Corría intentando encontrar una salida al extraño laberinto plagado de telarañas de mi sueño, podía sentir en todo momento que algo se deslizaba detrás de mí, sin prisa alguna, tomándose el tiempo de casarme, toque la pared con mi cuerpo, justo para darme cuenta de que no estaba construida en ningún material sólido, eras suave pero a la vez imposible de romper , estaba enredada y a punto de ser devorada por la araña.
La luz del sol entro por la ventana dándome de lleno en la cara y como si viniera de alguna clase de extraño mundo el chillante sonido del despertador se escuchó en la distancia , saque mi brazo de entre las sabanas para tomar el reloj de la mesita de noche, solo eran las 7:40 estaba bien… que?!!, las 7:40??
Chitose: voy a llegar tarde!!!!!
Mi nombre es Chitose Ayame, naci el 24 de Agosto, soy virgo y mi tipo de sangre es A+ , el día de hoy comienzo mis clases en el nuevo instituto después de la mudanza, pero que digo? debería estar cambiándome , en un movimiento rápido me despoje del pijama y me puse el uniforme azul del instituto, baje las escaleras a toda velocidad después de cepillarme el cabello.
Chitose: porque no me despertaste?!
Al entrar en la cocina mi mirada se dirigio inevitablemente a la mujer de ojos oscuros, cocinaba con una sonrisa alegre en su rostro, se giró para verme cuando entre en la habitación de modo estrepitoso, esa mujer de sonrisa irritante es mi madre Akane Ayame, y justo en este momento a pesar de su sonrisa está molesta.
Akane: Chitose-san no deberías estar yendo ya a la escuela?
Mire el reloj, rayos tenia razon, faltan solo 15 minutos, valla dia que va a ser, pensé mientras daba un beso en la mejilla a mi madre y salía disparada por la puerta, aunque en realidad no tenía idea del día que iba a ser.
Capítulo 1 ¿Nada interesante?
La jovencita corría con todas su fuerzas, haciendo piruetas, saltando de aquí para allá, esquivando a los transeúntes, cualquier cosa para ahorrar distancia, por suerte la escuela no estaba demasiado lejos de su casa.
En su camino apresurado no se fijó en la joven de cabellos negros a la que casi hace caer cuando atravesaba por las puertas del instituto a toda velocidad, nadie podría culparla por ser tan descuidada, salvo ella misma un tiempo después, entro en el aula de clases, mirando hacia ambos lados para asegurarse de que no había profesor en el salón
Chitose: lo hice- respiro entrecortadamente por el esfuerzo de la carrera mientras lo decía- parece que lo hice a tiempo- dos muchachas en la primera fila se giraron reprobando su actitud y ella un poco sonrojada ocupo su asiento, intentando pasar desapercibida.
Después de ella la jovencita de cabellos oscuros se introdujo en el aula sin que nadie le prestase atención, después de todo nada en ella era del tipo de una joven popular, desde sus cabellos largos y negros completamente lacios, hasta sus ojos oscuros, su piel pálida como la leche, y su poco interés en los demás, tomo asiento en su habitual lugar junto a la ventana, sin mirar a nadie.
Mientras la respiración de Chitose volvía a ser normal, se dedicó a mirar la habitación, no parecía un lugar demasiado especial, los asientos distribuidos en filas, pizarras blancas, ventanas amplias, el lugar cliché en donde todo alumno se enfrenta a sus mortales enemigos, si las fechas de entrega, dando un suspiro pensó con todo aburrimiento, que esa era la clase de lugar donde nunca sucedía nada interesante.
El profesor apareció por la puerta de entrada no mucho después que las jóvenes y coloco sus cosas sobre el escritorio en un gesto que denotaba que estaba muy acostumbrado y después paseo la mirada sobre la clase, deteniéndose en Chitose que ya se esperaba algo así, la joven sin esperar a que se dirigiera a ella se levantó de un salto.
