No puedo vivir lejos de ti
Quería verte, quería saber que estabas bien, pero comprobándolo con mis propios ojos, no por lo que decían los demás, o lo que suponían, tenía la necesidad, simplemente porque eras lo más importante en mi existencia, porque sin ti mi vida no tiene sentido, no tiene horizonte.
Me daba mucha rabia el no poder estar con ella como yo quería, pero las circunstancias me forzaban a mantenerme al margen de la situación, estaba loca de remate por esa mujer, solo verla me alegraba el día, pasara lo que pasara, con recordar que la había visto todo se volvía magnifico.
El gran problema era que ella no estaba al tanto de lo que sentía, o lo que significaba en mi vida, el impacto que lograba en mí ser. Es mágica, logra borrar todo rastro del color gris en mi vida, solo observando su espléndida figura, así fuera de lejos.
Yo tenía la costumbre de espiarla, aunque la conocía lo suficiente como para pasar y saludarla, no me atrevía, me sentía evidente y lo menos que quería era quedar en evidencia, o peor parecerle asfixiante o fastidiosa, prefería verle de lejos y saber que estaba bien, por lo menos saludable, es un paso para mi tranquilidad.
Ya eran 2 meses sin verla con todo lo de diciembre y de las vacaciones de ella, me quede largo tiempo esperando reencontrarme con Alexandra, para mí era importante, me parecía un siglo. Alexandra simplemente para mí es un ser que roza la perfección, si así es, la roza, porque nadie es perfecto, todos tienen un algo que se lo impide, aunque antes mis ojos era lo más perfecto del mundo entre su forma ser y su cuerpo, era un equilibrio muy esplendido, envidiado por muchas. Estoy harta de esperar ya no puedo más.
Alexandra toda una profesional, una doctora de prestigio, que vive en la mejor urbanización de la cuidad. Yo una estudiante de una segundaria pública, vivo en un lado de esa misma cuidad pero con muy mala reputación, eso no era todo, aparte de ser solo una estudiante y de ser obviamente menor que ella unos 7 años, era una mujer también. ¿En qué momento me fije en esa chica?; pues lo sé, qué pregunta más tonta, en la primera fracción de segundo en que mis ojos la vieron, fue como si me atropellara un tren, claro en un buen sentido, mi cerebro casi se desconecta del cuerpo, era irreal, y cuando le hable por primera vez, casi me desmayo.
Capítulo 1 “Te descubrí”
Pues yo estaba allí en su consultorio por la simple razón de que me dolía una muela, si así es, una muela. Yo siempre le tuve terror a los odontólogos, pero ahora era diferente, yo le pedía a mi mamá que me llevara porque según yo, me dolía a horrores la muela, después de pelear tanto con mi progenitora, a mí no me dolía nada, bueno no me dolía tanto, pero lo cierto es que al fin el día llego.
Me levante temprano, me bañe, me arregle el cabello, busque una ropa linda y me maquille solo con un delineador azul cielo, en fin, me daba mis toquecitos finales y Salí triunfante, en unos veinte minutos estábamos entrando a la clínica, la verdad llegamos rapidísimo. Nos sentamos y al cabo de un minuto más o menos ella salió del interior de la clínica, con una sonrisa espectacular como siempre, parece que estaba de buen humor y yo ahí, con un atentado de paro cardiaco, me sofoque, de veras no era costumbre tenerla al alcance de la mano.
Alexandra diviso a mi madre, con un gesto se señaló que se acercara, yo me le pegue a mamá para no perder detalle de nada. Saludo a mi madre como era costumbre, y me quede a un ladito esperando, que me saludara, me moría porque me saludara.
Mamá: ¿Doctora si se acuerda de mi hija Victoria, verdad?
Alex: ¡Hola!... discúlpame, no te reconocí, estas preciosa ¿qué te hiciste?
Vict: (infarto) pensando:” ¿Por qué me haces esto, tú quieres matarme?” pues nada, estoy como siempre –dijo-como si nada-
Si he de reconocerlo no soy buena hablando con la persona que me gusta, pero es que, que más le podía decir, miles de frases, pero esa fue la única que paso por mi cabeza. Esa mujer me encanta. Lo linda que es al hablar, es muy espontánea y diferente al resto de la humanidad, ella se relacionaba mucho con sus pacientes y era de mil maravillas.
Alexandra: La última vez viniste como gótica, con mucho negro en los ojos y ahora estas así tan diferente.
Vict: Bueno es que soy polifacética - dije con una sonrisa -
Alex: Y bueno ¿cuál de las dos se viene a ver conmigo?
Mamá: Pues ella, la muy irresponsable se le pico una muela y le duele.
Alex: ¿Victoria cómo es posible? bueno, vamos a ver qué podemos hacer.
-Victoria con cara de mascota regañada- está bien –dijo con un hilo de voz-
Entre al consultorio y me quede fría, todavía tenía terror a ese sitio, a pesar de estar con ella, estaba estática en la puerta, mi mirada perdida, porque le temía a ese lugar, ni yo misma sabia.
Ella me tomo de los hombros por la espalda, yo entre. Alexandra coloco la bata blanca en el perchero detrás de la puerta, no sé por qué.
Alex: ¿Qué pasa? ¿Te sientes bien? Tranquila voy a tener mucho, muchísimo cuidado -dijo con una linda sonrisa-
-Victoria reaccionando- Si, Estoy bien, estaba pensando algo.
Alex: Por favor siéntate.
Vict: Si claro.
