Enemigo de quien?
Cap.1
Busqueda
Nunca se han dado cuenta de cómo el destino te quita las cosas cuando más te empiezan a agradar?
O como te enamoras de alguien sin darte cuenta...
Como es posible odiar tanto a alguien, pero, amarlo tanto al mismo tiempo?
Son cosas de las cuales uno no se da cuenta hasta que las tiene y luego las pierde...
Todo comenzó cuando...
- Tienes que desacerté de el- dijo mi superior
- Con gusto jefe- le conteste al instante
- Recuerda, que no estas tratando con cualquier criminal...-me advirtió
- Se perfectamente con quien me enfrento- en ese momento me di la vuelta, tenía que cumplir mi misión, la cual era exterminar al otro espía, el que nos traiciono y se robó información confidencial...
Lo primero que tenía que hacer, era investigar más sobre él, sería algo fácil, pues contaba con un súper equipo de armas, computadoras, archivos, etc...
- Primera hora -
En la primera hora de mi trabajo de búsqueda no encontré nada, así que era hora de dejar mi escritorio para salir a las calles a investigar...
No sería fácil, pues el había desaparecido, es como si nunca hubiera existido y alguien más isiera cosas y le diera todo el crédito...
Me pase las próximas 3 horas buscando algún dato de él, pero, lo único que descubrí fue que aún vive en Japón y que se hace pasar por un tal "Gato negro", que apodo tan ridículo, según la gente lo llamaron así por que ataca en la noche, y rapidez y reflejos de gato. Amenos ya tenía algo...
Seguí buscando, cuando un señor me llamo por mi apellido:
- Oye, Blaze!- Lo sé es un apellido raro para un japonés, pero me sentía orgulloso de portarlo, pues, mi padre que llevaba el mismo apellido que yo, fue el espía más grandioso del mundo, ahora era tiempo de ganarme ese título, para llevar orgullo a mis ancestros, y bueno, dejando eso de lado y continuando con la historia...
- Me...me habla a mí ?- pregunte extrañado
- Claro!, acércate joven...se lo de tu misión!
- De...de veras!?- dije algo exaltado pues, quien se imaginaria que un indigente estuviera familiarizado con misiones ultra secretas, o almenos eso creía yo.
- Por supuesto que lo se...pon mucha atención, yo trabaje con tu padre, es por eso que quiero ayudarte...
Mira, el gato negro lo podrás encontrar en los edificios más altos y obscuros, ya que se oculta entre las sombras...
Pero, tienes que tener mucho cuidado de no caer en sus engaños, tal vez tenga una linda cara de inocencia, pero realmente el es de esas personas que te hubiera gustado nunca a ver conocido- El viejo hablaba con coherencia y sabiduría, después de todo no era un viejo loco que mendigaba alimento...
- Muchas gracias, anciano- agradecí amablemente
- No hay por qué, elefante rosa !
- *Retiro lo dicho...*- pero bueno el viejo me había dado buena información, así que subí a varios techos, cada vez más altos que los anteriores, pero no pude encontrar rastro del gato negro, cuando recordé que la casa del canje era uno de los edificios más altos y en las noches era el único lugar donde no pegaba la luz de la luna ni el artificial rayo de luz de los focos.
Subí al obscuro teco, no había ni una persona ahí, me desanime un poco pero cuando me voltee y vi la hermosa vista que había desde ahí, comprendí porque a él le gustaban los lugares altos y oscuros, las luces se veían hermosas, el puente se veía hermoso, pues el lago que estaba de bajo se iluminaba con toda esa luz. Contemple un rato aquel hermoso paisaje que tenía enfrente mío.
Cuando mis pensamientos fueron interrumpidos, por el dulce tacto de una cálida mano, era suave y al parecer de un tamaño no muy grande, al parecer era de un hombre, un hombre joven.
- Tus ojos se ven hermosos con toda esa luz- dijo una voz aterciopelada pero claramente era un chico, uno joven por supuesto, pero, esperen!...esa voz, yo...yo...yo la conozco...es la de...Eiri Katsueda (Gato negro), el espía que nos traiciono, voltee para encontrarme con sus labios que esperaban ansiosos probar los míos, me quede helado sin poderme mover cuando nos faltó el aire y él se separó.
- Tus labios saben tal y como me lo imagine- dijo tiernamente comencé a jadear pues ese beso me había dejado sin aire, me toque los labios y lo mire fijamente a los ojos, el me miro con una mirada gentil pero al mismo tiempo pervertida, se acercó a mí y paso su mano por mi rostro.
- Porque...- logre decir por fin- porque...por qué nos traicionaste!!!, porque te fuiste así como si nada...!!
- Aun no es el momento de que sepas toda la verdad- beso dulcemente mi frente y sonrió, me puso algo nervioso, pero como el espía que soy no me dejan demostrarlo...estaba algo confundido, pero no me dejan demostrar alguna emoción.
- No te preocupes...no tienes que fingir delante de mí, estas en confianza- dijo amablemente- Sabrás toda la verdad pero a su tiempo...
Después de comentar eso retrocedió y desapareció en la noche, trate de perseguirlo, pero fue inútil, había desaparecido en la obscura noche...