Que irónico y melosa es esta situación. Quien diría que me encontraría metida en un pleito más o menos grande… no quiero ser dramática pero si las cosas siguen a este paso ya no sabré como sobrellevar mis problemas... Fácilmente estos me podrían llevar a otra dimensión, a otro mundo o situación…
Se preguntan que ocurre… Pues fácil, dígase de la persona que llevaba una vida normal, con altos y bajos, gozosa de un buen trabajo. ¡Hasta que un gran día! Una chica de mi trabajo se me declaro… dijo que me amaba y que por mi seria capaz de personificar el mas noble sentimiento… bueno, bueno no con esas palabras pero quiero darle algo de elegancia a cada palabra.
El punto es que al principio le creí, empezamos una relación bastante tranquila, hermosa para mi gusto. Competíamos como nunca y nos conocíamos al pie de la letra... cada momento se hacia eterno pero esa eternidad infinita se hacia cada vez mas corta y aun así no perdíamos el gusto de estar juntas. (o eso creí yo...)
Hasta que me di cuenta que solo le interesaba sacarle celos al hombre de sus sueños. Un tipo robusto, caballero y mujeriego. Una combinación bastante común en los hombres de 22 años…
Ya enterada de su interés hacia el hombre fui tomando distancia junto a una gran frialdad que salía de mi alma. Le deje las cosas claras y la situación bien detallada, a fin de que cada una siguiera su propio camino.
Y así fue...
Pasados los segundos, minutos, horas, días, semanas y meses. Seguí mi trabajo e ideales hasta que una noticia me tomo por sorpresa, esa sorpresa que me tiene enredada en uno de los mas grandes problemas o tonterías a las que me enfrentado… corre la noticia de que me e violado a la chica con la que he tenido una relación. Situación que es totalmente falsa porque no seria capas de cometer tales actos profanos, y por mas que intente aclarar las cosas todo se va en mi contra... cada palabra, cada acto...
Increíble pensar que una mentira de tales magnitudes me tienen al borde del colapso... me despidieron de mi trabajo, hay una denuncia en mi contra y un tirado acechando cada paso que doy... en conclusión le veo pocas y muchas salidas a este problema, pero ya ni mi mente me ayuda a solucionar o crear algún buen método para salir de todo este enredo...
Solicitar ayuda no es lo mío... pero de vez en cuando no viene mal una mano o unas palabras de aliento que renueve los pensamientos y ánimos que viajan en nuestras mentes...
Podría pedirle ayuda a un sicólogo... medico... espiritista... a mi perro... espera no tengo perro... ¿a mi gato? tampoco tengo gato. A un libro... canción... persona o al alcohol...
Lo volveré a pensar para ver que me convence más...
Aun que fantaseando un poco mas seria interesante ir a un sicólogo, todos dicen que son para locos pero a mi parecer no es así…