A veces el amor comienza con amistad, y la amistad con odio, con indiferencia.
A veces el sentimiento se da de repente, a veces lo traes dentro y no lo sabes, puede ser cuestión de años, meses, semanas o tal vez días, para que abras los ojos y te des cuenta de ello.
Tan ensimismado en sus pensamientos y en la música que tocaba con su guitarra, no se dio cuenta de que la puerta del estudio había sido abierta.
Un pelinegro y un rubio de cabello casi blanco, le observaban tocar.
Enseguida entraron los demás integrantes, la voz del pequeño vocal atrajo la atención que el guitarrista no le prestaba a la pareja presente.
-Nee Takuya!- grito el pequeño vocalista.
-Ah?- Takuya se giro y observo que los demás miembros estaban ahí.
-Mira quien vino!! No es fantástico??- grito Kanon emocionado.
El grito de Kanon tan solo fue un murmullo para el guitarrista quien escucho mas fuerte el crujir de su corazón al verle tan alegre por la visita del rubio.
-Takuya estas bien?- pregunto Yuuki preocupado.-Parece que hubieses visto un fantasma.
-Ah…ore... hola... Bou-kun- fue lo único que provino de sus labios.
-Hola Takuya, al fin te conozco.- Comento el rubio con una sonrisa tierna.
-Hai, al fin.- Agrego Takuya con ironía.
-Nee, para celebrar iremos a comer que les parece?- dijo Teruki feliz rompiendo el silencio.
-Yeyy tengo hambreee!!- comento Miku feliz.
-Vamos Bou-kun- menciono Kanon al mismo tiempo que le tomaba de la mano y le jalaba.
-Takuchi que sucede? Vamos!- le animo Yuuki, pero este solo observaba a su pelinegro sonreír al lado del rubio.
-Anno…ha…hai, ahorita iré…termino de recoger mis cosas y salgo-dijo Takuya fingiendo una sonrisa.
-Hai!- grito Yuuki emocionado y salio.
Takuya se giro y se arrodillo a recoger sus cosas, sus ojos comenzaron a inundarse en lagrimas, era mas fuerte que el.
Bou le observaba parado en la puerta, le veía llorar, pero era tanto su temor al rechazo que prefirió solamente verle.
-Te odio! TE ODIO BOU!- grito con una gran tristeza el pelirrojo, Bou en la puerta se sobrecogió y se fue de ahí.
El porque de su odio…provenía de un secreto que el guardaba desde hacia años.
Su odio hacia el, era el amor que sentía hacia Kanon, el gran amor que le tenia desde que tan solo era un simple fan de An Cafe, un amor que creció al incorporarse a la banda, un amor que decidió esconder a la primera que vio a Kanon llorar por la partida de Bou.
Desde ese día, decidió tan solo amarle en secreto, verle con amor tan solo desde lejos.
Tan solo unos meces antes, una noche de tragos, mientras el se hallaba sentado en un sillón con vista al mar, Kanon llego por detrás dándole un fuerte abrazo.
-Observas lo inmenso del mar?- le susurro Kanon al oído apuntando hacia el mar cristalino que reflejaba en el, el cielo estrellado y siendo bañado por una hermosa luz proveniente de la luna.
-Ha…hai.- contesto el pelirrojo anonadado por el simple hecho de que Kanon le estuviese abrazando.
-Así de inmenso es lo que siento por una persona- le susurro nuevamente y lo abrazo fuertemente para después pararse e irse.
El corazón de Takuya latía fuertemente, sabia que no hablaba de el, pero quería pensarlo.
A veces el amor nos ciega por completo…nos vuelve tan estupidos como cobardes…y al mismo tiempo listos y decididos…
A veces… tan solo confundes el amor, crees haberlo encontrado y este aun no ha llegado.
Te aferras tanto a tu idea de lo que este es, que la venda que te ha cegado no te deja ver que el se encuentra a tu lado izquierdo y no al derecho…
A veces la amistad…la confundes con amor.
Los cinco integrantes de An Cafe y su ex miembro, fueron a comer y de ahí al parque, Kanon jugaba en el sube y baja con Yuuki, Miku buscaba un heladero, Bou sentado les veía jugar, Takuya recargado en una pared observaba reír a Kanon, eso le hacia feliz a el, Teruki observaba a Takuya, sabia lo que este sentía por el bajista, y se sentía mal al no poderle ayudar.
Siendo ya de noche, debían marcharse a sus casas, todos reían hasta que Miku menciono lo que para Takuya, era el final de su posibilidad.
-Nee… Bou, te quedaras con Kanon ne?-dijo el vocal.
-Ha…hai- respondió el rubio al tiempo que se atrevía a encarar al pelirrojo, viendo como este palidecía ante la noticia.
-Do…doshite?-pregunto el pelirrojo alterado.