Chitose: mi nombre es Chitose Ayame y soy nueva en la escuela, espero nos llevemos bien- lo dijo con toda rapidez casi sin tomar aire, el profe se ajustó las gafas.
Sensei: iba a decirle que tiene el cabello lleno de hojas- dijo tosiendo un poco mientras la carcajada general se extendía- pero nos alegra tenerla por aquí señorita Ayame- a Chitose se le subieron los colores y volvió a su asiento quitándose disimuladamente las hojas del cabello.
El profesor siguió explicando y el resto de la clase trascurrió con una normalidad sobrecogedora, hasta llegar el esperado momento del descanso, Chitose se estiro en su asiento y miro hacia la ventana, justo cuando una chica menudita y de anteojos se le acerco.
Yachiru: primer día difícil?- sonrió de modo amable mientras le tendía una caja de jugo- si quieres podría enseñarte la escuela- siguió hablando de modo enérgico , y le tendió la mano para presentarse- me llamo Yachiru.. Yachiru Megaure es un placer tener nuevos por aquí Ayame-san - chitose le sonrió en respuesta.
Chitose: te molesta si te llamo Megu-chan?- le pregunto, la sonrisa de la pequeña se ensancho- claro que quiero conocer la escuela, además es enorme- se puso de pie y solo entonces noto el extraño sabor que marcaba en la caja – jugo de aguacate? .
Yachiru: es delicioso- la chica dio un largo trago a su propio jugo y comenzó a caminar fuera del aula, con la castaña siguiéndola y observando todo- yosh lo primero que debo enseñarte es la enfermería, no te ofendas Aya-chan pero parece propensa a los accidentes- como si lo hubiera invocado solo por el hecho de mencionarlo chitose tropezó en ese momento con algo en el suelo.
Chitose: itai- se puso de pie de nuevo tomando la mano que su compañera le tendía- normalmente no soy tan torpe- se disculpó.
Yachiru: no te preocupes a mí me pasa todo el tiempo- la rubia se acomodó los anteojos- aún hay mucho que mostrarte- sonrió tomando de la mano a su nueva amiga y echando a correr por la escuela.
Durante los siguientes 20 minutos Chitose se vio arrastrada por toda la escuela e informada de casi cada pequeño chisme que a la menor le había llegado, pues como ella misma afirmaba, era una de las personas mejor informada de la escuela, para el momento en que la campana volvió a sonar anunciando el final del descanso la chica conocía más o menos la mitad de la escuela y estaba segura de que le gustaba.
Yachiru: entonces solías vivir en Okinawa- la chica parecía entusiasmada- debe ser un lugar muy bonito, eres toda una extranjera- los ojos de la chica brillaban por la emoción
Chitose: - sonrió para su nueva amiga- pero no nací en Okinawa solo vivimos un tiempo ahí- explico divertida-
Yachiru: pero sabes a lo que me refiero- soltó una risita mientras volvían al aula- además, es mucho más divertido comparado con este lugar, nunca sucede nada.
Chitose: vamos no puede ser tan malo, esta escuela es bastante grande- a Chitose le extrañaba que hubiera un colegio así en una ciudad tan pequeña, aun miraba hacia todas partes sorprendida, tanto que no noto a la persona que salía de la biblioteca y choco con ella, como resultado ambas cayeron al suelo- l-lo siento- se apresuró a ponerse de pie tendiéndole la mano a la morena que se levantó solo diciendo un seco “está bien” y entro al aula antes que ellas –cuál es su problema?- le pregunto a Yachiru que solo respondió con un encogimiento de hombros.
El resto de las clases se sucedieron rápidamente y pronto la chica se despidió de su nueva amiga para volver a casa, camino despacio, llenándose de la fragancia que anunciaba el final del verano y sonriendo un poco para sí, aunque fuera un lugar aburrido donde nunca podía esperarse algo impresionante, al menos era pacifico, y eso era lo único que importaba.
Se deslizo dentro de sus propios pensamientos sin notar a la persona que llegaba por detrás y le decía en el oído.
