Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Nuestros besos por Ruka Hatake

[Reviews - 44]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Las palabras tienen muchos significados dependiendo del contexto donde uno las utilice, para Sai las palabras son dificiles de utilizar, porque apenas esta aprendiendo los matices que los sentimientos pueden formar...

 

NUESTRAS PALABRAS

 

RUKA HATAKE

 

*-------///*///-------*

 

 

 

 

Siento nuevamente ese insistente revoloteo dentro de mi estómago, la sensación hace que incluso pierda la fuerza en mis piernas y mi cuerpo tiemble ligeramente. Adentro se encuentra él, es por eso que puedo afirmar que no se tratan de simples síntomas de una enfermedad al menos no una como tal.

 

 

Es gracioso como pude enamorarme de una persona a la cual solo he tratado en contadas ocasiones y de forma seca y distante. Desde que comencé a leer tratando de descubrir el nuevo mundo que se abría ante mis ojos, estaba seguro que si desarrollaba esta clase de sentimientos mi primer amor seria Naruto. Pues fue el quien tuvo el suficiente magnetismo para que pasara por alto varias de las órdenes de mis superiores, fue él mi primer vínculo importante dentro del equipo 7 donde llegue como un sustituto.

 

 

Por eso, cuando estos síntomas comenzaron a nacer dentro de mí, en alguna parte que llaman corazón o alma trate de negarlos y encontrarles alguna otra explicación, sin embargo cada vez que intentó encontrar otra respuesta las pruebas me llevan de nuevo al hecho innegable de que me encuentro enamorado de Gaara san el Kazekage de la aldea oculta de la Arena.

 

 

Él es amigo de Naruto, una persona más que pudo rescatar de su propia oscuridad. Para mí era una simple figura de autoridad, durante la guerra tuve contacto visual con él casi al final de la batalla definitiva. Sin ninguna peculiaridad continúe con mi vida, como todos, tratando de reconstruir de hacer nuevas cosas que hicieran olvidar el dolor que la paz traía.

 

 

La alianza entre Konoha y la Arena se solidifico y sus visitas a nuestra nueva aldea se intensificaron junto con el juicio de Uchiha Sasuke. Pase a ser guardia de su escolta personal en sus visitas que se llegaban a extender hasta dos semanas consecutivas, demasiado tiempo para un Kage. Y aquí nuevamente esa parte de “solo éramos dos personas sin un contacto personal”, “señor y guardia”, solo conocidos compartiendo a un importante amigo que lo más cercano que compartían era un saludo.

 

 

¿Entonces por qué?

 

 

Su voz se hizo una marca fácil de identificar incluso en la distancia u oscuridad, empecé a notar cosas de él, pequeñas manías cuando se enojaba, cuando estaba cansado o cuando estaba feliz. Mis ojos se perdían en su búsqueda y quedaban clavados en su persona mientras mi mente formulaba su nombre seguido de palabras descritas dentro de alguna novela romántica que hube leído.

 

 

Las palabras que sigo sin entender, sin conocer, brotan en mi cabeza como un eco de mi corazón ellas brotan contradiciendo cualquier excusa o protesta que tenga para decir que no es amor lo que yo siento por él. Y aquí estoy nuevamente parado haciendo guardia con estos sentimientos a punto de explotar sabiendo que él está ahí adentro, soy un ninja entrenado en raíz, una persona que fue entrenada para no sentir y siento tanto por él que es difícil para mí mismo creer que alguna vez no logre sentir nada vivo dentro de mí.

 

 

La puerta se habré mientras yo roto mi cuerpo junto con el de mis compañeros, no, creo que lo he hecho más lento y ahora le veo al lado de Tsunade sama con una ligera sonrisa en su cara, apenas perceptible incluso para mis ojos entrenados en examinarlo.

 

 

 

*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*

 

 

 

-Sai.-…-Sai.-

 

 

Me sorprendo, Iruka san se encuentra demasiado cerca de mí. Sus ojos chocolate me examinan para alejarse con una sonrisa en la cara, pero no estoy todavía seguro si me debó alegrar, después de todo Sakura fea suele sonreír antes de golpearme aunque ahora no he dicho nada, creo.

 

 

-Es un bonito dibujo.-

 

 

Bajo mi mirada hacia mi cuaderno donde veo un dibujo de Gaara san. He sido sorprendido completamente, ¿Cuándo lo inicié a dibujar?

