Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"Brand New Melody" o una dulce melodía de confusión... por NokiAndLuki

[Reviews - 34]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Hola! Lamentamos la enorme tardanza, pero bueno aquí otro cap.

Recordar que está  narrado desde la perspectiva de Tokiya.

 

Uta no prince-sama no nos pertenece, ya que es propiedad de Broccoli. 

Capítulo 5:    La  tormenta que pronto llegara.

 

Le costaba caminar con aquella pierna, a decir verdad le dolía bastante y ha pesar de que los días pasaran, el dolor no parecía disminuir para nada, debiendo hacer un gran esfuerzo para caminar normalmente y que los otros no lo notaran. Sin embargo un simple dolor no le haría  perder  su oportunidad para presentar su nueva canción, ni siquiera las palabras que su manager le decía, acerca de no preocuparse demasiado por la música, que Hayato siempre era talentoso en otros aspectos, tales como programas o series de televisión. ¡¿No preocuparse mucho por la música?! ¡Ni de broma! Para eso había creado a Hayato, para poder transmitir sentimiento hacia los demás a través de sus melodías. Se detuvo un momento al recordar que él ya no era capaz de transmitir nada en sus canciones. Hyuga-sensei siempre se lo tenía que repetir.

 

— ¡Hayato! ¿Estás prestando atención? — le reclamaba un hombre de edad madura,  encargado del evento en el que se presentaría dentro de unos días— Últimamente estas  bastante distraído. ­ — Le miro, para luego emitir una carcajada. —  Quizás el gran Hayato se haya enamorado de alguna jovencita.

 

— ¡Por supuesto que no! — Le respondió, levantando un poco el tono de su voz, lo que hizo que el hombre se sorprendiera un poco. — Puede seguir dándome las instrucciones para aquel día.

 

— Claro. —  algo asustado por el fuerte cambio de Hayato, el hombre decidió seguir con lo que decía, ahora ya no importando si le prestaban o no atención. —Tú vas a abrir el espectáculo, de seguro eso atraerá a un montón de gente. Debes salir por esta entrada… — Le indico el hombre, que se movía  tratando de explicar el lugar, moviéndose en un escenario que ahora estaba vacío, debido a que solo era un ensayo.

 

A pesar de que Tokiya intento prestarle atención, le fue imposible. Nuevamente su mente empezó a jugarle malas pasadas  y esta vez fue por el simple hecho de aquellas palabras que acababa de escuchar.

 

“Quizás el gran Hayato se haya enamorado…”

 

¡Imposible! Sí fuese así, no tendría problemas para expresar sentimientos en sus canciones, si fuese así, sus canciones no estarían vacías. Además “enamorado” era una palabra demasiado grande para aquello, a pesar de que la imagen de aquel ultimo beso se repetía constantemente cada vez que se reiteraba aquella palabra y que el recuerdo marcado de su corazón latiendo a una enorme velocidad producto de aquel simple contacto, era latente.

 

“Todos aquellos sentimientos se deben borrar…”

 

Nunca debieron haber existido aquellos dos besos, a pesar de lo calido que eran, nunca tuvieron que haberse dado. Tampoco debía haberse deleitado tanto con la sonrisa del pelirrojo o haberse alegrado tanto cuando supo que para él, la palabra maravilloso también había aflorado luego de aquel primer beso.  Después de todo, sabia muy bien que Otoya estaba enamorado de Nanami Haruka y a decir verdad ahora la idea que tenia acerca de aquella mujer había cambiado bastante, a pesar de que no lo sabia muy bien, pero  Nanami  resultaba ser una especie de musa,  que no solo había ayudado a Otoya, si no también a su compañero Jinguji Ren

 

— ¡Hayato! — Su manager estaba justo al lado de él, por supuesto que Tokiya no se había dado cuenta de aquello. —  Es hora de irse, hoy el ensayo terminara más temprano para ti.

 

— ¿Qué estas diciendo? Quedan muy pocos días para el evento y…— Tokiya fue cortado rápidamente, impidiéndole seguir con sus palabras de reclamo.

