----- Inicia Canción -----
Es Sábado de Pago Por Evento.
SummerSlam! es uno de ésos programas que los compañeros de cuarto acordaron pagar por partes iguales.
Si has tenido amor en la mira
La lucha libre es uno de ésos deportes que disfrutan mirar juntos
Ten cuidado
El amor muerde...
Sin tener que luchar tan encarnizadamente como los combatientes en la lona por la supremacía del mando a distancia.
El día de hoy la televisión está encendida, y a pesar de que ya se escuchan los acordes de Rip It Up (tema oficial del evento), preludio al comienzo del gran show... la estancia permanece vacía.
En la habitación del Caballero de fénix otro tipo de contienda se está llevando a cabo.
Cuando haces el amor
Desde hace un tiempo, rubio y moreno se frecuentan en la habitación del mayor
¿Miras al espejo?
Curiosamente nunca en el cuarto del ruso.
¿En quién piensas?
A fin de cuentas... es Hyoga el que lo busca
¿Él se parece a mí?
Y sin palabras de por medio inician este ritual en absoluto silencio
Dices mentiras
Despojándose de sus ropas por completo, sin besos o palabras cariñosas de por medio
¿Y dices que es para siempre?
Directo a la acción. Sexo sin complicaciones
Lo piensas dos veces
Prueba de que se puede ser buenos amigos y amantes
¿O solo tocas y miras?
¿Que los orilló a pasar de compañeros a... algo más?
Oh babe
Tal vez la necesidad de uno y la falta de compromiso del otro.
La distancia no es buena consejera para un noviazgo
Oh yeah!
Y un corazón blindado por una decepción pasada, tampoco es de mucha ayuda
Cuando estás solo
El punto es que para los demás tan solo son viejos conocidos
¿Lo dejas ir?
Que comparten departamento, más por conveniencia monetaria
¿Eres salvaje y comprometido?
Que por un genuino interés.
¿O es sólo por demostrar?
Y así era en un principio.
Ooh,
¡Vamos!
No deseo tocarte demasiado baby
Los gemidos y susurros sofocados procedentes del cuarto del moreno
Porque hacerte el amor me está volviendo loco
Se anulan bajo el despliegue de adrenalina que se escucha desde la solitaria caja tonta.
Sé que piensas que amor es la forma cómo lo haces
Arrodillado en la cama, encima del ave inmortal, Hyoga ejecuta una rítmica danza.
Pero no deseo estar ahí cuando decidas romperlo
¡No!
El amor muerde
El amor sangra
Con los ojos cerrados y gotas de sudor resbalando por su frente,
Hace que me postre de rodillas
El amor vive
El amor muere
El rubio apoya sus manos en los brazos del japonés, buscando no perder el equilibrio
No es sorpresa
El amor suplica
El amor implora
Encajando el falo erguido del moreno entre sus piernas y
Es lo que necesito
Liberándolo una y otra vez con la misma rapidez con la que se blande certero en sus entrañas.
El ave mítica mantiene sus manos afianzadas a las fuertes caderas del santo de Cisne, mientras contempla complacido el rictus de placer que demuda el perfecto rostro del ave de los hielos.
Dejar al mestizo tomar las riendas en la carrera hacia el orgasmo se ha convertido en el deporte favorito del moreno.
A lo lejos, el timbre del teléfono en el cuarto del ruso repiquetea un par de veces
Cuando estoy contigo
Como impulsado por un resorte, Hyoga sale de su placentero trance
¿Estás en otro lugar?
Interrumpiendo el acto carnal, abre los celestes orbes
Lo estoy consiguiendo
Soltando sus brazos e incorporándose para atender la anhelada llamada.
¿O sólo te complaces a ti mismo?
Ikki lo observa alejarse. En silencio se lleva ambas manos a la cabeza suspirando con resignación.
Cuando despiertes
Sabe lo devastadora que esa llamada diaria es para su amante.
¿Te habrás marchado?
Que del consabido ¡hola mi amor! Le seguirá la decepcionada voz del medio ruso.
No puede ser amor
La voz del otro lado le reprochará por enésima vez su falta de fidelidad
Si lo desechas
Y un cansado Hyoga comenzará a perder los estribos.
Ooh babe
No deseo tocarte demasiado baby
Llegando a los gritos e invariablemente colgando.
Porque hacerte el amor me está volviendo loco
Tomará un par de minutos antes de regresar a la habitación
¡No!
El amor muerde
El amor sangra
Retomando lo que dejaron pendiente, como si nada hubiera pasado
Hace que me postre de rodillas...
El amor vive
El amor muere
Pero las estocadas que se infringe el rubio, ahora son carentes de delicadeza
No es sorpresa...
El amor suplica
El amor implora
Arremetiendo con furia en sus entrañas, sus ojos se mantienen cerrados
Es lo que necesito
Aunque las venas de su cuello parecieran engrosarse, evidenciando el esfuerzo sobrehumano que el rubio está haciendo por tragarse ése sentimiento agolpado en su garganta.
