Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Tú y tu maldita manía de dormir desnudo por Arisita

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Si ven que hay alguna falta... perdon XDDD dsa pero copio y pego y los nuevos capitulos iran mejor(?)

El joven rubio mal teñido, también conocido como Akira, paseaba por los alargados pasillos del hotel con cigarro en mano.  Akira parecía nervioso, realmente no es que lo pareciese, es que lo estaba.

Ruki lo miró con la ceja levantada. Hacía años que conocía a aquel rubio de la bandita, y nunca lo había visto de aquella manera… ya se había fumado tres cajetillas de tabaco en lo que iba de noche. Todo el pasillo olía al inconfundible toque de Mild Seven Lights,un olor que no se iba tan facilmente de la ropa...y eso molestaba profundamente al castaño. Tal fue el enfado que, con un seco golpe en la pared sacó al rubio de sus pensamientos. Akira le miró a los ojos con cierta molestia y a la vez, confusión. 

-¿Se puede saber que demonios te pasa hoy Suzuki Akira?- Replicaba el pequeño con el ceño fruncido.- Llevas tres cajetillas de tabaco y me tienes mareado de tanto pasear de aquí allá…- Suspiró y lo miró con preocupación.- Ya sabes… que soy tu amigo, y que puedes confiar en mi… Aki… ¿qué te pasa?

El rubio chasqueó la lengua y soltó un pequeño bufido, inclinándose hacia un soporte, apagando allí el cigarrillo. Lntamente se incorporó, achándose hacia atrás un mechón del pelo que se había descolocado. Miró de nuevo a los ojos del pequeño… con una mezcla de angustia y rabia.

-Yo… nada más que estoy nervioso… es por una tontería pero… ya sabes como soy, cuando me preocupo, me preocupo, y ya está.- Akira hablaba despacio y con un tono muy suave, a pesar de haber fumado lo que había fumado su voz sonaba delicada, coo cuando tocaba su bajo por la noche, rasgandola cuidadosamente.

Ruki se acercó a él, despacio, y lo miró como una madre miraba un hijo. A ojos del rubio le parecía algo cómico normalmente, pero esta vez se sintió… como explicarlo, como un hijo solo que necesitaba una madre. No se quejó cuando el castaño se abrazó a él, apoyándose en su hombro y acariciándole la espalda, solo se dejó llevar, abrazándolo suavemente y dejando que su corazón se tranquilizase.

-Me pregunto… -Empezó el rubio algo más animado.- Que pasaría si Uruha te viese aquí conmigo…- El rubio soltó una débil risotada, que provocó un sonrojo en cuestión de segundos por parte del castaño.

-¡Reita! Pero serás… - El castaño bufó acomodándose de nuevo en su hombro.- Aún por encima de que intento consolarte y tú me tratas de esta forma… además, yo no tengo nada con Uruha.- Sentenció el pequeño.

-Y una mierda enano, se te ve prendado de él y aquel sujeto tampoco se queda atrás… ¿por qué no hablas con él?- El rubio sonreía mientras le revolvía el pelo al castaño.

-Porque…porque…- El castaño se ponía más colorado por segundos.- Simplemente por que no quiero fastidiar la relación entre todos… ¿o es qué acaso no has visto como lo mira Aoi? Aoi se lo come con la mirada y… si hubiera una mínima posibilidad de salir con él Aoi se enfadaría…y realmente no quiero que nos separemos… sois mi familia.

El castaño se había refugiado totalmente en el hombro de Reita, haciendo un amago de pucheros. Reita solo pudo revolverle el pelo y sonreír. Al fin y al cabo… había podido evitar aquel tema, desviándolo a otro.

-Eres demasiado bueno Ruki… Tú crees que si a Uru le gustases te dejaría por Aoi? Además Aoi ya es lo suficientemente mayor como para aceptar una derrota sin siquiera haberla comenzado.- Akira reconfortaba al pequeño que lo miraba con cariño. Y es que aquellos dos siempre se habían tratado de madre a hijo y viceversa. No eran como hermanos, por que era una relación más íntima e de igual a igual, pero como es comparación, si valían…por que solo había que verlos.

-Yo no se como lo haces Reita… Yo venía a reconfortarte… y al final ha sido al revés.- El castaño solo sonreía.- Ahora no me cambies de tema, ¿por qué narices no estás durmiendo? Son las cuatro de la mañana.

-Joder enano, mira que eres pesado, pareces mi madre.- El rubio se rió hasta que un pellizco en el abdomen le hizo pararse.- Vale,vale, le contaré los problemas a mi mami querida… Es que… no puedo dormir.

-¿No me digas? Oye, tan cortito no soy…tú… duermes con Kai ¿no?

Chik in! El castaño había acertado de pleno, he ahí el problema de insomnio del rubio mal teñido. Y el joven cantante se había dado cuenta de ello.

-Mmm…si, duermo con él…o más bien, soy su compañero de cuarto.- Reita bufó molesto mientras notaba un leve rubor en sus mejillas que gracias a la bandita no se notaba mucho.

-Reita… ¿sucedió algo? O es que acaso… ¿Te gusta Kai?- El castaño lo miraba con intriga, con un brillo realmente peligroso amaneciendo en sus ojos. Y es que… a Ruki no se le pasaba ni una.

