Capitulo 8 – El Trato
Ya era la noche del domingo cuando Naruto llego a casa, después de su “nada” interesante encuentro con Sasuke había dado una vuelta por el bosque y finalmente había llegado a su casa, donde muy a su sorpresa encontró como todo relucía casi con luz propia. ¿Es que Sasuke se había tomado enserio lo de limpiar la casa? Por un momento el rubio se avergonzó ya que había sido una broma, pero de inmediato solo se le vino a la cabeza a Sasuke en algún lugar de la casa limpiando. Naruto empezó a buscar por el primer piso pero estaba totalmente limpio y ordenado, asi que subió al segundo piso donde vio solo una puerta abierta y sonidos saliendo de su interior.
- ¿Sasuke? – pregunto dubitativo, no obtuvo respuesta - ¡eh, Sasuke yo solo bromeaba respecto a lo de limpiar y eso....! – sin embargo dejo de hablar al ver el interior del cuarto – Oni-chan – susurro sin creérselo.
- ¿eh? Pareces decepcionado
Deidara se dio la vuelta para encarar a Naruto, el chico frente a Naruto tenía el cabello largo y dorado, un mechón que cubría uno de sus ojos azules como el mismo cielo. Además su rostro era adornado por una angelical sonrisa y ahora estaba trepado en una silla arreglando algo en el techo.
- ¡ONI-CHAN! – chillo Naruto y sin pensárselo mucho corrió hasta su hermano abrazándolo (por las piernas) y cargándolo sobre le mientras le daba vueltas.
- Ya, ya – dijo entre risas el de cabellos largos – yo también te extrañe
Naruto sin embargo siguió dándole vueltas en el aire al otro hasta que lo dejo sobre la cama, sin dejar de reír en ningún momento.
- ¡¿has llegado?!
- No que va – rio el de cabello largo - ¿es que no me ves? – Deidara se sentó en la cama y miro divertido a Naruto.
- Debiste volver hace unos días – reprendió Naruto.
- ¿y desde cuando te tengo que rendir cuentas, enano? – Deidara se levanto quedando frente a Naruto... claro que el adjetivo enano era mucho decir ya que Naruto le sacaba más de una cabeza.
- Pues te aviso que si sigues con esa actitud no te contare nada de lo que paso – Deidara lo miro interesado.
- Jiraiya me ha dicho que tienes algo que decirme – sonrió Deidara con esa sonrisa cálida y que lo hacía parecer un ángel caído del cielo.
- Mucho, de hecho – asintió Naruto – deberías sentarte, no quiero que te caigas al piso.
Deidara hizo lo que Naruto le pidió y se sentó en la cama mirando con curiosidad al rubio de cabellos cortos y Naruto por su parte se sentó junto a el apoyando su espalda en la cabecera de la cama tomando una bocanada de aire para iniciar con su relato.
- ¡ESTAS DE COÑA! – el grito se debió escuchar por toda Konoha, sin embargo Naruto lo sintió muy lejano ya que acababa de terminar su relato y aun estaba en el mundo de los recuerdos.
- No, es enserio.
- ¿cómo me vas a decir que mi hermanito pequeño se ha comprometido, convertido en ninja y ya no es virgen? ¡solo llegaste hace una semana!
- Ya, lo siento supongo que es difícil de creer, a mi también me sorpren... ¡YO NO E PERDIDO LA VIRGINIDAD!
- ¿ah no? – pregunto sin aparente interés Deidara mirando se las uñas.
- ¡claro que no! Además, ¿quién te crees para gritar que soy virgen?
- Me creo yo – sonrió con arrogancia Deidara – pero volviendo al tema, Naruto tu odias el compromiso ¿cómo es que...? – Deidara dejo la frase al aire.
- Es solo por un mes – dijo sin interés Naruto – solo seria por un mes y simplemente lo hago porque no hay nada mejor que hacer mientras este en esta villa.
- Ah, entiendo entonces lo que haces es disfrutar de ese tal Sasuke un mes y lo dejas votado – Naruto se quedo sin palabras ante la crudeza de las palabras de su hermano – sin contar que no solo lo dejas votado sino que también con la deshonra y el desprecio de su familia y la villa... eso sin contar su corazón roto.
- ¡pero qué dices!
- ¿no es lo que me estas queriendo decir? – Naruto se sintió intimidado por la fuerza de los ojos azules tan iguales a los suyos, era una mirada que claramente decía “Me decepcionas, lo que haces está mal y además te comportas como un niñato sin corazón” - ¿eh, Naruto? – el cuestionamiento lo hizo el mayor con un tono de voz neutro y alargado que hizo estremecer al mejor
- ¡claro que no! Solo intento pasar el tiempo, además el me odia y seguramente se quiera deshacer de mi asi que no sería tan malo, no es como si lo fuera a dejar “con el corazón roto” – Naruto rio ante la estupidez de ese pensamiento.
- ¿estás seguro de que tan mal le caes?
- Tal vez peor, solo que no me lo demuestra – asintió Naruto.
- ¿y a ti también te cae mal?
- ¡Me cae muy mal! – grito Naruto mas rápido de lo necesario.
- Claro... – murmuro entre risas Deidara.
- ¿de qué te ríes?
- De nada – rio el mayor – solo pensaba en lo raro del amor.
Naruto decidió no preguntar y dejar que su hermano hiciera el aseo mientras él lo observaba y le preguntaba sobre su viaje. Deidara no era hermano de sangre de Naruto, sin embargo su físico era casi idéntico: el mismo color de cabello, la misma piel bronceada, los mismos ojos azules cielo. Eran muy parecidos incluso en su forma de pensar, sin embargo no eran hermanos de sangre, Naruto conocía a Deidara desde que tenía conciencia, su abuelo Jiraiya había llegado a un pueblo en ruinas destruido por terroristas, todos los habitantes estaban muertos, sin embargo ero-senin había oído un llanto y se había encontrado con un pequeño Deidara de 4 años llorando en medio de una pila enorme de muertos. El pequeño al verlo se había ido corriendo tan rápido como podía, sin embargo Jiraiya lo había logrado alcanzar y lo había llevado a la casa de huéspedes (en un pueblo cercano) donde él estaba de paso con Naruto y Minato, el padre del primero. Deidara no había abierto la boca durante toda una semana y Minato estaba muy preocupado ya que el pequeño no comía y parecía ido en su mundo, no quería ni imaginarse que clase de cosas eran las que le habían hecho al pequeño en el ataque. Con total dedicación Minato lo trato como un hijo, y con el tiempo logro que el pequeño fuese como un niño normal. Cuando Deidara había llegado Naruto solo tenía un año y para cuando Deidara se había convertido en un niño normal Naruto ya tenía seis, el proceso había sido lento y duro pero Minato había logrado su cometido, Deidara para ese entonces ya era todo un Uzumaki, era uno más de la familia y ninguno de los tres Uzumaki se podía imaginar la familia sin pensar en su rostro.
- ¿qué es lo que piensas? – Naruto abrió los ojos encontrándose con su hermano a menos de dos centímetros de su rostro observándolo fijamente, de un salto se alejo hasta el otro lado de la habitación.
