HIMEMIYA KURUSUGAWA MISAKI por franbuesa

CAP 1


Esa mañana estaba lleno de escalofriantes emociones... Tras levantarse 30 minutos antes de lo habitual se había topado con la solicitud de desalojo, en menos de un mes debía conseguir nuevo hogar y dejar atrás ese pasado en el que tan feliz había sido junto a su amor y que por testaruda había perdido. Como era posible que toda su vida hubiera dado un giro tan inesperado que ahora era ella un juguete de su propio destino, debía buscar una solución rápidamente pero para que mentirse, días atrás había tocado mil puertas y todas se las cerraban en la cara. Acaso era tan difícil conseguir un nuevo trabajo!

Cansada de evitar su una opción, no le quedo de otra que intentar despejar su mente en la ducha, tal vez el agua cayendo por todo su cuerpo era lo único que lograba relajarla un poco,

Al término de aquel baño con algo de frustración y en un manojo de nervios comenzó a arreglarse; era hora de volver al lugar que tanto había evitado pisar, aquella famosa empresa “Miya” era como su castillo de terror y algo le decía que nada seria diferente
Su estomago gruño un poco recordándole su gran apetito, lamentablemente no tenia muchas reservas de alimento así que con un par de tostadas y un buen pero escaso café termino su desayuno, debía de empezar a mejorar su estado de salud pero por el momento no tenia estabilidad para aquello

Tras recoger las llaves del auto y entrar al estacionamientos se percato que ya había llegado la hora de volver a afrontar la cruda realidad, temía por su bien pero no le quedaba mas opción que arriesgarse, puso en marcha aquel auto, como mínimo se había gastado 10 minutos en llegar a su destino y tras botar un cargado suspiro estaciono su coche dispuesta a mostrar valentía ante todo, tras cruzar las puertas de aquella empresa busco con la mirada a la recepcionista y a pocos pasos de ella la logro visualizar

H: Buen Día!

- Oh, pero que sorpresa Kurusugawa-san. Hace semanas que no la veía; supuse que estaba de vacaciones

H: No Takako, o pues algo así. Pero será que me permites entrar y hablar con Himemiya-sama

T: Claro, espera te anuncio

H: Gracias - Eso era lo mínimo que podía expresar pues ahora si veía su perdición -


T: Himeko ya puedes ingresar

H:- Respiro profundamente mientras con sus manos trataba de tomar aquella perrilla pero estas le temblaban y a la vez comenzaban a sudar. Se esperaba muchas cosas pero al ingresar en esa oficina todo lo que imagino vivir ese día comenzó a derrumbarse lentamente. Busco con la mirada a aquella persona que esperaba encontrar pero en su lugar una hermosa mujer  le brindaba una amable sonrisa logrando relucir aun mas aquel perfecto rostro-

-Buen día mi nombre es Himemiya Chikane, es un placer conocerla señorita Kurusugawa

H: Bu.. Buen Día – Logro decir saliendo de su asombro -

C: Tome asiento por favor

H: Gracias

C: Y bien Himeko, te puedo llamar así?

H: Claro

C: Bien, Himeko que te trae por aquí?

H:- Injusticias de la Vida, quizo decir pero esos pensamientos era lo que tenia que callar si deseaba ese puesto - Yo renuncie hace un par de semanas por cuestiones personales, pero ahora me veo envuelta en muchos problemas y deseaba volver a recuperar mi trabajo; claro si es aun posible

C: Renuncio!, vaya sorpresa - Tomo los papeles de Himeko, dispuesta a detallar su trabajo -

H:- Sin evitarlo comenzó a repasar con la mirada a aquella chica que estaba frente suyo, tenia unos hermosos ojos casi confundibles con el cielo oscuro y con un toque brillante como si alguna traviesa estrella se colara dentro de estos, su tez blanca se veía sumamente suave pero no sabría como comprobarlo ni tendría el atrevimiento de hacerlo, su cabello lucia hermoso, realmente largo y con un tono entre negro y azul casi el punto intermedio de estos dos, sus labios rosados y. . . -

C: Tu trabajo es perfecto - Dijo al voltear a verla y le causo algo de gracia como esta se sobresaltaba ante bajo su mirada, tal vez la había tomado por sorpresa detallándola… “Que hermosa es” pensó al poder notar la hermosura de aquella chica de cabellos dorados y ojos tan raros y al mismo tiempo tan atrayentes… Después de unos minutos viéndose fijamente decidió romper aquel silencio - Y porque renunciaste?

H: …. Renuncio por, estaba con problemas familiares y no podía cumplir con la empresa así que no tuve mas opción. Pero ahora que ya todo esta solucionado me veo en la obligación a volver a implorar por mi puesto- Había mentido pero y eso que importaba, aquella chica para ella era una simple desconocida... y peor aun una Himemiya -

C: Bueno pues no tienes porque implorar más… Ese puesto siempre fue tuyo, veras mi padre me había comentado algo de una tal Kurusugawa que resultas ser tú. Me dijo que eras excelente trabajadora y que te tuviera en cuenta para este trabajo

H: Y… Perdone la pregunta pero el Señor Himemiya no volverá?- Pregunto con algo de ansiedad -

C:- Aquella pregunta le habia sonado algo rara, pero tal vez era simple curiosidad - No, La que ahora esta cargo de la empresa soy yo, algún inconveniente?

H: Claro que no, y gracias por aceptarme de nuevo.