 

 

-Esto es… yo solo.-

 

 

-No tienes por qué explicarme nada. Te entiendo, créeme. Disculpa si te incomode, solo vine porque quería pedirte que le llevaras esta carta a Naruto de regreso a la aldea.-

 

 

Saca de una mochila algo desgastada un sobre blanco y me lo da.

 

 

-¿Aun no va a regresar?- veo como me nieva con la cabeza mientras baja la cabeza.- Naruto kun se sentirá bastante triste, creyó que ahora para su examen de Jounin si podría estar.-

 

 

-Lamentablemente aún tengo asuntos pendientes en la aldea de la niebla.-

 

Se nota el aire de melancolía que desprende, no es alguien con quien haya tratado mucho pero se varias cosas de él por Naruto, Sakura, Kakashi y algunos otros ninjas de la aldea. Le tienen en grande estima y después de la guerra ha sido enviado a diversas tareas diplomáticas que lo han tenido por más de un año fuera de la aldea casi por completo, inclusive fallo en llegar al examen de chunnin de Naruto. Lo que le deprimió bastante, recuerdo.

 

 

-¿Naruto kun alguna vez estuvo enamorado de usted?- le digo sin pensarlo mucho y puedo notar la sorpresa en su cara por mis palabras.- ¿o acaso usted estuvo enamorado de él?-

 

 

-No, nunca compartimos ese tipo de sentimientos románticos, Naruto para mí siempre ha sido como un pequeño hermanito, y yo para él quizás he sido también como un hermano mayor o inclusive siendo egocéntrico diría que un padre.-

 

 

-…-

 

 

-Estás enamorado.- me afirma más que preguntarme, solo asiento llevando mis ojos hasta mi dibujo, ni siquiera sé porque comencé esta innecesaria conversación.

 

 

-No trates de analizarlo, el amor no tiene una formula o patrón. Puedes ver a una persona solo una vez y amarla por el resto de tu vida o bien puedes pasar toda tu vida al lado de alguna persona sin nunca llegar a amarla.- sus palabras se sienten un poco acidas.- Puedes amar y no ser amado, te pueden amar y tú no amarles, es una apuesta muy arriesgada pero si la ganas, obtendrás una valiosa recompensa.-

 

 

-Esto ni siquiera es factible, somos de distintas aldeas, él es un Kage y yo…- Mi voz ha salido aguda sin esperarlo.

 

 

-Antes de iniciar la gran cuarta guerra me arriesgue al decirle que le amaba, perdí, incluso cuando permanecí a su lado durante muchos años siendo su compañero y amigo.- sus ojos se nublan y mi corazón se contrae ante sus palabras, porque conozco ese sentimiento como miedo.- No obstante, no me arrepiento, porque decirle de frente lo que guarde durante tanto tiempo, decirle lo que sentía para mí fue un regalo en sí mismo.-

 

 

-Pero te abandono.-

 

 

-Es doloroso, pero creo que sería peor seguir soñando a su lado. De cierta forma fue liberador declararme. De cierta forma duele no seguir permaneciendo a su lado.-

 

-No soy bueno con las palabras.-

 

 

-Creo te equivocas.- me dijo señalando mi dibujo y después la carta que el mismo me había entregado.- Las palabras se pueden traducir en varios idiomas y formas. Solo decide si quieres hacerlo y la mejor forma en que puedas hacerlo.-

 

 

 

Ya no hablamos más, Shizune san vino por él ha mandado de Tsunade sama.

 

 

 

*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*

 

 

 

Desde el pasado medio día cuando el vino a mí me quede pensando en sus palabras y la forma en que yo podía utilizarlas. Porque mi deseo es dejar de verle y poder ser capaz de caminar a su lado, de rozar su piel mientras sus palabras se dirigen hacia mí de forma libre y fluida encantándome y llevándome hacía lugares no descubiertos y yo llevarle a él a descubrir el mundo donde he habitado, el mundo que he ido cambiando.

 

 

Ahora espero a que me den paso a su tienda, ya es de noche y el corazón palpita más rápido mientras la sensación de vacío o vértigo dentro de mi estómago hacen que quiera huir como cobarde. Su hermana sale a darme el pase de entrada y yo no puedo contestar solo mover mi cuerpo en forma automática. La veo que se queda en la puerta viéndome inquisitivamente y luego cierra la puerta.

 

 

Quiero hablar quiero decirle con mis palabras lo que he soñado para ambos, pero nada sale.

 

 

Me mira y no puedo más que entregarle mi carta desviando mi mirada. Una carta donde he escrito mis esperanzas, donde he dicho cada sentimiento desconocido y extraño que estoy padeciendo como pobre enfermo en busca de salvación.