- Me asustaste – dijo Naruto después del shock inicial acercándose de nuevo al otro.
- Bajaste la guardia – respondió como si nada Deidara - ¿pensabas en tu prometido? – Naruto hizo cara de asco.
- No digas prometido... es extraño
- Es lo que es – dijo sin más Deidara – anda a dormir, ya es tarde
Mientras decía estas palabras Deidara empujo a Naruto hacia atrás acostándolo en la cama y le puso las cobijas encima.
- Mañana despiértate temprano, no puedo creer en el desorden en que vivían Jiraiya y tu antes de que llegase, este lugar era una porquería y Jiraiya estaba durmiendo tirado en el patio entre un montón de hojas, parecen un par de críos – suspiro cansado Deidara.
- Y tu pareces nuestra mama gallina
- No que me guste – murmuro Deidara – hasta mañana.
Y asi Deidara salió de la habitación apagando la luz y cerrando la puerta, se asomo con disimulo a la otra habitación donde el peliblanco dormía pacíficamente. No tardo en escuchar la respiración tranquila de Naruto (oído entrenado de ninja) asi que sin problemas salto por una ventana y se fue corriendo por los tejados. Solo tuvo que hablar unos instantes con un trió de hombres (que le miraban como a su cena) para saber el apellido del tal Sasuke, Uchiha. Solo unos minutos después ya se les había escabullido a los tres hombres y se dirigía al barrio Uchiha (también le habían dicho donde quedaba). Deidara no era una persona paciente en absoluto y además tenía una gran seguridad en sí mismo, por lo que no había durado ni cinco segundos en idear un plan para conocer al prometido de Naruto, el hijo de los Uchiha. En unos minutos ya estaba frente a la gran casa y se escabullo por una pequeña ventana esquivando un par de trampas, llego al comedor (sin saber que días antes su hermano casi muere atragantado en ese lugar) y se paro con una sonrisa triunfante (que parecía mas una de ángel (*)) y con las manos en la cadera, Unas tontas trampas no son nada contra Deidara Uzumaki, pensó muy sobrado de sí mismo. Subió alerta por las escaleras y llego al segundo piso donde había un largo pasillo con varias puertas, la cosa era saber cuál sería la del prometido de Naruto. Se concentro en los Chakra y encontró que habían cuatro personas en la casa, con sigilo se fue a paso ligero hacia una de las puertas del fondo, sin embargo a mitad de camino la puerta junto a él se abrió dejando ver a un joven alto, guapo, de tez blanca y ojos negros. Deidara lo observo con detenimiento (evaluándolo) no cualquiera tendría a Naruto como esposo, sin embargo antes de que pudiera evaluar bien al chico vio como este en un rápido movimiento sacaba una kunai. Deidara quiso bufar con fastidio, ¿que no veía que lo estaba intentando inspeccionar? Pero al ver los ojos negros profundos lo supo, seguramente lo mataría si se quedaba hay. Deidara con rapidez dirigió sus manos (y las bocas en estas (*)) hacia su reserva de arcilla... sin embargo paro a mitad de camino, no podía herir al prometido de su hermano. Con un salto Deidara salió del alcance de la kunai y con otro bajo las escaleras saliendo de otro salto por la ventana por la que había entrado. A pesar de haber salido de la casa y corrido unos metros sintió como el chico Uchiha lo seguía aun, esquivo varias Shurikens y Kunais, sin embargo le sorprendió como el silencio no era interrumpido por la batalla sino que todo era en extremo silencio. A Deidara no le gustaba el silencio, sin embargo tendría que esperar a estar más dentro del bosque para que su arte fuera apreciada por el Uchiha, sin embargo no lo lastimaría, solo atacaría para distraerlo.
Itachi perseguía al intruso, sus sospechas se confirmaban era un ninja, y nada bueno debería estar buscando un ninja en la casa Uchiha, además el rostro no lo había visto nunca asi que no era de Konoha o alguna aldea oculta amiga, tampoco traía ninguna banda con el símbolo de su villa asi que seguramente su trabajo era secreto y no quería que supieran su identidad si lo atrapaban. Una explosión interrumpió sus pensamientos, vio como tres arboles frente a el había estallado y como pajaritos de arcilla se estrellaban con sus troncos haciéndolos explotar, abrió los ojos ante la técnica que nunca antes había visto pero no permitió que su sorpresa creciera y siguió la persecución.
Deidara tenía una gran sonrisa en el rostro y saltaba por las ramas con brinquitos felices, hace mucho no tenía una batalla verdadera que no fuera entrenamiento, era tan inspirador volver al juego. Sin embargo una ráfaga de fuego paso por su lado haciéndolo voltearse y ver (sorprendido) al Uchiha tras él, debía ser un buen ninja si las explosiones no lo habían despistado, incluso lograba despistar a Jiraiya muchas veces con ese truco de estallar los arboles. Asi que lo que seguiría seria una lucha, pero el ya había decidido no luchar contra el prometido de Naruto asi que tras unas explosiones mas y varios Fotones, Shurikens y Kunais contra el paro en un claro dispuesto a explicarle al Uchiha ese quien era para evitar matarlo (tenía muy seguro que ganaría).
Deidara se paro en la mitad del claro y no demoro en aparecer la silueta del otro. Itachi había notado que el espía rubio a pesar de atacar no lo atacaba a él, asi que se sorprendió al verlo parado en medio de un claro esperándole para la pelea. Bajo y lo enfrento a unos metros, solo iba a esperar tener contacto con los ojos del otro para atacarlo, no se pondría con rodeos la técnica que ese ninja utilizaba le daba mala espina, era muy poderosa y el no estaba para correr riesgos.
- Tu – llamo la voz suave pero firme del otro ninja, Itachi alzo la mirada conectando sus ojos ónix con los azules – te voy a explicar porque estoy aquí, veras es que...
Antes de terminar la oración Itachi ya lo había sumido en su Tsukuyomi, y Deidara entro en ese horrible y doloroso mundo. Itachi había decidido ser “bueno” y había programado solo una hora en el Tsukuyomi para el ninja rubio, suficiente para dejarlo inconsciente hasta llevarlo al interrogatorio. Sin embargo había quedado un tanto extrañado por no seguir oyendo la oración del otro ninja, ¿y si lo que iba a decir era importante? Sin embargo mejor atacar directo y no ser víctima de esa técnica nueva, tendría que estudiarla.
Deidara salió de ese mundo de terror y abrió los ojos que miraban aun al Uchiha, la imagen se volvió un borrón y se sintió débil, retrocedió unos pasos estrellándose contra un tronco y recargando su peso mientras intentaba volver a la lucidez y no desmayarse, no pesaba quedarse inconsciente y a merced de ese tipo.