Esa mezcla de dolor y frustración viene acompañado de un fuerte agarre en los brazos del moreno tan poderoso que sus nudillos se tornan blancos.
Poco a poco comienza a relajarse, apaciguando el castigado galope sobre el cuerpo del peli azul tallado en bronce.
Ahora concentrado en su propia satisfacción, se estremece ante el delicioso roce de sus testículos y virilidad sobre el vientre del moreno.
Ha llegado el momento en el que el blondo se arquea como recorrido por una fuerte descarga eléctrica, soltando los brazos del japonés y llevando sus manos al palpitante miembro viril tratando de contener entre ellas la inminente descarga.
Pero esta vez Ikki detiene el movimiento del medio ruso aprisionando sus muñecas
Oooh yeah!
No deseo tocarte demasiado baby
Sabe que sigue después, se retirará de él y terminará en el baño
Porque hacerte el amor me está volviendo loco
Como si con este gesto reprimiera el sentirse expuesto ante el ave de fuego
Sé que piensas que amor es la forma como lo haces
Ikki suelta el agarre, incorporándose un poco para sentarse y poder rodearlo con los brazos
Pero no deseo estar ahí cuando decidas romperlo
Refugiándose en el hombro del rubio y besando su piel por vez primera
¡No!
El amor muerde
El amor sangra
Ikki baja sus manos hasta las corvas del rubio obligándolo a rodear
Hace que me postre de rodillas...
El amor vive
El amor muere
Su torso con las piernas.
Afianzando al rubio por las caderas ubicando su falo dispuesto en la entrada.
El amor muerde
El amor sangra
Empujándolo lentamente hacia sí, haciéndolos gemir casi al unísono en el proceso.
Hace que me postre de rodillas...
El amor vive
El amor muere
El moreno pierde los estribos acelerando el ritmo
No es sorpresa...
El amor suplica
El amor implora
Hundiéndolos a ambos en una vorágine de emociones y jadeos
Es lo que necesito
Hasta que por vez primera la explosión multicolor del orgasmo los alcanza al unísono
El rubio fuera de sí clava su perfecta dentadura en el hombro del japonés de acerinos orbes, hasta que entre jadeos percibe un sabor metálico en sus labios... el sabor característico de la sangre.
Ikki parece no haber notado que ha salido herido de la contienda.
Si has tenido amor en la mira
- Yo... -por fin balbucea Hyoga aturdido
- Shhh -el dedo índice de Ikki se posa en los labios del blondo,
Ten cuidado
Negando la cabeza lentamente, el japonés le resta importancia al asunto.
El amor muerde
En los pensamientos del ave mítica, si el precio por lograr que el mestizo se entregue por completo y sin reservas es ése... una cicatriz en el hombro, bien vale la pena.
----- Fin de la Canción -----
Ambos se incorporan de la cama, dirigiéndose al baño a enjuagarse... en silencio. Y en silencio también proceden a vestirse en la habitación del entrenado en la Isla de la Reina Muerte.
Una vez vestidos por completo, Ikki rompe el silencio
- Todavía hay tiempo para ver quien se lleva el campeonato del mundo en peso pesado
Con esa característica sonrisa de lado y un ligero cabeceo, el peli azul de mechas alborotadas le indica al medio ruso que lo acompañe a ver lo que resta de la competencia.
Después de un rato, en el que ambos gritan, gesticulan y aconsejan con frenesí desde el lado contrario de la pantalla a su luchador favorito, el combate da por terminado. Hyoga toma el mando a distancia, apagando el televisor.
- Ikki, yo... se acabó. Y esta vez va en serio
El japonés exhala profundamente, llevándose las manos a la cabellera, las deja caer pesadamente a sus costados. Tal decisión por parte del rubio era predecible... tarde o temprano esta situación entre ambos debía a terminar.
- Te escucho
- Pues eso *ahm* que ya no tengo un noviazgo a distancia -despues de una pausa Hyoga voltea a ver su reloj y pronuncia con seriedad - Desde hoy, sábado *ahm* 15 de Agosto; Yo, Hyoga de Cisne me proclamo...
Ikki sonríe divertido ante la solemnidad dramática del rubio. El blondo lo observa sorprendido diciendo
- Bastardo... ¡Hoy es tu cumpleaños!
- En efecto... -remata el japonés sonriendo
- Yo... lo olvidé por completo
- No te preocupes ruso. Hoy me has dado dos regalos magníficos. Por lo demás... ya el tiempo dirá.
Y guiñándole un ojo el moreno le arrebata el control remoto al entrenado en Siberia, tal y como acostumbran hacerlo, iniciando una nueva mini batalla donde el ganador escogerá lo que verán durante lo que resta de la noche y el vencido tendrá que compartir su lecho con el campeón.
Fin