-Ah? Que tiene de malo?- pregunto Miku algo confundido.
-Solamente quiero saberlo- dijo triste bajando la mirada.
-Nee… veras,- dijo Teruki.-Bou al marcharse, vendió su casa, estando nosotros no podemos dejar que se valla a un hotel o algo así.
-Demo…porque con el?- pregunto nuevamente intentando retener sus lagrimas.
-Nee…solo lo decidimos Takuchin- dijo aun confundido el vocal.-demo…si tanto te molesta esta bien, Bou-chan puede quedarse contigo!-dijo finalmente contento.
-Ah?-dijeron al unísono tanto Bou como Takuya.
-Si no seria mala idea, después de todo tu no has convivido tanto con el como Yuukiki.
-Ore…-Takuya no se esperaba eso… pero algo le dijo que si…
Mantén a tus amigos cerca… pero a tus enemigos mas!.
-Hai- respondió finalmente el pelirrojo.
-Ah?-pregunto incrédulo Bou.-Hontouni?
-Hai, Miku… tiene razón, bueno en fin, vamos a casa Bou.- dijo el pelirrojo con una falsa sonrisa y le tomo de la mano llevándoselo.
Los demás integrantes solo observaron hasta que ambas siluetas desaparecieron a lo lejos, Yuuki y Kanon también se marcharon dejando solos a Teruki y a Miku.
-Miku…estas seguro de lo que has hecho?- pregunto dudoso Teruki.
-Hai, ya veras que funcionara…
-Demo… el ama a Kanon.
-No le ama.
-Ah?.
-No le ama, cree amarlo… Bou si ama a Takuya.
-Quizás…tengas razón.
Esa noche Takuya soñó que el rubio moría, creía que el reía, pero no era así, realmente lloraba amargamente.
A veces solo hace falta un sueño para darte cuenta de tus deseos verdaderos.
Los días transcurrían rápidamente, y Takuya simplemente hablaba no mas de lo necesario con el rubio, solo le retenía para mantenerle lo mas lejos posible de Kanon.
Era un diario donde Takuya siempre escribía todo lo que sentía, donde decía lo que a nadie mas. Era un diario lo que ahora Bou con ojos llorosos sostenía en sus manos pesadamente.
No le dolía saber que el amor de su amado le pertenecía a alguien mas, le dolía saber que con la misma intensidad que decía amar a Kanon… le odiaba a el.
Despego un pequeño pedazo del forro que cubría el diario y escribió algo en el, después lo volvió a sellar y lo guardo nuevamente en su lugar.
Esa noche llovía fuertemente, las lágrimas de Bou se perdían con las de la lluvia y parecían una sola.
Takuya volvió de su ensayo con la banda, Bou había preferido no ir, para Takuya era lo mejor.
Algo le hizo parar, así quieto como estaba, observo al rubio llorando amargamente sentado en el jardín bajo la lluvia.
Tal vez era su imaginación, pero podía escuchar latir un corazón que no era precisamente el suyo.
A veces creemos escuchar nuestro corazón roto y no nos damos cuenta de que no es el nuestro…si no el de alguien más…el egoísmo te cierra…
-te enfermaras si continuas bajo la lluvia- comento el pelirrojo suavemente al oído del rubio tendiéndole una mano, Bou le observo y la tomo.
No es un principio, ni una señal, tan solo cordialidad y amabilidad...¡No confundas!...
Tras ese día lluvioso, un poco de amabilidad se asomaba de Takuya hacia Bou, algunos gestos y más palabras.
Cuando eres muy cercano a alguien…pueden llegar y malinterpretar esa preciosa amistad…
El rubio feliz le contaba a Kanon sobre el mejor trato de el pelirrojo hacia el.
Kanon emocionado le abrazo fuertemente y le dio un corto pero tierno beso en sus labios, como solían hacerlo…antes.
Através de un cristal, Takuya observo la escena ardiendo en cólera y al mismo tiempo en dolor. Se marcho de ahí y se dirigió al baño, golpeo fuertemente la pared y maldijo.
-ESTUPIDO, ESTUPIDO…KANON!
Kanon? Se dijo a si mismo… no…no podía ser…el amaba a Kanon, el…exactamente ”amaba” a Kanon, ya no!.
¿Qué ocurrió? ¿Cuándo ocurrió? ¿En que momento su ira, su odio se había transformado en ese sentimiento que ahora causaba celos?.
Camino un largo tiempo intentando despejar su mente.
Llego a su casa y esta se encontraba sola, tomo su diario y observo como através de los días los pensamientos de odio hacia el ex guitarrista eran cada vez menos pronunciados hasta simplemente escribirlo como “Bou” en una frase donde no había ni un dejo de maldad ni de odio.