Itachi contemplo con asombro (solo demostrado por sus ojos eran ahora unos milímetros mas grandes) como el rubio no se había desmayado y tenía los ojos abiertos mirándolo, a pesar de estar recostado contra un tronco Itachi supo que ese ninja tenía mucho aguante, cualquier otro hubiera terminado inconsciente un par de horas. Tan metido estaba en sus pensamientos de asombro que bajo la guardia, asi es, el perfecto ninja Itachi, genio de los Uchiha y prodigioso ninja ambu había bajado la guardia mientras observaba al ahora pálido rubio, asi que lo tomo por sorpresa una explosión justo frente a él que lleno de humo el lugar. Cuando Itachi miro con su Sharingan había un gran cráter y el otro ninja no estaba.
¿Y AHORA QUE?-NARUSASU-¿Y AHORA QUE?
Naruto se había reunido con Shikamaru y Kiba, Chouji estaba de misión, los tres habían estado hablando de todo y de nada mientras miraban las nubes en el sitio “especial” de Shikamaru. Naruto había encontrado cierto interés en buscar nubes en forma de zorro pero se había terminado aburriendo, y el y Kiba terminaron roncando junto a un relajado y despierto Shikamaru. No fue hasta que apareció Sakura que se despertaron y solo porque la chica le estaba gritando a Naruto algo como “Sasuke es mío” después de que Kiba (aun medio dormido) le gritara que era fea y nadie la quería la peli chicle se fue.
- Las mujeres son muy problemáticas – se quejo Shikamaru mirando la espalda de Sakura quien tenía los puños apretados mientras se alejaba.
- Sakura lo es – asintió Naruto.
- Me pregunto si algún día conseguirá esposo – pensó en voz alta Kiba – sería muy interesante ver si lo golpea solo por llegar tarde a casa... quedaría viuda muy pronto – Naruto y Shikamaru rieron junto a Kiba.
- Eh, Shikamaru – llamo Naruto acordándose de repente de Neji - ¿a ti te gusta alguna chica? – pregunto en tono casual.
- ¿eh? – pregunto Shikamaru.
- Ya sabes, que si te gusta alguien.
- ¿y me lo preguntas solo a mí? – Naruto no podía esperar menos del astuto Shikamaru pero ya había pensado en eso.
- Claro que si – Shikamaru lo miro con interés – ya se de sobra que Kiba está clavadito con Shino – Kiba levanto la cabeza muy rápidamente y tenia las mejillas color tomate.
- ¡Naruto! – lo regaño sentándose con enojo, Shikamaru sonrió y se relajo de nuevo (lo que Naruto esperaba).
- Gustarme... no lo había pensado – Naruto y Kiba abrieron la boca.
- ¿cómo que no has pensado? – dijo incrédulo Kiba.
- Es problemático – fue toda la explicación de Shikamaru.
- Pero con alguien habrás tenido que pelear, ¿has retado a alguien a pelea?
- No, nunca – dijo con tranquilidad Shikamaru devolviéndole su atención a las nubes – es muy problemático todo eso de las peleas, y retar a alguien... es tan extraño
- Shikamaru piensa quedarse soltero para siempre – respondió Kiba.
- Claro que no – negó Shikamaru – yo quiero una vida normal, algún día encontrare a alguien normal y me casare, no tiene que ser ni bello ni feo, tendremos dos hijos ni muchos ni pocos, y envejeceremos hasta morir de muerte natural. Eso es todo – dijo con tranquilidad.
- No puedes fijarte metas – hablo Naruto preparándose para uno de sus discursos que dan ánimos... o eso esperaba – las cosas nunca pasan como las planeas – Naruto sonrió – siempre piensas en una meta, y eso está bien, pero lo que no puedes hacer es fijar los pasos para esa meta, puede que a mitad de camino encuentres una meta diferente y llegues a ella feliz sin proponértelo o no – Naruto miro de reojo a Shikamaru que lo miraba con atención, Kiba solo miraba la escena – no deberías tener tan planeado lo que vas a hacer, deberías dejarte llevar.
- ¿dejarme llevar? – pregunto Shikamaru.
- Sip – asintió Naruto – dejar que las cosas pasen y no retenerte por complejos o estereotipos.
- ¿porque ha cambiado la conversación de esta manera, algo que decir Naruto?
- No – rio Naruto ante la perspicacia del de peinado de piña – es solo un concejo, lo digo porque hay muchas cosas asi en la vida por eso mi familia va a donde quiere, porque hay que seguir a los sentimientos y no ponerse a pensar en que pasara en el camino. La vida es un extraño camino pero no tienes que preocuparte por cómo llegar a la cima de la montaña... solo que te aseguro que si sigues el camino que tu quieres la vista será hermosa – Naruto se fijo en como Shikamaru ahora miraba el pasto bajo el con atención – asi que, ¿te gusta alguien, Shikamaru? – vio como el de peinado de piña después de unos segundos alzaba la vista al cielo.
- No – respondió con tranquilidad, Naruto quiso bufar pero no evito notar como Shikamaru apretaba el pasto bajo su mano sin siquiera darse cuenta.
- Bueno, no te preocupes ya aparecerá alguien que te haga feliz – rio Naruto dejando la charla profunda para reír y darle una fuerte palmada en la espalda a Shikamaru – me voy a almorzar – y sin más el rubio se fue dejando a un sonriente Kiba y un mas pensativo de lo normal Shikamaru.
¿Y AHORA QUE?-NARUSASU-¿Y AHORA QUE?
Jiraiya había despertado esa mañana y se había ido a una reunión sin ni siquiera asegurarse de que Naruto estuviera en su cama. Al notar esto (y por los antecedentes del rubio) apenas había salido de la reunión había ido a su casa a buscarlo encontrándose con la grata sorpresa de que en un Futon al lado de la cama de Naruto se encontraba Deidara.
- ¡ya decía yo que la casa estaba muy ordenada!
Había gritado nada más verlo, despertando al de cabellos largos que aun estaba un poco débil pero lo supo disimular. Jiraiya estuvo hablando con su nieto un rato hasta que Tsunade había enviado a un ambu para llamarlo, tendría alguna misión asi que se despidió de Deidara y dejo todo en sus manos prometiéndole hablar con Tsunade sobre su posible integración a los ninjas de Konoha.
Apenas su abuelo se había ido Deidara se había tirado al sofá y casi de inmediato se había dormido. Asi lo encontró Naruto al entrar a la casa dispuesto a invitar a Deidara a un almuerzo en el restaurante Akimichi.
- Deidara Oni-chan – llamo moviéndole el hombro, el bello durmiente abrió los ojos con una queja.
- ¿es que no puedes ver a un pobre feliz? – pregunto de mala gana sentándose mientras se restregaba los ojos.
- Te invitare a almorzar – sonrió Naruto.
- Vaya, pues entonces iré a cambiarme.
- Si, conocerás a mis amigos en la aldea
- Eso suena bien – asintió Deidara, pero a mitad de camino se detuvo – Naruto
- ¿eh?
- ¿ira tu prometido?
- No lo llames prometido – gruño Naruto – pero si
- Oh... bien – Deidara sin embargo apenas le dio la espalda a su hermanito hizo mala cara.
