

- S-si  - le respondí un poco nervioso, ya que imaginé algo muy, por decirlo de alguna forma, “indebido”


 Se despidió de mí y se fue. ¡Si, lo había hecho! ¡Había invitado a Reita a mi casa! Estuve a punto de hacer un baile triunfal, pero pasaron algunas personas y de seguro que ya me veía demasiado ridículo con aquella imborrable sonrisa en mi cara.


 Corrí hacia el comedor, me había dado hambre y un sándwich no me haría nada mal. Pagué el sándwich y la bebida que compré y me senté junto a Shin que estaba ahí sentado solo. Conversamos un rato, lo hice reír bastante ya que estaba de buen humor. Cuando terminamos me ofrecí a llevar a Shin a su casa. Aceptó y nos fuimos. Durante el camino seguí haciendo más bromas, Shin me preguntó qué me había pasado para que estuviera así. Le dije que nada, aunque se que él sospecho algo.


 Cuando por fin llegué a mi departamento me tomé una ducha y después vi televisión hasta tarde. Para mí aquel día fue verdaderamente magnífico.




 Pasaron los días y fue 31 de diciembre. Ya tenía todo preparado. Hasta el cuarto de huéspedes en caso de que algo saliera mal y Reita pues…. no durmiera conmigo. Estaba mirando el reloj ansioso, a cada rato me miraba al espejo para ver si me veía bien. En el momento en el que sonó el timbre pude darme cuenta de que aquella noche se definiría todo.


 Me miré una vez más al espejo y abrí la puerta.


 Al verlo estuve a punto de proferir un gemido. Estaba vestido con una sudadera sin mangas negra y con jeans del mismo color. Los notorios músculos en sus brazos estaban cubiertos por una fina capa de sudor, y el olor a desodorante me embriagaba. Todo en él era tan sexy.


- Ehh, yo… lo siento. Antes de venir aquí fui al gimnasio, y sucedió que de las duchas no salía agua caliente y me daba frío bañarme. ¿Me podrías prestar tu ducha?

- Claro, por favor pasa


 Entró y yo le indiqué en donde se encontraba el baño. Me agradeció y yo quedé algo confundido. ¿Eso había pasado realmente? Me apoyé en la mesita de la cocina y miré por la ventana mientras meditaba acerca de lo que había pasado desde que me había enamorado de Reita hasta aquel momento.


 Reita interrumpió mis pensamientos al preguntarme en donde podía dejar sus cosas. Lo miré y quedé impresionado ante su apariencia. Estaba usando una camisa gris a rayas con una corbata que era negra al igual que sus pantalones, lo cual le daba un aspecto muy pulcro y elegante, a parte de sexy.  Me dije a mi mismo “deja de comértelo con la mirada y ayúdalo con lo que quiere”. Lo guié hasta la habitación de huéspedes, aunque pensaba que no sería necesario que sus cosas estuvieran ahí, pero para mantener las apariencias y fingir que nada de lo que posiblemente iba a suceder era premeditado preferí que así fuera.


 Hice que se fuera a sentar al comedor mientras yo iba a buscar la comida. Me sentí dichoso cuando veía las caras que ponía Reita cada vez que dejaba alguno de los platos sobre la mesa. Sentí que estaba haciendo las cosas bien y de la manera correcta, esperaría a que fueran las 00:00 para darle un abrazo, decirle “¡Feliz año nuevo!” y luego declararme… o al menos ése era el plan.


 Cuando por fin hube llevado todos los platos a la mesa me senté a un lado de Reita para que así comenzáramos a comer.
 

- Hiroto, ¿Tú preparaste todo esto?

- Si

- ¡Está exquisito! Ya me gustaría que tú me cocinaras todos los días. Como vivo solo y no se me da bien el cocinar, lo único que compro son sopas instantáneas

- Bueno, si quieres yo puedo llevarte comida a la compañía, no se medirme cuando la preparo y siempre termino haciendo más de lo que puedo comer

- ¿En serio harías eso por mí?

- Si es que quieres

- ¡Muchas gracias! No sabes lo feliz que me has hecho

 
 Mi corazón comenzó a latir rápidamente, era sorprendente el como sus palabras provocaban tal impacto en mí, al contrario de cómo pensaba antes, sentía que a medida que pasaba el tiempo tenía más fuerzas para confesar mis sentimientos.


 Al terminar de comer pasamos al living y nos pusimos a ver una película, aunque realmente no le prestamos atención. Hablamos de diversas cosas, pude saber lo que le gustaba comer y lo que no, que no le llamaban la atención las tradiciones, sus artistas favoritos. Yo también le conté cosas sobre mí, pudimos conocernos un poco más.


 El momento estaba cerca, faltaban tan solo unos minutos para convertir esta “amistad” que habíamos forjado en un noviazgo, o convertirla en nada, en un cruel distanciamiento que reduciría a escombros mi corazón.


 La radio anunciaba los segundos, estábamos parados junto a la ventana, esperando que comenzara el espectáculo de fuegos artificiales.


