Si no hubo fuego, no hubo incendio
Secuela de En donde fuego Hubo cenizas quedan
Uchiha Naru
“Prueba que aun me amas y tal vez te pueda perdonar”
2.- Si no cumples tus promesas no quiero creer en tu palabra
La soledad era algo de lo que estaba acostumbrado a sentir, entonces ¿Por qué le dolía tanto? Ese día era sábado, después de dos semanas de trabajo por fin Sasuke podía tener un descanso, sin embargo eso no quería decir que estarían juntos, como otros días el Uchiha se encerraría en su despacho y seguiría trabajando diciendo “Yo soy el jefe de la compañía, no puedo perder el tiempo” Siempre se entregaban los trabajos a tiempo, incluso antes, todos les decían que podían descansar el plazo que aun les quedaba, sin embargo Sasuke tomaba otro proyecto y más grande que el anterior, quitándole más tiempo…
Ese día no fue diferente, en cuanto despertó la calidez del cuerpo de Sasuke ya no estaba, recordaba claramente como este lo había abrazado por la noche y de esa manera había dormido, vaya… Esa pequeña esperanza de encontrarlo a su lado fue en vano, realmente nunca nada volvería hacer lo mismo.
Se levanto cuidadosamente de la cama, sin embargo el mareo se izo presente, tenia días con esas sensaciones, sacudió su cabeza y trato de recomponerse, camino hasta el baño y como todos los días se baño y se alisto, a lo último se miro al espejo, a pesar de todo siempre había cuidado su figura la cual, a pesar de los años no había cambiado en lo absoluto, su cabello era recogido por una pequeña colita, su cabello no era largo pero tampoco corto como normalmente lo tenía, le caía por lo hombros pero siempre lo mantenía agarrado, se vistió con unos pantalones pesqueros y una camisa naranja, se puso unos tennis negros y con esto quedo listo.
A pesar de tener 32 años su figura aun era joven y hermosa, el cuidaba mucho su piel y su aspecto, eso era algo que Sasuke también cuidaba, el, al tener 33 años también se cuidaba y no parecía, ningún de los dos, pasar de los 25 años.
Sin más suspiro y bajo las escaleras, miro a su hijo botado en la sala mirando tele, lo cual le extraño ¡Era sábado! Su hijo siempre salía con Suitetsu, o mejor dicho este lo venía a raptar, claro Sasuke no estaba al tanto de esto por su trabajo, su jodido y estúpido trabajo.
-Pensé que estarías con Suitetsu, Natsumi – El susodicho miro como su Otto-chan bajaba las escaleras con lentitud, sonrió alegre y se paró de un salto para ir a su lado, lo beso en la mejilla y lo condujo a la mesa para desayunar.
-Le dije que hoy estaba ocupado… Quería pedirte un favorsosososote – Decía su hijo mientras le servía de comer.
-Mmm ¿Y esta es tu manera de sobornarme? – Natsu rio, ¡Por supuesto que sí! Su sonrisa lo decía todo, se sentó al lado de Naruto con toda la intención de contarle su plan macabro.
-Quiero hacerme un nuevo look, quiero cortarme el cabello diferente, y a ti no te haría mal tampoco ¡Quiero que vengas conmigo! ¡Un día solo para nosotros! – Naruto se puso en pose de “Déjame pensarlo” -¡Por favor-dattebayo! –
-Mmm… Está bien-ttebayo – Dijo con una sonrisa, Naoki comenzó a gritar de felicidad, hace ya un tiempo que no salía junto con su “mamá” “Iré a arreglarme” El niño salió corriendo escaleras arriba y en ese momento Sasuke salía de su despacho, el simplemente lo ignoro y comenzó a comer.
-Naruto – El susodicho lo miro con una sonrisa mas falsa que matusalén –Lo de anoche, iba enserio yo… de verdad lo sien—No tienes porque disculparte Sasu, estoy bien ¿Si? – Dijo volviendo a comer, no quería hablar con él, ni siquiera verlo, y Sasuke estaba consciente de eso.
-Naruto mírame – Sasuke se sentó al lado del mayor, quien lo miro con una sonrisa, el Uchiha se fue acercando a los labios del mayor, quien abrió los ojos en grande al ver las intenciones de Sasuke, si sus labios se tocaban, rompería en llanto, y cuando decía algo se cumplía, sus labios se juntaron en un sutil beso que izo que sus sentimientos saltaran no pudiendo mas, las lagrimas salieron y cuando el aire fue necesario se separaron –Naruto yo… Te a—No lo digas… - Sasuke lo miro sorprendido – No lo digas si no es cierto… No quiero que digas algo que dejaste de sentir hace mucho tiempo, te pido que te alejes de mí –
-No Naruto yo en verdad - - El celular de Sasuke sonó, mas especifico el del trabajo, tanto la mirada propia como la ajena miraron el teléfono.
-Si contestas me darás la razón - Dijo con seriedad, Sasuke tembló, sin embargo aun así contesto y salió de ahí… -Lo suponía… - Dijo mientras se limpiaba las lágrimas y trataba de terminar su comida, la cual apenas había tocado, sin embargo el apetito se había ido de nuevo…
Solo fueron segundos en los cuales todo quedo decidido, definitivamente a Sasuke no le importaba, el susodicho salió poniéndose su saco mientras sostenía su maletín apresurado y caminando a la puerta y justo cuando tomo el picaporte…
-Si abres esa puerta significa que en verdad esta familia no te importa – Sasuke miro de reojo a Naruto, quien seguía sentado mirando al frente, con la pierna cruzada totalmente quieto.
-Es una emergencia – Dijo simplemente, Naruto se paro y lo miro a los ojos.
-Esta familia se está yendo a la mierda y es por tu culpa… Tú decides – Sasuke miro la puerta y miro a Naruto, no pronuncio palabra alguna y se fue… Naruto simplemente pudo llorar mirando aquella puerta cerrarse nuevamente –Entonces esto se acabo… -
Continuara…