Una cosa era jugar a perseguirse e intercalar en la persecución Shurikens, Kunais y uno que otro Ninjutsu fácil de esquivar como los Katún y las explosiones básicas. ¡Pero una cosa totalmente diferente era que te metieran en un Genjutsu que te causa semejante grado de dolor! Era un Genjutsu de alto nivel, ese maldito ya se las vería con él. Sin embargo no por eso iba a saltarse un almuerzo importante para Naruto, sin embargo el prometido de su hermanito ya lo iba a oír.
Naruto se las había arreglado para que todos sus amigos estuvieran libres para ir a almorzar, incluso Chouji y Neji (que estaban de misión) habían llegado e iban a comer con todos, claro que ninguno sabía que Naruto iba a presentarles a Deidara.
Ambos rubios se pusieron en marcha, ya iban tarde y todo porque Deidara había tenido que buscar repuestos de arcilla, Naruto le había dicho que dentro de la aldea no las tenía que llevar encima, pero después de la noche anterior Deidara no estaba tan convencido de eso.
Llegaron al restaurante y ya casi todos estaban ahí hablando animadamente en la mesa de siempre, junto a la ventana que daba al patio.
- Chicos – saludo/grito Naruto consiguiendo la atención de todos quienes después de ver al rubio fijaron su vista en Deidara quien solo les dedico una cálida sonrisa.
- ¡Naruto! – grito Lee y después de eso todos lo saludaron.
- Bien, les presento a mi hermano Deidara – Deidara los saludo con la mano aun sonriendo, el chico del día anterior no estaba.
- Yo soy Ino – de algún lado apareció la rubia y se abalanzo sobre Deidara (prácticamente) y lo arrastro sentándolo junto a ella en una de las esquinas.
El resto de la mesa se presento y saludo a Deidara ya acostumbrados al comportamiento de Ino, Deidara solo la ignoro no era por presumir pero ya estaba acostumbrado a esas atenciones.
- Sasuke – se presento como todos los demás (mas su cara de indiferencia) el pelinegro.
- Un gusto Sasuke – pero entonces paro - ¿tú eres el prometido de mi hermano? – Sasuke y Naruto hicieron idénticas muecas de desagrado.
- ¡no! – y gritaron al mismo tiempo, Deidara rio por lo bajo.
- Aun están un poco renacidos a su relación – murmuro seductoramente Ino pegándose a uno de los costados de Deidara.
- Pero hacen bonita pareja – dijo Deidara sonriendo y alejándose muy disimuladamente – oye, Ino – la rubia sonrió al oír su nombre – me preguntaba, ¿Sasuke es el prometido de Naruto, no es asi? – Ino asintió – bueno, ¿hay alguien parecido a Sasuke? – porque Sasuke y el ninja del día de ayer se parecían mucho – es que he visto a alguien parecido por la calle.
- Sí, todos los Uchiha tienen las mismas características, por eso Sasuke y Sai se parecen tanto, los Uchiha tienen un físico casi igual en todas las familias.
- Ya veo – Deidara se volvió a alejar.
Asi que había sido eso, seguramente había entrado a la casa equivocada, después de todo le habían dicho que en la casa principal del barrio Uchiha, seguramente habría otra casa más grande que la que él vio.
Naruto se sentó junto a Sasuke y ambos se miraban de reojo para luego hacer una exclamación reprobatoria. Ten-ten miraba la escena con gracia, aunque le disgustaba el comportamiento bajo de Ino tenía que admitir que el hermano de Naruto era muy guapo, también pensaba en que Naruto y Sasuke hacían buena pareja como Deidara decía. En ese momento sintió un aura oscura cerca de ella y volteo hacia su derecha donde estaba Sakura mirando mal a Naruto, Kiba y Shino que estaban sentados cada uno a un lado de la muchacha la miraban fijamente y Kiba susurraba algo como “Sa-Sakura-chan, ¿estás bien?”
En ese momento empezaron a llegar el resto de invitados, primero llegaron Neji y Chouji, Chouji con un ágil movimiento consiguió colarse en otra silla dejando a Neji junto a Shikamaru. Luego llegaron Hidan y Kakuzo y se sentaron juntos en el centro, finalmente llegaron Sasori e Itachi.
Itachi entro hablando con Sasori sobre jutsus (buscando información sobre el jutsus del tipo de la noche anterior) y distraídamente tomo asiento en la punta justo al lado de Deidara, sin saberlo claro. Se quito la chaqueta y la banda de Konoha y volteo para saludar a los demás.
- Konichiwa – dijo mientras volteaba encontrándose con un perfil muy familiar.
Ante los ojos de Itachi todo paso en cámara lenta, todos los de la mesa se voltearon hacia el devolviéndole el saludo, Deidara se volteo para mirarlo haciendo hondear su cabello suelto, al verlo sus ojos se abrieron y la sonrisa angelical desapareció rápidamente, lo miro una milésima de segundo y luego pego un salto cerrando los ojos y tapándoselos con las manos, al brincar había caído en las piernas de Ino quien chillo emocionada por la acción y lo abrazo muy confianzudamente atrayendo con su chillido la atención de toda la mesa a los tres en la esquina.
- Tú – Itachi pudo oír de nuevo la suave voz de la noche anterior diciendo con más agresividad que la anterior vez ese sustantivo.
- No lo puedo creer
Y es que no lo podía creer, ¿cómo es que el ninja que lo había atacado estaba tan familiarmente sentado con sus amigos? Seguramente era algún tipo de broma, ¿o los estaría engañando para buscar información?
- Eres un maldito – gruño Deidara intentando levantarse (aun con los ojos cerrados) pero Ino no lo dejaba ni moverse - ¿qué haces aquí?
La mesa entera se había quedado en silencio observando el intercambio de ambos chicos.
- ¿acaso se conocen? – había susurrado por lo bajo Neji hacia Ten-ten.
- Eso es lo que debería preguntar yo, atrápenlo es un espía – dijo firme dirigiéndose al resto de la mesa.
- ¿espía? – preguntaron el resto de los presentes.
- ¡yo no soy un espía! – grito indignado Deidara bajando las manos de su rostro (aun con los ojos cerrados) para llevarlas disimuladamente a su reserva de arcilla, sin embargo un par de manos lo detuvieron.
- Ni se te ocurra – Itachi había reaccionado rápido, no quería enfrentarse al extraño Jutsu sin conocerlo.
- ¡suéltame! Naruto – urgió Deidara aun temeroso de abrir los ojos y enviarle una severa mirada a su hermanito.
- El no es un espía – asintió Naruto.
- Que no te engañe Naruto-kun – dijo Itachi – este chico quería robar información de la casa Uchiha anoche.
- ¿qué? – pregunto a coro la mesa.
- Deberíamos presentarlo ante la Hokage.
- ¡yo no iba a robar información! – no literalmente, solo iba a conseguir información sobre el prometido de Naruto.
- ¿entonces que hacías en la noche en mi casa queriendo entrar a mi habitación?
- Eso sonó terriblemente comprometedor – rio entre dientes Sasori que estaba frente a la escena.