-¡¿Pero qué narices dices enano?!- El rubio había saltado a la defensiva en cuanto había escuchado la palabra ¨gustar¨saliendo de los labios de aquel castaño de poco mas de metro y medio.-¿Estás loco o qué? No es eso…es otra cosa, que no se cual es y me está volviendo majara…y todo empezó por culpa de su maldita manía…

-Ha vuelto a dormir desnudo… ¿verdad?- El castaño había dado en el blanco, para no variar.

Reita miró para otro lado molesto…maldita sea la maldita manía del baterista…

*Flash back*

(pvo Reita)

Después de una larga sesión de fotos estaba completamente reventado. Es que… a quien se le habría ocurrido una sesión con ropa de invierno en pleno verano… casi muero allí asfixiado. Aunque el peor de todo no estaba aún por llegar, en el maldito hotel no dejaban consumir bebidas. Joder, lo que habría dado yo por una cerveza.

Llegué al piso donde estaban nuestras habitaciones con parsimonia. No tenía ni idea de quien me tocaba de compañero esta vez, ya que me había parado en un bar a tomar un par de cervezas mientras el resto guardaba todo…ja, pringaos que son.

Bien, pues ahí estaba yo todo contento cuando de repente veo una notita cerca de la puerta. Esa caligrafía tan extravagante no era otra que la del manager. Bufé molesto… una carta rosa con una florecita, que coño…

La carta me decía que esta vez me tocaría cuarto con Kai, y que entrase sin hacer ruído, ya que el pobre estaba muy cansado.

Con qué Kai ,¿eh? Desde que comenzamos la banda solo había compartido cuarto con él una vez…y esa noche la pasé fuera así que, no sabía si roncaba, sin era noctámbulo o alguna cosa parecida.

Decidí  arrugar el papel y cerrar la puerta con cuidado tras entrar y lo que vi allí no me gustó nada, nada, pero nada, nada y nada…¡Una puta cama de matrimonio!

La madre que los parió a todos, maldita mariquita la que teníamos como manager, y maldito todo. ¿Por qué señor, por qué?

No es que molestara la compañía, por que era mi amigo desde hacía años pero… odio las camas de matrimonio, son muy grades y muy solitarias, incluso cuando había gente para acompañar.

Un murmullo me hizo salir de mis pensamientos. Kai se había movido un poco, acurrucándose en la almohada. Y ahí fue cuando vi el paisaje entero. La ventana estaba entreabierta, dejando paso a la luz de la luna, alcanzando la cama. El paisaje era realmente bonito…

Un momento ¿qué coño estoy diciendo? Bueno, se acabó, me voy a la cama…

Me desvestí con cuidado para no despertar a Kai, quedando solo en boxers, y me metí cuidaosamente. Al fin y al cabo, una cama era una cama, y ya éramos mayocitos.

Morfeo me venía a dar un abrazo cuando, noté que ese abrazo no era de mi preciado Morfeo…sino de Kai. Abrí los ojos de golpe al ver al batería pegado a mi, abrazándome como a un peluche. Me quedé anonadado ante la reacción de Kai, pero no podía hacer nada, Kai no presumía de buen genio si lo despertabas, así que dejé estarlo…por poco tiempo.

Kai cada vez se acercaba más, enredando sus manos en mi pelo y pasando una mano por mi cintura y ahí fue cuando me di cuenta…Kai estaba desnudo.

Si, desnudo.

Completamente desnudo.

Estoy que no me lo puedo creer, esto no me puede estar pasando a mi.

Si, me había pasado a mi.

Suzuki Akira, eres un puto degenerado. Te has excitado gracias a uno de tus compañeros de banda.

Jódete, que alegría la mía… ¿y ahora que coño hago?

Y mientras yo me debatía contra mi cuerpo y mi conciencia, Kai se las habí ingeniado para quedarse con la sábana por las caderas y pegado ami, pero literalmente pegado. Sentía su aliento, tranquilo y caliente, cerca de mi oído, haciéndome estremeces, y una de sus manos muy cerca de mi entrepierna.

Ay madre… como siga así me da algo.

Y entonces hizo algo que ya fue lo más, que hizo que saliera de la cama disparado. El muy jodido no le había ocurrido otra cosa que soltarme, en el estado en el que me encontraba…

¨Déjame comerte¨

Si, eso había dicho…

*Fin Flash Back*

 

Ruki observó al rubio con gracia.

-Estás jodido, mi querido rubio teñido, por que Kai siempre duerme desnudo… y nos vamos a pasar una semana aquí… me gustará ver cuento aguantas sin dormir.- Ruki ya se reía de la situación. No era aposta…pero ver a su amigo así era demasiado para él.

Miré hacia abajo, encendiendo un cigarrillo por enésima vez… Estaba preocupado por lo que había pasado en su habitación...por que el ya lo sabía... sabía que eso no había sido un simple calentón, porque cada vez que expulsaba el humo de su boca, recordaba la perfecta silueta de su cmpañero a la luz de la luna y aquella expresión angelical.

-Odio las camas de matrimonio…las odio


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).