Era invierno, nada mas podía ser perfecto. La blanquecina nieve adornando la ciudad entera dándole un toque especial. Un aura angelical. Pero sin duda el lugar más hermoso de todos era el mirador en el que se encontraban. No solo por la vista que pudiera ofrecer, si no porque en él se guardaba un recuerdo, uno muy especial. Para cuatro personas lo que había sucedido allí con anterioridad era algo memorable.
-Kyuhyun, ¿recuerdas la última vez que estuvimos aquí?- pregunto a su lado un joven de cabellos castaños.
-Claro hyung, como olvidar ese día- dijo observando el cielo y regalando una pequeña sonrisa al viento.
Ambos se quedaron así por un rato, mirando el cielo queriendo dar gracias a Dios por ese día, que jamás olvidarían. No de ninguna manera. Significaba mucho, la felicidad llego a ellos ese día y no estaban dispuestos a pasarlo por alto.
-Ambos pedimos lo mismo- dijo recordando aquella vez que hablo con Kyuhyun y sorprendiéndose de que habían pedido lo mismo- que nuestras parejas fueran felices, independientemente si era con nosotros o alguien más... porque ellos son parte de nuestro corazón, aunque no de la misma forma que lo eran antes.
-Y así fue hyung, yo nunca pensé hacer eso que solo pocas personas tenían la oportunidad de hacerlo. Pedirle un deseo a una estrella fugaz- contesto un poco serio. Nunca fue creyente sobre esos mitos, pero ese día que vio una se sorprendió, y no estaba de más pedir algo que deseaba con todas sus fuerzas.
-Ni yo, aun así estoy agradecido. Gracias a eso nos dimos cuenta de que nuestros destinos iban por un mal camino- dijo suspirando.
-Mira que enamorarnos de la pareja del otro- se detuvo un poco ante su comentario, su corazón parecía salirse de solo recordar al dueño de su felicidad- pero... solo el destino sabe lo que nos tiene deparado y quien estará a nuestro lado para hacerlo más grato.
- Y nosotros estamos agradecidos, por darnos cuenta de que estábamos equivocados al negar lo que sentíamos por ustedes- Dijo otro joven de cabello negro, que acababa de llegar el cual rodeo de la cintura a Kyuhyun y al instante le robo un beso.
-Hae...
-Es verdad, gracias a eso. Hoy disfruto de mi monito, la persona que amo más que nada en la vida- Sugmin se acerco hacia Eunhyuk para depositar un tierno beso sobre los labios de su novio.
En ese lugar solo existían ellos. Dos parejas que se amaban intensamente. La felicidad no cabía en ningún lugar haciendo que se desbordara a traves de sus acciones. Nunca se lo hubieran imaginado. Estaban destinados a estar así, de esa forma. Con la persona correcta.
Ambas parejas se quedaron en silencio. Solo querían disfrutar la precensia del otro. Sentirse plenos, que nada mas podía importar, solo la persona que estaba a su lado. Abrazándose, demostrándose amor por medio de besos y caricias. Comunicándose por medio de miradas las cuales mutuamente se decían...
‘'Te amo''.