Tokio, Japon 11 de marzo de 2011 las 13 horas.
Los habitantes de la famosa isla de la tecnologia se encontraban tranquilamente trabajando como todos los dias del calendario nipon. El sol brillaba en todo su explendor y nada hacia sospechar lo que realmente se avecinaba.
Naruto Uzumaki era un joven de 22 años que trabajaba como profesor en un colegio infantil. Desde pequeño su deseo fue poder enseñar a las futuras generaciones todo lo que estuvo, esta y estara relacionadas con su pais. El joven era un hombre atractivo de cabellera rubio y unos hermosos ojos azules, y se notaba a leguas que era extranjero, pero amaba el pais como el que mas. Llego a Japon siendo un pequeño niño de tan solo 2 años, cuando sus padres se mudaron por cuestiones de trabajo, y desde entonces, se empezo a criar con la lengua, economia y gente de ese pais. Amaba su trabajo, y tambien a sus niños, ya que eran su alegria.
Gracias a sus padres poseia una gran cantidad de dinero, pero eso no impedia que querria cumplir con su trabajo. Su padre siempre quiso que fuera empresario como el, pero Naruto siempre se nego, porque ese no era ni de lejos un trabajo de su agrado. Al ser su personalidad alegre y animada, porducia que los niños se encontraran agusto con el, y que la gente estuviera comoda con su presencia.
En esos momentos el rubio se encontraba en el descanso que le correspondia mientras tomaba un caliente té en una de las sillas de la sala para profesores.
- Que raro verte aqui Naruto, nomalmente sueles estar en el patio exterior - Shikamaru era el profesor de matematicas del colegio, en lo que a personalidad se referia era un tanto raro, pero eso no evitaba que fuera uno de los mejores amigos de Naruto.
- Jajaja, si, hoy estoy aqui, aunque hace un buen dia - El rubio sonrio a su amigo, y continuo con su té, mientras pensaba en que hacer a la tarde antes de llegar a su apartamento en tokio.
El tiempo pasaba y llego la hora de que cada uno se dirigiera a su casa, y el rubio no fue la excepcion. Despidiendose de sus niños cogio su maleta y se dirigio a su apartamento, no sin antes pasar a comprar algo para llenar la nevera, no sabi porque tenia un mal presentimiento, y decidio provisionarse.
Desde muchos años atras todo el mundo trataba de mantener provisiones en sus casas, dado que japon era la isla que se econtraba en el centro de las placas teoutonicas, y eran frecuentes los terremostos. Acia dos dias hubo uno que cogio a mucha gente desprevenidos, y Naruto no queria que si ocurria lo mismo, se quedara sin nada que llevar a la boca.
Entro en el gran centro de supermercado, y rapidamente se dirigio a comprar sus amados fideos instantaneos, de distintos tamaños savores y colores. Adoraba esa comida, y no era de extrañar que se llevara el alimento en elevadas cantitadades. A continuacion se dirigio a la zona de los refrigerios, y compro lo que creia seria necesario. Se encontraba entretenido comprando cuando miro su reloj, de seguro ya seria tarde y tenia hambre, a fin de cuentas, aun no habia comido. El reloj marcaba las 14:55, si, definitivamente era tarde.
Se empezo a dirigir a la caja cuando comenzo. Un fuerte temblor empezo a sacudir el edificio, mientras que las estanterias se caian unas contra otras en un desesperante efecto domino, se podia oir claramente el sonido de botellas y productos que caian al suelo mientras al recivir el impacto se rompian en pedazos, y tambien se podia escuchar, el terrible rugido que lanzaba la tierra. Naruto se dirigio a un refugio para que no reciviera ninguna clase de impacto o se caeria por las constantes sacudidas. Podia contemplar desde el lugar en el que se encontraba como al gente desesperada se intentaba amarrar a cualquier zona que lo mantendria de pie. El tiempo pasaba, y las sacudidas no cesaban, al contrario se acian mas fuertes. Estaba clara una cosa, ese no era un terremoto "mas". Los gritos de panico se escuchaban en todo el establecimiento, y los niños que lloraban mientras llamaban a sus madres tambien. Pudo contemplar como una de las dependientas quedaba sepuntada tras una gran estanteria de latas, y como muchas otras se guarecian bajo la caja registradora, las luces se apagan y encendian en un constante destelleo producto del movimiento del edifio que tambien afectaba a la electricidad del mercado. Pero al final, todo ceso.