3...


2...


1...


- ¡Feliz año nuevo! - me dijo Reita y me abrazó mientras sonaba música de fiesta por todas partes.

- Feliz año nuevo…


 Me dirigí a la mesa con los ojos llenos de lágrimas, me emocionaba el comienzo de un nuevo año y sentí miedo por todo lo que podía pasar. Serví dos copas de champaña, me enjugué las lágrimas y le ofrecí una de las copas. Brindamos y comenzamos a beber. El teléfono no tardó en sonar al igual que su móvil, durante al menos una hora estuvimos recibiendo llamadas.


 Cuando ya eran pasadas las 1:30 de la mañana, decidí que era el momento. Nos encontrábamos en el living comiendo algunos bocadillos.


- Reita yo… tengo que decirte algo

- ¿Qué pasa Hiroto?

- Yo… te amo


 Su semblante no cambió para nada lo cual me inquietó, quizás ya se había dado cuenta. Aún así debía decirle todo lo que sentía o si no nada de lo que había hecho iba a tener sentido.


- Se que es repentino que te lo diga, pero ya desde hace tiempo que me gustas y ya que este sentimiento es tan fuerte sentí que era tiempo de confesarlo todo. - seguía mirándome inexpresivo ¿por qué no decía nada? - Por favor dime algo, me estás matando

- Hiroto, somos hombres y…

- ¡Lo sabía! Tú, maldito estúpido - me levanté y me puse frente a él, estaba ardiendo de ira - Te crees muy macho, vas al gimnasio para tener músculos y usas ropa para verte rudo, pero nada de eso te funciona, quieres tener fama de mujeriego, yo lo se, eso lo notan todos ¡Pero no te das cuenta que hasta el afeminado de Uruha muestra más que tú!

 
 Luego de soltar todo aquello intenté tranquilizarme, mi respiración se había agitado considerablemente, por lo que me iba a dirigir a la cocina a tomar agua cuando Reita me habló.


- No pensé que tuvieras una personalidad como aquella, no creí que fueras capaz de decirle tales cosas a alguien para ofenderlo, y te digo que tus palabras no han tocado mi orgullo de hombre, es más, te encuentro la razón. Sólo quiero que esta vez escuches lo que quiero decir.

 
 Bajó la mirada y entrelazó sus manos sobre sus piernas.


- Escucha. Lo que iba a decir era que somos hombres y que yo… Mira, lo que sucede es que tú me dices que me amas, pero ¿realmente iniciarías una relación conmigo?

- No te entiendo

- ¿Tendrías el valor para demostrar en público que estás con otro hombre?

- Tanto los chicos de mi banda como los de la tuya están de novios con otros hombres, y no les molesta. ¿Por qué crees que me molestaría a mí?

- Es que pareces ser tan frágil, tengo miedo de que alguien te haga daño

- El único que me puede hacer daño eres tú, por eso te pido que me digas qué es lo que sientes por mí


 Se paró y me tomó de las manos


- Hiro, yo te amo. No quiero hacerte daño, ni tampoco quiero que alguien te haga daño por mi culpa. Por eso te pregunto ¿Estás dispuesto a estar conmigo?

- Totalmente


 Me tomó de la cintura y me beso delicadamente. Nuestros labios se movían en un lento compás, sus manos acariciaban mi cintura suavemente por sobre mi camisa. Sus labios se apartaron de los míos y besó mis mejillas. Luego bajó hasta mi cuello, dándome lamidas que provocaron en mí una deliciosa sensación.


- Quizás no deberíamos, recién nos hemos hecho novios y probablemente estoy yendo demasiado rápido - me dijo Reita sin despegar su cabeza de mi hombro

- No es así - dije mientras acariciaba su cabello con una de mis manos - si no te molesta, me gustaría que hiciéramos esto ahora

- Entonces intentaré que sea lo más especial posible. Vamos a tu cuarto


 Lo tomé de la mano y lo llevé. Iba a encender las luces pero él apartó mi mano del interruptor. Inmediatamente se apoderó de mis labios y me recostó sobre la cama, por suerte mi cama era grande por lo que cabíamos los dos en ella.


  Estuvo bastante tiempo besándome, sus manos recorrían mi cuerpo proporcionándome sutiles caricias que eran suficientes para hacer que mi temperatura aumentara.


 Lentamente desabrochó los botones de mi camisa y luego me la quitó. Sus labios se posaron en mi pecho, pasaba su lengua por mis pezones y los mordisqueaba suavemente sin hacerme ni el más mínimo daño.


 Estaba perdido en las sensaciones que el provocaba en mí, así que para no quedarme atrás y al no saber que hacer exactamente, decidí deslizar mis dedos por su cabello y besar su cabeza de vez en cuando. Comencé a gemir de forma casi inaudible, cerré mis ojos para entregarme a las sensaciones.


 Cuando sentí que ya no me hacía nada abrí los ojos, y lo vi sobre mí sacándose su corbata y su camisa. Desabrochó sus pantalones para luego quitárselos. Fui consciente del notorio bulto entre sus piernas, por lo que hice que se apartara de mí y se sentara en la cama. Me obedeció al instante, y me desnudé para no seguir perdiendo tiempo.