 

 

Me quedo lo más quieto que puedo, veo como sus ojos se deslizan cada vez más despacio entre cada línea que escribí. Ahora siento ha sido demasiado cuando hace poco pensaba que era más bien poco. Quiero saber su respuesta rápidamente y quiero escapar antes de saber lo que por mí siente.

 

 

Toma la última hoja, esa donde las palabras las convertí en líneas de su cara; donde mis sentimientos los pinte de colores; donde mis miedos los calque en negras sombras; donde mis esperanzas las retrate en sus ojos en color casi azul pastel. No porque fueran su exacto color sino porque para mí reflejan el tranquilo cielo de la tarde, antes de que sus matices me recuerden su piel, su cabello.

 

 

Estoy tragando mi saliva como si estuviera tomando agua, el deja todo sobre su escritorio, sin mirarme sin decirme nada. Y creo que entiendo este silencio. Se su respuesta, y duele sin que la haya pronunciado, pero como me dijo solo hace un rato Iruka san, no me siento mal del todo. Soy un hombre que fue entrenado para no sentir, pero me fue imposible, porque tuve a mi hermano a mi lado, porque ahora tengo amigos y estos sentimientos hacia ti Gaara san. Por eso no me voy a arrepentir, y también sé que debo ponerle fin.

 

 

-Disculpe mi atrevimiento Kazekage sama. Puede usted darme el castigo que crea conveniente por esta falta de respeto a su persona.-

 

 

-¿Acaso no es verdad lo que has escrito aquí?, no veo otra razón para castigarte. –

 

 

-¡Por supuesto, que no!, es verdad todo lo que ahí escribí son las palabras que me cuestan trabajo decir con mi voz.-

 

 

Creo que su cara se ha puesto un poco roja. Me pregunto si es capaz de escuchar mi corazón, porque está latiendo como si fuera a explotar.

 

 

-Lo siento, no sé cómo debo contestar no soy bueno con cosas como sentimientos o palabras.-

 

 

Él también está nervioso puedo sentirlo.

 

 

-No se preocupe Gaara sama. Yo también apenas estoy aprendiendo.-

 

 

Creo que se sorprende un poco con mis palabras, abre levemente sus labios para volverlos a cerrar. Se crea un silencio pero no me es desagradable, creo que los nervios comienzan a menguar mientras mi corazón recobra un poco de su latir normal.

 

 

-¿Sai?-…- ¿Tu nombre es Sai?- asiento con la cabeza.- ¿Sai qué?-

 

 

-Lo siento, no comprendo.-

 

 

-Tu apellido.-

 

 

-No tengo.- sus ojos son como un escáner.- Yo pertenecía a un escuadrón especial de ambu, por lo que nuestros nombres nos eran dados como claves para misiones, Sai es el último nombre que me dieron, me gusta así que decidí dejármelo.-

Parece un poco triste o decepcionado creo que me he equivocado al decirle aquello, pero es la verdad este nombre me fue dado por Danzo cuando me asigno la misión de hacer matar a Sasuke. Lo cierto es que nunca imagine hasta qué punto mi destino se alteraría por esa misión.

-Podemos ser amigos.-

 

 

-…-

 

 

-Yo, quiero saber más de ti como tú quieres saber de mí. Pero no te prometo que responderé a tus sentimientos. Ahora solo quiero hacer lo mejor para mi aldea. Quiero ser una persona diferente a la de yo del pasado, y aún me falta para ello, por eso…-

 

 

-Gracias.- lo sé, se un poco te ti Gaara san.-Gracias Gaara sama.-

 

 

-Llámame Gaara, después de todo ya somos amigos.-

 

 

 

*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*-------///*

 

 

 

Hace dos semanas que regrese a la aldea. Hoy veré a Naruto que se encontraba en una misión para entregarle la carta de Iruka san. Sé que se pondrá feliz por tener noticias de él y triste porque no podrá estar cuando haga su examen de jounin, pero habrá otras oportunidades de que le demuestre que tan lejos ha estado llegando.

 

 

Yo me encuentro feliz. Mis aves de tinta le entregan mis memorias en forma de palabras y son mis aves las que me entregan las suyas. Hay muchas cosas que no conocía de Gaara, cosas increíbles que me deleito en releer cada vez que tengo oportunidad.

 

 

Quiero verle pronto, quiero que nuestro destino se entrelace cada vez más.

 

 

También quiero ver a Iruka san para darle las gracias por darme las palabras que me hicieron arriesgar, pero como Naruto creo que tendré que esperar un poco más.

 

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).