El brusco sacudir se detubo, mientras la gente aun se encontraba en su lugar shockeada. La respiracion de Naruto era acelerada, y su cuerpo temblaba sin control, contemplando el desastre que la naturaleza habia creado en el lugar. Se comenzo a ergir poco a poco mientras intentaba tenuemente salir del asombro que lo azotaba. La gente se dirigia a la salida y el rubio no fue diferente, cogiendo las bolsas con la comida,y se dirigio a la salida del recinto. Y contemplo con horror como la gente salia a la calle con heridas por doquier producto del impacto de algun material. Esquibando a la gente y corriendo a como daban sus piernas se dirigio a su apartamento.
Entro sin vacilar, queria llegar y sentir que se encontraba seguro en su casa, auqnue sabia que ante tales sucesos NADIE estaba seguro. Dejo las bolsas en la entrada, no tenia ganas ni de andar recogiendo la compra, y se dirigo al sofa, encendiendo la enorme pantalle de television que se encontraba en el centro. Al encenderlo vio con horror el desastre que habia producido el terremoto, y como el gobierno pedia calma para los ciudadanos de la isla. No podia creer aun lo sucedido, y contemplo a su alrededor comprobando el deplorable estado en el que se encontraba la casa debido a la catastrofe.
- Esto es una locura - Se llevo una mano a la frente mientras preocuraba relajarse un poco de la tension que mantenia acumulada cuando escucho lo siguiente.
- Ademas se ha encendido la alerta por maremotos en toda la zona del pacifico y un gran tsunami producido por el terremoto a azotado con gran intensidad Miyagi, afectando a la central nuclear de Fukushima y al aeropuerto de sendai. Un barco con 100 pasajeros a desaparecido y la media de muertes se eleve poco a poco, mientras que la de heridos asciende a una cifra ya tetrica y escalofriante - anunciaba la cadena de television que estaba contemplando el rubio.
Sus ojos no se separaban de la pantalla de plasma, y comprobo lo terrible que habia sido el terremoto junto con el tsunami en la zona de Miyagi. El agua arrastraba todo lo que se encontraba a su paso. Las casas no eran un obstaculo y los coches flotaban como si fueran de juguete. El agua se adentro en todas las zonas a las cuales llegaba y los barcos se estrellaban entre si, o contra puentes y casas, mientras se undian en el fondo de ese terrible rio inparable de escombros. No pudo contemplar mas, el estado del lugar le desesperaba y decidio apagar la tele. No queria seguir sufriendo por como habia quedado su amada japon.
Se levanto del sofa y cogio la compra de la entrada para comenzar a colocarla donde le correspondia. Despues de terminar decidioordenar en todo lo posible la casa y arreglar aquellos destrozos que podia reconstruir el mismo. Esataba con su tarea cuando del telefono de casa sono.
- ¿Si? - el rubio respondio con voz tranquila, preocurando transmitir tranquilidad para no preocupar a nadie.
- ¡Naruto hijo mio! ¿ Te encuentras bien? - el rubio suspiro mientras sele formaba una sonrisa en la cara, sus padres siempre tan protectores con el - Que alegria oir tu voz mi niño, estaba preocupadisima por ti, y tu padre tambien, queria mandar a alguien a buscarte para que te trajera a Alemania. No e podido llamarte antes porque las lineas de japon estaban cortadas, casi me muero de la angustia yo ya no...
- Ya mama, estoy bien, no hace falta que te preocupes mas de la cuenta enserio, no me paso nada, nisiquiera un rasguño - el rubio trataba por todos los medios en tranquilizar a su madre la cual se notaba isterica al otro lado de la lineo telefonica - deverias calmarte un poco jejeje.
- Bueno, confio en ti, y mas te vale no estar mintiendome en esto Naruto. Bueno hijo, sea lo que sea lo que necesites llamanos y pidenoslo que te ayudaremos enlo posible ¿Vale? Bueno mi niño, muchos besos y abrazos y CUIDATE, adioos.
- Si mama, adios - el rubio suspiro habatido, su madre era tal y como lo era el de peuqeño.
