Acabé con mis papas más rápido que de costumbre, vi mi vaso y esta vez lucía muy grande o nunca lo había notado. Quizás es porque siempre compraba algo más para acabármelo y ahora que sólo es la orden de papas se ve enorme.
—Tae —miré a Onewhyung—, si aún no estás satisfecho, puedes tomar mis nuggets.
—Gracia hyung —no creo que sea justo que me coma su pollo—, así estoy bien.
Creo que eso generó un complejo de culpa en Minho porque justo estaba por morderle a mi ex hamburguesa pero se detuvo y la dejó en el plato.
—Ahora me siento avergonzado —dijo—, me hubieras dado las papas fritas.
Solo le sonreí.
—No, no te preocupes, Minho —opté por levantarme haciendo que Onew me imitara—. Onew hyung, ya me tengo que ir. Quedé de verme con mis amigos dentro de diez minutos.
Busqué la salida del lugar para ver si de casualidad los veía.
—¿Quieren que me lleve la camioneta de mi papá? —pregunté, porque es como la de Onew, es una Pick up.
—¿Tienes permiso para conducir? —preguntó Key pero sólo sonreí fastidiado.
—No es como que vaya a atropellar a alguien… intencionalmente, ja, ja, ja —como me encanta mi risa siniestra—. Lo tengo a medias, sólo puedo conducir si hay un adulto como copiloto —tenté el bolsillo de mi pantalón buscando mi teléfono, lo saqué y miré la hora—. Ahora sí, hasta al rato.
Salí casi corriendo que apenas pude distinguir algunas palabras que dijo Onew antes de irme.
End of Taemin’s POV
Minho’s POV
Me siento un poco culpable, el pequeño se quedó sin comer bien…
—¿No es una ternurita? —escuché que preguntó Key, sólo suspiré.
—¿Taemin?— ahora preguntó Onew.
No tengo tiempo de pensar si es una ternurita o no, por lo que me levanté de mi silla.
—Minho, ¿a dónde vas? ¿Acaso es tu turno de acosarlo?— le dirigí una mirada reprobatoria a Onew, él sólo sonrió y se recargó en su respaldo.
—No, tengo que ir a mi casa a preparar mis cosas para el campamento.
Empecé a caminar para salir del local, sin embargo escuché que seguían hablando de mí y de Taemin, pero no quise saber más al respecto.
Suspiré, qué difícil será estar junto a él.
Atravesé la plaza para salir pero antes de hacerlo entré a una tienda de revistas. Hace mucho que no sé qué dirá mi signo zodiacal o leo los chismes de farándula además, creo que me vendrá bien tener una ahora que estaré todo el finde fuera de la ciudad.
Salí de ahí y entré a otra tienda donde vendían gafas de moda, empecé a medir algunas con el fin de pasar el tiempo para poder irme a casa a la hora que pueda encontrar a mi mamá, según mis cálculos aún falta un hora, así que puedo turistear en algunas tiendas más.
Estaba viéndome en el espejo cuando vi pasar a Taemin acompañado de alguien que no es Onew, pero no logré identificar quién era.Compré las gafas oscuras estilo policía y salí de la tienda, aproveché la revista para esconderme.
—Ja, ja, ja, sí es en serio.
Escuche que se reía pero ¿de quién? ¿O de qué?
—Me alegra verte fuera de Detención, hicimos un acuerdo y el primero de los siete que castiguen otra vez le paga el desayuno a los otros.
¿Detención? ¿Los siete? ¿Acuerdo?
—Ja, ja, ja, está bien, aunque ustedes saben que tengo el mejor asesor del mundo y volver a Detención ya no será…. fácil.
¿Asesor? ¿El mejor?
—Eso ya lo veremos, porque no importa quién sea el asesor, un “vándalo” siempre irá a Detención —¿por qué lo estoy espiando? se supone que debería de estar yendo a casa.
—Oye YoungMin —dijo Taemin volteando por encima así que subí la revista para esconderme más—, el lunes te prometo salir porque estos días iré de campamento, me invitaron los amigos de Onew.
Debería de salir de aquí, no lograré nada haciendo esto.
Cerré la revista para girarme y esta vez sí fui directo hasta mi casa; mientras caminaba pensaba en lo que había escuchado y sin querer empecé a hacer mi versión de los hechos.
—Minho… ¡Minho!
Volteé por encima de mi hombro hasta que pude ver a alguien corriendo hacia mí, tenía el cabello corto y castaño, también era alto.
Me giré por completo para esperarlo con una sonrisa en mi cara.
—Te he estado marcando a tu celular pero no me contestaste, justo iba a casa.
¡Es ChangMin!
—Te acompaño a tu casa y me explicas bien lo del camping.
Vino a mi lado y ambos comenzamos a caminar.
—Claro pero antes de eso ¿te puedo preguntar algo? es más como asesoría.
Una vez que llegamos a casa, nos sentamos en el jardín delantero.
—Sí, ya sabes que si en algo te puedo ayudar sólo tienes que decirme.
—Es que alguien me invitó a salir pero yo no sabía quién era, todo fue por aviones de papel hasta que Jonghyun ¿te acuerdas de él? —al ver que asintió asentí también yo— Él me dijo quién era el que me manda los aviones y resultó ser Taemin un niño de grado inferior al mío, siento que le gusto o le atraigo, pero…
—Ya veo… —puso su mano en mi hombro para darme ánimo— No te apures Minho, esas cosas suceden. La mayoría del tiempo la gente se enamora y muchas veces no es correspondida pero siento que lo que te “asusta” a todo esto, es a como se le llama. ¿O me equivoco?
La verdad ni lo había pensado.
—No sé si sea eso, sólo que... yo no sentía nada por él, ni lo conocía pero hay cosas que me asustan después de haber estudiado sexualidad humana.
Arranqué una hoja del pasto y la iba a empezar a triturar a no ser que su mano se puso sobre la mía.
—Está bien que tengas ese tipo de miedo, no es fácil lidiar con el ser gay pero tampoco te obligues a hacer algo que no quieres, pienso que él entró en tu mente de cualquier manera que ahora, el que se está enganchando eres tú y no él. La típica técnica de “te enamorarás de mí” y por fortuna o desgracia, has caído redondito.
—No… no lo sé, pero me gustaría que me ayudaras con todo esto, tú ya sabes que hacer o cómo reaccionar.
Él tiene más experiencia en el amor que yo, incluso en el ámbito romántico sexual contrario a mí, que ni siquiera se me hace fácil hablar de esto. Menos mal que puedo contar con él para todo esto.
—Yo te apoyo en lo que quieras, si sientes que las cosas van a salir bien, anímate, sino empieza a retroceder de a poco así no te lastimas ni lo lastimas.