Esa noche, Takuya observaba el techo de su dormitorio sin poder dormir…
-Takuya, ¿Me sigues odiando?- le pregunto un Bou con los ojos cristalizados.
Eso tomo por sorpresa a Takuya quien solo remiraba atónito.
Tal vez un deseo dentro de el, un impulso, no se lo que fue, pero se levanto de su cama, tomo la mano de Bou y le dijo tiernamente:
-Ya no Bou…-sonriéndole dulcemente.
Bou le abrazo fuertemente y este lo acogió gustoso.
Lentamente y abrazados caminaron hacia la cama, Takuya recostó a Bou en ella, con sus manos acariciaba la cara de Bou y este le sonreía llorando.
-Iee… iee… no mas llanto Bou- dijo Takuya cortando la distancia entre ambos dándole un suave beso, se separaron y se miraron a los ojos, Takuya volvió a besarle mas fuerte esta vez.
El deseo se hizo presente en ambos, ambos se recorrían sus cuerpos ya desnudos con sus manos, Takuya besaba suavemente el cuello de Bou, mientras invadía todo su ser, Bou era feliz siendo suyo, era inmensamente feliz.
Takuya besaba todo el cuerpo del rubio tiernamente… sin algo mas que ternura.
La traviesa luz de la luna que se colaba por las ventanas del cuarto del pelirrojo, era la única luz que alumbraba los cuerpos de ambos fundidos en el deseo y la pasión.
Esa noche durmieron en la mima habitación, en la misma cama...juntos…los dos.
Cuando una noche te entregas a la persona que amas… la duda de si estará o no al día siguiente... ¿no te invade?
Mientras el sol se colaba juguetonamente por el cuarto, un rubio se abrazaba solo a si mismo.
Takuya se había ido sin decir nada, solo se fue.
En un parque, con gente riendo y jugando por doquier, el pelirrojo miraba fijamente al cielo, todo había cambiado, no era mas el, se había transformado, no había sido solo sexo esa noche, había sido mas que eso, una fuerte fusión de pasión… y de amor.
Eso había sido todo, era mas de lo que su corazón podía soportar, empaco sus cosas y decidió marcharse, había fallado.
Al abrir la puerta, Takuya estaba ahí, Bou atónito le miro y no pudo decir nada, no solo porque sus palabras no salieron, también porque sus labios habían sido atrapados por los del pelirrojo en un suave y dulce beso.
Se abrazaron fuertemente cuando Takuya observo el equipaje del rubio.
-Go… gomene…yo pensé que tu…que tu…
-Iee, fue mi culpa, yo… no se que siento por ti Bou, lo que siento por ti… no… no se describirlo.
-Ore…-dijo Bou llorando-Yo si, yo te amo Taku…te amo desde que te conocí.
-Aquel día en el estudio?-pregunto confuso Takuya.
-Iee…aquel día de tu audición para An Cafe…
Nuevamente Takuya le beso y ambos se abrazaron.
A partir de ese día…Takuya supo lo que sentía…Amor hacia ese rubio, amor de verdad y no una simple fijación o atracción como la que sentía por Kanon.
Una tarde soleada de ensayo…todos charlaban alegremente.
-Etto…-hablo Takuya nerviosamente.
-Nani? Que ocurre Takuchin?-pregunto Yuuki.
-Ore…quiero comunicarles algo…Bou y yo estamos saliendo.
Los presentes lo miraron y sonrieron alegremente felicitándole.
-Eehh… ese Takuchi se lo tenia escondido-grito Miku abrazándole.
-Los felicito!-dijo Teruki emocionado mirando a ambos.
Bou sonreía…sonreía vasiamente, Kanon le miraba simulando sonreír.
Todos a festejar se fueron, y al mismo parque al que fueron la vez de la llegada de Bou terminaron yendo.
Bou se mecía en un columpio solo, y alguien se sentó en el columpio de al lado.
-Cuando?-pregunto seriamente Kanon.
-Pronto Kanon.- respondió el rubio con una sonrisa triste.
-Entonces… doshite? Eres… eres un egoísta Bou…
-Lo se Kanon… lo se.
¿Crees en la felicidad?
Yo no!
Pasaron los días, todo estaba siendo calculadamente planeado por Takuya… era cuatro de febrero y Takuya le pediría que fuera su novio formal a Bou.
Ese día, Takuya salio temprano a comprar lo necesario para el festejo.
Bou observaba por la ventana como Takuya subía al carro y se iba, al verle lejos, tomo su equipaje y escucho como Kanon le pito fuera de la casa.
Bou salio de la casa y observo a Kanon, este aunque molesto se miraba triste.
Antes de poder escapar, cayo.
Justamente antes de subir al auto como se disponía a hacerlo, se desplomo en el piso.
Kanon bajo nuevamente del auto y trato de reanimarlo, mas no pudo hacerlo, lo llevo rápidamente al hospital y marco a Miku.