 

—  No se puede ensayar cuando no se presta atención. — El hombre le miro algo compasivo. — Ve a descansar por hoy, recuerda que  mañana tendrás el doble de trabajo, ¿recuerdas que debes firmar autógrafos y  dos entrevistas para la televisión?

 

—Sí…— respondió fríamente, al percatarse de que quizás ni tiempo tendría para volver a practicar la canción que presentaría luego. Había desperdiciado su tiempo pensando de nuevo en todas aquellas cosas, se había sumergido de nuevo en aquel laberinto de pensamientos y ahora ni siquiera era capaz de controlar su mente y mucho menos poder controlar su corazón.

 

—Antes que te vayas. — dijo el manager, interrumpiendo abruptamente los pensamientos del cantante. — Puedo recomendarte algo… — La voz de éste era tranquila, pero su rostro demostraba seriedad, indicando de que lo que diría seria bastante serio. —  Enamorarse no le hace nada de bien a un idol como tú…— Finalizo estas palabras, acercándose a Tokiya y dándole un golpecito en el hombro. — Ve a descansar.

 

¿Enamorarse? De nuevo le habían dicho algo como aquello, ¿tan notoria era su actitud?, pero aun así no aceptaría que estaba enamorado, no necesita aceptarlo después de todo tenia que terminar luego con todo aquello, ya que tal como le había dicho su manager, enamorarse no le hace bien a un idol. Luego de unos minutos se percato que se había quedado solo en aquel  lugar y nuevamente había perdido su tiempo pensando y pensando.

 

“¿Qué esta pasando? Deja de inundar mi mente y arruinar mi corazón.”

 

Al formular aquello en su mente, la imagen de su compañero volvió a surgir en su cabeza, debía quitarse luego aquellas ideas y seguir su vida como si nada pasase, ya que hacer lo contrario, es decir dejarse llevar por todas aquellas sensaciones lo llevaría a un camino que de seguro seria el caos, no solo para él, si no que también para Otoya. Ya había sido suficiente haberlo confundido con aquel primer beso.

 

Debía ponerle fin a todo aquello ahora....

 

 

 

En el camino de vuelta a la academia, Tokiya solo pudo pensar en la manera de terminar con todo aquello. Quizás pidiéndole al director que le cambiara de compañero de cuarto, pero eso seria simplemente escapar de la situación, además dejaría a Otoya más confundido de lo que seguro ya estaba,  por lo tanto descarto esa idea inmediatamente. Lo mejor que podía hacer era dejarle claro lo que pensaba a Otoya e ir alejándose poco a poco de él, era lo mejor para los dos.

 

Cuando llego a su cuarto, preparado para tener su segunda larga conversación con Otoya, se dio cuanta de que su compañero no se encontraba ahí. La habitación estaba tan tranquila y silenciosa, que parecía otra ante los ojos de Tokiya. Por lo tanto decidió quedarse ahí y esperarlo, ya que de seguro su pie le dolería bastante si se ponía a buscarlo por la enorme academia. 

 

No tuvo que esperar demasiado, simplemente alcanzo a sentarse en su cama, para luego oír como unos pasos acelerados  se acercaban a la habitación. Era lógico que aquellos pasos fueran los de su compañero que seguramente vendría corriendo, desobedeciendo las reglas de no correr en los pasillos.

 

 

— ¡Tokiya! — grito emocionado el pelirrojo, mientras abría de golpe la puerta de la habitación, comprobando nuevamente que Otoya quizás no sabia que era golpear la puerta antes de entrar. — ¡Que alegría que hoy hayas llegado temprano! — dijo emocionado, mientras aquella  felicidad podía demostrarse al notar comos sus ojos se iluminaban.

 

— ¿Corriste sólo para decir eso? — Le miro fríamente, dando a entender que no le interesaba que el pelirrojo haya corrido para verle, aunque su desinterés quizás fuese mentira.