- ¡solo quería....! – no podía decir que quería conocer al prometido de Naruto ya que su hermanito se sentiría avergonzado, no enfrente de todos – podríamos hablar a solas.
- Claro que no – negó Itachi – eres un ladrón, admítelo de una vez.
- El no es un ladrón, Itachi-sempai – hablo Lee.
- El es mi hermano – asintió Naruto, Itachi dirigió su mirada hacia Deidara que aun con los ojos cerrados parecía muy enojado.
- Y además esta realmente lindo – anexo Ino con cara soñadora.
- ¿hermano? – pregunto Itachi dirigiendo su atención a Naruto.
- Si, es el hermano de Naruto, llego ayer a la aldea y este almuerzo fue organizado porque Naruto quería que nos conociera – respondió Sasuke mirando a su hermano con curiosidad.
- Pues... – Itachi no agrego más.
- Que falta de respeto – dijo entre dientes Deidara saliéndose a tientas de los brazos de Ino y con un movimiento brusco soltando sus muñecas de las del pelinegro – ¿es que no fue suficiente con casi matarme ayer? – siguió hablando consigo mismo entre dientes pero Itachi lo pudo oír perfectamente.
- Oni-chan – llamo Naruto - ¿porque tienes cerrados los ojos? – Deidara se lo pensó, no era lógico tener los ojos cerrados y no se le ocurría ninguna escusa.
- Por nada – rio con tranquilidad Deidara sin abrir los ojos, Itachi bufo, ¿es que acaso creía que con solo abrir los ojos lo metería en un Genjutsu? Bueno, eso había hecho la noche anterior, pero...
- No lo haré – fue todo lo que dijo Itachi, fastidiado porque era la primera vez que le daba explicaciones a alguien, ¿porque no solo dejaba quedar en ridículo a ese rubio? Maldita noción de justicia que no podía sacarse de la cabeza.
Deidara entendió la indirecta pero sin embargo tomo la precaución de abrir los ojos dándole la espalda a Itachi, las conversaciones siguieron de manera normal si no contamos que Ino cada vez estaba más cerca de Deidara y este siempre la apartaba con una cálida sonrisa, como si nada. Por su lado Sasuke ya había sacado sus conclusiones, seguramente su hermano y el hermano de Naruto se conocían de alguna pelea y su hermano había vencido con algún Genjutsu (no sabía cuál) y por eso el de cabellos dorados mantenía la precaución de tener los ojos cerrados. Sin embargo ahora tenía cosas más importantes en las que pensar y una de esas no eran las enemistades de su hermano. Su padre había invadido su habitación (literalmente, casi había derrumbado la puerta) y le había dicho con su voz siempre cortes que la gente se estaba preguntando qué era lo que sucedía entre Sasuke y Naruto, ya que normalmente los prometidos solían dar demostraciones abiertas en público como pareja (Abrazos, cogidos de la mano, besos e incluso cosas más subidas de tono, pero era “normal”) y que le habían dicho a Fugaku que los habían visto juntos pero no revueltos (típica oración de alguien hipócrita que no quiere ser directo). Sasuke le había explicado a su padre que no eran de los que hacían “Shows”, no le podía decir que simplemente no eran nada y que antes se matarían que ser como una típica pareja de prometidos. Sin embargo Fugaku le había dicho que no le importaba que tipo de pareja fueran pero que tenían que actuar como una delante de los demás para no dejar en duda que eran pareja y junto a eso no humillar a la familia. Sasuke simplemente había asentido como si estuviera sobrado de sí mismo y le había dicho a su padre que si era necesario lo haría, Fugaku había estado complacido con la respuesta y se había ido después de darle las buenas noches.
Sasuke intento distraerse mirando a Ino acosar a Deidara sintiéndose bien por no ser él a quien acosaba, y miro como su hermano parecía estar más pensativo de lo normal comiendo lentamente un trozo de carne. Justo mirando a su hermano lo vio, su padre estaba entrando por la puerta junto a su madre y estaba buscando una mesa vacía con la mirada. Sasuke se movió con lentitud para no llamar la atención y se pego a Naruto pasando uno de los brazos del rubio sobre sus hombros sin apartar la mirada de su padre. Naruto estaba riendo de una anécdota que narraban Kiba y Lee cuando sintió a Sasuke totalmente pegado a él y como el de ojos negros se encargaba de poner un brazo sobre él como si lo abrazase, de inmediato se puso nervioso, tanto que esperaba no ponerse a temblar ¿porque Sasuke lo abrazaba tan repentinamente? Miles de pensamientos del porque pasaron por su cabeza pero todos los desecho mientras con disimulo miraba de reojo a Sasuke, Naruto prácticamente se sentía sudar e hiperventilar pero hizo un gran esfuerzo para mantener la calma. Por su lado Sasuke vio que su padre había reconocido a Itachi y dirigió su cabeza hacia Naruto sabiendo de sobra que su padre lo estaría viendo en ese momento.
- Sasuke – murmuro Naruto - ¿qué haces? – Naruto hizo un gran esfuerzo para que su voz no sonara nerviosa... sin embargo fallo estrepitosamente.
Naruto trago saliva y dirigió su vista al frente intentando encontrar algo que lo relajara, entonces fue cuando vio al padre de Sasuke acercándose a la mesa, ¿y ese tío que hacia ahí? Antes de responderse a su propia pregunta sintió la mano de Sasuke sobre su rodilla y también como este la espichaba buscando llamarle la atención, volteo la cabeza hacia Sasuke solo encontrándose con el cabello de este y como disimuladamente le señalaba hacia debajo de la mesa. Al bajar la mirada Naruto pudo ver un trozo de papel en la mano de Sasuke (Kami-sama sabrá como lo escribió) y lo leyó, el mensaje solo decía “Sígueme la corriente, luego te explico”. Eso no tranquilizo a Naruto, ¿cómo se suponía que le tenía que seguir la corriente? Miles de imágenes pasaron por su cabeza pero antes de evaluarlas su mente quedo en blanco cuando Sasuke se pego mas a él y empezó a acariciar su rodilla, Joder, esto es raro tengo que comportarme y no estar nervioso seguramente es solo un plan, se repetía una y otra vez Naruto intentando relajarse con ese pensamiento.
- Sasuke, Naruto – el nerviosismo de Naruto se transformo en enojo al ver la cara del padre de Sasuke, ¿cómo se atrevía ese tipo a llamarlo por su nombre después de como lo había tratado?
- Padre – saludo Sasuke viendo como su hermano miraba con una ceja levantada a su padre.
- Veo que estas bien – Sasuke asintió – quiero que todos los demás lo vean de ahora en adelante – Sasuke entendió la indirecta y asintió, Mikoto que había conseguido una mesa vacía miraba reprobatoriamente a su marido mientras analizaba distraídamente el menú.
- Claro, padre
- Bien, con su permiso – la mesa se había quedado en silencio a la llegada del patriarca de los Uchiha, sin embargo apenas el hombre se fue (después de darle una mirada a Itachi) todos miraron a ambos hermanos Uchiha y en un acuerdo silencioso siguieron con su antigua conversación sin tocar el tema de nuevo.