Me senté y pues me pusieron anestesia, y me taladraron la muelita, si no hubiese sido por ella que estaba haciendo el trabajo juro que la empujo y salgo corriendo el ruido era horrible, pero tenía que aguantar
La espelúznate escena paso más rápido de lo que yo tenía planeado, a decir verdad no fue tan malo solo es que soy muy exagerada.
Todo termino por hoy tenía que volver en 5 días para terminar, pero eso no es lo que me preocupaba, de repente suena su teléfono celular, ella me pide disculpas y sale de la habitación a contestar, unos minutos después, entro un poco perturbada, se veía en ella tristeza y frustración fue lo que vi en su cara, cuando se percató que la estaba observando, cambio su expresión rápidamente o eso creyó ella, pero seguí con un deje de melancolía en su mirada. Y yo pues no pude contener el preguntar.
Vict: Lamento mucho si lo que le voy a decir le suena como a imprudencia, pero tengo que preguntar ¿Qué le paso?
Alex: Yo… -dijo insegura-
Vict: Sé que no me conoce pero usted me cae muy bien, y quisiera ser su amiga.
Alex: Eres muy amable Victoria, tú también me caes muy bien, me pareces una chica muy dulce, no puedo hacerte eso.
Vict: ¿Hacerme qué?
Alex: Tú no viniste aquí a eso.
Vict: Bueno, la próxima vez si me lo cuenta, a ver qué podemos hacer, usted está mal y yo lo sé bien.
Alex: Tú eres muy joven aun para entender (golpe bajo) y por favor tutéame.
Vict: Bueno, está bien. Yo sé más de lo que crees, pero esto no se queda así y lo de esos golpes tampoco, no son accidentales ¿o sí?
Ella abrió los ojos desmesuradamente, parece que la había descubierto, ella como que no sabía que era muy detallista y tenía atención extrema hacia las cosas y más si se trataba de ella. Alexandra en un momento se inclinó levemente y su camisa se movió hacia atrás (una de manga corta) y vislumbre un hematoma en el hombro derecho, y era un golpe certero perfectamente concentrado en un sitio, claro solo vi una parte pero era fácil deducir, con la cantidad de mujeres golpeadas que he visto en mi comunidad, durante toda mi vida lo supe, que era un golpe provocado por otra persona.
Alex: ¿Qué cosa? Amm, no es nada, tuve un accidente en casa con una repisa.
Vict: Si claro -dijo con sarcasmo-
Alex: Si de verdad le había… -dijo nerviosa-
Vict: Discúlpame –corto tajante- no tengo por qué meterme en tu vida, de verdad lo siento no debes darme ningún tipo de explicación.
Note que estaba algo descontrolad, cuando es una mujer extremadamente serena. Ese era uno de sus puntos débiles se le notaba a kilómetros, aproveche ese momento para dar a conocer una de mis facetas, yo soy una persona muy analítica y digo las cosas en el momento preciso, a mi “corta edad” manejo muy bien la psicología e interpreto muy bien sus reacciones.
Vict: Supongo que me tengo que ir, siento haberte importunado.
Alex: Victoria no entiendes…
Vict: He visto muchas veces esto Alexandra, he escuchado cientos de historia, te digo algo, yo seré muy joven como tú dices, uno nunca maltrata lo que ama, y no debes permitir que lo hagan contigo, eso destruye la razón y ofusca los sentidos sin mencionar que deteriora tu corazón hasta un punto que ya no quieres seguir viviendo.
Alex: … -solo la observaba fijamente-
Victoria: ya me voy, y no te preocupes yo te excuso con mi madre, le diré que estabas ocupada con algo
Y sin más di un portazo no tan estridente pero haciendo notar lo irritada que estaba. La sangre me hervía, no podía creer que ella estuviera en esa situación, “pensé que eras más inteligente” estaba a punto de explotar. Recorrí el pasillo y respire profundo, Salí con una sonrisa que no había usado nunca, una sonrisa de las falsas.
Mamá: ¿Cómo te fue?
Vict: Muy bien mami, la doctora dice que venga en 5 días.
Mamá: Déjame hablar con la secretaria para que me ponga la cita.
Vict: Si está bien.
Quería matar al maldito que le hizo eso, porque estoy segurísima que fue un hombre que le hizo eso, un desgraciado sin escrúpulos, mal nacido, bastardo. Y lo peor que no podía hacer nada.
Narra Alexandra.
Me quede como un témpano de hielo, -descubrió algo que estuve ocultando por días y con mucho recelo, me descuide un poco pero no pensé que lo notara. Soy una estúpida como deje que una chica de esa edad me dejara en evidencia, ¡peor! no tuve tiempo de decir nada convincente, ¿como es posible?-
f. back
Alex: Victoria no entiendes…
Vict: He visto muchas veces esto Alexandra, he escuchado cientos de historia, te digo algo, yo seré muy joven como tú dices, uno nunca maltrata lo que ama, y no debes permitir que lo hagan contigo, eso destruye la razón y ofusca los sentidos sin mencionar que deteriora tu corazón hasta un punto que ya no quieres seguir viviendo.
Fin de f. back
No sé qué pensar, la imagen que tenia de ella no se parece en nada a lo que me demostró.
Me levante y agarre mis cosas, cerré mi consultorio y Salí a la recepción.
Alex: Vanessa por favor, cancela todas mis citas por hoy, tengo que salir.
Vanessa: si doctora… Disculpe ¿está bien?
Alex: si, si, solo se me presento algo, hasta mañana.- dijo saliendo de la clínica-