Decidio de paso llamar a sus amigos para comprobar si se encontraban en buen estado, y algunos sufrian alguna erida leve, pero nada de lo cual preocuparse. Entro a la cocina, y deduciendo que la comida despues de la catastrofe escasearia, decidio comer lo que antes se desconponeria del refrigerador. Cocino un filete y posterior se fua al ordenador para comprobar en su totalidad el estado de la ciudad nipona, ya que, todo el mundo sabia, la tele no se podia comparar a lo que internet contenia respecto a informacion. Tan concentrado estab en su tarea de recopilacion de informacion que no se dio cuenta de que las oras habian pasado casi como una estalacion. Aun se encontraba absorto con las noticias que leia, desde que en la playa de Miyagi habian encontrado una media de 300 muertos hasta que el tsunami y posterior maremoto viajaba a una velocidad de 500 km/h.
Al final, la vista sele comenzo a cansar a causa de estar todo el tiempo frente a una pantalla de ordenador. Se retiro las gafas que devia usar en casos especiales como el ordenador, leer o ver television y levantandose de la silla se dirigio a la terraza que contenia el apartamente. Comprobo asombrado que ya era de noche y que estaba todo completamente oscuro, seguramente abrian cortado la electrizidad de la calle por se acaso sucedia algo mas. Entristecia ver como la gente deambulaba por las calles sin nigun lugar fijo al que acudir, y muchos aun eridos que no habian ser atendidos.
Naruto se fijaba en todos los detalles, desde el estado de la carretera y los alrededores como de la gente que pasaba y su estado, hasta que algo llamo su atencion. En la berjita de su casa veia un bultito, seguramente seria una persona. El rubio sin vacilacion bajo a comprobar quien era el que se habia sentado en la puerta de su casa, hasta que llego a donde se encontraba ese indibiduo.
- Oye ¿Que haces aqui? - Pregunto el rubio por detras de la reja, aun no se fiaba de esa persona, ya que era un desconocido.
El ocupante giro la cabeza asustado, pero aun sin levantarse, para comprobar quien le habia hablado, y entonces fue cuando Naruto lo vio. Era un joven de aproximadamente 20 años, o menor, de ojos y cabello color carbon y se hallaba completamente empapado y helado. La mala suerte dio que el terremoto y posterior tsunami fuera a ocurrir en aquellos frios dias de invierno, y que a consecuencia, la gente lo pasara aun peor de lo que deveria ser. El joven no llevava nada mas que un pantalon unas playeras y un shutter puesto, y todo se allaba completamente mojado. Se abrazaba a si mismo por las rodillas y su mirada se hallaba completamente muerta, no habia brillo, no tenia vida.
- Lo siento... No tengo donde ir... - La voz estaba quebrada ya seria por el frio la angustia que tenia - pero... Ya me iba...
El chico izo mencion de levantarse pero al intentarlo la falta de fuerza izo que su cuerpo volviera a caer de rodillas al suelo. Naruto se asusto, realmente se encontraba en deplorable estado, y alarmado decidio salir a ayudarlo. Lo levanto como pudo y paso su brazo tras su cadera, mientras pasaba el brzao del chico por encima de los hombros, para asi poder caminar aunque seria un poco con el. El chico seguia consciente dentro de lo que cabia, y eso era bueno.
Entraron en la casa y Naruto dejo al joven encima del sofa mientras tocaba su frente para comprobar la temperatura que tenia, y efectivamente, estaba elevada. Se dirigio rapidamente al baño donde tenia todo lo que a medicina se referia y cogio un termometro, para seguidamente ir a la cocina y llenar un cubo de agua fria y meter un paño dentro. Volvio a la sala donde lo habia dejado, y vio que respiraba con dificualtad y que se allaba sonrojado, seguramente devido a la fiebre. miro con angustia que su ropa se encontraba mojada, y decidio camviarla poniendole ropa suya y de paso taparlo con una manta. El termometro marco una temperatura de 38,6 y decidio empezar a poner el paño en la cabeza, sin darse cuenta, se paso la noche entera ayudandole, hasta que se quedo dormido en el suelo apollado en el sofa.