Sasuke y Naruto estaban incómodos ya que la mesa de los padres del menor estaba justo frente a ellos y por eso Sasuke aun permanecía pegado a Naruto, con disimulo Sasuke le dio una señal a Naruto para que salieran un momento y el rubio (después de comerse casi entero un trozo de carne al estilo Chouji) se deslizo junto al pelinegro hacia afuera.
- ¿que ha sido eso? – exigió Naruto cuando ya estaban lejos del restaurante caminando por las calles.
- Mi padre quiere que actuemos como una pareja en público – Naruto frunció el ceño.
- ¿cómo que como una pareja?
- Ya sabes lo que hacen las parejas, ¿es que nunca has tenido una? – se burlo Sasuke.
- ¡claro que sí! – contesto mas rápido de lo que debería Naruto, si había tenido parejas... pero nunca algo que se pudiese llamar relación, nunca había tenido una cita, ni habían paseado, ni cogido de las manos y dado un paseo ni nada de lo que las parejas normales que se quieren hacen.
- Bien, pues es eso, mi padre quiere que actuemos como si fuéramos una feliz pareja de novios.
- Pues me vale lo que quiera tu padre, yo no vivo para hacer lo que él dice – Naruto paso sus manos sobre su cabeza en un gesto guay y camino en esa posición con pasos de “soy el amo del mundo”.
- No se trata de eso, Dobe. Por mucho que me fastidie admitirlo mi padre tiene razón, si se supone que somos prometidos tenemos que actuar como tal o la gente sospechara que esto no es algo normal
- Pero esto no es normal – dijo Naruto alargando la “o” de la segunda palabra.
- Sí, pero se supone que hacemos esto porque la idea es que la gente no se entere que tú me... que tú me – Sasuke hizo cara de sufrimiento y asco al terminar – que tú me rechazaste
- Uhm – Naruto miro a Sasuke un tanto avergonzado – nadie sabe que yo hice eso
- Aja, pero si no actuamos como pareja van a empezar a comentar y se darán cuenta, y asi cuando pase el mes y nos casemos van a decir “pero si él lo había rechazado, seguramente se caso por lastima”
- ¿cómo es que hemos llegado a hablar de matrimonio, teme? – dijo un tanto mareado Naruto por el tema.
- ¡porque toca aceptarlo de un buena vez! – grito Sasuke, ya habían llegado al vacio patio trasero y oculto del edificio de la Hokage y se podía permitir gritar sin ser oído – si estoy haciendo todo esto es porque me pienso casar contigo, Baka – Sasuke hizo mala cara – por muy feo y repugnante que suene esa es la verdad, planeo casarme contigo – Naruto palideció varios tonos y cayo sentado en la banca que había en la mitad del lugar.
- Yo no me quiero casar – murmuro Naruto - ¡no pienso hacerlo!
- No lo puedes negar tan convencido – dijo un tanto sufrido Sasuke inclinándose de canclillas frente al rubio y alzando la cabeza para mirarlo a los ojos - ¿porque no intentarlo? Después de todo no es como si nos gustara otra persona, podemos casarnos y...
- ¡no se trata de que me guste alguien o no! – Naruto estaba bastante asustado con el tema y su mirada gacha se encontraba conectada con los ojos negros muy fijamente – se trata de que no me quiero casar y no pienso hacerlo, nos odiamos – o eso habían dicho antes de comerse a besos el uno al otro la ultima vez – no tiene sentido que nos casemos.
- Déjame terminar – a Sasuke se le había ocurrido una muy convincente idea - ¿qué te parece si nos casamos por conveniencia? – Naruto lo miro sin entender y Sasuke cambio su posición de canclillas para arrodillarse en el piso quedando a la misma altura que la cara de Naruto, no que se quisiera arrodillar pero era mas cómodo asi – ya sabes la gente se casa por conveniencia todo el tiempo, no tiene que haber amor ni nada, podemos llegar a un trato.
- No pienso casarme por conveniencia, ¡no me conviene casarme! – Sasuke pensó rápido como argumentar esa verdad.
- ¿Qué tal si hacemos esto? – Naruto fijo sus ojos en los de Sasuke de nuevo - nos casamos y con eso yo no quedo en humillación y mi familia no se vuelve escoria. Y tu... bueno yo – un bombillito prendió sobre la cabeza de Sasuke - ¡yo no actuare como un esposo contigo! Solo seremos esposos de palabras tu podrás hacer lo que se te venga en gana – Sasuke inflo el pecho orgulloso por su plan.
- ¿me estás diciendo que seremos esposos sin serlo en realidad? – Sasuke asintió – ósea que estaremos casados pero no actuaremos como esposos.
- Si, y además podrás actuar como el soltero nómada que sueñas ser, podrás ir a donde tú quieras y solo tendrás que volver de vez en cuando a Konoha para que la gente no diga que me abandonaste – a Naruto le empezó a gustar la idea y se enderezo para acercar mas su rostro al del pelinegro, podría sacrificarse a venir de vez en cuando a Konoha y estar con sus amigos – además podrás salir con quien tú quieras como si no tuvieras compromiso alguno conmigo... aunque seria en secreto, no quiero que todo el mundo crea que me engañas.
- No es tan mala idea... – susurro Naruto imaginándose su vida como era hasta ahora y para siempre.
- No, no lo es – asintió Sasuke – es una muy buena ida, ambos salimos ganando.
- ¿y si tu luego quieres casarte con alguien más?
- Eso no va a pasar – dijo convencido Sasuke – y si llegara a pasar yo aria lo mismo que tu teniendo una relación en secreto, nadie se enteraría – Naruto sonrió sintiéndose libre por primera vez en esa semana.
- ¡eso es una excelente idea! – rio Naruto y Sasuke pudo sentir el aliento del rubio chocar contra su rostro sonrojándose un poco, sin embargo se obligo a seguir en la conversación, era importante.
- Asi es, y todos salimos ganando, sinceramente a veces me sorprendo de lo brillante que soy
- Teme – volvió a reír Naruto – aunque esta fue una buena idea creo que es lo único bueno que has tenido – Sasuke rio por lo bajo y Naruto se le quedo mirando, era la primera vez que Sasuke reía frente a él aunque fuera casi una risita nasal.
- ¿qué? – Sasuke hasta ese momento entendió que estaba más cerca de Naruto de lo que debería y justo cuando se iba a alejar Naruto junto ambos labios en un beso mariposa.
- Supongo que tendremos que cerrar el trato – Sasuke lo miro sin entender.
- ¿cerrar el trato, es que quieres hacer un documento? – Sasuke gruño ante la idea.
- Hay muchas maneras de cerrar un trato, por ejemplo en el segundo libro de Icha Icha Paradise edición verano los personajes principales cerraban un trato haciendo... – antes de terminar Sasuke le había pegado un puño que lo hizo caer de espaldas de la silla.
- ¡no pienso hacer nada de las cosas que salen en ese pervertido libro! – grito Sasuke parándose de un salto (ya que seguía de rodillas) y con una aura negra a su alrededor.
