-¿Qué es lo peor que puede pasarle a un idol?- preguntó el entrevistador mirando a todos los presentes, siendo Si Won el encargado de responder.
-Perder el cariño de sus fans-
Pero para Lee Hyuk Jae no era esa la respuesta que resonaba en su mente, lo peor para él era lo que vivía todos los días… tener que estar en el mismo grupo que su pareja.
Oh si….Su pareja.
El cosquilleo que sintió con solo verle desde la primera vez, ese nerviosismo cada vez que estaban solos… la cólera que debía esconder cada que los emparejaban con otro de sus miembros, porque al ser un grupo de trece personas le emparejaba con todos…
“Con todos menos conmigo”
Sabía bien que desde un inicio no fueron tan cercanos pero eso había cambiado poco a poco… eran buenos amigos, Hyuk Jae sentía que lograba ganar un poco de su corazón a cada momento, ¿las fans no lograban darse cuenta de lo cercanos que eran? Ni siquiera cambió cuando él entro en “Super Junior M”, todo lo contrario; los fandoms de su pareja y los otros miembros aumentaban…
Podía estar con cualquiera…cualquiera menos con él.
“¿Es que acaso es imposible?” pensaba cada momento que se encontraba solo, sintiéndose luego un tonto por siquiera imaginarlo al verle venir y notar esa mirada suya, esa forma con la que solo podía mirarlo a él, que hacía saber era especial para él… así las fans dijeran miles de cosas o crearan parejas inexistentes entre ellos.
Claro que antes no era así, cuando estaban en Corea era aún peor; el no tener noticias suyas aún cuando solo eran amigos, saber que quien amaba (por que Hyuk Jae no dudaba en que lo que sentía por él era amor) se encontraba en otro país
…pensaba en tantas cosas…
“Cosas que ya no importan”
Cuando supo que pertenecería al nuevo Super Junior M su emoción fue tanta que no lograba exteriorizarla, especialmente por el hecho de que ambos se volvían aún más cercanos cada día… llamadas sin sentido mostrándose a cada momento, salidas inesperadas, mensajes que hacían resonar su corazón… pero aún así ese tema molestándole.
“Fan service”
La entrevista seguía pero en su mente solo se alojaba el recuerdo de aquel día; ese día en donde hablaron de todo, en donde esas simples palabras emanaron de sus labios. Aquel día… en donde logró probar el dulce sabor de sus besos sin ningún miedo sino con la alegría que, desde hace un mes, no lograba dejar de mostrar.
Se sobresaltó regresando a la realidad de golpe, la mano de Kyu Hyun sujetando la suya con fuerza, sonriendo de esa manera tan característica en él, tan suya…
“¿Kyu Min? ¿Kyu Hae? ¿Kyu Mi?”
El menor movió únicamente sus labios, un “Hyung” siendo leído por el rapero
“tal vez Kyu Won o Kyu Hen”
-Feliz mes- susurró esta vez acercándose a su oído sin que las cámaras lograran captar el momento.
…Definitivamente era Kyu Hyuk.