Un nuevo dia llegabay en la cabeza de cierto moreno que en esos momentos se allaba profundamente dormido, se allaba una constante pesadilla que no le dejaba descansar tranquilo, y asi fue que deseo despertar y asi izo, levantandose de golpe y los ojos entre lagrimas mientras se abrazaba a si mismo.
- Papa... Mama... Hermano... Todos... sniff... -Las lagrimas flulleron tranquilas a traves de los hermosos ojos del moreno que no paraba de abrazarse a si mismo.
El pequeño ruido que producia al final termino despertanto a la persona que se encontraba a su lado cuidandole, y este ultimo se asombro con lo que veia. Era hermoso, aunque se allara un poco demacrado devido a la fiebre que tenia, y el estado en el que se encontraba. Se levanto un poco ya que le dolia el cuello por haber pasado en esa posicion la noche, y parecia que aun con esas, el chico no se daba cuenta de su presencia.
- Hola ¿Como estas? - El moreno al final mira acia la direccion del rubio y este ultimo quedo asombrado por como esos pozos negros eran en esos momentos eso, pozos sin final aparente en los cuales te sumergias en la trsiteza.
-... Hola... Pues, un poco devil supongo - el moreno al menos le hablaba, eso significaba que no estaba loco ni nada por el estilo.
- ¿Y como te llamas y que edad tienes? - tenia que saver un minimo de el, ya que ahora tenia que ayudarle a llegar a su hogar.
- Mi nombre, es Sasuke Uchiha... Y tengo 18 años - el moreno hablaba con la cabeza agachada, sin mirar al rubio, solo contemplaba sus manosque se encontraban encima de la manta.
- Y dime Sasuke ¿Donde vives? De esta forma puedo ayudarte a volver con tu familia.
Entonces el Uchiha se derrumbo en llanto. Su hogar su familia esas palabras le dolian en lo mas profundo. El llanto que salian de sus ojos era inparable y el dolor que se podia contemplar por el constante tembleo que llevava su cuerpo impactante. Se tapo la cara en un bano intento de que el rubio no le viera, pero este asustado se sento el el borde del sofa y accedio a abrazarlo. Aunque no lo conocia practicamente de nada, el sufrimiento que ese chico desprendia le dolia hasta a el. Y ademas, tan solo tenia 18 años, aun era un chico joven y bastante hermoso. Aun podia tener un buen futuro, y le daba pena pensar que podria perderlo por el estado en el que se encontraba.
Despues de un tiempo, el moreno comenzo a calmarse, auqneu eso no produjo que el rubio lo soltara en ningun momento, solo preocuraba susurrarle palabras para que se calmara. Al final comprobo que el cuerpo del Uchiha dejo de temblar, y penso que seria el mejor momento para separarse de el.
-Dime ¿Que ocurre Sasuke? - El tono de voz del rubio sonaba preocupado y desesperado, queria saber que le pasaba que lo qtormentaba hasta el punto de dejarlo en eses estado.
- Mis padres... Mi hogas... ¡Mi hermano!... ¡He perdido todo, TODO alli! Primero en terremoto, y despues el tsunami... Lo vi... ¡Vi como moria mi hermano! Y no pude hacer nada... Porque me dijo que tenia que vivir yo...- el moreno contaba todo lo que podia dentro del estado en el que se encontraba, y el rubio escuchaba con atencion cada palabra que pronunciaba.
- ¿En que zona vivias? - pregunto el rubio.
-...Miyagi... - entonces Naruto quedo en shock. Miyagi era la zona mas afectada por el tsunami, y practicamente apenas daban supervivientes.
- ... - Entonces comprendio, el tsunami se habia llevado todo lo que era balioso en su vida, y se habia quedado solo. Era normal su dolor, ver perderse ante tus ojos a tu propio hermano por salvarte a ti la vida, debio de ser muy duro para Sasuke.
El moreno no paraba de llorar aun dolido por lo que habia sucedido, y el rubio volvio a abrazarlo. No sabia porque le dolia tanto el suceso del moreno. De aqui en adelante, nadie ni nada le aria daño, ya que el no lo permitiria, y ademas, tendria donde dormir, donde vivir, porque seria con y junto a el. No se perdonaria si lo dejaba en la calle a su suerte. Y asi fue como decidio, que Sasuke Uchiha iba a cuidar por quedarse solo tras la catastrofe.
CONTINUARA...