- Pero no te dije como sellaban el trato – dijo con voz nasal Naruto sobándose la nariz.
- ¡eres un maldito pervertido! – Sasuke se arreglo las ropas con brusquedad – no me importa como sea, nada bueno puede salir si confinas ese libro erótico y tu mente pervertida – Sasuke se dio la vuelta e inicio caminar hacia el túnel de piedra que lo sacaría del patio a la calle principal.
- ¡espera! – grito Naruto levantándose - ¿no se supone que tenemos que parecer una pareja?
- ¿y que con eso? – dijo receloso Sasuke, mínimo Naruto saldria con algo pervertido chantajeándolo con hacerlo ya que se suponía que eran “novios”.
- Que tendríamos que caminar por la calle como una pareja feliz – Naruto llego junto a Sasuke – eso quiere decir que deberíamos caminar asi – Naruto alzo uno de los brazos de Sasuke y lo cogió de gancho.
- Asi no caminan las parejas de novios normales, dobe – suspiro Sasuke – asi caminan las amigas chismosas – Naruto lo soltó e inflo los cachetes con un puchero indignado.
- Pues si tanto sabes, teme, ¿cómo caminan las parejas de novios?
- Bueno – Sasuke parpadeo acordándose – podría ser asi – Sasuke abrazo a Naruto por la cintura – o asi – paso una de las manos de Naruto sobre su hombro – o también podría ser... asi – Sasuke cogió un poco dudoso una de las manos de Naruto.
Ambos se quedaron mirando ambas manos unidas, se sentía tan extraño: se sentía bien, pero a la vez había un cosquilleo extraño. Ambos se quedaron mirando las manos enlazadas viendo el contraste de la mano color canela de Naruto y la blanca de Sasuke y como ambas se fundía, Sasuke tenía las manos más pequeñas que Naruto y al rubio le daba curiosidad la manera en que se enlazaban, tanto asi que estuvo tentada a subirlas frente a sus ojos y mirarlas mejor.
- Supongo que asi está bien – Sasuke soltó ambas manos y volvió a pasar el brazo de Naruto sobre sus hombros.
- Creo que deberías cogerme la mano – negó Naruto.
- ¿porque? – reto Sasuke.
- Porque si, caminemos cogidos de la mano
- Te digo que no, que caminemos asi
- Tu no mandas – Naruto bajo su brazo de los hombros de Sasuke y busco la mano del menor.
- Me parece mejor caminar asi – Sasuke volvió a poner el brazo en su lugar.
- Que no, teme – negó Naruto volviendo a bajar el brazo – cogidos de la mano.
- ¡pero no entiendo porque insistes en caminar cogidos de la mano!
- Y yo no entiendo porque insistes en no caminar cogidos de la mano – Naruto se cruzo de brazos – parece que ni como falsos esposos podemos actuar – Sasuke se mordió el labio y volvió a coger el brazo de Naruto pasándolo sobre su hombro y antes de que Naruto protestara cogió la mano sobre su hombro con una de sus mano.
- ¿qué tal asi? Nos estamos cogiendo de la mano – explico Sasuke y Naruto volvió a ver ambas manos entrelazadas – incluso puedo cogerla con ambas manos – Sasuke subió la otra mano y la junto con la de Naruto también - ¿qué tal? – Naruto asintió viendo las manos de Sasuke sobre la suya fijamente – todos somos felices.
- Algo asi – dijo Naruto atrayendo a Sasuke hacia el del cuello con el brazo y bajando su cabeza para volver a unir sus labios esta vez en un beso más profundo.
Naruto no perdió tiempo para colar su lengua en la cálida boca de Sasuke, el menor estaba sorprendido pero respondió el beso de todas maneras, juntando su lengua junto a la de Naruto y sintiendo el vacio habitual en el estomago. El rubio había pegado a Sasuke a el por la cintura con su otro brazo y estaba sumergido en las sensaciones, los besos que se daba con Sasuke siempre lograban calentarlo y hacerlo sentir esas cosas extrañas al mismo tiempo. Sin embargo Sasuke no pensaba prolongar el momento ni tampoco pasar a más (como el subconsciente de Naruto ya planeaba) asi que se separo de Naruto haciendo que el rubio quedara con la boca estirada.
- Tenemos que volver al almuerzo – respondió como si nada volviendo a la posición de “caminar” y tirando de Naruto hacia delante.
¿Y AHORA QUE?-NARUSASU-¿Y AHORA QUE?
Naruto y Sasuke habían vuelto al almuerzo y todo seguía igual que antes de irse, exceptuando porque ahora Deidara miraba mal a Itachi (ya sin miedo a un Genjutsu) e Itachi solo lo ignoraba. Luego se habían ido a sus respectivas casas pero antes de que Naruto pudiese tocar siquiera su ansiado Ramen Instantáneo lo llamo Tsunade para presentarse en su oficina. Naruto corrió por los tejado y entro por una de las ventanas al pasillo que daba frente a la puerta de la oficina de la Hokage. Shizune le dio una sonrisa y lo hizo seguir, dentro se encontró con Ten-ten, Lee, Neji y un hombre que nunca había visto.
- ¡Naruto! – gritaron emocionados Lee y Ten-ten.
- Chicos – saludo Naruto – Baa-chan – saludo a Tsunade, a la rubia le salieron unas venitas en la frente y tiro unos papeles hacia Naruto.
- ¡No me digas asi! – Naruto esquivo los papeles y solo le sonrió a la rubia - Naruto te presento a tu grupo para esta misión – hablo Tsunade respirando profundamente para calmarse – Este es el líder, Maito Gai – Naruto miro al hombre con curiosidad ya que le dirigía una enorme sonrisa y alzaba el pulgar hacia él.
- ¡Un gusto conocerte, Naruto! – dijo muy animado.
- ¡igualmente! – de algún modo ese hombre había despertado el ánimo de Naruto (ya que estaba desanimado por no comer Ramen)
- Bien – dijo animado Gai - ¿de qué se trata la misión?
- Shizune – llamo Tsunade y la joven se asomo por la puerta.
- ¿si, Tsunade-sama?
- Sake – ordeno y de inmediato la chica entro con una botella y la dejo junto a la Hokage.
Tsunade les explico que la misión era rango indefinido ya que sospechaban que podría ser rango S pero aun no tenían suficiente información. Dijo que Jiraiya había sido enviado para investigar pero que le había llegado una de sus ranas pidiéndole refuerzos, algo extraño en él y que por eso la Hokage estaba preocupada. Les explico que la misión era descubrir un grupo terrorista (uno de los muchos) que al parecer había sido formado por ninjas renegados de alto nivel, que aun no sabían quienes lo integraban pero que las sospechas habían surgido por un tal Kisame, ninja renegado y que por eso les habían enviado a esa misión y que cada vez era más seguro que si habría un grupo terrorista importante que actuaba en silencio. Ese mismo día saldrían al lugar donde habían enviado a Jiraiya pero que ellos irían por su cuenta y no con el senin. Asi que Naruto se fue a casa y aviso a Deidara sobre su misión. Deidara le conto que mientras él estaba en reunión le habían hechos las pruebas y que ahora era un ambu. Naruto lo felicito y se fue a arreglar la maleta, después de que Deidara revisara que al menor no se le quedara nada Naruto se despidió y salió a la entrada de Konoha, el punto de reunión. Todos ya estaban allí cuando el llego, ellos si son puntuales había pensado riendo al recordar su anterior misión, lo que hizo que de inmediato se acordara de Sasuke, había pensado irse a despedir pero se había dado cuenta de su estúpido pensamiento, ¿porque Sasuke querría que él se despidiese?