 Le quité sus boxers y vi su miembro erguido. Era bastante grande a mi parecer, por un instante pensé en que tan grande lo tenía Uruha como para que se le notara más que a Reita, pero aparté rápidamente ese pensamiento de mi cabeza y tímidamente comencé a lamer la cabeza de su pene. Con una de mis manos acaricié el resto de su miembro, mientras que con la otra toqué su abdomen bien marcado.


 - Ahhhh Hiro eres tan bueno


 Sus gemidos me animaban a seguir, así que metí su miembro en mi boca y comencé a practicarle el mejor sexo oral que pude. Cuando me avisó que ya estaba a punto de terminar, con mi lengua hice presión en la punta de su pene al tiempo que con mi mano lo masturbaba.


 Se vino en mi cara con un sonoro gemido, y apretó fuertemente las sábanas.


- Gracias - me dijo cerca de la oreja y me besó justo detrás de ella - Ahora, para que veas que no me creo el gran cuento como un macho, tú eliges ¿Quieres que te lo haga o quieres hacérmelo?


 Me desconcerté bastante ante sus palabras, sin duda quería ser suyo pero me tentaba bastante el hecho de poder hacerlo gemir y rogar por más, sin embargo preferí tomar la primera opción, ya tendríamos tiempo para experimentar cosas nuevas.


- Quiero que me lo hagas - dije un poco avergonzado, era algo extraño que esas palabras salieran por mi boca


 Nuevamente me recostó en la cama y separó mis piernas. Con su lengua comenzó a dibujar círculos alrededor de mi entrada, mis gemidos se hicieron cada vez más altos, era algo tan sucio el que hiciera eso que me encantaba, ni en mis más perversos sueños pensé en tenerlo haciéndome eso. Su lengua se abrió paso en mi interior, se sentía tan caliente, pensé que podría correrme en cualquier momento.


 Luego de estar un rato torturándome, me dilató metiendo sus dedos de a poco. Cuando ya me hubo preparado se puso sobre mí y llevó su pene hasta mi entrada. Ejerció un poco de presión y mis paredes internas abrieron paso al miembro que pronto acogería en mi interior.


 Dolía bastante, intenté calmar mi respiración, Reita me daba besos en las mejillas esperando la señal para comenzar a moverse.


- Y-ya hazlo

 
 Comenzó a moverse a un ritmo lento y suave, gemíamos a la par, ambos necesitábamos expresar de alguna manera la excitación que sentíamos en aquellos momentos. 


 Las embestidas se hicieron cada vez más bruscas, me dispuse a lamer el lóbulo de su oreja y a gemir aún más fuerte, sabía que eso lo llevaría al límite.

 

 Terminé corriéndome antes que él, y cuando por fin él hubo terminado, nos recostamos en la cama para normalizar nuestras respiraciones.


 Lo hicimos un par de veces más aquella noche, pensé que Reita no tenía límites, no obstante cuando lo vi durmiendo tan pasivamente por la mañana deseché aquella idea de mi cabeza.



 Al llegar como novios a la compañía luego de las vacaciones (en las cuales estuve todo el tiempo con Reita) nuestros compañeros nos felicitaron, aunque no hicieron falta algunas bromas nada discretas que me ponían un poco incómodo.


 Ahora estamos pensando en mudarnos juntos, eso sería como dar el siguiente paso. Así no tendríamos que visitarnos, para vernos simplemente tendríamos que abrir los ojos por la mañana y mirar a nuestro lado.

 

 

Notas finales:

¡¡¡Feliz año nuevo!!! =D

 

 Esto se me hizo tan extremadamente tierno escribirlo ^^ Como que recibí inspiración divina para escribirlo e_e

 

 De mis one-shot de año nuevo Hiroto es el único uke que relata ^^

 

 No tengo mucho que decir del fic. Mmmm... no, no tengo nada que decir xddd

 

 Hoy lloré mucho cuando comenzó el año nuevo, digamos que es una de mis tradiciones xddd

 La primera canción que escuché fue Jukai ni Saku Ai ♥~♥

 El primer fic que subí este año es este xdd

 

  Ahora explico, se supone que son 5 one-shot de Alice Nine x the GazettE celebrando el año nuevo. Bien, he escrito 3 y me faltan dos que subiré mañana. Si se dan cuenta los que quedan son: Ruki, Shou, Nao y Kai. En este fic se pueden dar cuenta cuales son las parejas [[se nombra a una de ellas]] pero no les diré quienes serán los uke así que tendrán que descubrirlo ustedes mañana xddd Los otros one-shot pueden verlos en mi cuenta e_e [[los estoy promocionando xdd]]

 

 Muchas gracias por leer, dejen reviews ya que me motivan a seguir escribiendo [[y últimamente se me han ocurrido varias cosas *¬*]]

 

 Que estén bien, Adiós ^^

 

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).