-Moshi moshi!-atendió Miku.
-Ya…ya ha pasado…-dijo entrecortadamente Kanon y Miku colgó.
Miku que sostenía a su perrita en brazos mientras miraba la tele, dejo a un lado a Nyappy-chan, apago el televisor y se tapo la cara con las manos para llorar amargamente.
Antes de que Takuya llegase a casa, Kanon le habló y le pidió de favor que fuera al estudio.
Takuya resignado acudió, y al entrar se topo con la cara triste de todos ecepto de alguien… de su rubio.
-Nani? que pasa? –pregunto Takuya extrañado.
-Takuya…Kanon debe decirte algo…-hablo cabizbajo Miku.
-Ah? Kanon?.
A veces crees que las cosas ocurren por casualidad… y no es así…
Hacia mucho tiempo, Bou cansado de la fama, decidió hablar con sus amigos y comentarles acerca de su partida, estos tristes le apoyaron, concediéndole un ultimo deseo como miembro de la banda, estar presente en la audición de su suplente.
El día de la audición, no se mostró en publico, prefirió no hacerlo, pero se quedo tras un telón detrás del escenario.
Enseguida la melodía que escucho, invadió su corazón y sabia que era el, que era el suplente ideal para ocupar su lugar.
Como a los demás miembros también les agrado, lo aceptaron y se comunicaron con Takuya para hacerle saber de su decisión.
Para el fue como amor a primera vista, algo que le hacia falta a su vida.
Pero últimamente fuertes migrañas y demasiado estrés, le hizo alejarse, decidió marcharse para descansar, deseándoles lo mejor y pidiéndoles que cuidaran de Takuya, que no lo dejaran irse como le hizo el.
Después de largos años sin saber nada de el, Kanon entro a su casa y le encontró llorando en su sala, lo abrazo fuertemente y Bou le contó.
Estaba enfermo, iba a morir…sin un diagnostico seguro y sin haber podido conocer a Takuya.
Kanon sin poder creerlo, decidió ayudarle, y no estaba solo, Miku, Teruki, y también Yuuki a quien conocía desde años antes de su partida, estarían con el.
Miku mientras tocaba una canción, se dio cuenta de ello… el podía ayudarle a acercarse a Takuya, pues el ya sabia de los sentimientos de este hacia Kanon…
así se planeo todo… pero todo plan concluye y llega el fin.
El primer día que Bou quiso marcharse de casa de Takuya, le había sido anunciado que no le quedaba mucho, pero que gracias al medicamento no debía sentirse así, le prometieron que todo terminaría como un dulce sueño.
-Eres un egoísta Bou!
-Lo se Kanon… lo se.
El amor nos hace egoístas…
Pasaban los días y un respirador artificial mantenía “vivo” al rubio.
Era trece de febrero y Takuya se encontraba llorando amargamente en su cuarto, todo alrededor se encontraba tirado, roto, todo como lo estaba su corazón.
Veía su cuarto por todos lados, no se reconocía ni el, todo era un desastre.
Lloraba desconsoladamente, no podía calmarse, de pronto giro su cabeza y observo un pequeño libro envuelto en polvo, lo tomo y se dio cuenta de que era su diario.
Comenzó a leerlo y observaba en cada hoja como con letra llena de odio y rencor escribía y describía lo mucho que odiaba a Bou.
Sus manos comenzaron a temblar y e diario en ellas, lo tomo y comenzó a romperlo, todo, todo el, que no quedara huella ni rastro del odio que alguna vez sintió hacia su rubio.
Un pequeño trozo del forro se desprendió del libro y dejo al descubierto un escrito que el no recordaba haber grabado ahí.
Lo acerco a el y lo leyó.
Si amas algo, déjalo ir…
Espero y algún día el odio que
sientes hacia mi…se convierta en amor…
Bou.
Cayo arrodillado al piso con la mirada hacia ningún lado, Bou le había dicho su ultima palabra.
11:58, Takuya abrió la puerta del cuarto de Bou despertando a Miku y Kanon quienes se habían ofrecido a cuidarlo en el hospital.
Takuya se acerco a el, le beso los labios y susurro…Feliz día de San Valentín mi amado Bou…dicho esto, apago el respirador. Eran las 12:00 AM del 14 de febrero.
A veces el odio se transforma en amor… y cuando careces de el, siempre cuentas con la amistad, ese calido sentimiento que cuando el amor acaba, te reconforta.
Y así frente al ataúd del joven rubio, se encontraba su amor, el amor de Takuya quien portaba una rosa en manos, como obsequio de ese día…
Y detrás de el, sus amigos, una amistad que le prometió ayudarle a sanar, ya continuar juntos.
Amor y Amistad, dos palabras distintas que llegan a ser una sola.
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