- Hola – Saludo cayendo frente a ellos desde un tejado.
- ¡HOLA! – saludaron Lee y Gai a coro.
- Bien, ya que estamos todos es hora de irnos, ¡correremos día y noche hasta llegar! – dijo con ánimo y solo Lee grito “si”.
- ¿eh? – fue lo único que pudo musitar Naruto.
Pero antes de que alguien le respondiera Lee y Gai ya estaban corriendo y se habían trepado a los arboles de rama en rama para ganar velocidad.
- Ellos son asi – le sonrió Ten-ten – vamos – y salió corriendo tras los otros dos.
- Venga, que extraños
- Deberíamos irnos ya o nos retrasaremos – Naruto volteo rápidamente hacia Neji, era la primera vez que el de ojos perla le dirigía la palabra. La voz del chico era bastante suave y Naruto podría jurar que podría calmar hasta a Tsunade borracha y enojada solo con saludarle.
- Si, vamos – asintió Naruto un tanto extrañado de que Neji le tratara con familiaridad cuando nunca le había dirigido ni el saludo.
Ambos se fueron por los arboles tras el resto del equipo y de vez en cuando Naruto hablaba con Neji, no era ningún tema de importancia pero como a Naruto no le gustaba el silencio sacaba cualquier tema para hablar con el otro. Ten-ten había tenido que discutir con Lee y Gai durante un buen rato para que ellos decidieran que pasarían la noche en un claro en vez de correr. Naruto miraba con mucha curiosidad a Gai, era un tipo supremamente animado y optimista, todo el tiempo hablaba de la felicidad y de superarse a uno mismo mientras Lee asentía y le daba la razón.
- Ves, es muy obvio – dijo Ten-ten sacándolo de sus pensamientos, Lee y Gai estaban hablando muy animadamente – no sé porque Gai-sensei no se da cuenta.
- Tal vez no tiene perspicacia – dijo Neji apareciendo tras ellos – nunca he visto que entienda las cosas si no se las explicas de manera fácil, simple, lenta y tal vez con ejemplos.
- Bueno, ¡pero tiene 30 años!
- La estupidez no es cuestión de años – dijo Neji.
- Tal vez Lee debería ser más claro – opino Naruto.
- ¡pero por Kami-sama, mírenlo! – Lee sonreía en ese momento como puro idiota enamorado mirando a Gai mientras este buscaba algo en su maleta.
- Debería decírselo de frente – dijo simplemente Neji dándose media vuelta y extendiendo su Futon junto al fuego.
- Decírselo de frente... – susurro Naruto mirando inquisitoriamente a Neji, Ten-ten había bufado y se había ido junto a Lee. Entonces Naruto recordó una de las conversaciones con Ten-ten – si se lo dice de frente corre el riesgo de que lo rechace de manera vergonzosa y solo le duela mas – Neji se había quedado con las manos estiradas totalmente estático y había inspeccionando a Naruto con la mirada.
- Seguramente si – había respondido con cuidado devolviendo su vista al Futon – asi es la vida – dijo recostándose contra un árbol junto al Futon.
- Supongo que sí – había dicho Naruto fijándose fijamente (y disimuladamente) en la posición de Neji, se había cruzado de brazos y los pegaba fuertemente a su cuerpo, Como si estuviera dándose el mismo un abrazo, se dio cuenta Naruto – aunque puede que le diga que sí.
- Y yo que se – dijo calmadamente Neji fijando su vista en la luna.
- También miras mucho el cielo – Neji bajo su mirada a Naruto sin entender – igual que Shikamaru – al ver que Neji se había tensado y sus ojos se habían abierto con un tanto de terror prefirió agregar – el vive mirando las nubes como si fueran lo único que importara – Naruto rio queriéndole mostrar a Neji que él estaba relajado – no lo entiendo, pero... a ti también te gusta mirar las nubes.
- No – negó Neji – la luna – lo corrigió - y no tiene nada que ver con lo que hace el
- ¿a no?
- No – negó Neji – La luna muy pocas veces está llena, dicen que eso afecto a la marea– el rubio quiso sonreír ante la torpe manera en que Neji intentaba cambiar de tema - ¿sabías?
- No – Naruto le concedió por esa ocasión la victoria a Neji, en otro momento volvería con el tema.
¿Y AHORA QUE?-NARUSASU-¿Y AHORA QUE?
(*) Como ya había mencionado mi personaje favorito en Deidara, amo todo de él. Asi que déjenme ser feliz imaginándome que su sonrisa en todo momento es dulce y lo hace ver como un ángel (el ángel que es)
(*) Deidara tiene las bocas en sus manos, ¡claro que sí! Es parte de él y de sus técnicas... pero sin embargo les doy el dato que en este FanFic las puede aparecer y desaparecer, ¿que porque? Porque no es lindo darle la mano a alguien y que la mano te lama.
N/A: ¡Konichiwa! Antes que Nada... ¡GRACIAS POR SUS COMENTARIOS! Hemos cumplido los 50 comentarios ¡SI!, ahora lo segundo (jeje) se que me demore mucho más de lo normal en publicar, la verdad es que estado con un montón de cuentos y me la paso todo el día fuera de casa arreglando asuntos, sacando exámenes, etc. Además de que cuando llego a casa es a hacer tareas y luego estudiar... ¡sé que no hay escusas suficientes y que puede que no les interese! Pero es mejor que sepan porque me demore, sin embargo este capítulo es más largo en compensación (gritos, música, baile, confeti... FIESTA) ya ha aparecido mí amado Deidara y ya a conocido a Itachi XD, Naruto y Sasuke no tienen remedio... y Naruto sigue interesado en ser casamentera de sus amigos. Ahora va a empezar el nudo de esta historia (más o menos) y eso es porque... ¡no se los diré! (risa malvada kukuku) tendrán que leer los próximos capítulos, intentare subir mas rápidamente lo juro hare todo lo posible. De nuevo gracias por los comentarios y como siempre les digo eso siempre te hace sonreír diga lo que diga, sabes que alguien está leyendo tu historia... muchas gracias ¡ustedes me inspiran! (llanto teatral, lo lamento no soy de las que lloran como magdalenas), espero que les guste mi historia y que la sigan siguiendo.
Espero que valoren mi trabajo, si es asi, ¡Dejen Reviews!
Nos estaremos viendo de nuevo déjenme sabe que les pareció la historia, si les gusto, si tienen ideas, si no les gusto, lo que sea... ¡Feliz Día!