- Hay una araña en tu cabeza- la chica soltó un gritito y salto hacia adelante, solo para recibir una carcajada de parte del joven- eres una miedosa- reía abrazándose el estómago- deberías haber visto tu cara- la chica enrojeció mirando al bromista.
Chitose: no es gracioso- inflo las mejillas- eres un tonto onichan- el chico dejo de reír para revolverle el cabello en un gesto bromista.
Chiharu: es que estabas tan entretenida que podrías haber tragado una mosca, niña miedosa- la castaña tuvo que levantar la cabeza para mirar de manera amenazante a su hermano mayor, aunque para el chico esto no marco diferencia, una sonrisa que se notaba incluso en sus ojos castaños se formó en su rostro.
Chitose: O-ni-chan- la chica lo miro, estaba segura lo que seguiría.
Chiharu: - colgó su mochila mejor a su hombro y dijo- si yo llego primero
Chitose: - sonrió también- cuando te gane…
Ambos: tendrás que hacer tu solo la cena- ambos echaron a correr justo cuando decían eso, riéndose llegaron casi el mismo tiempo per chitose logro meterse enfrente de su hermano.
Chitose: lo hice – dijo riendo- así que… espero que prepares mi favorito – le sonrió entrando a la casa, mientras su hermano suspiraba teatralmente.
Chiharu: está bien pequeño monstro, ve a darte un baño- dejo su mochila sobre uno de los sofás y se dirigió a la cocina preguntando- ¿Día pesado?
Chitose:- se deshizo de su mochila de igual modo y se acercó a la cocina, recargándose en la puerta- es una escuela… bueno conocí a una niña bastante mona seguro que te gustara cuando te la presente- lo miro- que hay de ti.
Chiharu: pues volví a ver a algunos compañeros míos del preescolar, no han cambiado demasiado, aun les gusta comer pegamento- ambos rieron- puedes ir a darte una ducha, te llamare cuando la cena este lista.
Chitose: eres un cielo onichan- la chica dio un beso en la mejilla de su hermano y se dirigió escaleras arriba- es un buen lugar para comenzar de nuevo- dijo mientras se dirigía al baño, despojándose de la ropa en el camino, no era la más ordenada de todas las chicas pero al menos ponía todo en el mismo sitio.
Al entrar al cuarto de baño, metió su mano entre las puertas deslizables y encendió el agua caliente, sintiéndose relajada, una vez estuvo segura de que la temperatura era la adecuada se deslizo dentro, el agua callo sobre su cuerpo haciéndola suspirar y cerrar los ojos, era uno de esos placeres tan simples y normales que son poco valorados.
Abrió los ojos lentamente para buscar el Shampoo y le pareció ver algo moverse cerca de la puerta, algo pequeño y negro, pero lo suficientemente grande como para asustarla.
Chitose: a-araña- saco la mano fuera de la ducha buscando uno de sus zapatos y conteniendo la respiración como si se tratara de una operación militar, lo localizo después de pocos segundos y cerrando los ojos atesto un golpe gritando asustada- l-la mate?- se preguntó permitiéndose abrir un ojo, no había nada en el lugar que la araña había ocupado- ya no está- la chica arrojo el zapato fuera de la ducha y termino de asearse en un tiempo record.
Después del incidente, mientras se cambiaba, e incluso aun mientras cenaba, comentando con su hermano el día que habían tenido, le pareció que alguien le observaba insistentemente, pero intento calmarse y concentrarse.
“es tu imaginación, todo está bien” se repetía constantemente mientras estaba en la cama intentando dormir, la oscuridad llego a su mente arrastrándola al sueño, una continuación del de esa misma mañana, que ni siquiera recordaba, pero esta vez, el sonido de las patas arrastrándose, había sido sustituido por el sonido de unas botas de tacón.
-te atrape- escucho una voz femenina decirlo, mientras caía de nuevo en la telaraña, sentía miedo, aunque por alguna razón… era muy diferente al miedo de esa mañana.