Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Porque se me da la gana por matty xD

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Death Note obviamente no me pertenece, porque yo no tengo nada y todos tienen tres cabritas en una cabaña...

 

 

 

Llevaba tiempo sin aparecer por aqui y hacia tiempo que queria escribir un lemon. Dos pajaros de un tiro. 

 

Aclaraciones: escribo humor y por lo mismo, el lemon de este fic no va a calentar a nadie. La idea es hacerlo chistoso porque digamos que... quiero que sea asi.

 

Perdon por las faltas de ortografia, a esta mierda de teclado no le esta funcionando la tecla que se supone pone los tildes. Me jode. 

Notas del capitulo:

Si leen gracias, si dejan review más gracias.

Si les gusta bueno, si no les gusta, rayos! xD

Le había pedido que se fuera a dar una ducha. "Quizás huelo mal" pensó, en ese caso agradecía que se lo dijera, prefería eso a andar apestando por ahí. Se duchó tranquilamente mientras su amigo permanecía sentado en el sillón mirando distraidamente la televisión.

 

Hasta ahí todo iba normal. Salió de la ducha con la toalla atada a la cintura y con la intención de caminar hacia su habitación y vestirse, pero justo antes de dar el primer paso...

 

-¡Matt!

 

Se detuvo. Ni siquiera respondió, sólo se dirigió hasta el lugar de donde provenía la voz que habia lo había llamado para evitar ponerse a hablar a gritos.

 

-¿Qué pasó? - Esta, señores míos, es la pregunta que deben atesorar como la última parte cuerda de todo este asunto, desde ahora la tranquila convivencia o digamos mejor que no tan tranquila, pero si la acostumbrada relación de amistad de estos dos jóvenes sufrirá una pequeña, no así insignificante modificación.

 

-Matt, me dieron ganas - respondió Mello, el interlocutor de quien ya deducimos lleva por nombre Matt, mientras miraba fijo a la televisión, casi sin ver, sólo con los ojos inmóviles, al igual que el rostro, exceptuando su boca y mandíbula al responder a su amigo.

 

-Pues ve... ya terminé de ocupar el baño - contestó muy naturalmente aunque algo extrañado, ¿qué le importaba a él si tenía ganas o no?

 

-No de eso idiota - dijo por fin volteándose a mirarlo.

 

-Entonces? - Matt, Matt, Matt.... si supiera qué tipo de pensamientos pasan por la cabeza de su "amigo" tal vez no respondería tan calmado y tal vez consideraría ir a ponerse el pantalón y en lugar de cinturón ponerse un candado...

 

-Uhm! - ¿eso es una respuesta? más que el diálogo, queridísimos lectores, debieron haber visto la mirada que el jovencito sentado en el sillón dirigió a su amigo, y al lugar donde el amigo de su amigo estaba. Pudo haberse relamido los labios, pero entonces hubiese sido muy obvio, o más obvio aún.

 

-... - estamos carentes de diálogos, en lugar de palabras, Matt arqueó una ceja. "¿Y este qué se trae?" pensó. Nada malo, Matt, nada malo, pero en tu lugar muchos evitarían tus fachas delante de un chico que te acaba de decir que está con ganas.

 

-¿aún no entiendes? - preguntó lanzándole una mirada que Matt hubiese interpretado de cualquier otra persona como seductora, pero en este caso toma como la cosa más bizarra que ha visto. Querido Matt, no subestime las miradas del amigo que lo mire ganoso. Sobre todo si ya se lo ha advertido.

 

.

 

-Estas loco Mello - y dicho esto y haciendo caso a la voz de su servidora, quien les narra, Matt se dirije a su habitación en busca de su ropa. Este tipo no puedo oirme, si es que ya pensaban en culparme por la situacion actual, en la que toallas caen y pantalones suben, con manos nerviosas, tanto que al parecer se han olvidado de la ropa interior. ¿Por qué estará nervioso Mattito? ¿son acaso los pasos del sensual hombre que se dirige a su habitación los que te hacen temblar? ese que se apoya en la puerta, una vez cerrada y te mira divertido. Tus nervios le hacen gracia, querido, después de todo él siempre ha sido capaz de manipularte. Esperemos por tu bien, que esta vez no lo haga. Acabo de mentirle al protagonista de mi historia. Arréstenme.

 

-¿acaso te asustaste? -pregunta burlonamente.

 

-No tengo por qué asustarme de una broma -respondió terminando de ajustarse el cinturón. Tentador, cariño - sólo quería vestirme.

 

-¿Por qué? ¿Tienes frío? Puedo ayudarte con eso sabes... - otra vez el tonito sensual.

 

-¿Ah si? Como me calientas tanto.. - bromeó.

 

-¿Quieres apostar? - acto seguido se acercó a él con un imaginario pero extrañamente visible letrero de "te quiero comer" en la frente. Pobrecito Matt, apuesto que tienes miedo. Un par de vueltas torpes de parte del acosado y otros tantos pasos seguros del violador en potencia terminaron por dejar al primero acorralado en la puerta malditamente cerrada. Adorada seas puerta. No le digan a Matt que dije eso.

 

-M-mello... ya deja de jugar así, es incómodo... - tan inocente, que lindo es.

 

-No estoy jugando - sonrió.

 

-... - vio como su amigo apoyaba las manos en la pueta, dejándolo a él entre ellas y más encerrado y nervioso de lo que ya estaba. Pero no fue sino hasta que sintió el aliento del otro demasiado cerca de su cuello que tragó saliva con fuerza y las piernas se le quisieron hacer lana por un momento.

 

-¿Asustado? - preguntó divertido, y el otro entendió que quizas, QUIZAS todo era una broma, incómoda por supuesto y en la que por poco termina cayendo. Si, tenía que ser una broma, a Mello le gustaba asustarlo, generalmente con armas, quizás el chico tiene ideas nuevas. ¡Qué ideas!

 

-Para nada - respondió sonriendo con confianza, esa que adquirió en el momento en que su cabecita lo hizo asumir que esto no iba en serio. Matt y su cabecita, por Dios niñito tonto. Quizás su sonrisa y sus palabras no hubiesen hecho a Mello reaccionar de la forma siguiente, pero la mano de Matt en su cintura, esa inocente mano que pretendió responder broma con broma en lugar de lo que pasaba por la mente de Mello que era ganas con ganas, hizo que la boca del último se juntase con la del primero y lo dejase con los ojos más abiertos que de costumbre y con las mejillas sonrojadas no sabía exactamente por qué.

 

-¡¿Pero qué mierda?! - Dijo soltándose violentamente. A la hora que le vuelven las fuerzas.

 

- Creo que he sido bastante claro. ¿O no? - levantó una ceja. Creo, sólo creo, que no le molestó mucho que lo empujaran, raro, para tratarse de Mello, pero eso es señal de que las ganas le pueden.

 

-¿Con lo de tener ganas? Pff! tus bromitas en doble sentido no tienen nada que ver con andarme dando besos, que puto que eres Mello - ¿se enojó o es idea mia?

 

-Nada de puto acá, sólo te he dicho que tengo ganas y eres lo único que tengo cerca. Es eso, o mi mano.

 

-Qué vulgar...

 

-Soy sincero, es diferente.

 

-Como sea.

Notas finales:

Aqui el primer capitulo. Ahora mismo ando escribiendo el segundo y sinceramente no tengo idea de cuando va a estar listo. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).