 

— ¡Claro que no! Yo corrí para darte la bienvenida. — Otoya al percatarse del rostro de su compañero, se acerco hacia él. — ¿Aun te duele tu pie?  — dijo con un tono de voz que demostraba preocupación.

 

— Te he dicho miles de veces que no. — Miro su pierna por un pequeño momento, para luego volver a fijar sus ojos en el rostro de su compañero,  ya que había algo diferente en él.  En los últimos días el pelirrojo se veía bastante decaído,  quizás debido al último incidente que habían tenido o quizás tenía algún problema con alguno de los compañeros de su clase. Sin embargo en aquel momento sus ojos brillaban de una manera diferente, no solo había recuperado el brillo alegre normal, si no que  ahora era algo más intenso. — ¿A qué se debe esa cara alegre? — La pregunta simplemente salió de sus labios, aunque esta solo hubiese sido parte de sus pensamientos.

 

— ¿Alegre?  — Se pregunto el pelirrojo para si mismo, mientras ponía una cara como si estuviera pensando el motivo de aquella alegría. —  Es porque tú llegaste temprano. — Sonrío nuevamente posando su mirada en la cara de Tokiya. — Últimamente  ya ni siquiera te veo, llegas demasiado tarde y yo a veces pienso…— Bajo la mirada y poco a poco disminuyo la voz. —…que estas enfadado conmigo. —  dijo lo ultimo en un tono que Tokiya no pudo escuchar.

 

— ¿Qué?  Otoya si lo dices tan bajo, no te oiré.  — Le miro, para darse cuenta que la sonrisa ya no estaba en el rostro del pelirrojo, era increíble como se borraba  por cosas tan pequeñas. —  Da igual, de todos modos no creo que sea solo eso el motivo de tu felicidad. —  La imagen de Nanami Haruka paso rápidamente por la mente de Tokiya, “¿Quizás ella?” Ella era la única capaz de alegrar a Otoya de esa forma y lo más probable que así fuese, sin embargo pensaba seguir insistiendo. — Me vas a decir ¿Por qué estas tan feliz?

 

—Yo…—su rostro volvió a cambiar, esta vez proyectando uno decidido y en parte lleno de felicidad por lo que iba a decir. —  ¡He decidido ir a verte en tu presentación! Debo asegurarme de que tú pie este bien y aunque solo vaya como espectador me esforzare por ver que Tokiya este bien, además podré verte cantar y…

 

— ¡Otoya! — Lo callo de golpe, pronunciado su nombre con una voz fría. — No se te ocurra asistir,  alguien que no es fan de Hayato, no merece estar en ese lugar. — Fijo su vista al suelo, evitando ver el rostro de Otoya, pero pronunciando sus palabras en un tono decidido como intentando ordenarle al pelirrojo de que no fuera.

 

— ¿Qué? pero Tokiya…— la voz comenzaba a alterarse. — Yo iré por mi cuenta, no tienes que preocuparte por mí...

 

— Mi pie esta bien, así que no necesitas aparecerte por ahí. — continuo explicando. — además sabes lo sospechoso que seria que te vieran en un concierto de Hayato, alguien que nunca tuvo interés en él.  — Tokiya sabía que su compañero continuaría insistiendo, pero también suponía que solo había una forma de detenerlo.

 

— Pero yo estoy muy entusiasmado en ver como cantas y entre la multitud ni siquiera me vas a ver. — Su rostro estaba casi suplicante. — ¡Mo! ¡Tokiya! Quiero verte cantar, además se que tu pie no esta bien, pero también soy conciente de que no puedes cancelar un evento por aquello. —Levanto su mano, empuñándola en muestra de lo decidido que estaba. —  Así que estaré ahí, para ver que todo salga bien.

 

 

—Silencio Otoya… — volvió a mirarlo, esta vez decidido a lastimarlo y con eso dar por terminada toda la confusión. —  Me aburres con tu actitud  ¿Crees que puedes llegar y meterme en mi vida como si fueras alguien cercano a mi?  Sólo eres un simple compañero de cuarto, sólo eso, así que no te hagas ideas equivocadas.  — Se levanto de la cama. — No se te ocurra aparecer ahí, si quieres verme cantar, puedes ver el evento por televisión. — Se dirigió a la puerta, para salir de ahí. No quería ver la reacción de Otoya luego de haberle dicho aquellas palabras, abrió la puerta y salio al pasillo caminando lentamente por este.

 

Podía decir que ya se había terminado todo, ahora su mente se calmaría con el tiempo y  quería pensar que Otoya también podría arreglar por su parte la confusión que él le había provocado, de seguro luego de unos días el pelirrojo volvería a alegrar la vida de sus compañeros y dedicarles aquellas hermosas sonrisas, aunque Tokiya debía prepararse  quizás para no volver a ver aquella sonrisa jamás, jamás dedicada a él y era algo que se lo merecía, lo sabia muy bien.

 

Su pecho dolía, mucho más que el dolor de su pie al caminar, aquellas palabras que había dicho le habían dolido bastante y ahora estaba sumergiendo su corazón en la tristeza. Pero ya no podía hacer nada, ya no debía…. Ahora ya no había vuelta atrás.

 

Se esforzó por no volver al cuarto en aquellos pocos días que quedaban para la presentación e intento concentrar su mente únicamente en el trabajo, dedicando casi todas las horas del día en aquello. Trataba de simplemente asistir a las clases para luego marcharse rápidamente, en el poco tiempo que se mantenía en la academia, nunca se encontró con Otoya, pero si tuvo un pequeño encuentro con Nanami Haruka .

 

Aquel día mientras entraba a una tienda para comprar algunas cosas que su manager le había encargado, se encontró de frente con aquella estudiante de la clase A. Parecía preocupada y apresurada por salir de la tienda.

 

—Pareces ocupada. — Dijo Tokiya, suponiendo que en algo estaba metida la chica, para tener aquella cara de preocupación. Quizás tenía algo que ver con el pelirrojo.

 

—Un amigo está…— Hizo una pausa, para luego agachar la cabeza como teniendo miedo de mirar a Tokiya a los ojos — Syo-kun irá a una audición, así que estamos tratando de ayudarlo.

 

—Pueden darse el lujo ¿eh? — La muchacha se sorprendió antes estas palabras. — Poner toda la atención en otra gente. — Y Tokiya decía todo esto en plural, debido a que con las palabras de Nanami, no pudo evitar no recordar a su compañero de habitación, y es que Nanami Haruka era igual que Otoya Ittoki, no les importaba gastar de su tiempo para poder ayudar a alguien  e inclusive se esforzaban tanto por  resolver los problemas, que si no lo conseguían terminaban dañándose ellos mismo.

 

—No es como piensas. — Haruka Nanami, volvió a agachar la cabeza, pero esta vez debido a la tristeza que seguramente sentía al no haber sido comprendida.

 

—Buena suerte. —Quiso finalizar Tokiya, que ya no quería seguir viendo ese rostro triste de la muchacha, no quería volver a acordarse o que su mente imaginara el rostro triste de Otoya, al haberle dicho las últimas palabras antes de salir de su habitación. Nanami dijo algunas otras palabras antes de largarse del lugar, pero no llegaron a los oídos de Tokiya, estaba demasiado preocupado en evitar volver a aquellos pocos días atrás.

 

Nuevamente su corazón dolía, al igual que todas las veces que recordaba lo que le había hecho al pelirrojo. Su manager podía notar lo ido que estaba Tokiya y muchas veces le había dicho que mejor cancelara la presentación. No podía, era su oportunidad para mostrar que él de verdad solo quería cantar, debía alejar la imagen de Otoya de su mente… El evento estaba demasiado cerca. 

Notas finales:

Muchas gracias por leer  n_n  Noki subirá la continuación (espero pronto xD)  y recuerden que los review son nuestro alimento D:

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).